Me convertí en un Príncipe Demonio - 192
(Perspectiva Aramis)
Han sido un par de días desde que partimos con rumbo a Tilcara, hacía tiempo que no cabalgaba… me gustaría haber venido en mi carruaje, pero esta misión es para escoltar a los príncipes demonio, no a mí…
-Príncipe Aramis ¿Me permitiría hacerle una consulta? (soldado b)
Uno de los soldados empieza a cabalgar a mi lado.
-Dígame soldado ¿Qué es lo que quiere saber?
-¿Por qué el Rey Porthos ha permitido que un demonio pueda participar de la competencia? (soldado b)
Noto que la pregunta de este soldado ha llamado la atención de los demás.
-¿No se los ha explicado mi hermana?
-La princesa nos dijo que con Leonte podríamos ganar un gran aliado y que podríamos eliminar las diferencias raciales… pero, si me permite hablar con total honestidad, yo no quiero que esos sucios demonios empiecen a ocupar nuestro territorio (soldado b)
Vaya, parece que este soldado tiene mucha indignación por tener que hacer esto, puede serme de utilidad… pero, por ahora tengo que guardar las apariencias.
-Cuide su boca soldado, está contradiciendo las palabras de la Princesa, tendría que ser más respetuoso
-…Lo siento Príncipe, me dejé llevar… solo olvide lo que he dicho (soldado b)
Siento como todos se ponen un poco nerviosos por la situación, probablemente el soldado esperaba que yo apoyara su opinión.
-Me parece que es suficiente de preguntas (Teniente)
-No se preocupe Teniente, quiero seguir conversando… es más, creo que es una buena oportunidad para que todos podamos esclarecer algunos asuntos
-¿Está seguro Príncipe? (Teniente)
-Así es… pueden decirme con completa confianza ¿Qué es a lo que temen?
Pasan varios segundos y nadie dice nada.
-Ya dije que pueden hablar con confianza, nada de lo que digan llegará a oídos de mi hermana, se los prometo
-Suspiro- (Teniente)
-Que nos vuelvan a traicionar… (Teniente)
No me esperaba que el Teniente fuera el que confesara su inquietud… había demostrado ser el más maduro en relación a todo esto.
-Entiendo que tengan muchos prejuicios contra los demonios, pero ha pasado mucho tiempo desde que se terminó la guerra, su gobierno no es el mismo, así que no debemos esperar que suceda lo mismo
-Yo creo que no van a poder con su naturaleza, no pueden evitar querer imponer su poderío ante todos los Reinos (soldado c)
-Cierto, si los dejamos formar parte de nuestro Reino lo terminaremos pagando muy caro… esto es una mala idea, lo vea por donde lo vea (soldado a)
Esto es bueno, muy bueno… tengo que aprovecharme de todo este odio.
-Deberían despreocuparse, recuerden que yo también estoy participando de la competencia ¿Creen que me dejaré ganar por un demonio?
Hago una pose de orgullo para esperar los elogios y aplausos… pero…
-¿Por qué nadie dice nada…?
Todos hacen silencio… parece que están evitando responderme.
-No me digan que piensan que no le podré ganar a Leonte…
Siguen sin decir nada.
-Vuelvo a repetir que pueden hablar con completa libertad, así que por favor cuéntenme qué es lo que opinan
-Suspiro- (soldado b)
-Sabemos lo fuerte que es usted y definitivamente nadie de nosotros quiere que un demonio forme parte del Consejo de Caballeros… es solo que… (soldado b)
¿Solo que…? Se detuvo antes de terminar… no se atreve a decirlo.
-¡¿Habla de una vez?!
De pronto todos se detienen con mi grito… mierda, me terminé enojando… tengo que seguir aparentando ser el bueno y dulce Príncipe…
-Lo siento, no fue mi intención gritarte… es solo que parece que mi misma familia no me tiene confianza para ocupar el puesto de Caballero Real y esto me tiene un poco alterado
-Por favor Príncipe, yo no creo que usted no pueda ganar el puesto… incluso creo que es la única persona que se merece ser el nuevo Caballero Real (soldado b)
-Si es así ¿Por qué dudaste cuando nombré a Leonte?
