Humanos Contra Demonios.- ¿Soy realmente un chico perfecto? No lo creo - 05.1
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CAPÍTULO 5- Adiós, pueblo.
(Pov- Daniel.)
Ah, ahora resulta que puedo ver fantasmas. Tener magia me sorprende cada vez más.
Estar en este mundo resultó ser más interesante de lo que creí. Me pregunto si existirán fantasmas malvados o demoníacos, algo así como monstruos. Sería interesante pelear con uno.
Soy pacifista, pero debo ganar experiencia para poder ser capaz de pelear con demonios más peligrosos y poderosos. Debo volverme mucho más poderoso de lo que ya soy.
Dejando de lado mis problemas a futuro, en este momento me siento tan feliz y satisfecho con mi vida. Recuperé a mi abuela, tengo nuevos amigos, un nuevo hogar, le dije adiós a nuestros problemas económicos y soy poderoso. Mi vida está mejorando bastante, y espero que siga mejorando.
—Por cierto, ¿tienes novia?
—No, pero te advierto de una vez que no estoy interesado en tener novia. No intentes nada raro, porque posiblemente te termine dando dinero para que inicies una nueva vida lejos de mí.
—Ouch, que exagerado eres.
—Solo es una advertencia.
Debo dejarles en claro que no estoy interesado en el romance, así me tratarán como un amigo y no intentarán coquetear conmigo.
Quiero tener solo amigos, es todo lo que quiero.
•
•
Han pasado varios minutos desde que mi abuela y las chicas entraron al río, pero desde hace uno o dos minutos no escucho nada de mi abuela y mis compañeras. No hay nada de ruido en el ambiente… Y eso es raro… ¿Pasa algo malo?
Si algo malo estuviera pasando, las chicas me hubieran pedido ayuda. ¿Se estarán cambiando de ropa?
Miraría para confirmar si están a salvo, pero no quiero ver a mi abuela bañándose, y tampoco quiero ver a mis compañeras bañándose, eso sería acoso sexual.
Pero el ambiente está demasiado silencioso, y eso me preocupa bastante.
—¿Ya habrán terminado de bañarse? Señorita, ¿puedes fijarte si ya terminaron de bañarse? Te lo agradecería.
Ella es mujer, así que pedirle a ella que las vea sería lo mejor.
—¿Quiénes?
—Mis compañeras se están bañando en el río. Fíjate si ya terminaron, por favor.
—¿Bañándose?
La chica voltea a ver el río. Yo también miraría el río, pero no quiero perturbarme viendo a mi abuela joven bañándose… Ya es raro que sea joven.
Joven… Mi abuela joven es muy hermosa… Hermosa… Si a mí, un hombre, me acosan sexualmente todos los días, a una mujer tan hermosa como mi abuela seguramente será acosada sexualmente peor que a mí, como lo que le pasó con Sandro.
… La sangre me hierve de ira con tan solo imaginar a mi abuela siendo acosada sexualmente por algún bastardo.
La protegeré todo el tiempo, y si algún idiota trata de acosarla sexualmente, le romperé personalmente la cara.
Soy pacifista, pero no un idiota.
—Oye, guapo.
—Me llamo Daniel.
—Oye, Daniel, no hay nadie bañándose.
—Supongo que se están cambiando de ropa.
—No hay nadie en el río ni cerca. Solo estamos nosotros dos aquí.
¿Q-qué dijo?
Volteo rápidamente a ver a la dirección en donde estaban y no hay nadie… N-no hay nadie, y sus ropas siguen en la orilla del río… ¡Mierda!
—¡Maldita sea!
¡Solo me descuidé un poco porque pensé que Sara y Alex eran capaces de proteger a mi abuela! ¡¿Están en peligro?! ¡Ahhhhhhhh! ¡Soy el peor nieto!
Me levanto y observo a mi alrededor, con la esperanza de ver alguna pista, pero no hay nadie ni nada. N-nada… ¡Ahhhhhhhh! ¡Definitivamente les pasó algo! ¡¿Por qué no me pidieron ayuda?! ¡¿Las secuestró un demonio?! ¡No, abuela!
—¡¿A dónde habrán ido?! ¡Señorita, ¿hay monstruos en este lugar?!
—En este lugar es muy común ver Orcos, supongo que ellos se las llevaron.
