Limit Breaker: Conquistando Mazmorras - 135

En la A.A.C, Oscar mantiene una conversación por comunicación mágica a través de un cristal creado para cualquier actividad a larga distancia. Esa persona no se presenta, ni con nombre y apellido, rango, ni nacionalidad, pero menciona que en estos momentos vive en África junto a varios cazadores mas y que desea hablar con Martín acerca de los cazadores europeos. Sus actividades se encuentran rozando la ilegalidad, a simple vista, pero tras bambalinas la cosa es mucho mas oscura de lo que pretenden aparentar.

A pesar de querer exponer a la iglesia, esa persona es sospechada por parte de Oscar ya que conoce mucho acerca de los movimientos en el bajo mundo. Tales cosas son como el tráfico de cristales mágicos artificiales, así como armas de carácter “semi-legendario” que se describen como al nivel mismo de los altos rangos mundiales. Es decir, esas armas pueden incrementar los poderes de los cazadores, pero poseen efectos secundarios graves a la estructura biológica y mágica de dichos cazadores.

De igual manera, no puede escapar a ese asunto de la iglesia siendo que permitió que vaya Victory hasta ese lugar sin saber que clase de trampa los espera:

Oscar: “Entonces dime algo, ¿Cómo puedo confiar de la información que quieres darme?”

“No necesito que confíes en mí. Al final todo lo decidirá Martín”

Oscar: “¿Te conocemos? ¿acaso fuiste un aliado o enemigo?”

“Habíamos dejado en claro que no voy a revelar ninguna información personal. ¿Quieres saber lo que tengo para decir o vas a querer seguir indagando?”

Oscar: “Habla”

“La Iglesia Católica quiere mostrarse como la esperanza a la falta de fe en el mundo y por eso sostiene lo que sostiene”

Oscar: “La creencia de que los cazadores fueron bendecidos por dios para combatir a las mazmorras”

“Exacto. En estos momentos hay un entramado oculto y que involucra a las armas semi-legendarias. Algo siniestro ocurre en las catacumbas y que excede a todos nosotros”

Oscar: “¿Qué se supone es lo que ocurre allí?”

“No tengo información de ello, pero por lo que pude averiguar, están experimentando en ese lugar”

Oscar: “No parece ser una información tan profunda”

“Es todo lo que pude reunir. Dependerá de lo que hagan allí ahora en más”

Oscar: “Cierto”

“Bien, eso es todo”

Oscar: “Espera un momento”

Oscar sospecha de la identidad de quien está informándole sobre todo eso. Durante muchos meses, un grupo de cazadores famosos se adentró en el territorio africano para poder ayudar a países que no poseen tanto poder ni los rangos necesarios. Con toda la escasa información que le dio esa persona, puede sospechar de quien se trata, pero tiene que ser cauto:

Oscar: “Hace unos meses ocurrió una batalla…en…”

“Escucha, seré lo suficientemente claro sobre esto. Saca tus propias conclusiones, pero mi identidad se mantendrá en secreto. Fin de la comunicación”

Oscar: “Haaaaa ¿Qué opinas Christian?” — le pregunta al cazador y maestro del gremio Yaguareté que se encuentra sentado en el sofá y bebiendo café

Christian: “Por lo que escuché, la situación es realmente difícil pero también lo es para nosotros”

Oscar: “Si, es verdad. Argentina sigue sin ser una potencia como fuerza mágica. Tener a Victory nos ha garantizado un estatus muy grande entre los grandes gremios, pero también nos dejó en claro que hay fuerza que son suficientes como para doblegarnos. Es decir, depender de Martín y su gente es todo lo que podemos hacer”

Christian: “Y es lo que mas me enoja. Tener apenas rango B+ y esos monstruos de Victory, enfrentaron a Dark Eagle, Fortaleza e inclusive a esos cataclismos en China y mazmorras de Antártida y Salta. Me siento muy impotente al respecto”

El maestro del gremio Yaguareté se pone de pie y camina hasta una de las sillas delante del escritorio. Se sienta en esa silla oscura de patas plateadas y junta ambas manos las cuales descansa con sus codos apoyados en la mesa y el rostro sobre las palmadas de las manos. Se queda mirando al presidente Oscar:

Christian: “¿Victory está sujeto a ese pacto?”

Oscar: “¿Te refieres a no provocar ninguna pelea en territorio de Roma?”

Christian: “Si, aquel ridículo pacto donde se prohíbe pelear entre cazadores”

Oscar: “Cualquier acción sería tomado como una agresión directa y todo el poder del país y sus aliados tienen autorización para sofocar al gremio o cazador en cuestión”

Christian: “Entonces están con los brazos atados. Tan solo haberse anunciado como enviados de Argentina, ya los expone”

Oscar: “¿Crees que debimos enviarlos como independientes?”

