Reina de Lobos - 10
Tortura implícita y no implícita. Leer con discreción
La cachorra estaba sentada frente a aquellos fantasmas a punto de tomar el elixir dorado a sus patas, cuando por el rabillo del ojo vio como una cucaracha empezaba a subir por la pared, con una clara confusión se le marcó en la mirada y cuando acercó el hocico al elixir, una gran mariposa blanca con manchas negras abrió sus alas de golpe frente a su rostro haciéndola retroceder asustada
Retrocedió tanto que fue capaz de ver como su cuerpo caía como si fuera un saco vacío de carne, huesos y sangre con sus ojos completamente blancos y vacíos, al voltear hacia sí misma, su cuerpo era humano otra vez y brillaba con una luz blanca que ya no era brillante o incandescente o siquiera era una luz que alumbrara, era más bien tenue con un brillo casi inexistente
La joven se levantó asustada y trató de correr hacía su cuerpo, más la imagen se desvaneció, cerrando el portal por el cual había sido traída, frente a sus ojos apareció una escena que la obligó a cubrirse el rostro con las manos mientras gritaba
Róngqì; ‘‘¿Qué pasa cariño?’’ preguntó el recipiente de Yangko, mientras la sujetaba de los hombros
Athea; ‘‘¡Púdrete!’’ gritó mientras temblaba incontrolablemente
Róngqì; ‘‘Oh pero ¿No quieres ver la sorpresa que te preparé mi vida?’’ Aquel tipo la obligó a descubrirse los ojos para ver la horrible escena frente a ella
Athea; ‘‘No…. No… no, ellos están muertos, esto es falso…’’ el nudo en su garganta le hacía imposible hablar
Jingky; ‘‘No lo es hija mía, te lo aseguro’’ dijo acariciando su cabello, ‘‘Míralos mi niña, son ellos en todo sentido, podemos recuperarlos si queremos, solo para ti’’
Frente a la joven estaban sus amigos, eran ellos estaba segura de eso, pero su estado en este momento era demasiado espantoso para ella. Lǜsè estaba atada en el aire con marcas de golpes y su mandíbula estaba tan desencajada, que parecía que su boca había sido desencajada por la fuerza, con la mandíbula inferior colgando mientras la sangre corría a chorros. Shuǐ lǜ, con su cabello en ondas y su rostro tranquilo, estaba recostada y amarrada sobre un caballete, con su sangrante columna vertebrar expuesta, sus costillas y carne formando una hermosa águila sangrienta, que tenía en su interior cuervos comiendo de su carne. Chéng hóngsè daba la impresión de que solo tenía pequeñas protuberancias que se movían, hasta que de su brazo salió una gran criatura negra cubierta de sangre, su cuerpo era ahora un saco de carne y huesos listo para ser devorado por los dientes y uñas de miles de ratas. Mientras que Tiānlán sè, tenía una profunda cicatriz de cuerda en el cuello, rasguños por todo el cuerpo y sus órganos internos expuestos por el gran agujero de su estómago
La escena casi la hace desmayarse y vomitar, pero lo que no pudo evitar fue que las pesadas lágrimas salieran descontroladamente mientras que Róngqì, era reemplazado por Yangko, que sin mucho esfuerzo se deshizo de los cadáveres al tiempo que Jingky creaba nuevos; cuando aparecieron corrieron hacía la joven desesperados, solo para chocar contra una barrera que los separaba
Tiānlán sè; ‘‘¡No los escuches!’’ advirtió
Lǜsè; ‘‘No les creas nada ¡Por favor!’’
Jingky; ‘‘Solo tienes que volver con nosotros y ellos volverán contigo, hija mía’’
Shuǐ lǜ; ‘‘¡No lo hagas! ¡Solo vete!’’
Chéng hóngsè; ‘‘¿¡Por qué no estas corriendo!?’’
Shuǐ lǜ; ‘‘Solo olvídate de nosotros y vete!»
Lǜsè; ‘‘Vete de una vez»
Chéng hóngsè; ‘‘Aprovecha y lárgate»
Tiānlán sè; ‘‘No nos va a pasar nada ¡Corre!»
Athea; ‘‘Cállense ¡Cállense!’’ gritó cubriéndose los oídos ante los gritos resonantes de sus amigos
Yangko; ‘‘Exactamente, ¡Cállense!’’ dijo golpeando la barrera
Tiānlán sè; ‘‘No los escuches sin importar qué ¡Serena!’’
