Limit Breaker: Conquistando Mazmorras - 72
Al día siguiente, Oscar llega primero a la sede del gremio Victory, donde lo espera Martin con mate preparado para beber y los miembros caminando de un lado hacia el otro preparándose para los trabajos que les llegan.
Martin le indica que tome asiento y Oscar asienta con su cabeza:
Martin: “¿Con azúcar?”
Oscar: “Jajaja, sabes que no hace falta la pregunta. Sin azúcar por favor”
Martin: “Creo que es la costumbre” — sonríe
Oscar: “¿Hay trabajo para ustedes ni bien llegan?” — mira una pila enorme de hojas que Estela y María están ordenando
Martin: “Bastante diría. Lucas, Marcos, Laura y Daniel están en una misión en Quilmes donde se abrió un portal. Julio y Macarena están yendo al aeropuerto a buscar a una comitiva que desea hablar conmigo. No hace ni 24 horas que llegamos y ya estamos atestados de trabajo”
Oscar: “Si, nadie dijo que sería fácil administrar un gremio”
Martin: “Tu fuiste el que me convenció de ello”
Oscar: “Pero no te arrepientes ¿o sí?”
La verdad es que Martin no se arrepiente ni por un segundo, ya que, gracias a esa decisión por parte de Oscar, pudo conocer a gente maravillosa y que ahora forma parte del gremio. Se ha formado una gran familia y sin saberlo, se incrementará mucho más.
Por un momento sonríe y le responde al presidente de la A.A.C:
Martin: “No podría contradecirte en eso. Pasar de ir a mazmorras solo a tener mi propio gremio y contar con tantas personas es algo que me motiva día a día”
Oscar: “Tengo entendido que tu madre está más lucida y ya no hace falta que esté en internación. Felicitaciones. Se que esto debía decírtelo antes, pero hemos…”
Martin: “No te preocupes” — niega con su cabeza — “estoy seguro que todo se ha vuelto muy caótico”
Oscar: “Si, y es por eso que vengo con noticias”
Martin: “¿Noticias? ¿Cuáles?”
Oscar: “Los diplomáticos que vinieron desde México tuvieron que retirarse por esto”
Oscar le entrega unos periódicos provenientes de México, más precisamente de los más conocidos en ese país “Diario Azteca”, “El semblante Federal” y “Cronista Justo”. Martin toma los diarios y lee la primera tapa que es la que le pide Oscar que pose su atención y allí una foto del congreso estadounidense completamente lleno de cadáveres y sangre.
Lo primero que piensa Martin es que puede ser un montaje, más que nada porque un periódico recurriría a la censura inmediatamente por las leyes de información y periodismo. Sin embargo, todo empieza a cuadrar cuando lee el encabezado:
Martin: “Muerte en el Congreso, se acusa a los gremios de Whiplash y Guerreros Jaguar de atacar al organismo bicameral de los Estados Unidos. Desde la presidencia no hay discurso aun, pero es posible una guerra inmediata. Esto debe ser una broma, Oscar”
Oscar: “Seria mejor, pero es mucho más grave de lo que pensaba. Estos últimos meses fueron críticos en la relación de México con Estados Unidos. El ataque a Tijuana y ahora lo del Congreso. Suena a una respuesta, pero nada tiene sentido”
Martin: “Tengo entendido que los recursos que posee México son la principal causa. Pero ¿ir tan lejos por unos cristales? Es decir, Ghana, Singapur, Omán y Ecuador poseen la mayor cantidad de reserva de cristales mágico del mundo ¿Por qué empeñarse con México?”
Oscar: “Al comienzo pensé lo mismo que tú. Pero mis redes de información me otorgaron imágenes que en lo personal me dieron escalofrío” — le da fotos con visión calórica proveniente de un satélite funcionando con cristales mágicos que Pakistán saco al espacio hace 5 años
Martin: “¿Qué es?” — toma las fotos y analiza
El cazador se queda petrificado al ver que en la selva mexicana hay una cantidad exagerada de mana que se forma como un círculo color rojo intenso, muy similar a cuando la mazmorra arácnida recibió la visita del emperador insecto. Algo así como un portal mágico.
Solo una fuente inmensa de maná podría hacer eso.
