Capítulo Especial: Toon Latino (1)

Oh, mi señor. No llores.

Aquel pequeño ser que abrazaste sigue su camino descalzo por las tinieblas con valor.

Oh, mi señor. No temas.

Su camino espinoso plagado de aflicciones muy pronto llegara a su fin.

Oh, mi señor. Limpia tus lágrimas y sonríe.

Porque tendrás por siempre un lugar en su corazón.

.

..

…

PLAF!

—¡Auch!

—¡Demonios!

Repentinamente Bell y yo caímos en un lugar desconocido.

Mire a mi alrededor y nada me era familiar. Aparecimos en una especie de parque, donde parecía que había pasado un tornado.

Lo último que recordaba era que me preparada para ir a dormir.

—Bell, creo que ya no estamos en… ¿Kansas? —comenté.

—Jo, estamos en un, estamos en un…iseeekai… —dijo con un tono de suspendo y una cara seria.

—Se nota que has estado leyendo algunas novelas ligeras últimamente.

Sss~ Sss~

—¡Jo! —exclamó Bell repentinamente.

[¡¡¡PROTECCIÓN!!!]

De la nada, sin que yo pudiera detectarlas, unas enormes serpientes aparecieron sorpresivamente, lanzándose hacia nosotros, pero en un instante Bell activo su habilidad para cubrirnos con su impenetrable campo de energía.

—¡Donde demonios hemos venido a parar! —exclamé.

Active mi guantelete. Sin embargo, cuando estaba a punto de invocar a mi daga ‘Balmung’ para luchar, un cuadro de dialogo apareció repentinamente frente a mí:

[Se ha detectado una fuente de energía externa.]

[Es posible cambiar el suministro de energía. ¿Deseas realizar una conexión?]

No sabía que sucedía, pero acepte sin pensarlo dos veces.

[Suministro cambiado exitosamente.]

BEAM~! BEAM~!

De repente, ambas serpientes cayeron abatidas por dos rayos láser. Sorprendido, dirigí mi vista al lugar donde se originaron.

—¡Debe ser él! —exclamó una voz masculina.

Un hombre disfrazado y una mujer con una tela que cubría sus ojos venían corriendo hacia nosotros. El hombre por su traje podría decirse que era una especie de superhéroe y la mujer, a pesar que parte de su rostro estaba cubierto, podría decir con seguridad que ella era toda una belleza y una especie de maga por el libro que llevaba consigo. Sin embargo, si algo he aprendido es a no confiarme por las apariencias.

—¡Wow! ¡Jo, mira es un cyborg! —exclamó Bell maravillada—. Espera no, es un Ranger, no un Riiider…

Tras de decir eso, Bell puso una cara de sorpresa y rápidamente entro en mi mochila.

Lo interprete como que ella había notado algo malo y, ya que acababa de usar su habilidad ‘Protección’, tenía que esperar que trascurrieran diez minutos para volver a utilizarla, por lo que entendí que se apresuró a entrar en ella para resguardarse.

No me quedaba más alternativa que prepararme para luchar, por lo que me puse en guardia.

—¡Espera no queremos hacerles daño! —exclamó la mujer.

—Las encontré —avisó Bell asomando su cabeza fuera de mi mochila.

Luego salió de ella con dos galletas y voló hacia la mujer.

—Hola, él es Joseph y yo soy Bell. Esto es para ti —dijo con una sonrisa en su rostro.

—Tú eres —dijo la mujer con un leve tono de sorpresa—. Ya veo… Muchas gracias pequeña hada.

Posteriormente de darle la galleta a la mujer se acercó lentamente al hombre disfrazado.

—P-Para usted —balbuceó Bell al hombre mientras le daba la galleta restante.

—Oh, gracias pequeña —dijo en hombre disfrazado.

—Ji, ji, ji.

Después de eso Bell regreso a mi hombro con una expresión de felicidad.

—Y… ¿ustedes son? —pregunté.

—Perdona, mi nombre es Toonlaman y ella es Opalice. Lamento todo esto —respondió luego de comerse la galleta.

—Puede que tengas algunas cuantas preguntas, pero créenos, no somos tus enemigos —dijo la mujer.

—Está bien —contesté mientras me sacudía el polvo del pantalón.

—¿Lo aceptaras así de fácil? —preguntó Toonlaman.

—Recibieron galletas de Bell, así que sé que no son malas personas, además ya estamos acostumbrados a situaciones fantásticas como esta —respondí—. Solo díganme exactamente lo que ocurre.

—Muy bien. Te lo contare todo —dijo Toonlaman con una tenue sonrisa—, aunque hay que movernos, no es seguro permanecer aquí.

