Mi Novia Se Convirtió En La Reina Demonio (Giantess) - Capitulo 7
(Comedor del castillo)
Ambos entramos al comedor, es un lugar muy hermoso, en el centro estaba una mesa bastante larga, encima había lindas velas de colores, los utensilios eran igual de finos.
Ambos nos dirigimos al único lugar para tomas haciendo, yo obviamente aún seguía entre sus pechos, no tenía otra opción más que seguirla.
Tomo un asiento de una forma muy elegante, como esas mujeres de la alta sociedad que salen en las películas medievales, ella al parecer se toma su papel enserio como reina demonio cuando se enfocaba en ello.
Vivimos en dos mundos distintos (No literal) Vyvyan es de la clase alta, pero yo soy un simple guerrero que ni siquiera ha alcanzado el nivel 15.
Me gustaría salir de vez en cuando para aumentar mí nivel, pero Vyvyan que me vigila constantemente, se me hace imposible salir y mucho menor darme el permiso que luche con monstruos ahí afuera.
Necesito hacerme lo suficientemente fuerte para protegerla en el futuro, yo se lo prometí, pero debo buscar alguna manera para convencerla para que pueda por lo menos en pulir mis habilidades como guerrero.
Vyvyan se encontraba de buen humor después de haber tenido su momento romántico dentro de su habitación con Mack.
Algunas veces daba ligeros apapachos en la cabeza de Mack con sus dedos cuando nadie la miraba, daba risitas de felicidad cuando lo hacía.
Mack por otro lado casi no notaba los apapachos que le hacia Vyvyan, él estaba demasiado enfocado en como volverse más fuerte, por parte de Vyvyan, ella pensó que él estaba callado por estaba feliz en estar en sus pechos.
-Vyvyan amor, creo que ya es hora de que bajes, me está dando algo de calor estar aquí adentro-
-¿Tan pronto amor?, quédate otro ratito más, si- Dijo de una manera tierna a Mack.
Me puso una cara muy tierna Vyvyan, no quería irme, pero estar en medio de dos grandes pechos, te hace tener bastante calor, no quiero terminar empapado en mi propio sudor.
-Vamos cariño, sabes que me gusta estar aquí, pero hace demasiado calor y no quiero terminar todo sudado-
-Eso no sería un problema cariño, deja que te enseñe algo-
Vyvyan empezó a recitar algunas palabras que no lograba entender mientras las escuchaba, y vi cómo se comenzó a formar un círculo de color azul arriba en el techo.
Ese círculo soltó un viento algo frio, pero fue lo suficientes para quitarme el calor que tenía hace un momento.
-Que te pareció esposo, este es un hechizo básico de nivel 1, solamente sirve para cambiar el clima en un cierto lugar cerrado-
-¡Sorprendente!, ya quería ver algo de magia, a pesar que un hechizo de nivel bajo, pero aún se me hizo genial verlo-
Me sentí emocionado al ver ese hechizo, también quería aprender algo de mágica, pero tenía dudas si podría usarlo o no ya que no soy de la clase mago.
-Jiji gracias esposo, pero puedo ayudarte en que aprendas algunas habilidades para tu clase guerrera, esposo-
Al escucha a Vyvyan en decir que me ayudaría en hacerme más fuerte, eso me puso muy feliz, pero también pude ver que estaba muy orgullosa.
Si ella me enseña en pulir mis habilidades, entonces no habrá necesidad que me escape de ella, por el momento lo pensare si debería o no de huir.
-Muchas gracias cariño, pero será en otra ocasión, por ahora primero bájame de aquí, por favor querida-
-Pero esposo, ya no hay necesidad de que te bajes, ahora ya dejo de hacer calor, así que quédate ahí-
Vyvyan comenzó de nuevo hacer sus pequeños berrinches, se veía linda cuando lo hacía, inflaba sus mejillas de una manera tierna, incluso me daban ganas de pellizcar sus suaves mejillas.
Cuando estuve a punto de reprocharle, comenzaron a tocar a la puerta.
Tock, Tock -Su majestad-
Dejo a un lado su pequeña rabieta, y exhalo un poco de aire para mantenerse calmada de nuevo, y con una voz autoritaria le contesto a Lucia.
