Salvé a una esclava sexual y será mi nueva amiga. - 01
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- Salvé a una esclava sexual y será mi nueva amiga.
- 01 - CAPÍTULO 1- El inicio de la amistad.
¿Qué se siente amar a alguien? ¿Qué se siente tener a alguien especial?
Cuando camino por las calles y veo a las parejas, me pregunto: ¿Algún día encontraré el amor?
Cuando veo a grupos de amigos, me pregunto: ¿Algún día tendré amigos?
Y cuando veo a padres conviviendo con sus hijos, me pregunto: ¿Tendré eso algún día?
Hijos, una esposa, amigos… Ser una verdadera persona normal.
Yo… Ah… Siendo sincero, es difícil para mí tener amigos. Todas las personas que consideraba mis amigos me traicionaron. No dudaron en hacerlo… Se arrepintieron, pero no los perdoné.
Después de tanto tiempo, volví a tener amigos. Realmente intenté ser un buen amigo para ellos y evité cualquier conflicto… Pero me traicionaron. No creyeron en mí… No confiaron en mí.
Personas que no confían en mí, no merecen mi confianza.
Deseo conseguir el amor verdadero.
Deseo conseguir un amigo fiel.
Deseo mínimo ser lo más parecido a una persona normal. Una persona normal que no resalte en nada.
Mientras consiga una de esas cosas en esta vida, moriré sin arrepentimientos.
Después de morir, me esperará un infierno, o simplemente mi alma desaparecerá. Sea cual sea mi destino, lo aceptaré sin quejarme, pues sé perfectamente que me lo merezco.
Hice cosas horribles en mi vida, cosas de las que me arrepiento con todo mi ser, pero el pasado no puede cambiar. Aunque yo intente cambiar y ser una buena persona, el pasado no desaparecerá, lo que hice siempre me perseguirá.
Por eso disfrutaré de mi vida lo más que pueda, porque esta será mi última oportunidad.
¿Y cómo planeo disfrutarla? Cumpliendo mi mayor sueño: ser una persona normal.
—Así que… ¿Podrías convertirte en mi amiga?- Fue lo que le pregunté a Yuik, la chica Vampiro que rescaté.
Aunque, bueno… Creo que ella no se ha dado cuenta de que es un Vampiro… Después de todo, yo la convertí en Vampiro para salvarla.
Una pobre mujer cuya vida seguramente ha estado llena de dolor, y quiero que sea feliz.
Ella me miró a los ojos y asintió lentamente. Unos ojos sin esperanza y vacíos. Unos ojos tristes, que solo llena mi corazón de tristeza al verlos. Sí… Comprendo perfectamente lo que has pasado y sentido. Lo comprendo bastante bien.
¿Cómo la conocí? Bueno… Primero les contaré mi historia.
Mi historia en este mundo.
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Después de cierto evento, nací en una aldea bastante normal y algo pobre, pero al menos teníamos lo necesario para no morirnos de hambre.
Yo era un simple plebeyo huérfano sin grandes sueños. Solo quería vivir una vida normal. Nunca soñé con ser un aventurero o un héroe, es más, prefería mantenerme alejado de esos temas porque solo me traería problemas innecesarios y no tendría mi vida normal… Pero el destino no me dejó vivir tranquilo.
Cuando cumplí 15 años, desperté un «trabajo».
¿Qué es un trabajo? Todos los humanos tienen un trabajo. Zapatero, Herrero, Curandero, Leñador, Maestro de espada, etcétera. Bla, bla, bla. En otras palabras, son los trabajos destinados de las personas, y el despertar de esos trabajos define el destino de cada persona en este mundo.
Hay trabajos aburridos, trabajos útiles y trabajos legendarios.
Todos sueñan con tener un trabajo legendario, pero yo no. Yo quería un trabajo útil para conseguir un trabajo y sobrevivir. Me conformaba con un trabajo aburrido, como el de ser un bibliotecario o de vendedor de flores. Me encantan la flores y quería abrir mi propia florería. Quería vivir vendiendo flores y plantas el resto de mi vida… Lamentablemente, desperté el trabajo legendario [Héroe], el trabajo más importante y famoso del mundo, y mis días de tranquilidad terminaron.
—¡¡Dreimo es un héroe!!
—¡¡Un héroe ha nacido en nuestra aldea!!
—¡¡Dreimo, no te olvides de nosotros cuando estés en la cima del mundo!!
—¡¡Dreimo, Dreimo, Dreimo!!
