Clara - 01
Ya ha pasado un tiempo desde que llegue aquí a esta familia, solo esta compuesto por mi madre y una linda sirvienta llamada Clara. Durante ese periodo de tiempo, me han cuidado con mucho amor y paciencia, sobre todo Clara, ella ha estado la mayor parte conmigo.
Hablando de tiempos juntos, ahora mismo estoy comiendo con ellas, pero lo que aún es difícil de acostumbrarse, es por las enormes proporciones de comida que me dan.
-…
Madre: Hijo ¿Te encuentras bien? ¿Hay algo de malo en tu comida?
-No, no hay nada de malo mamá…
Clara: No tiene que guardárselo joven maestro, puede decírmelo con toda seguridad. -Dijo con preocupación.
-Pues…
Miraba el enorme trozo de carne que estaba en mi pequeño plato, el problema es que el trozo tenia el tamaño de mi cuerpo, era jodidamente grande para que yo me lo comiera solo.
-Daré mi mejor esfuerzo en comerlo…
Clara: Se que usted puede joven maestro~ -Dijo con una sonrisita.
Madre: Necesito que estes bien alimentado hoy hijo.
Clara: ~~
-¿…?
Clara se ruborizo de repente, no se que esta pasando.
Ahora que lo pienso, es la primera vez que me dan una comida tan colosal. Tengo un mal presentimiento.
(Una hora después)
Mi estomago esta a punto de reventar, por suerte no llegue a vomitar sobre la comida o estaría enserio problemas…
Clara: Llegamos joven maestro~
-Gracias…
Le pedí a Clara que me llevara directo a mi habitación, que en realidad es una casa de muñecas.
La casita que me dieron esta dentro de la habitación de Clara, así se le haría mucho más fácil en cuidarme o atenderme cuando lo más necesito.
Clara: Si necesita algo, no dude en pedírmelo joven maestro~ -Dijo con una dulce sonrisita.
-Esta bien, muchas gracias por todo Clara.
Clara: Si~
Clara fue a su ropero y saco uno de sus libros favoritos, se fue a sentar a un lado de la mesa, mientras que tarareaba una tierna melodía.
Parece ser que se encontraba de muy buen humor hoy.
Pero en fin, igual me iré a descansar, no es como si pudiera hacer mucho con mi tamaño.
Ya aceptaron la cruda realidad, fui adentro de la casa de muñecas, ahí en mi pequeño escritorio saque un libro de notas, he estado anotando todo lo que he estado viviendo últimamente.
-Veamos… -Saco su pluma.
Dia 1, al llegar a este mundo, me lleve una enorme sorpresa al ver que tan grande era mi mama y Clara, podría decirse que miden alrededor de unos 25 metros, claro, depende del tamaño de la persona, he notado que Clara es un poquito mas bajita que mi madre.
En el día 3, aún seguía teniendo mucho miedo de ellas, es lógico, ya que no sabe uno si te usaran como juguete o su esclavo, para mi sorpresa no me hicieron nada de eso, resultaron ser muy buenas conmigo.
Ya en el día 4, le pedí amablemente a Clara que me explicara como era el mundo ahí afuera, lo que me dijo fue un tanto decepcionante por así decirlo, ella me contesto «¿Hay algo extraño ahí afuera?» o también «Yo lo veo normal»
Era de esperarse, desde su respectiva, ella lo ve como un día cualquiera, pero en cambio a mí, que vengo de otro lugar, no es para nada normal ver mujeres gigantes por donde sea.
Cansado de esperar alguna respuesta, decidí comenzar con mis propias investigaciones, para mi mala fortuna, solo logré juntar muy poca información de este mundo.
Lo poco que se, es que las mujeres de aquí son todas gigantes, pero a cuanto a los hombres, son completamente pequeños… Al leer ese tipo de información me nació una duda… ¿¡Como demonios se reproducen, si el chico es el tamaño de un soldadito de juguete!?
-Malditas preguntas que no dejan dormir…
-En fin, mejor dejare esa duda a mi futuro yo.
Guardé nuevamente mi libro en mi escritorio y me fui directamente a la cama.
-Oye Clara
Clara: ¿Mmm? -Dejo a un lado su libro.
-Voy a dormir un rato, despiértame si me necesitan.
Clara: Por supuesto joven maestro, yo estaré al pendiente si lo llegan a necesitar.
-Gracias.
Ya con todo en orden, me heche a dormir.
(Media noche)
A mitad de la noche, escuche la voz de Clara que me estaba llamando afuera de mi casa.
Clara: Joven maestro, despierte.
-Zzz… zzz…
Clara Mmm~
Ella en un momento desesperado, movió con algo de fuerza la casita de muñecas.
-¡¡…!!
-¿¡Que mierda!? ¡Esto es un terremoto! -Salto de la cama.