Christian: “Eso no lo se. Eres el presidente de la A.A.C y yo solo un simple cazador”

Oscar: “Nunca está de mas pedir alguna opinión externa”

Christian: “Si fuera Martín…ordenaría a toda mi gente abandonar ese sitio. No podría traer mas que desgracia para cualquiera”

Cuando dice eso, se levanta lentamente y camina hacia la puerta. Mira un pequeño reloj que le enviaron unos conocidos cuando fueron a visitar Roma, recuerda cuando cerrada se ha vuelto la mentalidad de la iglesia refiriéndose a las mazmorras, cazadores y monstruos, siempre alegando que dios tiene que ver con todo el fenómeno y los “soldados” que ha pedido luchar por la luz frente a tal oscuridad.

Según su experiencia como un embajador de la Iglesia Católica y ex creyente confeso, le confiesa a Oscar lo difícil que se ha vuelto confiar en el Vaticano. Desde antes que el fenómeno surja, la iglesia intenta luchar por mejor su imagen y cuando las mazmorras empezaron a surgir en el mundo, fue la oportunidad idónea para poder aprovecharse y crear un discurso para realzar la figura de los santos, Jesús, Dios y también el papa.

Oscar asienta con la cabeza y gira su silla hacia la ventana para tener un mayor panorama de la ciudad nocturna. Escucha que la puerta se cierra, dejando al presidente solo y enfocado con su mente en todo lo ocurrido y está ocurriendo. Espera alguna llamada para obtener información y saber que hacer, pero al parecer todas las comunicaciones se encuentran limitadas.

Suspira y no le queda de otra mas que esperar. Piensa en el grupo y más aún en Arakneida, a quien extraña y teme que cometan alguna locura y él sin poder hacer nada. Pero ya está acostumbrado a estar pendiente durante mucho tiempo, algo que Martín lo ha obligado desde que salió a la luz como un cazador de extraordinario poder y eso también es por lo que Oscar no se vuelve loco, sabe de las capacidades del joven cazador y ya lo ha demostrado en muchas veces.

Su compromiso con la humanidad es innegable.

***PARTE II***

En ese momento en la oficina del papa, Theodosius se reúne con el gremio Santo Marco y también el de Inglaterra, The Kingdom Glory con el líder y miembro de los altos rangos mundiales, Norman Lobbyhouse presente.

Allí discuten sobre las acciones a tomar con el gremio Victory y el proyecto ejecutado en las catacumbas del que los británicos no tienen mucho conocimiento salvo que es algo importante y no debe ser interrumpido bajo ningún aspecto:

Norman: “Al menos 20 de mis cazadores mas importantes se encuentran vigilando a los familiares de Martín Felucci y otros 40 hospedados como reserva”

Theodosius: “Bien. Tengo a mi disposición a 40 cazadores de otros gremios. También a 300 miembros de seguridad entre guardia suiza, policías y soldados. Y otros 1000 a la espera en diferentes puntos del país”

Marchello: “Son demasiados para un grupo tan pequeño. Yo digo que exageran”

Victoria: “No cuando tratamos con un gremio tan reconocido en la actualidad”

Norman: “De cualquier manera estamos con una ventaja diplomática ¿verdad?”

Theodosius: “Así es. No solo no pueden hacer uso de la fuerza mágica u ordinaria, sino que cualquier búsqueda de conflicto puede ser considerada como justificación para el uso de la alianza que formamos en Europa”

Marchello: “Que molesto. Podríamos atacarlos desprevenidos, hasta nos sacamos un problema de encima”

Theodosius: “Esa clase de acciones nunca es la solución. Hay que ser inteligentes si esperas tener éxito”

Victoria: “¿Cuándo iniciamos la operación?”

Norman: “¿Operación? ¿ya tienen planeado algo?”

Theodosius: “Si, y esperaba poder explicártelo”

Norman: “Al parecer se te olvidó”

Theodosius: “Jejeje, si, cosas de la edad como podrás ver. Nuestro plan consiste en separarlos en tres grupos y si son varios más, mejor. La idea es poder destruir su ventaja grupal además de que ya nos encargamos de la moral. Entonces usaremos todo nuestro poder mágico para doblegarlos y eliminar a la escoria que se atrevió a hacerse amigos de los monstruos”

Norman: “¿Moral? ¿Qué fue lo que hicieron?”

Theodosius: “Un poco de trabajo mental. Los sofocamos sutilmente”

Norman: “Vaya, así que la Santa Iglesia Católica le gusta ensuciarse las manos de ese modo”

Norman no se siente muy satisfecho con la explicación, ya que las probabilidades de que funcionen se reducen mucho con solo pensar a quien se enfrentan. A diferencia del papa, recluido en sus propios pensamientos y siempre leyendo la “nueva biblia”, surgida en la época de cuando las mazmorras aparecieron en el mundo, no suele leer noticias sucedidas en el planeta. Sucesos como lo acontecido en Brasil, Antártida, Estados Unidos o China no es de interés para Theodosius.

