Astra - 21
Capítulo 7
El momento del cuarto enfrentamiento había llegado, aquel hombre que fungía como presentador anunció a los participantes.
– Para este cuarto duelo, de un lado se presenta con un estado físico bastante fornido y un aura de vencedor… ¡Barnat Rois!
Los comentarios hacia el lado de Ireth comenzaron al instante.
– Ese tipo se ve bastante fuerte…
– Su oponente no tiene oportunidad…
– Sería mejor que su rival se dé por vencido antes de salir lastimado.
Ireth solo escuchaba todos los comentarios, mientras permanecía tranquila. En tanto que el presentador continuaba con la presentación.
– Y del otro lado, este misterioso pequeño de poco menos del metro cincuenta, y que oculta su apariencia por alguna razón… ¡Aior!
– Me intriga saber lo que puede hacer ese pequeño – decía Milo mostrando esa seriedad que en todo momento lo ha caracterizado.
Hana por su parte parecía estar segura de quien saldría vencedor del encuentro, de hecho, no le era difícil dadas las características de ambos contendientes.
– No creo que pueda hacer mucho, Barnat lo sacará en cuanto logré pegarle un golpe.
– Puede ser
Luego de la presentación formal, la orden hacia ambos competidores fue dada.
– ¡Comiencen!
El primero en realizar un movimiento fue Barnat Rois, sabía que si podía golpear a Aior lo sacaría de la plataforma de manera inmediata. Barnat llegó a la posición de Aior y con un movimiento trató de propinarle un golpe, pero el pequeño pudo zafarse de su ataque saltando a un costado.
– ¿Cómo?
Barnat nuevamente se centró en atacar, se abalanzó contra Aior, pero volvió a fallar. El pequeño conseguía eludir todos los ataques de Barnat, pero no atacaba.
– No tiene sentido que pueda evitar el ataque del rival si tampoco piensa atacar.
Hana hizo un comentario en medio de la pelea al ver cómo se iba desarrollando esta.
La situación seguía de la misma forma, aquel extraño cubierto evitaba los ataques de Barnat, solo eso, pero este se había hartado de todo ello, centró toda su fuerza en sus puños y con un golpe al suelo destruyó parte de la improvisada plataforma.
Este movimiento tras el impacto hizo que Aior pierda el equilibrio y tambalee por unos instantes.
– Ingenioso, con ese golpe sacó de equilibrio a su oponente, ahora está a merced de su ataque – comentó Milo.
Barnat lo hizo tal cual, se lanzó en ese instante contra Aior para lograr golpearlo mientras este trataba de estabilizarse. Sin embargo, volvió a fallar; Aior supo mover su cuerpo a un lado justo en el momento en que Barnat agitó el brazo hacia el frente.
En ese instante Aior tenía en frente el brazo de Barnat y no dudó en tomarlo con ambas manos, y después de tomar un impulso saltó para pegarle una patada en el rostro. Luego de haberlo golpeado, Aior se alejó de un salto quedando a unos metros de distancia.
– Lo tomó por sorpresa, fue una buena jugada.
Esta vez era Hana la que realizaba su comentario, y Milo agregó su parecer también.
– Supo ganar estabilidad en el momento exacto, lástima que…
La gente había quedado sorprendida por lo que había sucedido, el sorpresivo golpe de Aior no lo habían esperado, así como tampoco habían esperado que no le haya hecho ni un rasguño a Barnat.
– ¿Qué fue ese intento de golpe? – preguntó Barnat.
– Cielos, sí que eres fuerte
Cuando Aior mencionó estas palabras, Ireth tuvo una ligera reacción.
Barnat por su parte, mostró su molestia frente a aquellas palabras.
– Si eso es todo lo que puedes hacer, mejor ríndete, no tenemos por qué perder el tiempo.
– Quien debe rendirse ahora eres tú, ya que serás derrotado – volvió a hablar Aior para sorpresa de la gente, esta vez en tono amenazante.
– ¿Derrotado?, debo decirte que no me gustan las bromas, enano.
