¡Okushon! La Liga en el Viejo mundo (Temporada II) - 2
- Inicio
- ¡Okushon! La Liga en el Viejo mundo (Temporada II)
- 2 - Capítulo II: El padre del futbol
Tras un vuelo largo de poco más de 20 horas, el equipo llega al aeropuerto de Londres, donde son esperados por un enviado de la Comisión Británica de Deporte con un cartel en sus manos que dice “#WelcomeOkumi”. Willian lo reconoce y deja sus cosas a cargo de su hijo para saludar al hombre:
Willian: “Hola John, tiempo sin verte”- le extiende su mano al hombre de mediana edad, con traje y rostro endurecido por el paso del tiempo
John: “Un gusto volver a ver Willian. ¿Qué tal el vuelo?”-pregunta mientras también extiende su mano para saludar
Willian: “Creo que no tan bien para los chicos”-se voltea y señala a los chicos del equipo intentando caminar con sus piernas tambaleándose y ojeras enormes en los rostros
John: “Lo imagino. No deben de estar muy acostumbrados. Descuida, los llevaremos al hotel para que puedan descansar debidamente”
Willian: “Gracias John. Por cierto…”
John: “No hace falta que preguntes, ella no ha parado de preguntar por ti y Steve. Es demasiado estresante tener a toda una familia en el futbol o futsal”
Willian: “¿Puedes juzgarme? Es cierto, llevamos un poco distanciados por nuestros trabajos, pero nunca nos dejamos de amar”
Dice eso, pero la realidad es que Willian había decidido alejarse de su país por una razón mucho mas complicada que implica a su hijo y para su bienestar decidieron optar por caminos separados, pero no han de separarse ni preocuparse el uno por el otro. Una gran familia.
Como parte de la CBD y amigo de la familia, John sabe todo lo ocurrido y mantiene en un profundo secreto. Ciertamente tener a la familia completa en la misma ciudad es importante, ya que ambos padres son muy conocidos en el ambiente del deporte y Steve ya es monitoreado para ser llevado por un equipo ingles a las inferiores. De cualquier manera, el joven británico-japonés desea permanecer con su equipo y amigos, por lo que el rechazo es seguro. Su talento es innegable y hasta medios deportivos locales se han hecho eco de la llegada de otra promesa, Hideo.
John: “Si, escuchar hablar a un casado sobre el amor es algo tan aliviador. Por cierto, fue sarcasmo”
Willian: “Había olvidado que John esta soltero y buscando mujeres mayores con dinero”-piensa
Como muestra de la hospitalidad a los japoneses, John los guía hasta un local de comida rápida muy conocida en el mundo entero pero que ellos no suelen disfrutar en Japón porque comen en otro sitio.
Willian saca su billetera para pagar el desayuno de los jóvenes, puesto que la hora de llegada es cercana a las 3am y mucho siguen con los efectos del trastorno por el viaje. En lo que respecta al sueño claro está. Pero John lo detiene y saca su billetera con la que porta la tarjeta exclusiva de la organización para la que trabaja:
John: “La CBD va a pagar toda la estadía y gastos generales así que no duden en pedirme”-dice en voz alta para que lo escuchen también los jóvenes
Hanamichi: “Muchas gracias señor Dombart”-hace la reverencia característica de su nación y luego lo siguen los miembros el equipo con Kiyoshi a la cabeza
John: “Por favor no hace falta que lo agradezcan”
Hanamichi y la manager, Urichia, ordenan al grupo en varias mesas pegadas una al lado de la otra mientras esperan por el desayuno. Tobira mira todo a su alrededor, impactado por la cultura occidental y el enorme tamaño del aeropuerto de Londres. No es de extrañar, es su primera vez fuera de Japón como la mayoría de los miembros del equipo.
Miro sigue a Tobira en la emoción y ambos se levantan de su silla y pasean muy cerca del local de comida rápida, gritan y corriendo al ver trenes de juguete, vestimenta clásica de la ciudad, comidas que nunca han visto, solo en fotos. Steve se les acerca sonriente y explica sobre esas comidas que ven entre saliva que cae de sus bocas, mientras, da unos disimulados y veloces vistazos a Urichia, poniéndose rojo por algo más que sensación de vergüenza sino una emoción diferente y maravillosa. Inmediatamente vuelve su mirada hacia el lugar donde está explicándoles a sus compañeros.
Para evitar que se alejen, Hiroichi se queda con ellos a la espera de que Kiyoshi envíe un mensaje avisando de que ya esta la comida. Mientras tanto, los demás se quedan en sus sillas.
Hideo saca un folleto sobre el aeropuerto y empieza a leerlo, pero su mente se encuentra en otro lado, más precisamente en el torneo que se avecina. Inosuke lo señala y sonríe:
Inosuke: “Estas demasiado impaciente, chico talentoso”
Hideo: “¿Qué dices?”
Inosuke: “¿Acaso me equivoco?”