Y mientras que los aldeanos y los niños del orfanato aplaudían y me felicitaban por conseguir ese estúpido trabajo, yo simplemente le deseaba la muerte en mi mente al estúpido Dios que me dio ese trabajo.
—Puta madre. Me debes estar jodiendo, Diosa suprema.- Pensé lleno de rabia y decepcionado, pues ese trabajo arruinó mi oportunidad de tener una vida normal.
Estaba planeando escapar y conseguir una nueva identidad en otro país, para así evitar trabajar como héroe, pero considerando mi suerte, si yo no ayudaba, este mundo sería destruido y no podría conseguir mi vida normal. Pero, si derrotaba al Rey Demonio, podría tener mi vida normal que tanto soñé.
Por eso, con todo el dolor de mi corazón, acepté el trabajo y suspiré.
—Bueno… Soy un héroe.- Dije, cruzando los brazos.
Después de más de una semana de celebración, en donde varias familias me ofrecieron a sus hijas para que yo me case con ellas, personas importantes del reino vinieron por mí.
Por cierto, rechacé casarme porque no creo en el amor a primera vista, en el matrimonio sin amor y me da asco el harem.
Si me casaré, será con una mujer que yo ame y que ella me ame, y solo me casaré con una sola mujer.
Después de ir a la Capital del país, el Rey me obligó a inscribirme en una escuela de magia, la más importante del mundo y… Ah, no vale la pena narrar lo demás.
Bla, bla, bla, torneos, bla, bla, bla, nobles corruptos, bla, bla, bla, rechacé a muchísimas mujeres que estaban detrás de mí por mi trabajo de héroe, bla, bla, bla. Muchas cosas aburridas pasaron. Ni siquiera vale la pena mencionar todo lo que me pasó en esa escuela.
Muchos nobles intentaron aprovecharse de mí por ser plebeyo, pero los terminaba humillando públicamente, y si me caían mal, me aseguraba de que sus familias se volvieran pobres. Incluso maté a varios nobles, pero eso no es importante.
Sinceramente, la escuela no me importó en lo absoluto, no aprendí nada porque ya tenía muchísimo conocimiento sobre la magia, ya no me pueden enseñar algo que no sepa. Para lo único que me sirvió la escuela, es para mejorar mi relación con mis compañeros héroes y evitar que alguno de ellos se vuelva malvado o que se sienta superior a los demás. Todos éramos igual de importantes en el equipo, y me aseguré de que nunca lo olviden.
Terminé la escuela y emprendí mi viaje para derrotar al Rey Demonio, junto con mis 5 compañeros héroes.
Y gracias a todo el tiempo que estuvimos juntos, yo los consideraba mis mejores amigos… Pero me traicionaron.
—¡Debemos sacrificar a Dreimo!
—Lo siento tanto, Dreimo.
—E-es por el bien de la humanidad.
—Tu sacrificio será recordado por siempre.
—Q-quiero que sepas que… te amo. ¡Siempre te he amado, Dreimo! ¡L-lo siento, lo siento, por favor, perdóname!
—¿C-chicos?
En la pelea con el Rey Demonio, logramos derrotarlo, pero el alma del Rey Demonio entró a mi cuerpo e intentó apoderarse de mi cuerpo, y mis compañeros decidieron matarme para matar también al Rey Demonio… O eso creían.
Cayeron en una ilusión. Fueron engañados tan fácilmente, que inmediatamente dejé de verlos como amigos. Un verdadero amigo al menos escucharía a su amigo, o al menos dudar un poco de lo que vio, pero no, ellos creyeron firmemente en lo que vieron.
—¡E-esperen! ¡Por favor, tan solo escuchen…!
El único amigo hombre que tenía, las engañó.
Él atravesó mi pecho con su espada, justo en mi corazón, y me susurró.
—Yo cuidaré muy bien de ellas.
Yo sabía que esto podría pasar. Todas mis amigas estaban enamoradas de mí, pero siempre las rechazaba porque no sentía nada por ellas, y no quería involucrarmer sentimentalmente con alguna de ellas porque eso solo traería problemas al equipo, pues odio el harem, nunca tendría harem, y me negaba a salir con todas al mismo tiempo. Si salía con alguna de ellas, las demás se pondrían tristes y eso solo significaría problemas innecesarios que retrasarían el progreso… Y él se puso celoso al saber que todas ellas estaban enamoradas de mí y no de él.
—… Tú tienes el alma del Rey Demonio.- Dije, al darme cuenta de que el Rey Demonio estaba dentro de él.