Norman sale de la oficina, anunciando que regresará a su habitación en la ciudad de Roma. Para ello y con la intención de no ser visto, toma una ruta a través de pasillos de roca y antorchas apenas encendidas que trazan un camino recto en el subsuelo de la Basílica, acompañado por Victoria, la maestra de gremio Santo Marco.

Durante casi media hora caminan en silencio, solo con el sonido incomodo de goteras a su alrededor. Para romper con la incomodidad, Norman intenta averiguar lo que Theodosius oculta haciéndole preguntas no tan directas:

Norman: “Victoria ¿verdad?”

Victoria: “Si”

Norman: “¿Qué piensas sobre esta operación? Es una gran movilización de gremios italianos, ingleses, holandeses, austriacos y belgas”

Victoria: “El papa sabe lo que hay que hacer y estoy segura que todos en Roma lo entienden. Quizás los extranjeros no sepan comprender lo que significa la palabra del santo padre”

Norman: “Wao, si que tiene carácter. Es tierna” —piensa sonriendo— “¿Fe ciega es lo que llamarían? Yo pienso que hacer cosas según la fe puede resultar un tanto…problemático”

Esa ultima palabra acaba desencadenando que Victoria desenvaine su espada de mango plateado y punta centelleante de la cual sale vapor frio y apunta al cuello

Victoria: “Si quieres decir algo entonces hazlo ya”

Norman: “¿Insinúas que tengo que decir algo?” —exclama levantando sus manos con expresión que desprende seguridad en sí mismo

Victoria: “Eres demasiado transparente. Se nota que insinúas algo”

Norman: “Puede ser”

Victoria: “¿Vas a decirlo? Sino cierra la boca y sígueme. Aún faltan 2 kilómetros”

Norman: “Puedo ver con solo una mirada que esta mujer oculta algo que la iglesia no quiere que se sepa y también…puedo ver que ella tampoco es transparente. Tengo que saber qué es lo que oculta y…”

Victoria: “Escucha”

Norman: “¿Huh?”

Victoria: “Te haré una simple pregunta y necesito una respuesta concreta”

Norman: “Claro”

Victoria: “¿Fe o religión?”

Norman: “¿Qué?”

Norman ya aceptó responder, pero ambas opciones son realmente complejas, pero tienen su propio significado. Solo tiene que elegir cual es la correcta:

Norman: “Religión”

Victoria: “Ya veo. Entonces no tiene sentido que lo sepas”

Norman: “¿De que hablas? ¿Cuál tendría que haber elegido entonces? ¿fe?”

Victoria: “No, maestro de Kingdom Glory. Ninguna es la opción correcta”

Norman: “Señorita ¿Qué es lo que ocultan aquí y no han querido decirnos?”

Victoria: “Oscuridad, señor Norman, oscuridad y una perversión sin límites. Pero todo lo que tienes que hacer es aceptar cumplir el tratado entre los dos países. Porque somos eso…simples cazadores con autoridades más grandes que nosotros”

Entonces llegan hasta una pequeña salida con puerta de rejas que da a un bello y cuidado jardín de avellanas y girasoles frente a edificios de época. Norman se despide y camina rumbo a donde está la élite de su gremio. Mientras, Victoria se queda mirándolo con cierta esperanza de que se pudiera convertir en un importante aliado en la lucha por venir.

Sin embargo, también guarda en su corazón las dudas y cuestionamientos sobre lo que hace la iglesia.

Después de eso, Victoria regresa con el papa, donde está Marchello tomando un té helado y comiendo pasteles de queso y mermelada. El papa escribe diversas cartas a otros gremios, como los de Francia, Alemania, y hasta Grecia y Portugal. Todos y cada uno de ellos, en mayor o menor medida, fieles seguidores de la Iglesia Católica y sus nuevas creencias. La intención es convertir a Martín en una amenaza para la humanidad por su amistad con los familiares:

Victoria: “Su santidad. El invitado ya está en camino a su hotel”

Theodosius: “Me temo que no podemos confiar en ese cazador”

Marchello: “Dime y lo liquido” —exclama sonriente con muchas ganas de pelear con alguien

Theodosius: “Es conmovedora tu entrega por la iglesia, pero es intocable y muy poco diplomático. Hay que vigilarlo. Victoria.”

Victoria: “¿Su santidad?”

Theodosius: “Mañana es un día muy importante para nosotros. Daremos comienzo ‘La ultima cena’. Ya es el momento. El argentino blasfemo va a sentir el rigor y peso de toda la historia del cristianismo. Suplicará nunca haberse convertido en amigo de esos monstruos y cazador y más importante aún, cuando tengamos en nuestro poder las armas mágicas semi-legendarias, sofocaremos a los altos rangos del mundo sea de la nación o religión que sean”

Victoria y Marchello regresan a sus habitaciones, dejando al papa en la oficina. Detrás de él una figura con forma de sombra le susurra al oído y el santo padre responde con una sonrisa macabra mientras asienta con la cabeza:

Theodosius: “Si, como órdenes” —murmura.