Limit Breaker: Conquistando Mazmorras - 86

Los cazadores argentinos son rodeados por varios miembros del gremio Dark Eagle quienes pretenden atacarlos por presuntamente ser los que iniciaron el ataque a su maestro. Entre la multitud de cazadores, Jeff y Morgan intenta contener los ánimos porque saben que las cosas se podrían poner más que difíciles para todos.

De todos modos, Julio y Daniel se ponen en guardia, con vistas para proteger a Estela y contener a los enemigos que ya no entienden de razones y se predisponen para iniciar una cruel batalla:

Julio: “Estela, queda atrás. Muchos de estos tipos son rango S+”

Estela: “No pienso quedarme atrás Julio. Voy a ayudar. Soy una sanadora y no dejare que aliados o enemigos sufran más daños”

Julio: “Se que quieres ayudar, pero tu estilo de pelea no es para confrontar sino para curar y defender. Además…” — un aura roja se desprende de ambos ojos — “siento que podría vencerlos a todos fácilmente”

Estela: “Lo se y es por eso que no cederé un solo centímetro. Salvare a estas personas de esa influencia maligna”

Daniel lo mira y abre los ojos de par en par, sorprendido por la cantidad de energía que desprende, haciéndolo recordar a cierto hecho que incluso lo avergüenza hoy en día:

Daniel: “Esto no es coincidencia. Julio…es otro más…”

Como Estela en su momento, quien había igualado muy brevemente al poder de Daniel, Julio logra su según despertar al alcanzar el rango S+, poniéndose al nivel de la gran mayoría de los cazadores que les son hostiles. Quizás no al mismo rango que los altos rango, pero eso quiere decir que aquella semilla destinada a florecer aún no ha alcanzado su punto más álgido, por lo que aún tiene el potencial para volverse mucho más poderoso.

Al mismo tiempo, Jeff y Morga ignoran lo que sucede, tratando de calmar a sus compañeros de empezar una guerra a pesar de que su líder ya está en batalla contra el rookie. Con el correr del tiempo, Jeff empieza a desesperarse al ver que su petición y posteriormente orden a los cazadores no llegan, sospechando que algo extraño sucede ya que muchos miembros fueron militares o el solo tener una autoridad significa que pueden apaciguar sus instintos más brutales. Esto tiene una simple explicación y es que, así como muchos fueron ex militares o estuvieron en las fuerzas de seguridad, otros han sido marginados que William pudo reclutar sea gracias al poder del dialogo de Jeff o golpearlos hasta que dejen sus ganas de pelear:

Jeff: “Por favor deténganse, ellos son de la comitiva que viene a negociar” — trata desesperadamente de calmarlos, pero entre los murmullos y sonido de armas preparándose para usar, se hace imposible la comunicación

Morgan: “Jeff, olvídalo” — le dice, serena al ver con más detalle lo que sucede

Jeff: “¿Qué? No, no podemos dejar esto así”

Morgan: “Solo míralos, Jeff. Están fuera de sí. Si hay algo que podemos hacer para ayudar es ponernos del lado de los argentinos o no entrometiéndonos, pero esto último sería irresponsable”

Jeff: “Tienes mucha razón” — mira los rostros de cada compañero y subordinado, no los ve como siempre sino muy violentos — “no son ellos mismos, algo está mal”

Mientras tanto, Estela se da cuenta de lo mismo, pero gracias a que su potencial se ha despertado, ahora puede ver la influencia del emperador oscuro, Kassio, sobre los subordinados de William, siendo una energía que funciona como parasito al volver violento a quien lo posee y sin voluntad para entender palabras, su misión es la de matar sin arrepentimientos. Sea aliado, familiar o amigo, no importa quien sea, a sus ojos negros brotando hilos de un líquido que parece brea, todos son enemigos a quien destruir:

Estela: “Hay una extraña energía que los rodea, posiblemente eso tenga que ver”

Julio: “¿Energía? Si puedes verla entonces sabemos que hay una razón”

Daniel: “Ella puede verlo, pero Julio no. Eso significa que Estela ha alcanzado ese nivel…incluso en esta situación el verdadero potencial de ella ha explotado” — piensa sorprendido

Julio: “Daniel ¿Qué opinas? ¿puedes verlo también?”

Daniel: “¿Qué? Ah…si, si, puedo verlo y es en gran cantidad. Es…demasiado siniestro…”

Julio: “Entonces hagamos lo que tu digas Estela”

Estela: “De acuerdo, creo que esto podría funcionar solo hay que retenerlos hasta que pueda preparar la magia de sanación”

Daniel: “¡Empiézalo ya porque se están aproximando!”