Athea; »Que se detenga por favor»
Jingky; ‘‘Esto se detendrá si vuelves hija, tendrás todo lo que desees si vuelves’’
Athea; ‘‘Deseo largarme’’ dijo entre lágrimas, ‘‘Solo quiero irme, ya no quiero hacer esto nunca más’’
Jingky; ‘‘¿Segura? Hija puedes tener lo que quieras, hacer lo que quieras’’
Athea; ‘‘No, no… no quiero papá… no puedo seguir haciendo esto… snnif no después de… ¿¡Por qué tengo que seguir haciendo esto!?’’
Jingky ‘‘Porque es lo único para lo que sirves»
Róngqì; »Tú propósito, tú motivo para vivir, la razón de tu existencia es satisfacerme y si yo quiero destrozarte en pedazos lo haré’’ sujetó a la joven del cuello obligándola a levantarse, mientras los amigos de la chica golpeaban la barrera que los encerraba
Athea; ‘‘Mí propósito es mantener en orden y ser la creadora de todo lo que existió, existe y existirá, no satisfacerte’’ la joven tenía una mirada valerosa que flaqueó en cuanto el chicho levantó la mano con intenciones de golpearla
Róngqì; ‘‘Tú propósito es el que yo decida, soy más fuerte que tú, tengo más autoridad y tienes que obedecerme’’
Athea; ‘‘¿Y qué si no quiero?’’
Róngqì; ‘‘Te voy a perseguir por toda la eternida, te juro por mi mismo que no tendrás un solo momento de tranquilidad’’
Athea; ‘‘¿Y cómo lo harás? No tendrás a tu compañera para crearte eso que me persiga’’
Jingky; ‘‘¿Te crees que yo no existo niña malcriada?’’ dijo el dios a sus espaldas
Róngqì; ‘‘Podemos hacerte desaparecer, puedo destruirte si yo quiero,’’
Athea; ‘‘¿¡Y porque no lo haces entonces!? ¿O qué? ¿Acaso no…?………… Oh ¿Acaso no lo haces porque no puedes? ¿Es eso? ¿Acaso sin mí no tienes poder?’’ la joven fue arrojada al suelo con brusquedad, riendo entre dientes continuó, ‘‘¡Entonces es verdad! Maldito… yo no fui creada para ti, tú robaste el lugar que tienes, estás aquí sólo porque le agradas a Yangko, tu magia depende de mí… si yo me voy… ja ja… de verdad serás un envase vacío jajajajajajajajaja’’
Róngqì; ‘‘Cállate’’
Athea; ‘‘¿Por qué? Tengo razón ¿No? Sin mí todos aquí se extinguirán, no son nada’’
Yangko; ‘‘Oh ¿Tú crees que somos nada?’’ dijo la Diosa, mientras tomaba a uno de sus amigos y comenzaba a abrirlo por la mitad un cuchillo
Athea, ‘‘¡No! Déjalos ¡Espera! ¡No les hagas nada’’
Jingky; ‘‘¿Ella? ¿O tú?’’
Athea; ‘‘¿Qué?’’
Jingky; ‘‘¿No lo ves acaso? Esto es todo por tu culpa’’
Athea; ‘‘No… no lo es’’ dijo apartando la mirada de Tiānlán sè y de cómo le colocaban un cubo de ratas en el estómago y lo calentaban con una ardiente llama de fuego, haciéndolo gritar de forma horrible mientras su estómago era destrozado
Jingky; ‘‘¿No lo es? ¿Acaso no están sufriendo por tú culpa? Todo por solo pensar en ti misma, ¿Cuántas veces no lo has hecho ya? Hacer lo contrario de lo que se te ordena ¿¡Por eso estamos aquí no!?’’
La chica cerró los ojos con fuerza, para intentar ignorar los gritos y cuando los abrió, se vio cubierta de sangre con un cuchillo en mano que soltó con horror, al descubrirse en medio de los cadáveres de sus amigos
Yangko; ‘‘Pero mira lo que has hecho, solo porque se te prometió libertad, que egoísta’’
Athea; ‘‘Yo… yo no hice esto’’
Tiānlán sè; ‘‘Sí… lo hiciste’’ dijo desde sus espaldas
Athea; ‘‘¡Estás….! ¿Estás vivo?’’
La chica volteó hacia él con una sonrisa que le fue devuelta en forma de una mirada de odio absoluto, algo extrañada bajó la cabeza, encontrándose con el cadáver de su hermana en sus manos, completamente espantada se alejó cerrando los ojos. Al retroceder chocó contra Jingky que la levantó, volvió a abrir los ojos para ver como sus amigos la veían con desprecio, teniendo varios cadáveres a su alrededor abrió los ojos como platos
Athea; »¿Que…?»
Lǜsè; ‘‘¿Cómo pudiste?’’