Clara: No, no, no hay terremoto joven maestro, es solo que lo estuve hablando y no despertaba, así que lo moví un poquito…
-…
-Dios, casi me matas un infarto…
Clara: Perdón~
(5 Minutos después)
-Y bien ¿Qué es lo quieres Clara?
Clara: Bueno~ Hoy es el día joven maestro…
-¿El día? ¿De qué día hablas Clara?
Clara: Este día es muy especial joven maestro, hoy estoy ovulando…
-¡¡…!! ¿¡Ah!?
Okey, esta conversación se volvió muy rara de golpe, no se por que me dijo eso de repente.
-¿Si? Es bueno que estes… Ovulando…
Se volvió muy incómodo para mí.
Clara: Este día tan especial, haremos un bebé juntos, joven maestro.
-Uff, solo era eso, pensé que… ¿Qué?
¿Acaso escuche mal? ¿Ella quiere que hagamos un bebé?
Clara: Mo~ No me haga repetirlo joven maestro, es… Es muy vergonzoso para mi también~ -Llevo ambas manos hacia su rostro y se cubrió con ellos, su carita estaba rojita como el de un tomate.
-Este… ¿Estas bromeando verdad?
¿?: Ella no está bromeando hijo.
-Esa voz… -Volteo hacia donde provenía.
Vi una silueta oscura a mitad de la habitación, que lentamente se acercaba hacia nosotros, al acercarse lo suficiente y gracias a la luz de la luna puede obsérvala mejor.
-¿Mamá?
Madre: Hijo, hoy es el tan anhelado día, he se formará un nuevo miembro de nuestra familia.
Mi madre fue atrás de Clara, le toco levemente su hombro y ella lentamente se comenzó a quitar su traje de sirvienta.
Madre: Hijo, hoy te convertirás en un hombre, al igual que tu padre lo hizo conmigo.
¡Con una mierda! ¡Viendo la diferencia de tamaños! ¡No me quiero imaginar el tremendo desafío que hizo mi papá para complacer a mi mamá!
Que por cierto, ni una sola vez lo he visto en estos días.
-¡Espera! ¡Espera un momento por favor! ¡Yo aun no me encuentro listo para ser padre!
Madre: No te tienes de que preocupar por eso hijo, depende del sexo del bebé, se sabrá quien lo cuidará.
Clara ya se encontraba completamente desnuda, ella mostraba todo su hermoso cuerpo desnudo, su piel blanca como la nieve y sus ojos de color jade, con el toque bajo la luz de la luna, la hacían ver como una completa belleza.
Clara iba acercándose lentamente hacia mí.
¡No! La verdad no puedo hacer esto, aun tengo mis dudas de como rayos la llegare a embarazar, necesito otro poco mas de tiempo para pensarlo, todo esto es tan repentino.
Debo ganar tiempo… ¡Ya se!
-¡Momento mamá! ¡Primero hay que considerar los sentimientos de Clara! ¿¡No creo que a ella le guste hacer esto de manera forzosa conmigo!?
Clara: ¡¡…!!
Clara al escuchar eso, ella se detuvo enfrente de mí. Cuando de pronto, vi como en sus ojos, comenzaron a formar lágrimas.
Clara: Joven maestro… ¿En verdad no se acuerda de lo que me prometo cuando era usted niño?
No me jodas, dura apenas me acuerdo que paso hace unas horas y tu quieres que recuerde algo de mi infancia. Es mejor ser sinceró.
-Yo… Lo siento, lo olvide completamente…
Espero que esto me ayude a ganar tiempo.
Clara: …
Clara: Joven maestro…
Ella alzo su mano y lo bajo con gran velocidad hacia mi.
-¡¡Oye!! ¡No!
Ahora si estoy muerto, ni siquiera he vivido lo suficiente, espero que en mi próxima vida no esté tan jodido.
Se escucho un gran «Pum»
-¡¡…!!
Ella termino golpeando con brutal fuerza la mesa.
Clara: …
Clara: Me disculpo, me tengo que ir a dormir…
Ella tomo sus ropas que estaban en el piso y salió a toda velocidad de mi habitación.
-¡Clara! ¡Espera!
Pude notar que ella seguía llorando, deseaba seguirla, pero es completamente inútil, ya que tengo el tamaño de un soldadito de juguete y por la otra, es que estoy en una mesa.
-Dios…
Madre: Hijo…
«Glup»
Por alguna extraña razón, comencé a sudar frio.
-Si… Mamá -Hablo nerviosamente.
Madre: Sabes que te adoro con el fondo de mi corazón, pero esta vez te pasaste, hiciste llorar a Clara.
¿Es enserio? Ella casi me mata, debiste mencionar eso primero mamá
-Si… Lo siento.
Madre: No es conmigo con quien te debes disculpar cariño, segundo, me decepcionaste, si no pones de buen humor a Clara, no volverás a formar parte de esta familia.