Estela: “S-Si”

Cierra sus ojos y extiende ambas manos. Concentrándose todo lo que puede, transfiere maná hacia la palma de sus manos y a su alrededor la brisa se intensifica hasta envolverla por completo, causando que muchos que se acercan por detrás se sientan repelidos por eso. La razón es porque siendo una sanadora de ahora rango SS+ y cuyo elemento es viento, que, junto a la luz, son los que son denominados como “Elementos Divinos” o “aquellos que repelen a la energía del abismo” y ahora potenciada por su despertar, Estela siente con gran impulso que por fin puede ayudar con todo su poder.

Sin embargo, así como algunos se alejan, sobre todo los que son de rangos bajos, aquellos más fuertes se abalanzan sobre ella, atraídos por esa asquerosa magia que los agobia con el solo hecho de verla. Julio intercepta a los cazadores y golpea a puño limpio sus estómagos y rostros sin llegar a herirlos de gravedad o inclusive matarlos, mientras tanto Daniel neutraliza a la mayoría con su magia de gravedad, poniéndolos de rodilla e inmóviles:

Julio: “¿Te falta mucho?”

Estela: “Solo un poco más”

Jeff junto a Morgan se unen a los argentinos para contener a los cazadores restantes:

Jeff: “Nuestras razones son diferentes, pero no queremos victimas aquí. Les ayudaremos”

Estela: “Esta bien, confiaremos en ustedes”

Morgan: “Dinos que hacer, rápido, rápido”

Estela: “Conténgalos que estoy preparando un hechizo para neutralizar esas auras que están poseyéndolos”

Jeff: “¡De acuerdo!” —  mira a su compañera — “¡Morgan, cuida ese costado descubierto!”

Morgan: “Recibido”

Todos pelean rodeados por cazadores poseídos por remanentes de energía oscura creada por Kassio que actúan como parásitos. El cielo nocturno y los continuos gritos de personas que tratan de salvarse y otras que siguen heridas y sin poder moverse, llenan los oídos a los demás. Estela tiene grandes ansias de ir y salvar a las personas, sanarlas y protegerlas, pero ante tal cantidad de enemigos enloquecidos por matarlos es suficiente como para posponerlo. El tiempo es crucial y ella intenta apresurarse.

Uno de ellos se acerca por un costado ciego con su arma apuntándole a un lado del cuerpo a ella. Daniel se percata y corre hacia ello, interponiéndose entre el arma y el cuerpo de Estela, quien se da vuelta y lo ve parado con el arma incrustada en el costado el cuerpo, provocándole una herida sustancialmente grave.

Julio golpea al cazador y lo manda contra un edificio. Mientras que ella se mueve hacia él como para poder cancelar el hechizo y curarlo, pero el brasilero niega con su cabeza:

Daniel: “Continua con lo que estabas haciendo. No desperdicies el tiempo ni la oportunidad”

Estela: “¡No, no voy a dejarte morir!”

Daniel: “Tranquila, no es como si no hubiera hecho algo como para merecerlo”

Julio: “¿De qué hablas?”

Daniel: “Saben que mis pecados con esa basura de gremio jamás se pudieron saldar. Pero ¿saben qué? Esto que me ocurrió, es algo necesario y lo prefiero así” — empieza a llorar — “por favor, cuídenla, sé que está mal de salud, pero por favor…cuídenla”

En ese instante, Estela recuerda cuando se enfrentó con Daniel en la sede del gremio, lo afligido que se había visto por tener que ir y pelear contra alguien que era inocente como ella. Una voz le susurra al oído y acto seguido inhala y exhala lentamente mientras pequeñas partículas mágicas color blanca caen sobre ella:

Estela

Aventurero Clase SS+

Inteligencia: SS+

Fuerza: D

Agilidad: B

Velocidad: B

Poder Destructivo: B

Mana: SSS+

Su rango, así como las estadísticas sufren un aumento exponencial, llegando al nivel de los altos rangos, producto de que aquella semilla que había en su interior ha crecido en base sin duda a la fuerte determinación de ella para ayudar a quienes aprecia y evitar seguir siendo una carga. La prueba de ellos es su capacidad de mientras estar ejecutando su magia para poder liberar a los demás cazadores de esa maliciosa aura, y sin necesidad de siquiera moverse, mete a Daniel en una burbuja de aire y con ello lo cura a gran velocidad hasta que lo pone fuera de peligro.