Hideo: “No te incumbe”
Inosuke: “Es demasiado tedioso tener que esperar y sobre todo saber que tus rivales son de clubes altamente especializados en el deporte”
Hideo: “¿Qué es lo que sabes de ellos?”
Inosuke: “He estado investigando en el avión sobre algunos de los equipos”
Urichia: “Inosuke, detente”
Inosuke: “Algunos de ellos son campeones internacionales”
Urichia: “¡Inosuke!”-se levanta y lanza un grito molesto que llama la atención de los turistas y locales
Kiyoshi: “Urichia, cálmate por favor”
Urichia: “Pero Kiyoshi, no es momento para…”
Kiyoshi: “Toda información es bienvenida, pero a su debido tiempo ¿cierto Inosuke?”
Inosuke: “Si, capitán”
John y Willian, mientras esperan por la comida, conversan sobre las nuevas oportunidades y que el británico erradicado ahora en Japón puede volver si lo desea ya que hay un puesto importante en la CBD para él. Por supuesto que respetarían su puesto como entrenador de Okumi y esperarán a que finalice la liga de desarrollo, a lo que responde con una sonrisa:
John: “Willian, conozco esa expresión ¿estás seguro de eso?”
Willian: “Estos chicos me necesitan y son quienes le han permitido a Steve ser feliz. ¿Olvidaste porque lo saque de aquí? No es precisamente la razón que todos conocen sino por la seguridad”
John: “Entiendo y lo respeto. No voy a insistir más”
Willian: “Muchas gracias. Ahora bien, quiero que me digas todo sobre los equipos que disputarán el torneo”
John: “Willian sabes que no puedo. Eso es algo que los mismos estudiantes deberían averiguar por sus propios medios. Además, sería poco ético ya que cuentas con contactos para ello”
Willian: “Solo dime que hay del equipo local”
John: “No te vas a rendir ¿verdad?”
Willian: “Me conoces bien”
John mira a un lado y luego al otro, esperando no encontrar a ningún otro miembro de la CBD que estuviera haciendo compañía. Entonces le comienza a explicar sobre el New West Ham FC, un equipo que funciona como cantera para el poderoso West Ham United, el actual campeón ingles y europeo, por lo que es considerado el club de inferiores mas poderoso de la actualidad. Ese sería el primer rival al que Okumi deberá de enfrentar en su grupo, no solo eso, sino que también a su capitán y jugador estrella, Thomas Mccloyd, un joven escoces que ya es considerado como el mejor jugador del futuro:
Willian: “Así que el proyecto que propuse hace unos años ha surtido efecto”
John: “Ese chico, Thomas, el escoces, no hay ninguna duda de que llevará a su equipo y selección al éxito. Es incluso mejor que muchos grandes referentes profesional del Futsal”
Willian: “Si es que el West Ham del futbol lo evita. Si es tan bueno como dices, entonces será tenido en cuenta como profesional del futbol”
John: “A su debido tiempo y si es que el chico quiere”
Willian: “¿A qué te refieres?”
John: “El chico es fan de Falconnieri, el italiano actual mejor jugador del mundo en el futsal. Es obvio que seguirá sus pasos. Entonces dime Willian, ¿Cuál es la dupla que mencionaste?”
Willian: “Pues…los verás cuando sea el momento”
John: “Jajaja, cielos, no cambiaste nada”
Lo cierto es que Willian siente algo de culpa y temor, puesto que Okumi enfrentara a campeones de sus respectivos países, así como algunos de sus continentes, un panorama complejo para un equipo que hace apenas unos pocos meses que empezaron a desplegar sus garras y mostrar los colmillos.
Takehiro, padre de Hideo, regresa con los estudiantes que se quedaron deambulando por los locales, mirando vestimenta moderna y comida, así como recuerdos para sus familias:
Willian: “¿Algo bonito para llevarse a Japón?”-pregunta a los jóvenes
Tobira: “Es muy caro”-dice decepcionado
Takehiro: “En mi juventud había venido hasta Londres para las pruebas de un equipo de la Liga Inglesa y recordaba más pequeño esta estación”
Willian: “Te sorprendería como cambian las ciudades en pocos años”
John: “Jajaja, no por algo es la ciudad mas costosa del mundo…y definitivamente el padre del deporte que aman. Jóvenes, más tarde conocerán el museo del futbol”
***PARTE II***
Luego de desayunar, la delegación japonesa es llevada al hotel, ubicado a 15 calles de la estación de Londres y aeropuerto.
John distribuye a cada persona en grupo de dos a excepción de Urichia, quien obtiene una habitación solo para ella, cosa que la impulsa a ser la primera en separarse e ir directo a donde descansará en las próximas 2 semanas. Tobira y Hideo son ubicados en el mismo lugar, mientras que para malas noticias de Takehiro, deberá estar con Willian:
John: “Bien, eso es todo. Descansen como si fuera su propia casa”
Willian: “Gracias John. Bueno jóvenes, desempaquen, duerman, dúchense o coman y exactamente a las 13hs nos encontraremos en el salón de abajo”
John: “Takehiro, profesor Hanamichi, Willian ¿les parece acompañarme al bar para beber? Será algo tranquilo. Un café. Deseo conversar sobre unas cuestiones”
Willian: “Seguro”
En el bar que se encuentra junto al salón de descanso propio de un hotel 4 estrellas, los cuatro adultos se sientan en una mesa lo bastante grande como para que quepan sin problemas. John y Willian se piden un café amargo sin azúcar, Takehiro un té verdad y Hanamichi té negro.