El silencio vuelve… no puede ser… parece que me están intentando irritar a propósito.
-Príncipe, imagino que usted también ha escuchado muchos de los rumores con respecto a Leonte (Teniente)
-Algunos… de todas formas
-Entonces, debe saber que Leonte es el asesino de ejércitos, la persona que derrotó al Imperio Rubí por sí solo… (Teniente)
-Dicen que solo su aspecto ya logra intimidarte y que su aura de poder es fácilmente palpable en el aire (soldado b)
-Yo escuché que incendio una ciudad por completo sin ayuda de nadie ¿Saben la cantidad de poder que se necesita para hacer algo como eso? (soldado c)
-A mí me inquieta su skill… sus llamas negras pueden volverte cenizas en menos de un segundo (soldado a)
Solo rememorar los rumores han logrado poner nerviosos a los solados… este maldito Leonte, todavía no ha llegado y ya me está causando problemas.
-Dejando atrás cualquier tipo de rumor que no podemos confirmar, lo cierto es que la Reina Evelin lo adoptó luego de su proeza contra el Imperio Rubí y ahora el Rey Porthos lo admite en la competencia… evidentemente debe ser una persona especial, por lo que debemos ser cuidadosos con él (Teniente)
No puedo creerlo…
-¿Ustedes se escuchan a sí mismos? Asesino de ejércitos, persona especial… sigue siendo un demonio y les aseguro que lo venceré
La mirada del Teniente y de sus solados se queda en mí.
-Espero que tenga razón… (Teniente)
¡¿Siguen sin tenerme confianza?! Debería acabar con todos en este instante ¿Cómo se atreven a ser tan insolentes?… les mostraré mi verdadero poder…
-Todos escóndanse (Teniente)
-Príncipe, por aquí (soldado a)
Estaba por activar mi skill, cuando de repente todos se bajan de sus caballos y, con sus riendas, los llevan hasta unos matorrales para ocultarse junto a ellos.
-Apúrese Príncipe (Teniente)
No sé lo que sucede, pero ante la incertidumbre termino yendo a ocultarme con ellos.
-¿Alguno me puede explicar?
-Shhhhhh (Teniente)
¿Cómo se atreve a callar…?
-Gruñidos-
¿Esos son orcos? Un grupo de seis de estos monstruos aparece por el camino que estábamos recorriendo.
-Estuvo cerca… (soldado c)
-Has silencio (Teniente)
Uno de los orcos detiene su paso y mira directamente a donde estamos escondidos.
-Relinchar-
De inmediato, el teniente le dio un golpe a su caballo y este sale corriendo.
-Gruñidos-
Esto llama la atención de los orcos, por lo que salen corriendo detrás del caballo.
-Suspiro- (soldado a)
-Casi nos descubren… (soldado b)
-Me da lástima haber tenido que sacrificar a mi caballo, pero no tuve más opción (Teniente)
-Lo siento… (soldado c)
-Solo la próxima vez no hables hasta que estemos completamente fuera de peligro (Teniente)
-¿Peligro? ¿Cuándo estuvimos en peligro? Eran solo unos orcos, deberíamos haberlos erradicado
Vaya banda de cobardes con la que he venido…
-Príncipe, esos no eran orcos normales ¿Acaso no vio su color de piel? (soldado a)
-Era roja y ¿Qué tiene?
Los soldados me miran extrañados.