Athea; ‘‘No… yo no quería…’’
Shuǐ lǜ; ‘‘No querías ¿Qué? ¿Asesinarnos del todo?’’
Chéng hóngsè; ‘‘Eres una mentirosa ¿Si quiera te importa lo que nos pase?’’
Tiānlán sè; ‘‘¿Sabes lo que hemos hecho para que te dejen en paz?»
Athea; ‘‘Chicos yo…’’ no pudo terminar de hablar, pues un puñetazo en la boca la arrojó al suelo
Lǜsè; ‘‘Después de todo lo que soportamos por ti’’
Shuǐ lǜ; ‘‘Te atreves a volver con ellos’’
Chéng hóngsè; ‘‘¡Maldita!» gritó golpeándola
Sus queridos amigos estaban decididos a acabarla a golpes y no podía entender por qué estaba pasando, sentía un intenso dolor por culpa de los golpes e insultos que se le eran dirigidos, la luz de su cuerpo se hacía cada vez más intensa, hasta que aquellos que la golpeaban volaron en pedazos, dejando un reguero de carne picada e intestinos revueltos con sangre, viéndose bañada en sangre otra vez se levantó, solo para encontrarse de frente con sus amigos una vez más, pero su mirada era diferente, Tiānlán sè se adelantó hasta ella tomándola de la mano y clavándose el cuchillo que la joven sostenía
Jingky; ‘‘¿Quieres ser libre no? Pues demuéstranos que sí quieres tu libertad, derrama su sangre, mátalos mil veces, vamos, hazlo, compra tu libertad con sangre’’
Tiānlán sè; ‘‘Ve y se libre’’ fue lo que dijo antes de desvanecer y caer sin vida frente a Athea
Athea; ‘‘No… no, no, no, no por favor’’
Mientras la chica gritaba, su cuerpo se iba moviendo en contra de sus deseos, ella solo podía sentir los golpes y la carne siendo cortada, mientras el cuchillo se iba oxidando, siéndole cada vez más difícil hacerse camino entre el cuerpo de sus amigos. Estaba desesperada, no quería que es pasara, quería llorar y estaba harta de hacerlo, quería tener una nueva vida, ser feliz, pero no había hecho nada para conseguirlo, solo se había dedicado a huir y…. decidió volver a hacerlo, cerró sus ojos y trató de perderse en su propia cabeza hasta que su cuerpo se detuvo de repente
Jingky; ‘‘Felicidades hija mía, de verdad has asesinado a todas las copias que teníamos de ellos, ¿No estas orgullosa? Ya se han ido… para siempre…
Yangko; ‘‘Y todo… todo por tú culpa ¡Jajajajajajaja!’’
Jingk; »Pero cariño ¿La vamos a dejar en paz tan fácilmente?»
Yangko; »Oh no… claro que no…»
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El viento del lugar estuvo llevando el sonido de espantosos gritos de dolor por un largo, largo tiempo, cuando desde la lejanía Marilia surgió de la oscuridad, golpeando su guadaña estruendosamente contra el suelo, llamó la atención de ambos dioses
Marilia; »6 meses… 2 semanas… 5 días… y 4 horas… me tomó encontrarlos… ustedes son buenos para esconderse de mí pero… están empeorando chicos» con un movimiento rápido de su guadaña convirtió a aquellos dioses en almas encapsuladas en esferas de cristal, que huyeron del lugar
La muerte desató a su desesperada amiga; Athea comenzó a golpear el suelo con su cabeza repetidamente mientras gritaba, cubría sus oídos con las manos para tratar de minimizar las risas y gritos que se entremezclaban y eran cada vez más estridentes, sus lágrimas cada vez más amargas y pesadas, el suelo y su propio espíritu se agrietaron, sufriendo las secuelas de meses de torturas, cubierta con la pesada sangre, al borde de la muerte, se dejó caer al vacío regresando por fin a su cuerpo de lobo
Poniéndose en pie con dificultad corrió hacia el elixir y los núcleos para devorarlos de un solo bocado, sin importarle que los lobos fantasmas se alertaran al verla devorar las 3 cosas al mismo tiempo, estaba decidida a permanecer en ese mundo sin importar qué
Al tragar, su cuerpo se sintió pesado, una gran cantidad de calor recorrió cada vena y arteria de su ser, un frío bestial apareció en su pecho, que poco a poco se convirtió en un calor casi insoportable, la presión se sentía parecida a un ataque cardíaco, su cuerpo cada vez se iba calentando más, cuando la boa Nee, que la había estado persiguiendo la devoró de un bocado, antes de recostarse
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