Martin intenta decir algo al respecto, pero eso va más allá de su entendimiento humano, ni siquiera Oscar podría comprender que está ocurriendo. Además, la información escasea como para poder sacar conclusiones por lo que el joven cazador piensa mejor lo que dirá y no dar esperanzas:
Martin: “Es decir, parece como si la mazmorra estuviera abierta desde hace tiempo, pero no hubo nada de peligro por lo que dicen los documentos ¿o será que hay algo más?” — mira a Oscar, pensando que quizás hay algo que no le está diciendo
Oscar: “Estas en lo que correcto en que es una mazmorra, pero ni los expertos han podido determinar que es. Además, su acceso es imposible por las partículas mágicas que impiden su paso. Ya de por si cazadores que quisieron entrar y de rangos altos como A+ y S+, han sido pulverizados. No me explico que sucede, pero es posible que fuera el hogar de un Emperador, como el que enfrentaste en la Antártida”
Martin: “Supongo que no tengo más opción que ir a investigar”
Oscar: “En realidad no es lo que esperan los diplomáticos mexicanos. Mas bien esperan que hagas algo más arriesgado”
Martin: “No comprendo”
Oscar: “Quieren que actúes como intermediario para detener el conflicto que provocó Dark Eagle”
Martin: “Eso puede ser un poco más problemático. No hablamos de monstruos o mazmorras desconocidas, sino de un ser humano que se ha vuelto loco. Es algo más complejo de tratar. Además ¿Por qué yo? ¿Qué pasa con los organismos internacionales o gremios más fuertes?”
Oscar: “Hasta el momento hay problemas que llaman mucho más la atención que un simple conflicto entre países. Si no hay nada importante que se dé a cambio, tampoco es que hay mucho interés. Al final es solo lucha de intereses. Sobre todo, porque es a propósito, muchos países como Italia, España, Colombia y Francia esperan ver al que supuestamente es el mejor cazador de Sudamérica y nuevo top del mundo”
Martin: “Al final esos desgraciados son solo cazador top de nombre. Solo ceden a lo que les da la gana o conviene” — dice indignado al pensar que mucha gente ha muerto por capricho de naciones, organismos e individuos poderosos
Oscar: “Tienes todo mi apoyo y el de la comunidad de cazadores de Argentina en adoptar las medidas necesarias. Solo no uses la violencia. En esa instancia ni nosotros podríamos hacer algo”
Martin: “Comprendo”
Una vez que Oscar regresa a su oficina, Martin camina hacia la cocina y se encuentra con Estela, que prepara deliciosos platillos para los que aún están en la sede del gremio. Lo nota algo extraño y se acerca a él, dándole un cálido abrazo mientras esperan a que la comida acabe de cocinarse.
Estela se aferra a él y lo huele:
Martin: “¿Huh? ¿Qué pasa?” — pregunta, avergonzado de lo que hace ella
Estela: “Es solo que me gusta tu desodorante, jejeje, perdón amor”
Martin: “No, no pasa nada” — sonríe y la besa
Estela: “¿Qué harás?”
Martin: “¿Sobre qué?”
Estela: “La petición de Oscar de ir a Estados Unidos”
Martin: “…”— no responde y se toma unos momentos para pensar que decir — “hay mucho trabajo que hacer así que prioricemos eso por ahora”
Estela: “Esta bien” — le besa la mejilla y mientras camina hacia su escritorio se voltea y sonríe — “No lo pienses demasiado, te apoyaremos sin importar que. Tus decisiones siempre son para ayudar”
Martin: “Creo que es hora de resolver ese problema”
Estela: “¿Te refieres a…?”
Martin: “Si, hemos esperado demasiado y lo debemos. Con Arakneida será suficiente”
***PARTE II***
En Lousville, una de las ciudades principales del estado de Kentucki, el congresista superviviente a la masacre en el Congreso de la Nación, Mark Hodersfield, mira por la TV todo lo que ha ocurrido y con gran estupor presencia las consecuencias de esa masacre.
Por un lado, siente alivio de haber sobrevivido gracias a que decidió falta para ir al cumpleaños de su hija que vive en Florida, pero por la emergencia que suscitó ese incidente tuvo que abordar un avión y regresar rápidamente, aunque, por otro lado, la situación indica que es posible que haya sido una especie de atentado terrorista de cazadores de origen haitiano por la naturaleza macabra de las muertes. Ciertamente muy común en la sociedad norteamericana actual el vincular a los asesinatos de ese estilo, con mutilaciones, descuartizamiento o drenaje de sangre con residentes provenientes de Haití y que además son cazadores.
A la oficina del congresista entra su asistente, un joven de unos treinta y tantos llamado Roger Stiphain, quien elegantemente se acerca a Mark y le entrega un vaso con whisky entre gruesos hielos. Mientras observa los noticieros, Mark no evita preguntar con angustia:
Mark: “Roger ¿crees que yo sea alguna especie de objetivo para los perpetradores?”