Julio se pone detrás de ella, espalda contra espalda y como lo hizo hace un rato Estela, él también manifiesta el poder colosal que iguala a los altos rangos, bajo una columna de luz roja:

Julio

Aventurero Clase SS+

Inteligencia: S+

Fuerza: S+

Agilidad: B

Velocidad: B

Poder Destructivo: SSS+

Mana: SS+

Puntos vitales: SS+

***PARTE II***

El sudor cae desde la frente de los cazadores, mientras el cielo se oscurece, recordando al breve enfrentamiento que tuvieron el día anterior y dejó un extraño sabor de boca en William. Ante la mirada de cientos de personas que caen en temor y el caos por la brutalidad del norteamericano, indiferente por aquellos heridos y con solo una meta actual en mente, medirse frente a frente con el argentino:

William: “Estoy muy emocionado por eso. Quiero creer que podre ir con todo desde el principio, así como lo harás tu” — se mantiene sonriente

Martin: “Ten cuidado con lo que pides” — responde a punto de explotar en furia

William: “Esa es una buena actitud. Amenazante y ruda, pero tendré que bajarte de tu pedestal”

El experimentado cazador de mil batallas saca a relucir todo su poder, llenando de cientos de puñetazos el cuerpo de Martin quien apenas se defiende bloqueando con ambos brazos. Al darse cuenta de que la gran defensa del chico es casi imposible de penetrar, William usa una insana cantidad de magia en los nudillos de su puño derecho y lo golpea en el rostro, enviándolo contra varios edificios, los cuales atraviesa y cae en medio de la gran avenida, dibujando con el cuerpo un cráter de al menos 20 metros.

Los autos que circulan por esa calle se detienen y otros chocan entre si mientras las personas que transitan intentan escapar desesperadas.

En aquel momento previo a darle ese golpe, William se había percato de que usar una pequeña porción sería inútil. El hecho de que no se haya esforzado significa que de alguna manera subestimaba al argentino. Sin embargo, en el instante que golpea al rostro y lo manda a volar, se da cuenta que la pelea apenas comienza.

Además, la filosofía de ambos se contrasta en gran medida porque uno opta por la violencia antes que la palabra, por eso depende de alguien con gran dialogo como Jeff, mientras que el otro prefiere el dialogo y entrar en puño limpio si las cosas se tuercen negativamente. Inclusive en el momento en que ambos aceptan ir con violencia, mantiene una filosofía dispar. William acepta el desafío como diversión y Martin se acerca al propio significado de si hay que matarlo o perdonar su vida siendo un genocida que pretendía erradicar a un país entero:

William: “Ah, la gran manzana ¿no te parece sublime? La cúspide de la civilización occidental se encuentra en tan solo 5 calles. Me da cierta intriga saber qué opinas de nuestra grandiosa nación ¿sabes?”

Martin: “No tengo nada que decirte. Solo eres otro pelotudo a quien tengo que vencer para salvar a las personas”

William: “Anda, no seas tan serio. Estamos en el pináculo de nuestra raza. Deberías sentirte incluso realizado, ya que te estoy reconociendo. No como el imbécil de Novak o el chino”

Martin: “Hablas como si fuera divertido. Como si se tratase de un juego y los demás son simples piezas”

William: “Como si no lo disfrutases. Tú que hasta no hace mucho eras la porquería entre la porquería y de la noche a la mañana diste una exhibición de poder. Ahora todos te respetan. Mira si no hablamos de algo divertido ¡jajaja! Eres muy divertido. Te haces el tonto, pero te encanta lo que haces”

Martin: “¿Vas a continuar con el parloteo o continuamos?”

William: “Si, ya me detuve lo suficiente”

Lo vuelve a golpear en el rostro, en esta ocasión contra el suelo. Sus pies impiden que impacte con el cuerpo el concreto. La diferencia a primera vista es abrumadora y el cazador norteamericano se encuentra más allá de cualquiera, o al menos es lo que cree:

Martin: “Matar, como si eso fuera sencillo” — piensa mientras se cubre de los ataques — “jamás había peleado con alguien tan brutal y poderoso. De alguna manera está forzando su cuerpo a elevar su poder al rango SSS+ como si fuera una especie de habilidad especial. Es increíble”

William: “No puedo creerlo, no puedo creerlo, no puedo creerlo” — se repite a si mismo mientras golpea y golpea al argentino en el suelo y este se intenta defender — “se defiende, pero aun así siento felicidad al sacar todo mi poder e ir más allá de mis límites” — sonríe, lleno de felicidad

William, quien hasta no hace mucho era el gran héroe americano, rivalizando con los grandes presidentes, generales y hasta comparado con otros grandes de la cultura popular, se ve abrumado de felicidad al estar masacrando a un cazador que representa un gran reto para él e ignorando la seguridad de los ciudadanos, a quienes profesaba respeto y seguridad. Tan descuidado el alto rango que Martin acaba deslizándose de tal desventajosa situación y retrocede varios metros. Él no es un oponente fácil como se había imaginado antes pero tampoco tan lanzado al ataque como esperaba.