– ¿Enano?
– Terminaré con esto de una vez.
Barnat se lanzó corriendo nuevamente para golpear a Aior, pero este continuó evadiendo los golpes por unos segundos más.
La gente comenzaba a aburrirse de ver los mismos movimientos por tanto tiempo, pero hubo algo que llamó la atención de todos.
– ¿Te has dado cuenta? – Hana preguntó al costado de Milo.
– Sí, aquel sujeto… Barnat ha perdido velocidad de movimiento, además parece que…
Aior permanecía quieto mientras Barnat se le acercaba.
– ¡¡Pierde de una vez!!
Barnat golpeó el rostro de Aior, la sorpresa para todos fue que este no intentó esquivarlo. Pero lo más sorprendente fue que esta vez aquel golpe no había afectado para nada a Aior.
– ¡No es posible!
La gente comenzó a murmurar asombrados por lo que habían visto.
– ¿Q–Qué fue lo que pasó? – Hana también había quedado sorprendida por esa escena.
– No solo perdió velocidad… también su fuerza… ¿qué significa esto? – Milo tampoco podía entender lo que había sucedido.
Aior seguía sin moverse, mientras Barnat no podía creer lo que estaba pasando.
– ¿Cómo es que no te hice nada?
Barnat de inmediato se alejó y volvió a golpear con todas sus fuerzas el rostro de Aior, pero el resultado fue el mismo.
– I-Imposible… ¿qué está pasando?
– Te advertí que tenías que rendirte, ahora tendré que derrotarte.
Aior apretó con fuerza su puño y golpeó en el estómago a Barnat. La fuerza aparente de Aior no tenía mucho poder, pero bastó para afectar notoriamente a Barnat, quien se tomaba la zona del golpe, poco a poco fue perdiendo el equilibrio y el conocimiento hasta que cayó inconsciente al suelo.
Todo el lugar quedó enmudecido por un momento, hasta que el presentador habló.
– L-La victoria es para… ¡Aior!
La multitud entonces comenzó a vitorear, aún asombrados, nadie tenía en sus apuestas a Aior como vencedor, incluso los miembros de Fénix Negro presentes, no lo habían esperado.
Tanto Hana como Milo por primera vez aquella tarde habían sido sorprendidos por uno de los participantes.
– No pude ver en ningún momento que haya hecho algo, ni siquiera un hechizo puede hacerse sin llamar la atención. ¿Cómo pudo pasar esto? – comentó Hana, quien no podía salir de su asombro.
– Pues será interesante averiguarlo.
Era momento de que inicie el siguiente enfrentamiento, el presentador anunció a los siguientes competidores.
– El quinto enfrentamiento comenzará…
– Listo, es tu turno – Hana le habló a Milo para que suba al escenario.
Ahora ambos participantes se encontraban frente a frente para su pelea.
– De este lado un joven aficionado que busca ganar experiencia para futuros torneos, con una apariencia no muy resaltante… ¡Milo!
¿Aficionado?
–… y del otro lado un experimentado luchador de los barrios bajos de Cassperor… ¡Rumpel!
En la zona de participantes, los comentarios para este encuentro daban el total favoritismo a Rumpel, muchos no lo conocían, pero por la descripción que habían oído podían sacar sus conclusiones.
– Ese chiquillo no podrá oponer resistencia…
– Si ese Rumpel pelea en los barrios bajos debe de ser bastante malicioso…
– Esta pelea está acabada antes de empezar…
– Ese es el mocoso que viene acompañando a esa preciosidad – comentó Arienthus con otro de los competidores mientras veía a Hana –, después de esto tendrás que buscar otro acompañante hahaha.
– ¡¡Comiencen!!
Rumpel avanzó unos pasos hacia Milo manteniendo una postura de pelea, mientras él solo seguía de pie.
– Esto será rápido jovencito, no te preocupes
Rumpel comenzó a correr hacia Milo, y cuando estaba frente a él, con un movimiento rápido trató sorprenderlo con un golpe.