—¡¿Orcos?! ¡¿Qué es un Orco?!
—Son como cerdos gigantes, ellos secuestran mujeres para… procrear… Supongo que me entiendes.
U-un Orco, c-como los Orcos de las historias de fantasía. A-aquí también hay de esos Orcos. ¡¿Un Orco secuestró a mi abuela?! ¡Nooooooo!
¡No permitiré que mi abuela sea profanada! ¡La protegeré con mi vida! ¡Nadie tocará a mi abuela!
—¡Mierda!
¡Nadie va a profanar a mi abuela, tendrán que matarme primero!
¡Se arrepentirán de tenerme como enemigo! ¡Nadie le hace daño a mi abuela y sale ileso!
Junto mis manos, para usar el mismo hechizo que Sara. Me concentro en imaginar a mi abuela y compañeras, para que el hechizo sepa exactamente lo que quiero encontrar.
—¡Búsqueda!
Siento como mi vista atraviesa los árboles hasta que veo a cuatro Orcos con mi abuela y mis compañeras atadas de las piernas y brazos. Tres de los Orcos cargan a mis compañeras y uno lidera el frente con una espada. Los Orcos son hombres cerdos que usan unos pantalones verdes… Cerdos con pantalones… Maldito mundo raro.
Se atrevieron a secuestrar a mi abuela… ¡Tienen sus minutos contados!
Pero, ¿serán poderosos? Lograron secuestrar a mi abuela sin que me diera cuenta. ¿En serio Alex y Sara no fueron capaces de derrotarlos? ¿Las derrotaron tan fácilmente? ¿Tan fácil que ni siquiera pude escuchar la pelea por lo corta que fue?
Me estoy arrepintiendo de tenerlas como compañeras. No puedo confiarles a mi abuela a dos chicas que no son capaces de protegerla.
—Ellas son muy poderosas, pero ¿las atraparon tan fácil que no me di cuenta?
—Ellos aguantan mucho la respiración bajo el agua. Cuando las mujeres vienen a bañarse, ellos salen del agua y las atrapan. Usan un hechizo que les quita la voz por un minuto, para que no puedan ser capaces de pedir ayuda.
—¡Debo ir por ellas! ¡Esos Orcos me las pagarán!
—¡Llévame contigo, cuando estaba viva era una gran aventurera!
Entre más ayuda, mucho mejor. No sé nada sobre los Orcos, así que no debo tomarlos a la ligera.
—Supongo que podría necesitar tu ayuda. ¡Muslar asio!
Tomo en mis brazos a la chica. Me sentiría nervioso o apenado, pues ella me abraza con mucha fuerza y siento sus pechos en mi pecho, pero no tengo tiempo para ponerme nervioso, ¡mi abuela está en peligro!
—Por cierto, ¿cuál es tu nombre?
—Rem, amo.
Me sonrojo un poco, me da pena que me digan «amo». ¡Ahhhhhhhh! ¡No, Daniel, deja las tonterías de lado, tu abuela necesita tu ayuda!
—¡Que no soy tu amo!
Me preparo para volar. Abuela, aguanta solo un poco más, por favor.
—¡Arches Nexus!
Me voy volando de ahí.
Estoy volando sobre el lugar, buscándolos. ¡Maldita sea, sabía que debía bañarme solo!
Espero que no la hayan tocado indebidamente… Porque, si lo hicieron, sufrirán un destino peor que la muerte… De eso me aseguraré.
—Los Orcos deben estar… justo aquí.
Sí, los veo. Veo unos Orcos que no saben que están a punto de morir.
Aterrizo frente a los Orcos y bajo a Rem de mis brazos.
Los Orcos se detienen y yo tomo aire para tranquilizarme, porque si no me tranquilizo primero, terminaré perturbando a mi abuela por lo que posiblemente termine haciéndole a los Orcos
Prefiero darles una muerte rápida, pues si me tomo mi tiempo para torturarlos, mi abuela se asustará. No quiero que mi abuela quede perturbada.
Tienen suerte de que mi abuela sea una persona buena, malditos.
—¡Dani!- Dijo mi abuela, con una gran sonrisa en su rostro.
—¡Daniel!- Dijeron Alex y Sara, llorando.