-Está bien Lucia puedes pasar-
-Muchas gracias su majestad, así con su permiso pasaremos para dejarle su desayuno-
Paso lo mismo en aquella ocasión, vinieron algunos demonios enorme y pusieron la comida en frente de Vyvyan, pero esta vez, Lucia no traía ninguna sirvienta, ahora vino sola.
Ahora que me acuerdo, necesito ayudar a aquellas sirvientas que vi ayer, no quiero que mueran por mi culpa.
Tengo que buscar la manera de salvarlas, antes de que Vyvyan las asesine, debo buscar la manera de salvarlas, pero tenía dudas aun si la mujer que vi en mis sueños decía a la verdad o no.
Vyvyan tiene los pechos ligeramente grandes, se mi hizo difícil ver lo que estaba pasando ahí abajo, así que solo me limitaría en escuchar.
-Ya está todo listo su majestad, ¿se le ofrece algo más?-
-Por el momento no Lucia y gracias por hacer esto-
-No hay de que su majestad, como su sirvienta es mí deber en servirle-
-Está bien Lucia, ya te puedes retirar-
-Muchas gracias su majestad, pero antes de irme, debo informar que hemos pues a las tres sirvientas bajo arresto y están encerradas en el calabozo subterráneo-
No podía creerlo, todo lo que me dijo el súcubo en mi sueño fue verdad, ahora estoy más decidido en ayudar a aquellas chicas.
-Hiciste un buen trabajo Lucia, pero por el momento voy a almorzar junto con mi esposo, te llamare después una vez que vaya a la oficina-
-Si su majestad- Lucia hace una ligera reverencia y se retira con el resto de demonios que la había acompañado para dejar la comida.
Paso un pequeño rato y me saco de donde estaba y me coloco en la mesa, tomo una pequeña servilleta y corto un trocito de tarta para que yo comiera.
-Ten esposo, no te vayas a ensuciar-
-Muchas gracias querida-
Me corto un trozo bastante grande, a Vyvyan siempre le encantaba comer algo dulce, me hacía ir a la tienda para comprar sus antojos, pero lo que más me sorprendía de ella, era que nunca engordaba, creo que toda esa grasa se iba hacia sus pechos.
Vyvyan tiene un hermoso cuerpo a pesar de que come mucho, parece modelo cuando una vez la vi por accidente con su ropa interior.
Hahaha, cada vez que me acuerdo me da mucha risa, pero volviendo al tema, necesito hablar seriamente con Vyvyan respecto a las sirvientas.
Estábamos a mitad del almuerzo cuando decidí hablar con ella.
-Vyvyan, querida-
-¿Que pasa cariño?-
Me sentía demasiado nervioso en preguntarle sobre aquellas tres chicas, pero si no hago algo ella morirán, así que necesito convencerla a toda costa de que no las mate.
-Puedes perdonar a las sirvientas de ayer por favor cariño-
-…-
Vyvyan se detuvo un rato mientras comía su pastel, pero ella volvió a seguir comiendo como si nada.
-Vyvyan cariño, perdónalas ellas no hicieron nada malo, fue un accidente-
-…-
Seguía comiendo su trozos de pastel, su rostro era mucho más seria que antes, estaba ignorando todas mis suplicas que le hacía.
-Está bien Vyvyan si no estás dispuesta a contestarme, creo que iré directo al calabozo para buscarlas-
No tenía ningún conocimiento sobre los lugares del castillo, pero haré todo lo posible para encontrarlas, aun si me pierdo.
Estuve a punto de irme cuando escuche algo romperse.
Así voltee rápidamente en la dirección donde esta Vyvyan y veo su plato partido por la mitad, al parecer uso mucha fuerza que lo termino rompiendo.
-Esposo, siéntate-
-Pero Vy…-
-¡Dije que te sentaras!-
-Aggg-
Mis piernas se están doblando, es como si me quisiera romperme los huesos, así que rápidamente me senté para que no mes los rompiera.
Sude demasiado, incluso con ese círculo que hacía que refrescara, aún seguía sudando sin parar.
Alce la mirada para ver a Vyvyan por que hizo esto y vi que estaba llorando, sus lágrimas estaba cayendo por sus mejillas, tenía completamente sus ojos rojos.
Paso un largo rato, ella seguía comiendo con tranquilidad, pero aún tenía sus ojos rojos, yo por mi parte, no podía moverme, la enorme presión que tenía, me impedía hacerlo.
