Reina de Lobos - 08
Dentro de un aterrador laberinto, hecho y rodeado de grandes fardos de oscura maleza, dura como el metal más fuerte, inquebrantable cual armadura; que con los años fue debilitando su coraza permitiendo que los golpes del tiempo la agrietaran y a la vez condensando su propio poder aumentándolo inconmensurablemente, un lugar que nunca debió ser descubierto y en donde una despavorida Athea chocaba contra una gran pared de arbustos, agazapada contra las filosas hojas no dejaba de temblar con terror
Sin embargo lo que ella esperaba que la persiguiera; la que para ella era una presencia malvada nunca apareció, en su lugar y desde la oscuridad un gran tronco atado con cadenas de dirigió con velocidad hacia la cachorra, la pequeña huyó evitando el golpe directo, pero notando inmediatamente con un alarido que su cola había quedado atrapada
Maldijo su suerte mientras intentaba soltarse, estaba segura que habría esquivado eso si tan solo su detección de peligro no estuviera siendo tan confusa, es un escalofrío, luego una sensación, una alarma, a veces no la sentía por completo, no parecía decidirse en el pánico que ella misma sentía, parecía que su pánico hacía que todo en ella entrara en pánico a la vez, en eso estaba pensando cuando la voz del sistema regresó
[Habilidad básica del Usuario: Percepción de peligro lv_9/Mejorada a lv_13
Asimilación forzada de la magia negra 70% interviene con la detección de amenazas, el nivel de asimilación es suficiente como para no considerarse la magia negra como un peligro inminente
¿Desea que la percepción de peligro se actualice con respecto al nivel del usuario y lo que ya NO se considera una amenaza?]
[Si] [No]
Athea; ‘‘¿Qué? ¡Ah!’’ gritó al ver la flecha que casi se clava en su cráneo en el instante activó un pequeño cable por accidente al soltar su cola, gracias a que la advertencia fue opacada por el resto de sensaciones y sonidos, ‘‘¡Sí! Definitivamente sí, actualízalo, ¡Ya! ¡Hazlo ahora!’’
[Recibido, actualizando percepción de peligro… Completado]
Inmediatamente después de que el sistema informara del cambio, todo a su alrededor se volvió de forma sorprendente y rápida sumamente silencioso y tranquilo, la gran alarma de inquietud se detuvo, los escalofríos pararon y solo había una sensación de incomodidad en el ambiente provocada por la energía mágica tan pesada del lugar
Con el abrumador silencio rodeándola se sintió bastante más tranquila, olfateo el aire con cuidado llenando sus pulmones de aire con mucho cuidado, dándose por fin cuenta que el estrés le estaba pasando cuenta, con un dolor muscular y un cansancio extenuantes y su cabeza le daba vueltas por el dolor, movió las orejas con cuidado, no había un solo sonido en el lugar pero un pequeño grillo brincó frente a ella y movió sus patas traseras para generar el sonido tan característico que poco a poco se fue multiplicando por todo el oscuro laberinto
Confundida empezó a caminar, su visión nocturna hizo lo suyo y con paso firme avanzó por el laberinto esquivando las trampas, todo era tan tranquilo que sorprendentemente fantasmas empezaron a aparecer de entre los arbustos, pero no la atacaron ni intentaron atraparla como antes; en cambio la ignoraron por completo, conforme se iba relajando el lugar dejaba de verse oscuro y aterrador para estar iluminado por los bellos fuegos fatuos y la misma luz de los fantasmas, casi se sentía flotando
Se sentía agotada por el estrés que ella misma se había provocado con pesadillas horribles y sin sentido, pero no podía permitirse volver a dormir, no solo porque no quería tener otra pesadilla, sino porque sentía que tenía que salir de ahí inmediatamente
Mientras caminaba cerró los ojos para descansar un poco, viendo que antes de alguna intersección quedaba algo de distancia, pero al abrirlos; estaba sentada frente a una estatua de lobo en un claro circular, no tenía la menor idea de cómo llegó a ese lugar, ni tampoco qué era esa estatua, la cual era de un lobo acostado con la cabeza levantada, había una inscripción en la base
Athea; ‘‘Nèixīn de píngjìng, tranquilidad en el espíritu… hmm’’
‘‘Repugnante’’
‘‘Simbólico’’
Athea; ‘‘Cliché’’
‘‘Y espantosa’’
‘‘No lo es’’
Athea; ‘‘Si es, solo mírala es tan……..’’ se espantó de escuchar a otras dos personas con ella, y al voltear hacia todos lados se dio cuenta para su horrible sorpresa; estaba completamente sola, ‘‘¿Qué?… ¿Qué demonios? ¿¡Quién dijo eso!?’’ viendo hacia atrás se encontró a una pequeña niña fantasma, ‘‘Por D…… por favor niña, no asustes a la gente así’’
La cachorra se alejó por una de las entradas del claro sin saber exactamente cómo salir del laberinto, pero saliendo del círculo notó que los fuegos fatuos no podían entrar, pero dentro del círculo seguía viendo a la joven niña, confundida comenzó a caminar sin un rumbo claro, pero sintiéndose mejor conforme más rápido se movía por el oscuro laberinto
Sorprendida por cuanto disfrutaba solo correr por ahí, dando giros aleatoriamente en todas las vueltas, empezó a entender más sus habilidades, ahora era una criatura y por ende encontrar alegría actuando como una criatura no debería sorprenderle tanto, pero igual le sorprendía, su velocidad, agilidad, su olfato y oído, todo la sorprendía, incluso su grandiosa capacidad de aparecer en lugares sin tener idea de cómo llegó a ellos
Descubriendo esa gran habilidad luego de chocar de frente con un podio para estatuas, al voltear hacia arriba vio una estatua de lobo gruñendo, parcialmente cubierto por maleza dentro de un claro con forma cuadrada, encontrándose ahora de verdad preocupada
Athea; ‘‘Sistema ¿Crucé algún portal para llegar aquí?’’