-Que su piel sea roja significa que son orcos caníbales (soldado a)
-Había escuchado que una nueva raza de orcos había aparecido… pero ¿A quién le importa? Rojos, verdes… son todo lo mismo
-Escuche Príncipe, cuando los empezamos a expulsar a los orcos de las zonas urbanas se tuvieron que trasladar a partes más desérticas de nuestro reino… sin comida, empezaron a comerse a sí mismos (Teniente)
-Sus instintos de supervivencia son un poco extremos…
-Sí pero, esto no termina ahí… (Teniente)
-¿Cómo dices?
-Pareciera que al comer a los monstruos de su propia especie su fuerza aumenta exponencialmente, son más resistentes y ágiles… además de que su color de piel también cambia (Teniente)
De esto debe haberse tratado la reunión a la que mi padre me pidió que asista, pero no lo hice… que suerte que no fui, debe haber sido realmente aburrida.
-Nos han estado causado muchos problemas, nuestros solados no los pueden derrotar fácilmente y han comenzado a atacar algunos pueblos poco poblados… por ahora los hemos podido controlar, aunque no nos podemos confiar (soldado b)
-Entonces, lo mejor habría sido asesinarlos, no dejarlos irse
-Puede que tenga razón, pero seguramente debe haber más de ellos por esta zona, no se alejan mucho de su lugar de asentamiento, hubiera sido riesgoso atacarlos… además, nuestra misión no se trata de exterminar orcos (Teniente)
Parece que el Teniente se ha puesto un poco nervioso…
-De acuerdo, fue la decisión acertada… continuemos, debemos llegar a Tilcara
-Capaz debamos volver por otro camino cuando estemos escoltando a los Príncipes (soldado c)
-También tenemos que alertar a todos los pueblos cercanos que nos crucemos (soldado a)
-Cuando regresemos a la Capital organizaré un pelotón para poder venir a terminar con estos orcos (Teniente)
Estos orcos caníbales… capaz sean la solución para todos mis problemas…
[…]
(Perspectiva Dantalian)
Mañana llegaremos a la frontera, donde deberían estar esperándonos un grupo de solados del Reino Bestia para escoltarnos. En verdad, por el momento, el viaje ha sido bastante tranquilo y espero que se mantenga de este modo.
-Ronquidos- (Leonte)
Mi hermano se la ha pasado durmiendo, tampoco hay mucho más que hacer, pero no sé cómo puede consagrar el sueño tan fácilmente, el carruaje se mueve bastante.
-Cuidado (chochero)
Pisamos un pozo y el carruaje hizo un movimiento bastante brusco, a mí no me pasó nada… aunque…
-¡Aunch! ¿Qué fue lo que sucedió? Me duele la cabeza (Leonte)
-Jajaja, pisamos un pozo
Leonte se chocó su cabeza.
-No te rías, me dolió… debería haberme traído una almohada (Leonte)
-No habría sido mala idea
Hubiera amortiguado el golpe.
-Igualmente, me quedé dormido pensado en Agnes… ¿Crees que haya sido buena idea no decirle nos íbamos de viaje? (Leonte)
-Hubiera intentado retenernos o venir con nosotros… además, estaba durmiendo cuando nos fuimos
-Sí, pero deberíamos haberla saludado… seguramente se enojará con nosotros cuando volvamos (Leonte)
-Lo sabrá entender
-Tendremos que traerle un regalo (Leonte)
-De esa manera solo la malcrías, no todo se resuelve dándole lo que quiere
-Lo dice el que no pudo regañarla en la fiesta (Leonte)
Supongo que estoy siendo un poco hipócrita…
-Esa niña es la consentida de la familia y no hay mucho que podamos hacer (Leonte)
-Jaja, supongo que tienes razón
Es la más pequeña, es inevitable para todos intentar cuidarla lo más que podamos.
-Jajaja (Leonte)
De repente Leonte se comienza a reír.
-¿Qué sucede?