– «Está acabado»
Las murmuraciones en el público ya daban por terminada la pelea.
Milo movió el cuerpo a un lado dejando pasar el brazo de Rumpel a la vez que lo tomaba con una mano. En una reacción bastante rápida, Milo levantó el codo con fuerza sin soltar del brazo a Rumpel y lo golpeó en la barbilla.
Antes que la gente pudiera darse cuenta, Milo soltó el brazo y comprimiendo su puño lo remató con otro golpe en el rostro.
Rumpel cayó unos metros más allá inconsciente, Milo lo había derrotado sin moverse de su posición y solo usando una mano.
Todo el lugar quedó en completo silencio, los competidores no entendían qué había sucedido. Los miembros de Fénix Negro habían sido sorprendidos de nuevo.
Ireth y Hana desde sus respectivos lugares sonreían con satisfacción.
– E-El ganador es… ¡Milo!
El público comenzó a aplaudir con asombro y algunos parecían haber fijado sus cartas para apostar en Milo. En la zona de competidores, Arienthus se resistía a creer lo que había visto.
– D-Debe ser una broma, e-el idiota de Rumpel se confió de seguro, no había forma que el chiquillo lo derrote.
– A mí no me pareció nada casual – comentó el pequeño encapuchado llamado Aior.
La siguiente pelea fue anunciada.
– Es hora del sexto encuentro…
Hana comenzó a avanzar hacia la plataforma, encontrándose en el camino con Milo.
– Bien hecho
– Termínalo rápido, me estoy aburriendo.
Hana entregó su espada al cuidado de Milo y continuó su camino.
Ambos competidores se encontraban en el centro, mientras el presentador los anunciaba.
– El sexto encuentro tendrá al campeón del último torneo, el invencible… ¡Arienthus!
La gente comenzó a alentar a aquel sujeto, quien había resultado ser el ganador del último evento. Milo no parecía inmutarse ante esto, ni mucho menos Hana.
–… y a la bella adversaria, también en su primera participación… ¡Hana!
En esta ocasión, más que aplausos, eran silbidos los que venían desde el público, por supuesto alentando a Hana.
– Hehehe… apuesto a que no sabías que yo fui el último ganador del torneo ¿verdad? Ahora sabes que no tienes oportunidad. Pero no te preocupes, evitaré lastimarte para que podamos pasarla de lo mejor esta noche.
– ¡¡Comiencen!! – el presentador ordenó el inicio de la pelea.
– Solo trataré de sacarte de la plataforma… quédate tra…
Cuando hablaba, Arienthus perdió de vista a Hana.
– ¿Qué? ¿Dónde está? ¿Huh?
Arienthus bajó la cabeza y ya tenía a Hana delante de él, preparando su ataque. Sin dejarle tiempo para reaccionar, Hana golpeó desde abajo a la barbilla de Arienthus, la fuerza del golpe sacó volando a este a unos metros, pero supo caer de pie.
– ¿Q-Qué pasó?
Arienthus perdía sangre de la boca mientras parecía bastante afectado. Pero cuando se dio cuenta, Hana había desaparecido nuevamente.
– ¿D-Dónde está? – comenzó a mover la cabeza tratando de buscarla.
– Si yo gano…
Cuando Arienthus escuchó esta voz, se quedó estático.
–… disfruta este día tanto como puedas.
Después de esto, Arienthus volteó rápido solo para ver cómo Hana lo golpeaba en su pecho fuertemente. El daño no lo movió de su posición, pero ocasionó que Arienthus pierda el conocimiento después de caer al suelo.
Mientras el sujeto yacía inconsciente ante la frívola mirada de Hana, el público quedaba sorprendido una vez más, el último ganador del torneo había sido derrotado de una manera bastante rápida.
– Esa mujer se desplazó a una velocidad que Arienthus no pudo percibir, sin duda será un rival difícil de vencer – comentó uno de los participantes.
Luego de eso, se disputaron los dos enfrentamientos restantes, completando así los ocho clasificados a la segunda ronda.