El gran cazador americano, como así se lo ha llamado por años, da un pisotón en el suelo y del cuerpo empieza a brotar tanto energía oscura como rojiza, ambos provenientes del maná que lo identifica. El oscuro por las llamas que durante años ha perfeccionado por la ramificación del elemento, y rojizo por la ira expresada en el fuego. Una columna violenta de color rojizo estalla alrededor de William, expulsada por el cazador mientras que Martin observa a la expectativa:

Martin: “Está queriendo aumentar más su poder. Va a terminar muerto si continua así” — piensa sin desviar la mirada en la escena

El orgullo con el que decide poner su cuerpo y su vida en juego por una simple pelea, no es algo ajeno al cazador y hasta podría decirse que no va a parar hasta lograr destrozar a su rival como lo hizo con Novak.

De repente, toda la ciudad empieza a temblar, vidrios revientan, paredes se agrietan y las personas corren asustadas a los refugios especiales que fueron creados durante la crisis de los portales en la década del 2020 cuando recién los fenómenos hicieron su aparición y nadie comprendía de que se trataba, y donde finalmente miles de personas acabarían muriendo por el caos.

Mientras su transformación procede con extrema violencia, Martin se aproxima y le da un golpe de puño tan fuerte en el rostro que el cuerpo de William impacta varias docenas de veces contra el suelo y luego cae en el medio del Central Park. Por varias cuadras William es empujado por la increíble fuerza de Martin:

William: “Maldición, ¿Qué acaba de pasar?” — su transformación desaparece y se pregunta mientras toma la cabeza con mareas — “e-eso fue un golpe… ¡espera! ¡¿Qué?!” — empieza a recordar cómo fue y se percata de que Martin lo ha golpeado — “así que ese mocoso tiene tal fuerza. Creo que definitivamente…”

Martin se aparece a lo lejos con su aura manifestándose muy fluidamente:

William: “Tú y yo nos vamos a entender muy bien” — añade

Pero William baja la mirada y ve que su mano derecha tiembla, inmediatamente se calma con palmadas en el rostro para no mostrar muestras de debilidad frente al rival.

Alguien cuyo poder no es una broma, el orgullo es primordial y no por algo durante años se ha mantenido en el pináculo de la humanidad. Por eso no va a doblegarse ni verse frente a otros como alguien débil. Todo sea por defender el trono del humano más fuerte.

Un hilo de sangre se desliza desde al lado del ojo izquierdo, los mismos ojos que han visto a inocentes siendo asesinados y ahora se ha comportado indiferente ante el peligro que los civiles están sufriendo por su misma culpa.

William pasa sus dedos en donde sale la sangre y en silencio camina hacia Martin. Una sed de sangre que ni los altos rangos por debajo del americano podrían soportar, salen de él como si fuera algo típico con lo que intimidaría a cualquier si lo molestase. Cada paso que da es pesado y acompañado no solo por una brutal pisada que se hunde en la tierra seca, sino que el maná se queda impregnado por la descomunal exhibición de su poder.

Finalmente quedan cara a cara y por primera vez intercambian miradas sinceras. Por apenas centímetros, William supera en estatura a Martin, pero nada evita que se igualen:

William: “Como te había dicho en mi oficina, tienes una mirada que me molesta y deseo romperte el cuello. Pero por el otro creo que con lo que estas demostrando, eso no será posible, aunque quisiera”

Martin: “Déjame preguntarte algo”

William: “Adelante”

Martin: “Mencionaste la marca imperial ¿Cómo sabes de eso?”