—Fufu. ¡Les dije que mi Dani nos salvaría!- Dijo mi abuela, inflando el pecho con orgullo.
… Abuela, deberías estar más asustada. ¡Me gusta tu lado optimista, pero estuvieron a punto de violarte! ¡Preocúpate un poco más…! Ah, pero mi abuela es así, siempre ha sido tan optimista y alegre.
Estoy muy decepcionado de ellas, Alex y Sara.
Creí que ellas eran lo suficientemente poderosas como para derrotar a un Orco… Yo quiero compañeras fuertes, no quiero compañeras de relleno inútiles.
Sé que es cruel pensar eso de ellas, pero mi misión necesita personas fuertes, no débiles.
No quiero cargar con compañeras inútiles, solo retrasarían mi objetivo: ser poderoso para poder ser capaz de proteger a mi abuela.
Ah, Daniel, toma aire. Las necesitas, al menos mientras te acostumbras a este mundo.
—Déjame entender la situación. Ustedes son muy poderosas, ¿pero las atraparon tan fácil? Mi abuela tiene magia poderosa, pero no es una guerrera, a diferencia de ustedes dos.
—Ellos son muy fuertes y resistentes. Intentamos pedirte ayuda, pero no podíamos hablar.- Dijo Sara.
¿Fuertes y resistentes? ¿Tan fuertes que Sara ni Alex pudieron derrotarlos? Debo comprobarlo.
Uno de los Orcos se acerca a nosotros, el líder, listo para pelear contra mí.
—Tenemos a otra, es nuestro día de suerte.
Rem se esconde detrás de mí, está temblando de miedo… Otra decepción.
—¿Realmente eras una gran aventurera?
El Orco se acerca hacia mí corriendo, seguramente no me toma en serio. El demonio negro también me menospreció, así que sé que debo tomar ventaja de eso.
—¡Espada Dex!
La espada aparece en mis manos, pero el Orco sigue acercándose sin miedo con una espada en sus manos.
No sé lo poderoso que eres, pero no me importa. Te atreviste a secuestrar a mi abuela, y eso es algo que nunca perdonaré.
Cualquiera que se atreva a hacer sufrir a mi abuela, nunca tendrá mi piedad.
—¡Muere!
No, tú muere.
El Orco intenta golpearme con la espada, pero fácilmente lo esquivo gracias al hechizo «Muslar asio», que me permite ver los ataques en cámara lenta.
¿En serio eso es todo? Sí, definitivamente soy ultra mega poderoso. Ah, el jefe final será muchísimo más poderoso que yo… Me espera un infierno en el futuro.
—¡Nadie le hace daño a mi abuela!- Dije, mientras sostenía con más fuerza mi espada.
Tomo impulso y me abalanzo contra él, partiendo al Orco a la mitad usando mi espada.
… Fue fácil… Mi espada fue capaz de partirlo a la mitad sin dificultad alguna… Ah, el problema no son mis compañeras, el problema soy yo, que soy demasiado poderoso. Algo injusto, pero necesario.
Chicas, perdón por considerarlas inútiles. No es su culpa que yo sea un fenómeno bendecido por un Dios.
Ah… Me estoy comportando demasiado grosero. Debo tranquilizarme.
—¡¡Un demonio!!- Gritaron los tres Orcos restantes, muertos de miedo.
Oigan, no me digan tan feo. Piensen en mis sentimientos, me dolió.
Los tres Orcos sueltan a mis compañeras e intentan escapar. Afortunadamente alcancé a atrapar a mi abuela con mis brazos, evitando que cayera al suelo y se golpeé. Lo siento, chicas, pero mi abuela es mi prioridad.
—¡Ouch! ¡Me dolió!- Dijo Alex, que cayó de cara.
—Me duele más el orgullo.- Dijo Sara, que cayó de cara también.
—¿Estás bien, abuela?
—No te preocupes por mí, sabía que vendrías a rescatarnos, así que no me asusté.
Gracias por la confianza, abuela.
Miré a los Orcos que intentaban escapar y dejé a mi abuela sentada en el suelo.
Lamentablemente para ustedes, no tendré piedad. Intentaron abusar de mi abuela, y eso nunca lo perdonaré.
Morirán por todos los crimenes que han cometido.
—¡Vels!