El presentador anunció entonces que se daría un breve receso antes de continuar con la siguiente ronda. Mientras la gente se tomaba el tiempo para poder comer o beber y los participantes para descansar; en la zona donde se encontraban los miembros de Fénix Negro había una suerte de pequeño debate entre los seis aparentes caballeros.
– Es la primera vez que veo participantes bastante interesantes.
– No solo tenemos garantizado el dinero sino también un espectáculo en esta segunda ronda.
– Podría apostar que la mujer será la ganadora.
– Es muy buena, pero no creo que sea quien gane, el sujeto que venció a Rumpel da la impresión de ser aún más fuerte.
– Apoyo la idea que la mujer lo derrotará, pero no dejo de pensar que Solo puede complicarle las cosas.
– Es verdad, Solo parece estar firme en su camino, lo podría ganar.
– No se olviden de Aior, ese sujeto es extrañamente interesante.
Mientras la conversación sobre quiénes eran sus favoritos continuaba, un séptimo miembro, que se encontraba unos metros más alejado, en otro asiento, se puso de pie y comenzó a caminar hacia ellos, vestía un traje negro más destacado, y una larga capa roja que llegaba casi a tocar el suelo.
– Ha sido una primera ronda muy interesante, al final parece que valió la pena haber venido.
Todos fijaron su mirada en aquel sujeto y se callaron, uno de ellos le habló entonces.
– Señor Dobre
– Tampoco esperábamos que sería entretenido – refirió otro de los miembros.
Mientras sucedía esta conversación, Milo y Hana se encontraban junto a Ireth en la zona del público, sentados en un puesto de bebidas, descansando de una primera jornada bastante sencilla. Ireth tomaba un jarro de refresco mientras Milo y Hana conversaban.
– Pensé que ibas a matar a ese sujeto – dijo Milo viendo a Hana.
– ¿Y quedar descalificada? No seas tonto.
– Me sorprende que puedas manejarlo con calma, no eres alguien que lo haga con facilidad.
– Eso es porque aún no me conoces bien.
– Sí, ya voy viendo.
Dos personas pasaban por el costado de los jóvenes, y uno de ellos hizo un comentario.
– Oye, por allá… ¿ese no es Dobre?
Mencionó apuntando hacia la zona de invitados donde se encontraban conversando los miembros de Fénix Negro.
– Sí, ese es.
¿Dobre? – Milo se preguntó para sí mismo mientras seguía con la vista hacia donde señalaban las personas.
– No me di cuenta en qué momento llegó, uno de los cinco elementos de Fénix Negro, Dobre «del aire».
– Bueno volvamos antes que perdamos nuestros lugares.
Luego de que aquellas personas se fueran, Hana había quedado con curiosidad por aquel sujeto.
– Dijeron ¿uno de los cinco elementos de Fénix Negro?, ¿a qué se referían?
– Dobre… del aire – agregó Ireth.
– No sé quién sea, pero sería una verdadera molestia si descubre quiénes somos, es mejor no hacernos notar – comentó Milo.
– Sí lo sé.
Al otro extremo, la conversación por escoger a sus favoritos continuaba entre los miembros, pero Dobre hizo una pausa con un comentario.
– He visto todas las peleas, pero aquellos niños… Milo y Hana, tienen una habilidad y fuerza impropias de alguien de su edad.
– Ahora que lo menciona, tiene toda la razón.
– No pierdan de vista sus movimientos.
– Sí señor – respondieron todos los miembros.
En la zona donde se encontraban Milo y las jóvenes, Hana parecía estar algo decepcionada, de pie y abrazando su gran espada apostada sobre el suelo y con Milo parado a su costado e Ireth sentada sobre una pequeña roca, entonces la joven hizo un comentario.
– Este torneo no es precisamente lo que esperaba.
– Solo a ti se te ocurrió poder encontrar gente con habilidades especiales en un simple torneo ilegal.
Milo reprochó con voz apacible la decisión de Hana.