Le di una fuerte patada en el estómago y salió volando, dándome el tiempo suficiente para regenerar mi herida y corazón.
—¡Imposible! ¡Destruí tu corazón!- Dijo, sin creer lo que estaba pasando frente a sus ojos.
Es imposible usar magia cuando el corazón es destruido, pero eso no aplica para mí por dos razones: número 1, mi cuerpo es muchísimo más especial que el cuerpo de un humano normal. Y número 2, un simple ataque como ese no es suficiente para matarme. Muchísimos lo han intentado antes que él.
Durante mi aventura, conseguí muchas habilidades únicas, y las oculté porque no quería que se sintieran inferiores a mí… Soy inmortal, solo pueden matarme eliminando mi alma.
Sabía que ser muchísimo más poderoso que ellos los harían sentir inferiores, por eso siempre me aseguré de parecer igual de poderosos que ellos.
Ellos no saben realmente lo poderoso que soy en realidad.
Y ni siquiera se imaginan lo poderoso que puedo llegar a ser.
—¡Tú tienes el alma del Rey Demonio, Valen!- Dije gritando, con la esperanza de que mis compañeras reaccionen y se pongan de mi lado.
—¡Está tratando de engañarnos! ¡Debemos matarlo! ¡Nosotros vimos cuando el alma del Rey Demonio entró en él! ¡Él es el Rey Demonio! ¡No se dejen engañar! ¡Sé que lo aman, pero él ya no es Dreimo, es el Rey Demonio!
Él creó una ilusión y las engañó. Creyeron más en una ilusión que en mí, el chico que supuestamente amaban. Si realmente me amaran, se hubieran dado cuenta del engaño, pero no fue así.
Intenté convencerlas, pero fue inútil. No importaba lo que les dijera, no lograba convencerlas y me seguían atacando… Intentaron matarme y no me creyeron… Y eso me hizo enojar.
Sin exagerar, yo podía derrotarlas a ellas en segundos si quisiera, pero no quería hacerlo porque quería que ellas confiaran en mí, pero me cansé de intentarlo.
Dejé de controlarme y los derroté en menos de 10 segundos… Por primera vez en muchísimo tiempo, usé el 100% de mi poder total.
No las maté a ellas, pero sí maté a Valen, pues debía matar al Rey Demonio. Lamentablemente, eso no fue suficiente para derrotarlo.
—Fufu. Te subestimé, héroe.- Dijo el Rey Demonio, controlando el cadáver de Valen.
Y el Rey Demonio utilizó su última transformación. Se transformó en un gigantesco Dragón negro, y…
Ah… ¿Será necesario narrar la pelea?
Bla, bla, bla. Una pelea aburrida después, logré derrotarlo. Debo admitir que fue bastante sencillo derrotarlo, lo difícil era eliminarlo, pues se regeneraba casi al instante. Tuve que sacrificar casi todo mi poder para eliminar su cuerpo y alma para siempre, logrando por fin derrotar al Rey Demonio y dándole fin a nuestra aventura como héroes.
Y después de la pelea, todas mis compañeras se reunieron conmigo para felicitarme y disculparse conmigo.
—¡Lo sentimos!
—¡C-caímos en una estúpida ilusión!
—¡Por favor, perdóname!
—¡N-no quiero que me odies!
Por un momento me vi tentado a perdonarlas para seguir teniendo amigos, pero no quería hacerlo, no quería perdonarlas. No quería tenerlas como amigas.
Y también aproveché esta oportunidad para tener la vida nomal que tanto quería tener.
—… Literalmente, hemos sido amigos por más de 10 años… Y ustedes no confiaron en mí… Le creyeron a él… Lo siento, yo quiero amigos que confíen en mí… Es algo infantil de mi parte, pero es lo que yo quiero… Adiós para siempre. Pueden quedarse con todo el crédito, no me importa, me iré a vivir a un bosque o no sé. Adiós.
—¡E-espera!
Ignorando sus palabras y súplicas, me fui.
Me alejé corriendo y no miré atrás. Intentaron alcanzarme, pero no pudieron avanzar tanto debido a la poca energía que tenían. Y desde ese día, no las he vuelto a ver.
Después de eso, decidí comenzar una nueva vida. ¡Por fin iba a tener mi tan soñada vida normal!
En la pelea con el Rey Demonio, sacrifiqué el 99% de mi poder total para destruirlo por completo y destruir su alma… Pero, a pesar de que conservé solamente el 1% de mi poder, seguía siendo más fuerte que un Orco. Y si entrenaba, podría volverme más fuerte. Aunque no era necesario ser poderoso, pues ahora por fin sería una persona normal, con un trabajo normal.