Me acerco hacia ellos corriendo, logrando alcanzarlos en menos de un segundo gracias al hechizo que usé, que aumenta mi velocidad al correr, y parto a los tres a la mitad con mi espada con rápidos ataques, sin piedad alguna.
Dios me pidió no tener piedad, y lo obedeceré.
Además, ustedes seguramente han violado a muchas mujeres, ustedes no merecen piedad alguna.
Sus cuerpos partidos cayeron al suelo, mientras mi espada desaparece.
—Bien hecho.
¿Eh? ¿Una voz de hombre?
Volteé hacia todas partes… No veo a nadie más… ¿Me lo habré imaginado?
—¡Increíble, eres muy poderoso, amo!- Dijo Rem, con ojos brillantes.
A-agradezco las palabras, ¡pero no me llames amo!
—¡Que no soy tu amo!
Ah, como sea.
Miré los cuerpos sin vida de los Orcos… Los maté sin dudarlo… Los maté… ¿Estoy cambiando? No… Estoy haciendo lo correcto, lo que hice estuvo bien, pero… ¿En serio fui capaz de matarlos sin dudarlo? No sé qué pensar al respecto.
Desato a mi abuela y a mis compañeras, que están en ropa interior.
Ignorando por completo a mi abuela por el bien de mi salud mental, ¡Sara y Alex están en ropa interior! ¡Ahhhhhhhh! ¡Mi corazón está demasiado acelerado! ¡No estoy acostumbrado a esto!
—E-esto es incómodo.- Dije, sonrojado.
Me tapo los ojos con mi mano derecha, y solo veo un poco entre mis dedos para verles solamente los rostros.
—¿No quieres vernos? ¿No te gustan las mujeres?- Dijo Sara.
—¡Sí me gustan, pero no quiero ver a mi abuela en ropa interior!
¡¿A qué clase de enfermo le gustaría ver a su abuela en ropa interior?! ¡No soy un enfermo psicópata!
Además, el hecho de que me gusten las mujeres no significa que me aproveche de la situación para verlas en ropa interior. ¡Eso es acoso sexual! Y no quiero incomodarlas.
Me tranquilizo y suspiro… Vamos, Daniel… Ah… Ya todo pasó. Lograste salvar a tu abuela, ya todo está bien.
—Soy muy fuerte, o ustedes son muy débiles. ¿En serio fueron capturadas tan fácil? Se veían ilesos. ¿Ni siquiera fueron capaces de lastimarlos?
—No lo parecen, pero son muy fuertes, nos tomaron por sorpresa y nos amarraron los pies y manos, no tuvimos tiempo para reaccionar.- Dijo Alex.
Ah, bajaron la guardia. Eso tiene sentido… Vaya.
Sara observa a Rem con curiosidad, pues se le está quedando viendo.
—¿Quién es ella?
—Es un fantasma que reviví. Ella vivirá con nosotros por un tiempo mientras consigue un lugar en donde vivir. Primero quiero que se acostumbre a estar viva de nuevo y después le conseguiré algún trabajo. Espero que se lleven bien con ella.
No pienso tenerla conmigo por mucho tiempo. Ya lo dije antes, pero solo quiero compañeros útiles y fuertes, no quiero poner en peligro a personas que no son capaces de protegerse a sí mismas.
—¡¿Un fantasma?!- Dijeron las tres, sorprendidas, mientras observan demasiado a Rem, con emoción y con expresiones de no poder estar creyendo lo que están viendo.
—También me sorprendí, pero por alguna razón, yo puedo ver fantasmas.
—¡¿Puedes ver fantasmas, Dani?!
—Sí, abuela. ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Puedo seguir considerándome un humano?!
E-esos Orcos me llamaron demonio. ¡¿Y si las personas comienzan a tenerme miedo?! ¡No quiero que me tengan miedo!
—¡Eres increíble, amo!
Rem me abraza con fuerza, p-poniendo mi cabeza en sus pechos. ¡Ahhhhhhhh! ¡Es tan incómodo!
—¡Eres la persona más genial que he conocido, amo!
—¡Que no soy tu amo!
—¡¿Amo?!- Dijeron las tres, confundidas.
¡Ahhhhhhhh! ¡No quiero que mi abuela piense mal de mí! ¡Soy incapaz de obligar a una chica a llamarme amo!