William: “Eso ni yo lo se. Esta cosa en mi cabeza es la que me dice que es tal cosa y cuan peligrosa es. Yo solo escucho y evalúo”

Martin: “Entonces lo que haces es porque te manipula esa cosa que dices”

William: “¿Quién sabe? Todos somos marionetas en un gran tablero”

Martin: “¿Qué hago? ¿se supone que él está siendo manipulado? No entiendo que está pasando ¿son sus deseos? ¿en verdad quiere asesinar a humanos? Desde hace rato que esto me resulta extraño”

William: “El tiempo para hablar se ha terminado”

Martin: “Lo mismo digo”

Habiendo dicho eso, William ataca primero, acercando la palma de su mano hacia el cuerpo de Martin y usar como un cañón, su magia de fuego oscuro con el que nada queda ni siquiera cenizas. Entre sonrisas, William se considera a sí mismo como victorioso antes de que su ataque impacte. Sin embargo, esa sonrisa desaparece cuando ve que un puño se acerca a su rostro y la palma de su mano es cubierta por la de Martin:

Martin: “No creas que eres el único con la capacidad para manipular el fuego”

En el medio del gigantesco Central Park se ve una pequeña luz que en un instante se convierte en un domo de energía que se expande lentamente y luego desaparece, dando lugar a una impresionante columna de humo. Al mismo tiempo que ocurría eso, Martin decide usar “Protección del Emperador” para evitar que la explosión fuera más allá e impacte en los edificios, ya que la cantidad de poder puesto en ambos ataques era descomunal.

La cortina de humo se deshace y allí William lo ataca varias veces mientras Martin esquiva sin dificultad. Cada movimiento del cazador significa una inmersión profunda en los sentimientos de ira, asesinato y contradictoriamente diversión algo que sin duda enloquece a William.

La velocidad de ataque no es una broma, y en tan solo 5 minutos de ataques continuas, William logra un total de 700 puñetazos que Martin esquiva hasta que ambos se detienen y retroceden con saltos:

William: “Haaa…haaa…” — respira con dificultad — “lo admito, eres increíble. Es la primera vez que me enfrento a alguien de tu nivel. Muéstrame… ¡muéstrame más de ese nivel tan espectacular que me está igualando!” — grita, eufórico

Martin no reacciona ante las palabras indiferentes de William, tan solo quiere terminar la pelea de una vez y por todas, pero por alguna razón también intenta descifrar al cazador. Su manera de ser, pensar, sentir, todo eso está siendo molesto para él porque es demasiado contradictorio.

Durante varios segundos intercambian puñetazos y patadas a gran velocidad. Desde lo lejos se ve como en el parque se forman columnas muy altas de tierra y polvo por los choques de puño, acompañados por ondas expansivas.

En un intento por esquivar uno de los ataques, Martin recibe un golpe en el estómago y escupe sangre. William aprovecha la oportunidad y lo toma del rostro y empuja contra el suelo, creando con el impacto un cráter de gran tamaño que derrumba varios árboles. Sin embargo, Martin no se da por vencido y con una capacidad de recuperación que hasta el mismo William se sorprende, lo toma del brazo al mismo tiempo que se pone de pie:

Martin: “Hacia mucho tiempo que no me ponía tan furioso como ahora” — sus pasos se tornan pesados y se pone a la par de William para mirarlo a los ojos, esta vez con expresión feroz — “hey William, querías una buena pelea…déjame darte la más brutal que has experimentado”

Los ojos de William tiemblan junto con sus brazos, mostrándose temeroso después de tanto tiempo que no recuerda cuando fue que había experimentado tal cosa. De pronto, los músculos del cazador empiezan a hincharse adoptando un color purpura y cuyas venas se vuelven tan negras que se confunden con la piel misma. Las pupilas se vuelven blancas, los colmillos sobresalen de la boca y un cuerno sale de un costado de la frente adoptando una forma casi demoniaca.

La corrupción a la que William estuvo sufriendo por un largo tiempo gracias a la influencia del emperador Kassio empieza a causar un efecto critico en el cazador, haciendo desaparecer la humanidad que poseía y ahora volviéndose una especie de comandante del poderoso monstruo no-muerto.

A lo lejos, Arakneida, Lorkamos, Kargroot y Cromana se acercan al lugar, pero a una distancia para no que William no los vea. Aun si estuvieran a la lejanía, el cazador no tomaría importancia, solo importa al rival de enfrente.

Cuando llegan hacen una mueca al ver la transformación que William había sufrido durante la pelea y que su aura es diferente, siendo increíblemente siniestra y agresiva. Kargroot se da cuenta que sucede:

Kargroot: “Esa apariencia sin duda es la corrosión de los remanentes de Kassio”

Arakneida: “¿Remanentes de Kassio? Eso quiere decir que aún tiene eso en su cuerpo. Tenemos que…”

Kargroot: “¡¿No lo entiendes?! No hay manera de poder sacárselo. Llegados a ese punto, no podemos interferir por más que estemos a ese nivel o incluso un poco más porque una criatura de esa clase solo existe para pelear y morir por ello. William…ya no es humano y la única manera de salvarlo es matándolo…solo podemos observar mientras ambos se intentan matar entre sí”