Mi nueva vida - 16
Grace se encontraba en un espacio desconocido, lleno de estatuas de marfil. Cada una representaba un espíritu, algunas con forma de animales, otras eran objetos y algunas eran paisajes.
Mientras caminaba vio un sello a lo lejos, el sello poseía una cruz llena de dibujos en un idioma extraño; Grace llena de curiosidad, comenzó a ir en esa dirección.
_ No vayas _ Dijo una voz chillona
Grace se detuvo y se giró buscando aquella voz que la había espantado, sin embargo no vio a ninguna persona. Cuando se disponía a seguir, sintió que algo le agarro la manga de su blusa.
_ Pero que mierda… _ enojada, miro la manga y se sorprendió
_ Soy tu guardián, mi nombre es Nesh _ Dijo aquel ser desconocido _ Soy el hada del sello celestial, como tu guardián siempre estaré a tu lado y voy a guiarte por el buen camino. _ Alardeo la pequeña hada, levantando su pequeño rostro con aire orgulloso.
Grace no podía creer lo que estaba viendo, seguía sorprendida, mirando al pequeño ser.
_ E-entonces… eres un ¿hada? _ susurra con ligera timidez, mientras observa al hada _ ¿Por qué no puedo ir allí?
*Dirige su dedo en aquella dirección*
_ No puedes ir, aun no estas lista Grace _ Dice mientras flota alrededor de Grace _ Tienes que practicar y desarrollar tu poder.
_ ¿Cómo puedo hacerlo?, no sé nada de magia… _ murmura la última frase y camina en dirección a la estatua del espíritu del tigre.
La pequeña hada se acerca a Grace y se sienta en su hombro, se acomoda un poco entre su cabello.
_ Escucha Grace… tu poder es más basto que este planeta, sin embargo este poder conlleva una gran responsabilidad y sacrificio. _ Le susurra el hada, mientras acariciaba el cabello de Grace.
_ Lo que te ayudará a mejorar, es la práctica; ningún humano nace sabiendo algo, lo aprende en el largo o corto camino de su vida. _ Después de decir esas palabras el hada alzó el vuelo _ ¡Vamos Grace! _ La llamó lleno de energía y entusiasmo.
Al escuchar el hada, Grace enderezó su espalda y emprendió la marcha, siguiendo al hada; para que esta le mostrara como dominar sus poderes espirituales.
*** ***
Mientras tanto en el mundo real…
_ No… estas mintiendo, ¿cierto? _ Dice Eloise, con su rostro lleno de lágrimas. _ Las dos están dementes… eso es… Tú no dormiste en toda la noche y tú estuviste preocupada, ninguna está pensando claramente. Ven Graciella… deberías dormir un poco _ Un poco histérica, trata de tomar la mano de Graciella.
_ No es una mentira, la Graciella que ustedes conocieron no es de este mundo _ Dice seriamente, mientras camina hacia el closet.
Ninguna podía creerlo, estaban aterradas, preguntándose… (¿Quién es esta persona? Y ¿Qué hacía en el cuerpo de su amiga?) Solo surgían más y más preguntas, causándoles un fuerte dolor de cabeza.
**
Cada trabajador debía regresar a su respectivo puesto, Matthew y Gina se pusieron en marcha. Cuando Matthew llegó al ala norte del castillo, se encontró con el guardia que había sido golpeado por su esposa.
Vio al pobre hombre con un gran hematoma en su frente, mientras caminaba observaba al guardia caminar tambaleándose. Se notaba que el golpe lo había afectado, ya que no tenía el control de sus funciones motoras al cien por ciento.
_ ¡Oiga! ¿Quiere que lo lleve a la enfermería? _ Dijo Matthew, mientras se acercaba un poco al guardia. _ Si sigue caminando sin ayuda alguna, no llegará a la enfermería o peor aún… podría desmayarse. _ Usó un tono de voz más suave y respetuoso con aquel guardia.
Matthew se sentía culpable por el golpe que su esposa le propinó a ese guardia, quien solo vigilaba la entrada.
(_ Pobre hombre… Gina tiene mano dura a veces, pero no pensé que fuese tan fuerte _ )
Tomo el brazo del guardia e hizo que este se apoyara de su hombro, con un poco de dificultad y varios descansos por el camino lograron llegar a la enfermería.
_ ¡Dr. Maurice! _ Matthew alzó un poco la voz, sin embargo no habían señales de dicho doctor; por lo que optó en recostar al paciente en la camilla. . _ Quédate aquí, iré por el doctor.
Matthew comienza a caminar, revisa el armario, despacho y sala de cirugías; pero, no encontró a nadie.
_ Caramba, ¿Dónde estarán todos? _ Resoplo
Cuando se dispuso a salir del despacho, vio una nota. Esta tenía la firma del doctor.
*Nota:
_ Por motivos personales, tuve que salir; si en dado caso tiene una emergencia. Busque a esta persona *Dimitrius*
Atte.: Dr. Maurice
_ No puede ser… _ Masculló Matthew, mientras rascaba su cabeza y daba vueltas alrededor del escritorio. _ Creo que tengo una idea…
***
Minutos después, llega alguien con una bata de médico y un paño en su rostro.
_ Doctor… _ murmura el guardia, su cara estaba pálida, sus labios secos y sus ojos de un tono medio rosa algo intenso.