—N-no es lo que parece, abuela. Ella se autoproclamó mi esclava y ahora no deja de llamarme amo. ¡No es mi culpa! P-por cierto, ¿ya terminaron de bañarse? Creo que necesito un buen descanso. Hoy fue un día lleno de emociones.
—Apenas estábamos comenzando cuando nos atraparon.- Dijo mi abuela.
Supongo que quiere terminar de bañarse. Pero esta vez no bajaré la guardia.
—Bueno, Rem las vigilará por mí. Vámonos.
Pongo mi mano izquierda en el hombro derecho de Rem, pues no puedo ver tan bien.
—¿Puedes guiarme? No quiero ver a mi abuela en ropa interior.
—¡Claro, amo!
Ah… Quiero compañeros que sepan protegerse solos… Mi abuela es nueva en esto, a ella se le perdona, pero Sara y Alex tienen experiencia siendo aventureras.
… Sandro es fuerte y lo derroté…
Dios, los aventureros de este mundo son unos inútiles, ¿verdad?
Si el demonio negro era igual de poderoso que Sandro, y ese demonio era uno de los más débiles, significa que los demonios más poderosos son capaces de destruir ciudades en pocos minutos… Debo estar preparado para cualquier situación.
•
•
Después de caminar unos minutos, llegamos al río. Espero que no hayan más Orcos, no quiero que el primer día de mi abuela en este mundo se arruine más.
—Allí están nuestras cosas.- Dijo Sara.
—Terminen de bañarse. Yo los espero aquí.
Me siento debajo de un árbol.
—Rem, siéntate conmigo, para que las vigiles.
—¡Claro, amo!
—No me digas amo, dime Dani o Daniel.
Prefiero ser llamado Dani que amo.
—¡Está bien, Dani!
Rem se sienta a mi lado y yo saco mi teléfono, para seguir estudiando el lugar.
—Es muy raro eso que tienes.- Dijo Rem, mientras observa mi teléfono.
—Se llama teléfono, sirve para guardar hechizos, tomar fotos, videos, y también sirve como mapa.
—¿Hace todo eso? ¡Increíble! Aunque no sé qué son las fotos y vídeos. El mundo ha evolucionado bastante desde que me morí.
Le explicaría, pero mejor después. Por ahora solo quiero seguir estudiando este país.
—Vigila, no quiero tener que salvarlas de nuevo.
No siempre tendré la suerte de que mis enemigos me menosprecien. Entre más famoso sea, más difícil será para mí derrotar a mis enemigos.
—¡Confía en mí!
… Mmm… Orcos… Seres de fantasía… Magia… Aventureros… Hombres gallinas… Es cierto, ¿en dónde están los semihumanos y los Elfos? Solo hay humanos… Y tampoco he visto enanos… Que extraño… Esperaba conocer hermosas Elfas y adorables chicas gato.
Bueno, el mundo es enorme, y si hay hombres gallina, debe de haber mujeres gato o cosas parecidas.
A seguir estudiando.
•
•
—¡Ya terminaron!
Ah, por fin, ya salieron. Ya es mi turno.
Pasaron aproximadamente 10 minutos y Rem me sacudió el brazo derecho.
—¡Dani, ya salieron del agua!
—Está bien, gracias.
Después de que se cambiaran de ropa, me reúno con ellas.
—Bien, es tu turno, Dani.- Dijo mi abuela.
—Sí, lo sé.
Me quito el chaleco y la camisa.
…
…
…
¿P-por qué ellas no dejan de observarme?
…
…
…
Ah… ¡Esas miradas son incómodas!
—Espera… ¡No me bañaré frente a ustedes!
—No te vamos a espiar, te lo prometo.- Dijo Alex.
—¡Rem, vigila, que no me miren!
—¡Haré mi mejor esfuerzo, Dani!- Dijo Rem.
Me alejo lo más lejos posible de ellas. ¡Yo no las acosé sexualmente, ustedes deberían de hacer lo mismo!
—Aquí estaré bien.
Sí, lejos de todas, pero no tan lejos como para no verlas. El lugar perfecto.
Me quito toda la ropa y entro al agua. Ay, está fría, pero poco a poco me acostumbraré a esta temperatura.
—Está helada…
Me limpio el cuerpo usando mis manos. No tengo jabón, pero no importa, después conseguiré uno.