[Respondiendo al usuario
No hay registros de que el usuario haya traspasado ningún portal debido a su ubicación actual]
Athea; ‘‘Pero… ¿Cómo? No, no ¡Sistema! Tiene que haber un error’’
[Respondiendo al usuario.
No hay existencia de portales en medio del laberinto, el usuario llegó atravesando el laberinto]
Athea; ‘‘Pero yo… yo no… no sé cómo llegue aquí’’ se intentó alejar del lugar, tropezando con una placa, ‘‘Shēntǐ de lìliàng, fortaleza en el cuerpo’’
‘‘Esa sí es buena’’
‘‘Jum, eso es ridículo’’
Athea; ‘‘¿¡Pero quién mier…!?’’ dijo volteando con molestia, hasta que vio a una persona sentada sobre el lomo de una gran serpiente, ‘‘Mierda… escucha Róngqì, estoy segura que podremos llegar a una solución’’
La serpiente ‘Nee’ a la que creía ya muerta siseó hambrienta, acercándose a la cachorra, la cual salió corriendo tan rápido como pudo
Mientras corría activaba todas las trampas que pudiera, tratando de cortarle el paso a sus perseguidores, acostumbrándose más a usar su percepción de peligro en situaciones verdaderamente amenazadoras, saltando los obstáculos y girando sin dirección por el laberinto, disfrutando de la situación más de lo que debería
No es que disfrutara ser perseguida por una persona que odiaba y la aterraba, disfrutaba la sensación de libertad, extrañamente, había encontrado justo lo que le habían prometido al reencarnarse en ese mundo, por fin era libre de verdad y no pensaba dejar que un idiota se lo quitara, tenía por fin justo lo que quería, aunque esa emoción no estaba pensada para que le durara tanto como ella deseaba
Entre más corría, más se alejaba de lo que la atormentaba, hasta que chocó de frente con una placa de cuarzo, la estatua que debía estar por encima estaba destruida dejando solo las patas recubiertas de musgo, por la forma quizá haya sido la estatua de un lobo sentado en medio del triangular claro lleno de maleza
Athea; ‘‘Xīnzhōng yǒu pínghéng, equilibrio en la mente… si bueno ¿Qué con todas estas estatuas? Es raro…’’ con velocidad volteó a todos lados esperando a que las voces volvieran a aparecer, pero no, no hubo una sola voz que hablara esta vez
Aliviada de no estar escuchando voces, siguió caminando hasta toparse con una placa de cobre, tenía la imagen de tres lobos alrededor de un hombre sentado en un trono, uno acostado con la cabeza levantada viendo hacia el hombre, al lado del trono un lobo arisco enseñando los dientes y un último lobo, sentado tranquilamente con una mirada aguda en los regazos del hombre, debajo de la placa había una inscripción
Athea; ‘‘Fènnù yǔ fùchóu zhī shén, Dios de…’’
Tratando de leer la inscripción metió su patita en un pedazo de cuarzo con un sello de pata que había en la base, aunque era más grande en comparación a la cachorra, igualmente la placa se hundió como si se tratara de botón que al presionarse provocó que un humo negro empezara a salir de todos lados, su percepción de peligro se activó de inmediato cuando se acercó a ella con extrañas y alargadas garras y escuchando el seseo de la serpiente cerca de emprendió su carrera nuevamente, agregando ahora que aquel humo le iba cerrando el paso
El camino cada vez iba pareciendo más un bosque que un laberinto, mientras iba evitando activar los pinchos que salían del suelo saltaba por piedras para cruzar un río, de pronto teniendo que dar giros bruscos para evitar ser atrapada por aquel extraño humo, viendo cómo sin importar a donde fuera; en cada curva siempre estaba a punto de ser atrapada por Róngqì o devorada por Nee, de pronto estaba en el laberinto otra vez, siendo acorralada por lianas espinosas, al siguiente momento estaba esquivando bolas de fuego, luego tratando de soltarse de entre la espesa niebla negra con la que chocaba de frente, era una carrera completamente desquiciada
Conforme más corría, en las paredes iban apareciendo más placas de aquel hombre de las cuales salía humo cada vez más espeso, el césped fue cambiando a ladrillos blancos que formaban un camino, que siguió sin importar qué las trampas, cada vez más agresivas, se activaban sin importar si se les acercaba o no, la carrera se volvía cada vez desesperante, sentía el aliento de la serpiente cada vez más cerca de su cola
Cuando al girar en la última esquina, se encontró con un camino recto que la llevó directamente a la entrada de un templo de piedra liza destruido por el tiempo y el abandono, pero manteniendo su belleza por la bella maleza que le cubría, sobre la entrada y siendo prácticamente la única cosa que se mantenía intacta era una placa de cuarzo con la dedicatoria
Athea; ‘‘Fènnù yǔ fùchóu zhī shén miào, Templo al Dios de la Ira y la Venganza’’
Al leer la dedicatoria, su cola se movió con alegría y sintiendo el peligro sobre su cola se metió para refugiarse, sin saber que tranquilamente revoleteaban dos mariposas, blanca y negra, que al verla comenzaron a volar histéricamente creando una densa nube de aleteos blancos y negros
Comments for chapter "08"
QUE TE PARECIÓ?
jajaja interesante me rei por las frases en chino, me dan ganas de seguir leyendo para saber a donde va la historia.
Podrias usar sinonimos de tal manera que no sea repetitivo una mima palabra en una misma frase. Felicidades y siempre ganas en los directos.