(_ Esto no es bueno, si sigue de esta manera podría morir y no tengo idea alguna sobre lo que hay que hacer.)
En eso recordó la pequeña nota que fue dejada por el doctor en aquel despacho. La tomó y vio aquel nombre *Dimitrius*. Sin embargo él no sabía cómo llamarlo.
_ Dimitrius… _ Masculló aquel nombre y la nota que sostenía comenzó a brillar de manera extraña, cuando sintió el calor de aquel papel decidió soltarlo.
El papel comenzó a tomar forma humanoide, Matthew estaba sorprendido, tanto… que se alejó de aquel lugar. La figura era similar a la de un joven de 15 años, de un metro sesenta con el cabello negro; ojos color rojo y piel morena. De sus labios sobresalía un pequeño colmillo, parte de su rostro tenía escamas negras con reflejos color purpura.
Un pequeño siseo salió de su boca, mostrando la punta de algo parecido a su lengua.
_ Bienvenido _ se inclinó cortésmente ante Matthew. _Ya que me has invocado, supongo que necesitas e mis servicios… ¿Qué puedo hacer por ti? _ Termina la frase incorporándose, luego da unos pequeños pasos, dirigiéndose al lugar donde yacía escondido Matthew.
Aquel jardinero, quien se escondía de una especie de guardián reptiliano, trato de huir, pero para su sorpresa el guardián fue más veloz. Evitando su escape y quedando cara a cara. Mientras veía los ojos de aquel ser, pudo sentir como gotas de sudor frío recorría su espalda. Dimitrius retrocede un poco y dice:
_ No te haré daño, sólo soy el asistente del doctor _ se aleja un poco más dando algo de espacio a Matthew. _ Ahora… Te vuelvo a preguntar y espero que no salgas corriendo esta vez. _ Lo observa de reojo _ ¿Qué puedo hacer por ti?
Matthew traga saliva, mientras trata de buscar palabras para explicar el »porqué¨ de su visita.
_ D-disculpe las molestias _ responde apenado _ V-vera… traigo a un guardia herido.
Dimitrius se pone en marcha junto al jardinero, quien aún seguía nervioso y un poco asustado. Pero trataba de hacer lo posible para que no se notara mucho.
*
_ Ummm… Ya veo… _ murmura Dimitrius para sí mismo _ Entonces… me dices que lo golpearon con… una ¿pala? _ Observa a Matthew, luego dirige su atención al soldado herido y dice esta frase: _*Healing vines*
Inmediatamente, salieron unas enredaderas de color opaco por sus dedos; estas comenzaron a introducirse en el golpe del soldado. Haciendo que la hinchazón bajase y dejando al soldado en un estado de sueño profundo.
_ ¿Se pondrá bien? _ pregunta Matthew algo preocupado
_ Si, estará bien _ luego de afirmarle esto a Matthew, procede a colocarle vendas en la cabeza. _ Solo necesita descanso, cuando despierte podrá marcharse. Ahora… ¿Me dice su nombre?
_ ¿De quién? _ responde Matthew
_ Obviamente que el suyo, usted lo trajo aquí, debe ser registrado. _ Reitera _ Nombre por favor _ le dice, mientras sostiene un pergamino y una pluma entintada.
_ Soy Matthew Stirp, jardinero real; rango C+ Espíritu regente: Tierra
_ Stirp… _ se queda pensando por un momento _ Ahora lo recuerdo… Graciella Stirp, es su hija, ¿no? _ Lo observa y su mirada cambia de impresionado a una totalmente seria _ Debes tener cuidado… La 4ta reina, no debe saber mucho acerca de Graciella.
*** ***
Mientras en los aposentos de la 4ta reina…
Varios objetos eran lanzados a las paredes tapizadas de su habitación, jarrones, tazas de té y café; platos y cualquier otro objeto que se pueda lanzar.
_ Mi reina… ya basta… _ dice Hiyori mientras sus manos temblaban y su voz se hacía menos clara.
_ ¿Cómo se atreve?, ¿Cómo? Yo le di la vida… lo he criado bien. ¿No es así Hiyori? _ suelta el jarrón que se disponía a lanzar. _ Dime Hiyori… ¡Dime!
_ Mi señora… _ Hubo silencio en la habitación
_ Fuera… quiero estar sola _ después de mandar a su sirvienta más leal, fuera de su alcoba.
*Llama a su espíritu »Nicarius»
Una araña de color negro azabache, con puntos verdes y patas peludas; colmillos que sobresalen de su cabeza y ocho ojos que enfocaba el rostro de la reina.
_ Pronto nos vamos a divertir… ¿No te parece Nicarius? _ Acariciaba al arácnido con extrema delicadeza, mientras esbozaba una sonrisa siniestra.
Comments for chapter "16"
QUE TE PARECIÓ?
Es claro que las dos gemelas no le creerán lo que les dice Graciella, parece más un mal chiste o un cuento que ella venga de otro mundo. Graciella la tendrá difícil en convencerlas, y si lo logra, eso muy probable le traiga un futuro problema.
Cómo deducia, Graciella muy probable sea algo importante que muchos reinos la querrán por un posible gran poder que tenga, o por un motivo que desconozca, pero todo eso se responderá en los siguientes capítulos.