Ah, que relajante, hace días que no me bañaba… Y tampoco he hecho del baño últimamente porque mi estómago no tenía nada en su interior.
—Ahora que me doy cuenta, hace dos días que no voy al baño… Mierda, estoy seguro de que los baños son solo agujeros en el suelo.
Ah, este mundo podrá tener magia, pero están muy poco avanzados. Definitivamente prefiero la tecnología que la magia.
•
•
(Pov- ¿?)
Daniel… ¿Por qué ese chico me recuerda tanto a Kei Molfer? No lo sé… Debo seguir investigando.
—Oh, Daniel. Eres tan parecido, pero, al mismo tiempo, tan diferente a ese chico… Kei me rechazó, pero estoy segura de que tú me aceptarás… Eres mucho mejor que ese idiota.
Me tomará algo de tiempo, pero te enamorarás de mí. Yo, Desmolfer, seré tu futura esposa.
—¡Uwaaaah! ¡Que asco, un pez!- Dijo, asustado.
Tan inocente. Que lindo.
Verlo bañándose se siente… raro… Ah… Me quiero masturbar… Pero me prometí ser una chica buena… A él le gustan las chicas buenas… No se enamorará de mí si soy una acosadora.
Miré un poco más y el espejo mágico desapareció.
Bien… Sí, me sigue excitando recordar eso. Me iré a masturbar.
•
•
(Pov- Daniel.)
Sentí un escalofrío… ¿Por qué siento que me vigilan?
Ah…
—Da igual.
Desde esta distancia no podrán verme tan bien, así que estoy a salvo.
Después de unos minutos, salgo del agua y me seco con la toalla. Ah, definitivamente esto era lo que necesitaba, un buen baño, aunque hubiera preferido bañarme con agua caliente y no con agua helada.
No me quejo, estoy acostumbrado a bañarme con agua helada porque no teníamos agua caliente en mi casa en mi mundo original, ¡pero el agua en este lugar estaba demasiado helada! E-espero que mi abuela no se enferme.
—Listo, terminé.
Me pongo la ropa que me quité.
—Llegando a casa me pongo ropa nueva.
Afortunadamente compré bastante ropa.
Me dirijo a las chicas.
Llego con ellas y Rem se acerca inmediatamente a mí, con una gran sonrisa en su rostro.
—¿Hubo algún problema?
—¡Esta chica trató de verlo, pero no te preocupes, la até!
Alex está en el suelo, atada con una cuerda… ¿De dónde sacó la cuerda? Bueno, no importa.
—¡Solo miré un poquito!
Estoy acostumbrado al acoso sexual, así que no me molesta tanto.
La desato… No me molesta que me haya mirado, ya estoy acostumbrado al acoso.
—Bueno, vámonos. ¡Muslar asio!
Alex sube a mi espalda y tomo a mi abuela en los brazos.
Invocaría al unicornio, pero ya lo hemos molestado mucho, se terminará enojando. Seguramente él está descansando en este momento.
—No quiero molestar otra vez al unicornio, ahora vuelvo por ustedes.
Ya lo llamé varias veces hoy. Se enojará conmigo.
—¡Está bien, Dani!- Dijo Rem.
Me voy de ahí volando. Es peligroso dejarlas solas, pero no tardaré mucho.
Un minuto me tomó ir al pueblo y regresar.
Regreso con Sara y Rem, y aterrizo frente a ellas.
—Bien, suban.
—¡Quiero ir en los brazos de Dani!- Dijo Rem.
—Está bien, yo iré en su espalda.- Dijo Sara.
Tomo a Rem con mis brazos y Sara sube a mi espalda. Sara no es una chica plana, tiene grandes pechos, y sentirlos en mi espalda me pone demasiado nervioso y me apena.
—¿L-listas?
—¡Sí!- Dijo Rem.
—Estoy… lista.- Dijo Sara, asustada, pues siento su cuerpo temblar.
No te preocupes, Sara, ya me acostumbré a este hechizo de vuelo.
—¡Arches Nexus!
Me voy volando de ahí, y no tardo mucho en llegar a nuestro destino.
Llego al pueblo, bajo a Rem y Sara baja temblando de mi espalda.