– Sí, puede que tengas razón, tal vez me apresuré en esta decisión, pero tampoco podemos decir que no obtuvimos nada, tenemos la posibilidad de ver a ese extraño, Aior. No sabemos exactamente qué hizo para ganar, pero en esta segunda ronda tal vez podamos aclarar eso.
– Tal vez…
– No bajen los ánimos – intervino Ireth –, estoy segura que algo bueno sucederá al final de todo esto.
– Tienes razón Ireth
Hana se puso firme y cargó su espada sobre su espalda mientras cambiaba su expresión, ahora con una sonrisa, a diferencia de Milo.
Ambos salieron nuevamente hacia la zona de competidores, dejando atrás a Ireth quien los despedía con una sonrisa.
Ahora era el momento del anuncio de enfrentamientos de la segunda ronda.
El presentador volvió a salir al frente, y tomando el micrófono comenzó a hablar.
– Ha llegado el momento de anunciar los que serán los cuatro enfrentamientos para esta ronda, se ha realizado un sorteo adicional para poder emparejarlos, esto fue hecho gracias a la ayuda de nuestros invitados y organizadores.
– Señor Dobre, sobre los emparejamientos – mencionó uno de los miembros.
– No se preocupen, me encargué que todos sean interesantes hehe.
El presentador comenzó a anunciar uno por uno las cuatro peleas.
– El primer enfrentamiento será: Zedric contra Aydal; el segundo, Vaynaldum contra Solo; el tercero, Yarek contra Milo; y el cuarto, Hana contra Aior.
– ¿Huh?
La última pelea de la segunda ronda dejó con sorpresa a muchos, incluida Hana; ahora tenía que enfrentar al extraño Aior, la oportunidad perfecta para descubrir su misterio.
– Era lo que esperábamos, ahora depende de ti saber qué tan bueno puede ser.
– No tienes que recordármelo, esto será interesante.
Los dos primeros participantes saltaron al escenario, tras la orden del presentador, su pelea comenzó, la duración de la misma no fue como se esperaba. En unos pocos minutos Aydal sacó de la plataforma a Zedric, convirtiéndose en el primero en avanzar a las semifinales.
La segunda batalla, que enfrentó a Vaynaldum contra Solo duró unos minutos más que la anterior, y tuvo como vencedor a Solo después de sacar de la plataforma a su rival.
La tercera batalla iba a comenzar, se encontraban frente a frente Yarek y Milo.
– ¡¡Comiencen!!
La mano de Yarek de inmediato comenzó a desprender un extraño líquido, este sujeto agitó la mano contra toda la plataforma cubriéndola con esta extraña sustancia. En cuanto este líquido llegó a estar por debajo de los pies de Milo, este de inmediato comenzó a perder el equilibrio hasta llegar a caer al suelo.
– ¿Pero qué es esto?
Milo trataba de ponerse de pie pero tanto sus pies como sus manos resbalaban cada vez que se apoyaba en el suelo.
– ¿Qué sucede? – se sorprendió Hana.
– Hahaha… olvídalo, no podrás levantarte, con esta sustancia que tengo como mi habilidad especial, puedo hacer que cualquier tipo de superficie se convierta en una pista completamente resbalosa. No pensaba utilizarla en este torneo, pero después de verte en la primera ronda y teniéndote como rival me vi obligado a hacerlo. Ahora solo será cuestión de que te empuje fuera de la plataforma y no podrás oponer resistencia.
Milo había conseguido ponerse de pie pero a duras penas podía estabilizar su cuerpo.
– Tú tampoco tendrías que poder moverte
– De hecho, soy el único que puede hacerlo… hahaha
– Qué tramposo
Yarek comenzó a desplazarse a velocidad hasta llegar a Milo para tratar de golpearlo, pero este echó el cuerpo a un costado para evitarlo; claro que logró conseguirlo, pero resbaló cayendo al suelo de nuevo.
Ese momento lo aprovechó Yarek para pegarle una patada en el rostro a Milo, la fuerza del golpe hizo que Milo saliera arrastrado hacia el borde de la plataforma, no había forma de poder sostenerse de algo, su caída era inminente.