Roger: “No lo sé, señor. Lo que entiendo es que fue algo que ni el FBI ni la CIA, ni cazadores de alto rango pudieron prevenir”
Mark: “T-Tiene sentido, pero me asusta el hecho de que vengan por mi”
Roger: “Si organizaron tal golpe, posiblemente ellos sabían que usted no iba a estar”
Mark: “Buen punto, es más, la masacre no fue dirigida para mi persona, no señor, sino un golpe a la institución como tal, si, eso es seguro”
Roger: “Creo que es más preocupante lo que pasa en Washington con las personas”
Mark: “¿Hablas de la violencia por parte de los latinos? Si, es verdad. El descontento es cada vez mayor por lo que paso en México, y se espera que el presidente diga algo. Este asunto me tiene completamente muy intrigado”
Roger: “Si…” — sonríe perversamente — “no hay duda de que algo anda mal con el gobierno”
Mark: “¿Verdad? Si no controlamos este descontento, quien sabe que pasara mas adelante. Inclusive hay noticias desde México que dicen que los gremios Whiplash y Guerreros Jaguar están tratando de convencer al nuevo cazador supernova de ayudarlos contra Dark Eagle. Diablos, todo está muy caótico ¿en qué diablos piensa el presidente y Willian?”
Roger: “Quien sabe…”
Mark se percata de que algo raro esta ocurriendo, las paredes empiezan a derretirse y dan forma a una masa negra, olorosa casi putrefacta y que derrite todos los objetos en la oficina. Inmediatamente salta de su sofá y corre en dirección a la puerta donde se interpone Roger con una extraña y desagradable sonrisa que antes no se notaba por estar muy pendiente de lo que los medios de comunicación estaban diciendo hace momentos:
Mark: “¿R-Roger? ¿Qué estás haciendo?”
Roger: “Por favor, no me llames con ese asqueroso nombre humano. Solo dime Nerofitus”
Mark: “¿E-Eres un monstruo?”
Roger: “Ah, diablos, no debería decirlo, pero ya que eres hombre muerto. En realidad, soy un autómata que nació del cuerpo del señor Kassio. Creo que en este mundo le dicen, Homúnculo. Da igual, tú y yo…moriremos aquí y ahora corrompidos por la sangre de la muerte”
Mark: “N-No lo entiendo ¿Por qué? ¿Qué sentido tiene matar a todo el congreso? ¿Qué es lo que q-” — se calla al ver que esa masa llega a sus pies y lo empieza a derretir — “¡Aaaaaaaaaaaaaahhh, mis piernas!”
Roger: “Llora todo lo que quieras, pregunta todo lo que desees preguntar. No hay motivo para que la muerte quite una vida. Solo espera su llegada como el humano asqueroso que eres y siente el abrazo interminable de la eterna oscura que mi señor esta creando en este mundo”
Los gritos de aquella persona que descansaba en su oficina son callados en un santiamén y todo el resto del edificio es consumido por esa masa negra y asquerosa, costándose la vida de mas de treinta personas que trabajaban allí y generando un caos entre los habitantes de esa ciudad.
***PARTE III***
En el desierto de Salta, una figura cubierta por harapos sucios se acerca al tenebroso portal de la mazmorra rango SSS+ donde reside el emperador insecto y se quita los trapos revelando la forma de un humano con características de insecto, sobresaliendo alas de libélula en su espalda, poderosas patas de hormiga entre otras cosas. Sin embargo, es su rostro lo más humano, siendo increíblemente parecido a David Freddo, hermano de Lucas, aquel chico que iba a ser reclutado para formar parte de Victory, y que sería asesinado por Esfutyox, emperador insecto y posteriormente devorado:
“¿Qué es esto? Por alguna razón me esta llamando, pero no quiero…no deseo entrar…aun así entiendo que es peligroso para cualquier vida en este territorio” — mira a su alrededor como a pesar de estar en un desierto con escasos animales producto de la energía que consume el portal, aun existe la vida debajo de sus pies y a kilómetros — “tengo que entrar, para que esa pequeña pueda estar bien. Porque algo malo podría ocurrirle a su hogar si este portal continúa existiendo”
Habiendo dicho eso y aun inseguro de que es lo que le va a deparar, entra al portal de la mazmorra imperial de insectos, donde una cosa es segura y es que puede llegar a salvar una nación entera de continuar siendo débil a los ojos de no solo el mundo humano, sino muchos otros más que esperan entrar en acción.
El portal se distorsiona muy rápido, saliendo de este relámpagos negros y fuertes ráfagas proveniente de una fuente muy poderosa de maná que solo aquellos monstruos de rango SSS+ podría tener o mejor conocidos como los emperadores.
Pequeñas chispas caen al suelo y como si de acido se tratasen, la arena es consumida.
El cielo es cubierto por nubes negras y relámpagos purpuras que ensordecen con sus destellos violentos. Nada de lo que ocurre es normal, incluso para las mazmorras y sus efectos en la vida en el planeta.
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