—Realmente no me puedo acostumbrar al vuelo.- Dijo Sara, con náuseas.
¿En serio se mareó? Creo que ya me acostumbré a volar, no me siento raro al volar.
—¡Eso fue increíble!- Dijo Rem.
… Oh…
Rem se queda observando a las personas y casas que están a nuestro alrededor.
Supongo que su yo fantasma nunca se imaginó que volvería a estar con vida. Seguramente está en shock en este momento, o algo así. Se dio cuenta por completo de que, efectivamente, está viva otra vez.
—Desde hace muchos años que estaba condenada a vagar por el río, no podía salir de ahí, era muy aburrido… Ahora que vuelvo a estar viva, puedo hacer lo que quiera, puedo ir a donde quiera… Puedo hacer lo que quiera…
Sus ojos se llenaron de lágrimas y me abrazó con fuerza.
—¡Muchas gracias, Dani!
Seguramente tiene un pasado triste. Considerando su edad y la ubicación del río, murió ahogada… O asesinada.
… Tal vez la violaron y después la mataron… No quiero preguntarle nada en este momento, debo esperar.
Con el tiempo olvidará su pasado y disfrutará de su nueva vida.
… Pero esa nueva vida será lejos de mí. Cuando llegue el momento adecuado, le daré dinero para que se compre una casa y le conseguiré un trabajo.
Pero esperaré unos meses, debo descubrir si revivir a un fantasma no tiene efectos negativos en su cuerpo. Tal vez necesite de mi poder mágico para seguir viva o algo así.
—No te preocupes, está bien.
Le acaricio la cabeza y le sonrío.
—Disfruta tu nueva vida.
Rem me ve a los ojos y se sonroja. Lo arruiné. ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué sigo sonriendo?!
—Lindo…
Siento mi rostro ponerse rojo de la vergüenza y volteo a ver a otra parte.
—G-gracias.
D-debo dejar de sonreirle a las mujeres.
Entramos a la casa y se la muestro a Rem, pues aquí vivirá por meses.
—La acabamos de comprar, por eso está vacía, cuando consigamos dinero, compraremos muebles.
… Ah, con razón siento mi brazo pesado. Rem sigue abrazándome. ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué sonreí?!
—¡Si estoy con Dani, no me importaría dormir en el suelo!
Se enamoró de mí… Yo le salvé la vida… Ah… Cliché. Le dejaré en claro que quiero estar solo… Y si quiere salir conmigo, la rechazaré inmediatamente, no me importa que eso le rompa el corazón.
—Dani.
—¿Sí, abuela?
Mi abuela se acerca a mí.
—Dani, ¿en dónde podemos hacer nuestras… necesidades?
Ah, una de las necesidades más básicas de los seres humanos.
—No lo sé.
Me acerco a ella y le susurro.
—Yo me estoy aguantando desde hace mucho.
Mi abuela voltea a ver a Sara.
—Señorita, ¿en dónde podemos hacer nuestras… necesidades?
—La zona para hacer del baño está en el centro del pueblo.
—¿Z-zona?- Dije, confundido.
—¿C-cómo son los baños aquí?- Dijo mi abuela, confundida y nerviosa.
—Pues… Son como casitas pequeñas en donde puedes entrar y hacer del baño.
Como los baños que hay en las construcciones.
Suspiro… Estamos en un mundo demasiado atrasado… Esperaba un mundo un poco más moderno.
Me acerco a Sara.
—¿Los baños son solo un agujero en el suelo?
—Sí, ¿por qué?
Realmente estamos en un mundo sin tecnología… Este mundo no está muy avanzado, pero al menos esperaba que tuviera baños un poco más decentes.
Bajo la mirada… No quiero hacer del baño en un lugar así, y tampoco quiero que mi abuela haga sus necesidades en baños así de antihigiénicos e incómodos.
Me pongo a pensar y se me ocurre una gran idea en cuestión de segundos.
—¡Ya sé qué haré!
Saco mi teléfono y abro la aplicación de hechizos.
—Debe haber un hechizo para que desaparezca la basura o algo así.
Reviso los hechizos tipo tierra… Mmm… Oh, aquí hay uno.
—Retiers: Sirve para sacar una gran cantidad de tierra y rocas. Puede usarse en casos de rescate. Solo debes concentrarte en cómo quieres mover la tierra y decir el hechizo.