– Hehe, nos vemos
– ¡¡¡Milo te va a echar!!! – Hana gritó preocupada.
Milo ya estaba llegando al borde, sin opción a detenerse, ante la sorpresa de todos.
– Esa habilidad es buena – comentaba uno de los miembros de Fénix Negro.
¿En realidad llegaste hasta aquí nada más? Qué decepción.
Dobre se encontraba decepcionado de Milo, por la manera rápida en que iba a ser derrotado. Pero Milo tenía un as bajo la manga.
Aún no acaba
Milo estiró su brazo al frente y exclamó.
– ¡Cúpula!
En ese momento una semiesfera de aire se formó en su camino y detuvo su avance.
– ¿¡¡¡Qué!!!?
Yarek no lo podía creer, la gente del público tampoco, la sorpresa también llegó hasta Dobre.
– ¿¡¡…!!?
Entonces Hana pudo tranquilizarse recién.
– Es verdad, lo había olvidado…
Sin embargo, Milo aún no podía ponerse de pie.
En este estado no podré ganar, estoy con mucha desventaja… no me queda otra opción…
Mientras Milo pensaba en la manera de vencer, Yarek se arrojó nuevamente contra él.
– ¡¡Maldito!! ¡¡Pierde de una veeeez!!
Antes que Yarek llegara a golpear a Milo, este agitó el brazo con fuerza hacia él y expulsó una fuerte ráfaga de aire que sacó por los cielos al enfadado competidor.
Yarek cayó al suelo, fuera de la plataforma y dejando absorto al público.
Hana mostró su tranquilidad esbozando una leve sonrisa.
Al otro lado, la zona de invitados lucía asombrada. Uno de los miembros alcanzó a decir.
– Esa fue una ráfaga de…
– ¿Aire?
Pero fue Dobre quien terminó de completar la frase, bastante sorprendido.
La extraña sustancia desapareció de la plataforma y Milo pudo ponerse de pie.
– El ganador es… ¡Milo!
La gente comenzó a gritar de emoción, ahora comenzaban a verse las habilidades especiales de los participantes, sin duda el torneo comenzaba a tomar un buen giro.
Cuando Milo llegó a la zona de competidores fue visto de manera indiferente por Aydal y Solo. Milo llegó al costado de Hana luciendo un poco desanimado.
– ¿Qué pasó?
– Me fastidia haber tenido que utilizar magia contra una habilidad tan ridícula.
– Hehe aquí lo importante es que ganaste, ya olvídalo. Ahora es mi turno.
Hana le entregó su gran espada a Milo y comenzó a avanzar hacia la plataforma. Mientras, el presentador anunciaba a los competidores.
– La última batalla de la segunda ronda… Hana y Aior… ¡¡Comiencen!!
– Este podría ser el mejor enfrentamiento hasta ahora, será muy interesante – refirió Dobre.
– Ahora sí, me mostrarás tus habilidades, Aior.
Hana se puso en posición de ataque, manteniendo sus puños frente a su rival.
Aior mostró una sonrisa entre todo el atuendo que cubría su cuerpo, y respondió.
– Claro que sí… onee-chan
– ¿¡¡…!!?
– ¿¡Qué dijo!? – Milo se sorprendió.
– Me lo imaginaba – Ireth dijo estas palabras como si hubiese tenido sospechas desde mucho antes.
– ¿Onee-chan? ¿Acaso tú…?
– Esto será divertido.
Aior comenzó a quitarse el atuendo que cubría su cuerpo, mientras poco a poco se dejaba ver su verdadera figura, la figura de una pequeña niña que ya habían visto antes.
Al final, quien resultó estar frente a Hana era Aiko.
– ¡La enana!
Exclamó Milo luego de ver a la pequeña.
– Aiko… ¿fuiste Aior en todo momento?
– Por supuesto, onee-chan. Entonces comencemos… pero, quisiera pedirte de favor que utilices tu arma.
– ¿¡Qué!?
– ¿Está loca? – decía Milo desde afuera y sosteniendo la espada de Hana.
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