Mi plan era conseguir un trabajo en una biblioteca, y eso hice. Me convertí en un bibliotecario aburrido, pero es un trabajo que disfruto bastante.
Usé magia de trasformación para cambiar mi apariencia, pues no quería que mis compañeras héroes me encontraran. Y también creé una historia para mi nuevo yo, para evitar levantar sospechas sobre mi identidad. Debido a cierta maldición, no puedo cambiarme el nombre, pero si las cosas que planeé salen bien, nunca sabrán que soy el héroe Dreimo.
Mi cabello rojo se volvió negro y largo, cubría mis ojos, pues no me gusta que me miren los ojos. Aunque tengo el cabello como mujer por lo largo que es… Bueno, no importa.
Antes era guapo, así que modifiqué mi apariencia a una más «normal». Me convertí en un ciudadano promedio. ¡Me convertí en una persona normal por fin! Tenía un trabajo normal y una apariencia normal. Por fin mi vida estaba mejorando.
Obviamente, si quería conseguir amigos o una novia, la apariencia era importante, por eso, aunque era normal, era algo guapo. No era tan guapo como lo era con mi forma normal, pero era guapo, al menos lo suficiente para que las chicas me miren.
Mi vida se volvió sencilla y normal.
Despertaba, me bañaba, desayunaba, trabajaba, cenaba y dormía.
Una rutina sencilla, pero tranquila. Realmente disfrutaba este nuevo estilo de vida normal. Me sentía más humano y no un monstruo.
Toda mi rutina era así… Hasta que la conocí a ella.
—¿Una esclava sexual?
Mi jefa me envió a recoger algunos libros en otra ciudad, y como estoy acostumbrado a viajar corriendo, fui a la ciudad corriendo. Sé que no es normal viajar corriendo, pero así evito complicaciones innecesarias y me permite ahorrar tiempo que uso para disfrutar del ambiente.
Y en el camino, encontré un escondite de bandidos. Me acostumbré a matar a todos los bandidos que encontraba, así que los maté sin dudarlo… Y la encontré a ella. Una esclava sexual.
—… Oye… Te ves muy mal.
Una esclava sexual… Algo muy común en este mundo, lamentablemente.
Su piel morena tenía cicatrices que se ven muy dolorosas. No tenía manos, se las habían cortado. Tampoco tenía dientes. Le cortaron su oreja derecha. Y tenía vendas en los ojos.
Le quiraron los dientes para que ella no los mordiera cuando… Ah, mejor no pienso en eso, me trae malos recuerdos.
—No tienes lengua tampoco… Probablemente estés ciega…
Le toqué el brazo para examinarla mejor, pero comenzó a temblar de miedo. Con un simple toque, está muerta de miedo, pero no intenta escapar ni gritar… Está acostumbrada a esto. Acepta su destino porque piensa que no hay escapatoria y que no importa lo que haga, le harán daño.
¿Por cuánto tiempo la han estado violando y torturando?
—… Estás muy traumada…
Sí, comprendo bastante tu dolor. Más de lo que me gustaría.
Mi magia curativa no es tan poderosa en este momento porque me volví muy débil después de la pelea con el Rey Demonio, pero creo que al menos puedo regresarle su visión.
Le acaricié la cabeza para tranquilizarla y usé mi magia curativa en sus ojos.
—No estés asustada, ya no sufrirás. Todo estará bien.
No podré usar magia curativa en mucho tiempo, tal vez años, pero valdrá la pena.
—Listo.
Con cuidado, le quité las vendas y sonreí.
—Todo estará bien, no te preocupes. Hola.
Una expresión sin esperanza… Una mirada fría… Ella ha sufrido muchísimo, puedo darme cuenta de eso con solo ver sus ojos. Tanto dolor, que ni siquiera siente fé alguna.
—… ¿Tienes familia? ¿Algún familiar lejano o cercano?
Ella lo negó… No tiene familia… ¿Fue vendida por sus padres? Tal vez es huérfana y fue secuestrada.
En el orfanato donde crecí, hubo varios empleados que intentaron vender huérfanos para vender sus cuerpos, tanto por sus órganos como de manera sexual. Afortunadamente para ellos, yo siempre los salvaba y mataba a esos empleados.
—¿Amigos? ¿Algún conocido?
También lo negó.