Pero en eso me hablo, en un tono algo amable.
-Esposo, me gustaría dar un pequeño paseo contigo en nuestro jardín-
Por alguna razón tenía un mal presentimiento sobre todo esto, así que acepte para que no siga enojada conmigo.
-Claro cariño, porque no debería tener un paseo contigo-
-¡Genial! Vamos cariño- Da un pequeño aplauso de felicidad.
Ella me tomo de nuevo y metió entre sus pechos de nuevo, y nos fuimos directamente hacia el jardín, de día pude apreciar mucho mejor el jardín, se veía igual de hermoso como de noche.
-Sabes esposo- Suelta un gran suspiro.
-¿?-
-Durante este largo tiempo que he estado sola, nunca hubo un momento en que no dejara de pensar en ti-
-Como ya sabes este jardín está vivo gracias a mis esfuerzos y sacrificios, puse mucho amor para que nuestras futuras hijas jueguen aquí mientras nosotros las miramos-
Vyvyan lo decía en un tono muy tierno y también a la vez muy triste, pero ella continuo caminado conmigo, me mostró algunos lugar que no pude ver en esa noche, seguimos platicando hasta que llegamos al mismo lugar donde cenamos ayer.
Me saco y me coloco en la mesa, ella tomo haciendo en un lado y cruzo los brazos de una manera autoritaria.
-Esposo, siéntate-
Al recordar esa escena donde casi me rompe las piernas, me senté rápidamente antes que use su presión sobre mí.
-¿Sabes por qué estoy haciendo esto cariño?-
A pesar de que sabía de por qué estaba enojada, no me atreví a responderle, así que me quede callado.
-Respóndeme-
Me lo dijo en un tono muy frio, nunca antes me había tratado así y mucho menos de esta manera, incluso desde que nos conocimos.
-S…si, lo sé-
-Esta vez no puedo perdonar que menciones a otras mujeres enfrente de mí, eres mi marido y debes ser fiel conmigo, oíste, nuestras futuras hijas jamás querrán que su padre se vaya con otra mujer – Lo dice en un tono frio hacia Mack
No me atreví a contradecirla a cuanto a la palabra marido, tenía mucho miedo en decirle algo que la hiciera enojar.
-S…si amor, no volverá… a suceder- Mack estaba muy nervioso al responder.
-Esposo, no me gusta ser ruda contigo, pero si vas a buscar a otras mujeres, ve preparándote en recibir serios castigos, oíste-
Vyvyan se está volviendo muy aterradora, me seguía amenazando como avanzaba la plática, tengo demasiado miedo en contradecirla, hasta que por fin ella decidió parar.
-Así que esposo, si vuelves a hablar sobre otra chica enfrente de mi, juro que construiré una pequeña jaula y te encerrare ahí para siempre, solo te dejare libre para que hagas tus necesidades o para que convivas con nuestras hijas en el futuro, entendido-
-Entendido querida-
Ella había roto toda mi voluntad en un instante, mi confianza en convencerla se había esfumado como el viento, solo me quede ahí arrodillo sin poder hacer nada.
-Está bien esposo- Da un leve suspiro – Desde ahora solo me obedecerás a mí y no quiero objeciones, eres mi esposo y es tu deber de cumplir las demandas de tu esposa, así que vamos a ir juntos a mi oficina y veras como mato a esas mujeres que se atrevieron a tocar a mi hombre-
Yo me quede callado, no podía decir nada hasta que escuche a alguien gritar.
-¡Su majestad! ¡Su majestad!-
Era Lucia volando a toda prisa, Vyvyan se voltea toda furiosa y la agarra con su mano.
-Lucia ¿te atreves a interrumpir mi charla con mi marido?.., da una buena explicación antes de que te mate-
Lucia le estaba costando respirar así que jalo aire para decirle a Vyvyan algo importante.
-Su majestad perdone mi insolencia pero… las sirvientas que encarcelamos ya no está, han escapado-
-¡QUE!- Dice Vyvyan con toda furia.
Cuando escuche eso quede impactado, ellas pudieron escapar, me alegro, pero al parecer Vyvyan estaba completamente furiosa, no sé qué pasara después de esto.
Comments for chapter "Capitulo 7"
QUE TE PARECIÓ?