-¡¡…!!
Que poca… Le da mas prioridad a Clara que a su propio hijo, enserio necesito investigar a profundidad de funcionan las familias de este mundo.
-Yo… Hare todo lo que pueda por ella…
Mi voz salía temblorosa, la madre amorosa y tierna que estaba en el almuerzo, había desaparecido al instante.
Lo que estaba enfrente de mí, era una mujer muy estricta y con los ojos fríos.
Madre: Ahh… Descansa hijo, iré hablar con Clara, espero que recuerde la promesa que le prometiste o ya veras lo que te pasara.
Después de decirme esas duras palabras, ella se fue, dejándome solo en la habitación.
-…
-Mínimo un tip o un consejo ¿No?
Al final, terminé regresando a mi cama, cerré mis ojos y no pensé más de este tema.
A las pocas horas, comencé a tener un sueño, en este me encontraba jugando en la mesita de té de mamá.
Hasta que ella me hablo.
Madre: Hijo, quiero presentarte a Clara, ella será una mujer muy especial para ti en el futuro.
La Clara de mi sueño lucia mucho mas joven, creo que este debe ser su versión adolescente.
Clara: Es un placer conocerlo, joven maestro -Hizo una leve reverencia.
-Hola~ -Salude de manera boba.
Madre: Ven querida, toma asiento.
Clara: Muchas gracias. -Ella se sentó a un lado.
-¡Sii! ¡Nueva amiga!
Fue corriendo a abrazarla, ella al ser tan grande, solo logro abrazarle un dedito de su mano.
Clara: ¡¡…!!
Clara se ruborizo un poquito, se le hizo bastante tierno que la abrazara.
Clara: Jiji~ Espero llevarnos bien el futuro joven maestro~ -Dijo con una tierna sonrisita.
-Por supuesto~ -Sonrió.
(A la mañana siguiente)
¿Qué fue ese extraño sueño? ¿Quizás uno de mis recuerdos de mi pasado?
«Tock» «Tock»
-Adelante.
Clara: Con su permiso.
Clara paso de manera sigilosa a mi habitación, pude ver en su rostro que estaba calmada, al parecer la platica que tuvo con mamá, termino sirviendo de algo.
-Buenos días Clara.
Clara: Buenos días joven maestro.
Incluso su voz sonaba tranquila, hasta ahora todo bien. Hasta que ella coloco su mano sobre la mesa.
-Este…
Clara: Adelante joven maestro, por favor suba.
Que extraño, ella por lo regular me toma con cuidado y me mete dentro de uno de sus bolsillos que está cerca de su pecho, al parecer aun sigue cabreada por lo de ayer.
-Si, voy…
Hice un enorme esfuerzo por subir a la palma de su mano, ya una vez arriba, ella se movió de manera brusca y siguió con su camino hacia el comedor.
Pararon unos minutos sin recibir ni una sola palabra de Clara, ella mantenía la mirada firme sin mirarme o por lo menos darme una pequeña charla.
Esto ya no puede seguir así, necesito consolarme bien con Clara o mamá me castigara.
-Oye Clara…
Clara: … -Se mantuvo en silencio.
-¿Recuerdas la primera vez que nos conocimos?
Clara: ¡¡…!!
Clara al escuchar eso, sus pasos se volvieron un poco lentos.
-Recuerdo que estaba jugando sobre la mesita de té, hasta que mi mamá llego y te presento delante de mí.
Clara: … -Ella escuchaba atentamente en silencio.
-Ella me dijo que serias una mujer muy especial para mi… Y al parecer resulto ser verdad, yo lo siento Clara, si he olvidado algo verdaderamente importante para ambos, no quiero que te alejes de mí nunca.
-No sé qué haría si te fueras de mi lado.
Me puse de pie y fui abrazar uno de los dedos de su mano.
-No quiero otras sirvientas, no deseo que me dejes, lo que mas amo en este mundo eres tú, Clara.
Clara: joven maestro…
Nuevamente vi como Clara quería llorar.
Clara: Yo… Yo igual deseo estar siempre de su lado~
Su estado de animo aumento, ver esa adorable sonrisa hace que me alegre el día.
Clara: Por cierto joven maestro, usted y yo ¿Qué somos?
El corazón de Clara comenzó a latir fuertemente. Sus mejillas estaban rojitas.
-Eso no se pregunta Clara.
Clara: ¡Entonces usted y yo…!
-Si, somos amo y sirviente.
Clara: ¡Ah!
-¿…?
El estado de ánimo de Clara cayo rápidamente.
Clara: Su mamá lo debe estar esperando, vámonos -Dijo en un tono enojada.
-¡Oye! ¡Espera! ¡Fuaaa!
Clara se movió mucho más rápido en llegar con mi madre, en este día, me dieron de comer pan con agua, ambas mujeres se le podía notar la cara de enojo cada vez que me veían.
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