—Ya veo…
Está sola en este mundo… Sin amigos, como yo. Sin familia, como yo. Fue violada y torturada… como yo.
Ella es… como yo… No puedo dejarla sola.
Veré mejor su condición.
—[Análisis.]
Activé una de mis habilidades y analicé su cuerpo.
Mmm… Varias enfermedades de transmisión sexual… Y está embarazada, pero su bebé está muerto… Ah, esto es asqueroso. ¿Cuántas veces la han golpeado para forzar un aborto? ¿Cuántas veces ha abortado? Su cuerpo está demasiado dañado.
—… Debo hacerlo.
Es algo desesperado de mi parte, pero es la solución más rápida para su recuperación total.
—Por favor, abre la boca. No es nada malo, te lo prometo.
Ella abrió la boca sin quejarse.
—No te preocupes, no te haré nada malo.
Me corté el dedo con mis dientes y puse algo de mi sangre en su boca.
—No te preocupes, es algo medicinal. No tengas miedo.
Mmm… Sus enfermedades están desapareciendo… Sus heridas se están regenerando.
No quería hacer esto, pero debía hacerlo… La transformé en un Vampiro.
Es una de mis habilidades únicas. La conseguí cuando maté a una Reina Vampiro.
Tengo la inmortalidad de un Vampiro y puedo transformar a otros en Vampiros.
Ahora que ella es un Vampiro, tiene inmortalidad y un cuerpo especial. Tiene la capacidad de regenerarse. Todas sus heridas desaparecerán y volverá a ser una chica saludable.
Lamentablemente, su estado mental no se puede arreglar con magia, pero tengo la esperanza de que ella saldrá adelante y volverá a ser feliz.
—… Realmente has sufrido… ¿Te gustaría venir conmigo…? Yo quiero tener un amigo… Así que… ¿Podrías convertirte en mi amiga?
Ella me miró a los ojos y asintió lentamente.
… Sus dientes ya se regeneraron, pero bo está sonriendo, simplemente me está siguiendo la corriente, pues tiene miedo de negarse.
—No volverás a sufrir, te lo prometo.
Le acaricié con cariño su cabeza.
—Pronto estarás mejor.
[Maldición detectada.]
[Sin comunicación: Los poseedores de esta maldición no pueden hablar.]
Un mensaje apareció frente a mí, informándome sobre la maldición que obtuvo.
… No sé eliminar maldiciones.
Las personas que se convierten en Vampiros sacrifican su humanidad… Y según mis investigaciones, los nuevos Vampiros adquieren una maldición por un castigo divino o algo así.
Lo siento, pero no volverás a hablar. Un pequeño precio a pagar considerando que tu cuerpo es saludable de nuevo.
—¿Qué edad tienes? ¿Más de 20?
Ella dijo sí con la cabeza.
—¿Más de 25?
Dijo sí.
—¿Más de 30?
Dijo no.
—¿Tienes 28?
Dijo sí… Tiene 28 años. Sigue siendo muy joven todavía.
—Yo tengo 26 años. Es un placer conocerte.
Le acaricié la cabeza y sonreí.
—Espero que seamos grandes amigos.
Por fin conseguí un amigo, y espero que esta vez sí sea solo mi amigo.
Ella y yo somos tan parecidos… Te prometo que nunca volverás a sufrir. Nunca.
La cargué con mis brazos y comencé a caminar.
—Te llevaré a mi casa y prepararé una deliciosa cena. Por favor, no me tengas miedo, no te haré nada malo.
Ella sigue temblando de miedo. Sí, es comprensible. Tomará mucho tiempo para que confíe en mí. Solo soy un desconocido para ella, es normal que me tenga miedo.
—Sabes, las estrellas de mar al este de la Capital son de color azul debido a que se alimentan de una planta azul llamada Lazuk.
No sé de qué hablar con ella, así que le contaré datos curiosos sobre este mundo mientras la llevo a mi casa.
No le preguntaré nada respecto a su pasado para evitar que recuerde cosas malas. Evitaré hablar de cosas que le molesten.
Por ahora, solo le daré comida y un hogar, mientras se acostumbra a mi presencia.
—Las tres lunas se llaman Kam, Kem y Kim por los héroes Trillizos que salvaron este mundo hace miles de años. Nombres lindos, ¿verdad?
Ella asintió lentamente, mientras me sigue mirando a los ojos con esa fría mirada.
—Sí… Son nombres lindos.
Te prometo que serás feliz de nuevo, no volverás a sufrir. Lo prometo con todo mi ser.
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