-Jaja… no es nada… solo que recordé como Meg terminó, después de la fiesta, seguramente está con un gran dolor de cabeza (Leonte)
-Ese amigo tuyo, no sé cómo hizo para conseguir que se involucrada en una competencia de tragos, por lo general no bebe nada de alcohol
-Arnold tiene sus habilidades, debemos agradecerle por conseguir que Meg se relajara un poco (Leonte)
-Puede ser, pero no podrá ir a nuestra casa por un tiempo… Megara no lo dejará ingresar
-Si es que se acuerda de lo que sucedió… fue una gran cantidad de alcohol la que bebió, jajaja
Leonte ¿Dónde fue que dejó toda su preocupación por tener que formar parte de la competencia en el Reino Bestia? Se lo ve totalmente relajado.
-Escucha Leonte, cuando lleguemos al Reino Bestia necesito que te comportes, puede que tengamos el apoyo de la Princesa Kenya, pero esto no significa que estemos exentos de críticas
-¿Críticas? Entiendo que los demás Reinos tengan una mala imagen de nosotros, pero no dejamos de ser personas como ellos, no pueden solo juzgarnos por algo que pasó hace mucho tiempo atrás (Leonte)
De pronto, Leonte se molestó.
-Comparto lo que dices, pero la traición que cometimos en la guerra es una marca que nos va durar para toda la vida y no hay nada que podamos hacer
-¿Qué no hay nada que podamos hacer? Yo no creo que eso sea así… dicen que no hay que juzgar a las personas por su apariencia, sino por sus acciones… pero, nosotros no hemos tenido nada que ver con lo sucedido en la guerra ¿Por qué debemos cargar con una traición que no cometimos? (Leonte)
-Eso es muy individualista, somos un Reino y todos nos debemos hacer cargo de lo que sucedió… tal y como lo hizo mamá, si bien no detuvo a Taxus cuando pudo, ha estado tratando de redimirse llevando a nuestro Reino en otra dirección… pero a nadie le importa, siempre seremos los malditos demonios en los que nadie puede confiar
Esta conversación ha logrado agitarme un poco, recordar el pasado nunca me resulta fácil.
-Solo son prejuicios… capaz no podamos cambiar el pasado, pero estamos haciendo las cosas diferente en el presente, solamente debemos lograr que todos se den cuenta de que no somos los mismos (Leonte)
-Como si fuera así de fácil… incluso ahora, el Reino Bestia solo acepto que formaras parte de su competencia por conveniencia
-¿Tú amiga Kenya piensa igual? (Leonte)
-¿Kenya?
-Si opinara que no se puede confiar en los demonios, nunca hubiera hecho nada… ¿No es así? (Leonte)
– …Kenya es distinta a los demás… todavía no entiendo por qué siempre me trató bien desde que me conoció
Nunca sentí que se acercó a mí con intenciones de aprovecharse, ella siempre quiso ser mi amiga.
-Lo ves… no todos piensan igual, necesitamos más personas como ella o como Petunia
-¿Petunia?
-Sí, es realmente agradable y tuve la misma sensación que tú con Kenya, me trató bien desde el inicio… luego de nuestra pelea… (Leonte)
…Cierto que aún no sabe que Kenya y Petunia son la misma persona… voy a dejar que se mantenga así, será divertido ver su reacción cuando lo descubra.
-Con la ayuda de personas como ellas podemos demostrarle a los demás que los demonios somos diferentes a lo que piensan (Leonte)
-Eres demasiado positivo…
-Eso es porque sé muy bien que las diferentes razas son capaces de convivir perfectamente… incluso pueden llegar a ser familia (Leonte)
-Me gustaría poder llegar a ver eso… me suena imposible
-Jajaja, no tienes ni idea (Leonte)
-¿De qué hablas?
-No importa (Leonte)
Ya se está desquiciando.
-Igualmente, creo que esta competencia será una muy buena oportunidad para demostrar mi punto de vista (Leonte)
-No sé si es una buena idea…
-Solo déjamelo a mí (Leonte)
Por favor, espero que no terminemos en guerra…
Comments for chapter "192"
QUE TE PARECIÓ?