El asunto es algo serio debido a que John no se muestra para nada feliz y mantiene su expresión seria:
Willian: “Bien John ¿Qué es lo que querías conversar?
John: “No se si sea buenas o malas noticias así que seré directo. En el primer partido habrá reclutadores y ojeadores de diferentes equipos”
Hanamichi: “¿Eso en que nos compete? -pregunta el profesor, confundido
Takehiro: “Si ¿no se supone que van a ver a los británicos? ¿o quizás?”
Willian: “John… ¿no me digas que no especificaste…?”
John: “Lo siento mucho, pero hay presiones desde arriba para que también algún estudiante de Okumi sea seleccionado. Específicamente hay 3 talentos. Tu hijo Steve es pretendido por el Barrisante Fubol Club de Italia, Tobira quizás tenga oferta para el Sao Moreinense de Brasil y Hideo…”
Al escuchar el nombre de su hijo, Takehiro abre bien sus ojos y esboza una expresión de desapruebo:
John: “Es pretendido por el San Sebastián, una cantera perteneciente al Real Barcelona”
Takehiro: “Tengo una pregunta John”
John: “Si, claro”
Takehiro: “¿Los chicos pueden rechazar esas ofertas?”
John: “Seguro. No es obligatorio ademas deben contar con la aprobación de los adultos responsables, la escuela y el mismo estado”
Cerca del mediodía antes de almorzar, Willian, Takehiro, John y Hanamichi se reúnen con los 3 chicos que recibirán oferta de equipos juveniles para pertenecer a futuro a la élite del futsal.
Williak les explica con mucho cuidado y detalles sobre ese asunto, John en parte ayuda a la explicación, puntualizando en el posible contrato que recibirán que consiste, entre otras cosas, dinero mensual que podrá ser administrado por sus padres o tutores, ademas de poder estudiar en el país donde vivirán, también la posibilidad de renovar sus contratos de juveniles al menos cada 6 meses.
Lejos de lo que esperaba John, ninguno de los 3 jóvenes se muestra emocionado, es más, ni siquiera Tobira está feliz por eso y suele ser el que mayor entusiasmo tiene entre los miembros del equipo:
Takehiro: “No me esperaba esta reacción”
John: “Me siento igual”
Willian: “No debería ser algo extraño, ellos 3 encontraron lo que en Sudamérica se llama ‘sentido de pertenencia’ y están convencidos de que pueden lograr lo impensado como pelear el torneo para ascender a los regionales”
Hanamichi: “Antes que jugadores, ellos son compañeros y amigos. Querrán disfrutar sus días escolares juntos”
John: “Eso es algo admirable y me recuerda a cierto tonto”-mira a Willian
Willian: “Si…lo sé”
Hideo, Steve y Tobira discuten entre ellos, pero no por el contrato sino la preocupación por el nivel que pueden tener los equipos:
Steve: “Para que ya nos ofrezcan contrato, el nivel de nuestros rivales debe ser muy alto”
Tobira: “Podemos hacerlo, no tenemos que decaer”
Hideo: “Eres insistentemente positivo”
Tobira: “¿Quieres ir con la cabeza agachada o con la frente en alto y tratar de ganar?”
Steve: “Tiene razón. Ya estamos aquí. Mientras nos mantengamos juntos y luchemos…no hay manera de perder orgullo”
John: “Al final es decisión de ustedes”-insiste a pesar de que Willian le clava la mirada
Hideo: “Agradecemos esta oportunidad y en verdad es el sueño que tenemos…”
John sonríe porque entiende que ganó a su colega, pero entonces el mismo Tobira añade a las palabras de Hideo:
Tobira: “Un sueño que deseamos cumplir cuando hayamos ganado las regionales y luego nacionales con nuestros amigos”
Steve: “Aún si no nos vuelven a querer reclutar, estaremos felices de saber que luchamos con nuestros amigos para vencer en estos torneos”
Pese a las respuestas negativas, John sonríe y camina hacia la puerta, antes de irse toca el hombro de Willian y le dice al oído:
John: “Siente un gran orgullo porque estos chicos son especiales”
Willian: “Gracias, amigo”
Lo normal es que John se enfurezca y amenazase como cada hombre de traje y con poder a no volver a dejar que sean reclutados, pero lejos de eso, el británico es un hombre que según la persona puede respetarla o simplemente no tomarle importancia. Las palabras de los tres chicos, simples pero poderosas, conmovieron al hombre tanto que ofrece su apoyo al equipo y alentará por ellos en el torneo.
Comments for chapter "2"
QUE TE PARECIÓ?