Bastante sencillo de realizar.
Sigo revisando hasta que encontré uno realmente interesante.
—Tier: Permite transformar objetos en tierra… Perfecto.
—¿Qué planeas hacer?- Dijo mi abuela.
—No haré mis necesidades afuera. No somos salvajes.
Me dirijo a una esquina de la casa y extiendo mi mano derecha.
—¡Retiers!
Una gran cantidad de rocas y tierra salen y lo puedo controlar con la mente. Perfecto.
—Permiso, la sacaré.
Salgo de la casa con la tierra y la dejo en las afueras del pueblo.
—Bien.
Regreso a la casa.
—¿Harás un baño? ¿Un baño en una casa? Eso es raro.- Dijo Sara.
… ¿E-escuché bien? ¡¿»Eso es raro» dijiste?!
¡Realmente estamos en otro mundo! Este mundo es asqueroso.
Un agujero cuadrado está en la esquina de la casa. Perfecto.
—Bien.
Sigo revisando los hechizos… Mmm… Oh, aquí hay otro mejor.
—Crea: sirve para transformar cosas en algo diferente. Solo debes imaginar en lo que quieres transformar el objeto y decir el hechizo. No funciona para hacer oro u otro objeto caro… Carajo.
Ahora debo regresar por la tierra, pues la necesito como material base.
Salgo de la casa y regreso con la tierra.
Bien, espero que funcione. Pensaré en… ¡tablas de madera!
—¡Crea!
Transformo la tierra en tablas de madera. ¡Funcionó! ¡Gracias, Dios!
—Será una noche larga.
No soy un experto, pero sé algo de carpintería. Trabajé un tiempo con un carpintero, pero fui despedido porque la esposa del carpintero me besó. ¡Yo no la besé, ella me robó un beso a mí…! Y también su hija de secundaria me robó un beso… Ah, no lo culpo, él estaba furioso.
•
•
Pasé toda la noche construyendo un baño. Las chicas se fueron a dormir con Sara. Rem fue la única que se quedó conmigo a trabajar. Tuve que salir del pueblo por cosas que necesitaba. Varios aventureros tocaban a mi puerta para quejarse del ruido que hacía, pero se disculpaban cuando veían que yo era el que hacía el ruido.
En resumen, fue una larga noche de trabajo.
Y terminé con lo que estaba haciendo hasta las 5:23 de la mañana.
—¡Terminamos!
—¡Increíble, Dani! ¡Nunca había visto algo como esto!
—Se llama baño, sería más cómodo tener un baño aquí.
Construimos unas paredes de madera alrededor del baño. El piso de piedra lo convertí en piso de madera. Construimos una bañera, luego iba a pensar en cómo traer el agua para bañarnos. Hice un retrete, pero sin fondo, para que nuestros desperdicios caigan al suelo. Yo lo iba a limpiar al final del día transformando los desperdicios en tierra. Es un gran y lindo baño. Básico, pero lindo.
Será asqueroso limpiarlo al final del día, pero es muchísimo mejor que ir a esa asquerosa zona para hacer del baño.
—Aún tengo mucho qué hacer, pero estoy muy cansado.
Después lo termino.
Extiendo mi mano derecha, apuntando a una gran cantidad de tierra.
—¡Crea!
Transformo una gran cantidad de tierra en un colchón. Ay, se ve tan cómodo. Dormiré como un bebé.
—Realmente este hechizo no respeta las leyes de la alquimia… Creo que así se llaman… Da igual.
Mmm… Veo que no me queda más tierra. Quería hacerle un colchón a Rem, pero se me acabó la tierra.
—Iré por más…
Bostezo… Me estoy muriendo de sueño.
—… tierra para hacer tu cama.
—¡No te preocupes, es un gran colchón, los dos podemos dormir en él!
—No debería, pero…
Bostezo.
—… Realmente estoy muy cansado.
Comúnmente rechazaría eso, pero tengo muchísimo sueño. Compartir cama no puede ser tan malo. No creo que me viole mientras duermo, yo le devolví la vida. Dudo bastante que sea una malagradecida.
Me quito el chaleco y la camisa, pues así acostumbro a dormir.
—Que duermas bien.
Me acuesto en el colchón e inmediatamente me duermo.
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