Mientras caminábamos Toonlaman nos iba narrando y mostrando, gracias a un holograma que salía de su cinturón, como esta ciudad fue invadida hace unos días por enormes serpientes, y como las autoridades de la ciudad hicieron todo lo posible por erradicarlas. Sin embargo, se vieron abrumados por la gran cantidad de reptiles, lo que empeoro cuando repentinamente apareció en el centro de la ciudad un colosal ser, con cabeza y torso humano, pero con la piel de sus brazos cubierta de escamas y su mitad inferior de serpiente, quien desatando su furia, destrozaba todo lo que se interponía en su camino, para luego desaparecer y reaparecer en un intervalo de veinte horas. Por lo que al no poder hacerle frente, ni con ayuda del ejército, no tuvieron más alternativa que solo concentrarse en la protección y la evacuación de los civiles.

—Jo, ¿entonces esto es un serpientecalipsis? —interrumpió Bell.

—… Algo así —le contesté.

Toonlaman continúo narrando como él y su compañera Toonlagirl hicieron todo lo posible por proteger la ciudad ellos solos. Sin embargo, luchar contra las serpientes y lidiar contra las repentinas apariciones del colosal ser los estaba agotando, mas con la aparición de la señorita Opalice todo cambio, quien usando sus poderes pudo invocar a diferentes héroes provenientes de otros mundos para hacerle frente a esta calamidad.

—Algunos héroes no querían cooperar en un inicio, pero Toonlaman los convenció, además dada la naturaleza de mis poderes, solo yo podía regresarlos a su sitio de origen, así que aceptaron a regañadientes —dijo la señorita Opalice.

Después de ponerme al día con lo que estaba pasando, deduje que el cambio de suministro de energía de mis habilidades era a causa de la señorita Opalice, básicamente ahora mis habilidades funcionan gracias a ella. Esto hizo que me preguntara quién es ella en realidad para tener tanta influencia en mi poder.

—Lamento que te involucráramos en esto —dijo Toonlaman.

—No hay problema —respondí—. Entiendo muy bien la situación pero…

Me sentía un poco inseguro. Sin embargo, le compartí como en el holograma pude darme cuenta que los otros invocados estaban a muchos niveles por encima de mí, dado a sus grandes poderes y habilidades. No me sentía tan fuerte como ellos.

—Entiendo cómo te sientes —expresó Toonlaman—. No obstante, si observas un poco más te darás cuenta que hay humanos normales entre los invocados. Ellos a pesar de sus limitaciones, están haciendo todo lo posible por ayudar y evacuar a las personas, demostrando que no es necesario tener grandes poderes para ser un héroe. Joseph, fuiste bendecido con tus habilidades, por lo que no debes sentirte menos que nadie, y ni tampoco sobre los demás.

—¡Toonlaman, esas palabras fueron geniales! —comentó Bell maravillada.

—Ja, ja. Solo digo lo que siento.

Sus sinceras palabras me hicieron darme cuenta de mi error por pensar así, y a la vez, recordar mis días en Forbbiden Fantasy Online con mis amigos cuando todos los demás gremios nos tenían de menos.

—Comprendo. Daré lo mejor de mí —expresé.

—Muy bien. —contestó Toonlaman mientras asentía.

Seguíamos caminado y la señorita Opalice me explicó la razón por la que yo fui el último en llegar a este mundo. Al parecer mi tardía llegada fue debió a la inestabilidad de mi lugar de origen, asumí que esa inestabilidad a la que se refería eran las grietas dimensionales que sufría mi mundo. Me dijo que ella y Toonlaman decidieron patrullar la zona los últimos dos días por si la invocación funcionaba, y ahora que se preparaban para la batalla final, decidieron venir al lugar una última vez antes de ir a reunirse con Toonlagirl y los demás héroes, los cuales, se dirigían al sitio donde reaparecería el colosal monstruo, el cual habían identificado como un ser de la mitología hinduista, un naga.

Luego de un par de horas de caminar, y de luchar con cuantas serpientes se cruzaron en nuestro camino, ya estábamos cerca del centro de la ciudad, mas repentinamente todo se oscureció.

—¡Jo, mira en el cielo, un círculo mágico! —avisó Bell.

—Eso indica que él viene en camino —advirtió la señorita Opalice.

En el cielo, del enorme círculo brillante, descendía el colosal ser que vi en el holograma de Toonlaman, y no venía solo, a su lado descendía una mujer naga.

—Esto es malo —dijo la señorita Opalice—, no esperábamos que trajera compañía. Toonlagirl y los demás héroes solo estaban preparados para recibir a uno de ellos.

THOOOM!

La tierra tembló cuando ambos nagas pisaron tierra. Luego comenzaron a separarse, la naga venía a nuestra dirección.

—Joven Joseph, Bell. Sé que los trajimos en contra de su voluntad a este mundo, pero… ¿me prestarían su fuerza? —preguntó Toonlaman.

—¡Claro! —respondí.

—¡Por supuesto que sííí! Ji, ji —afirmó Bell.

No me sentía lo suficientemente fuerte como enfrentar a estos seres. Sin embargo, Toonlaman creyó en mí, por lo que no me echaría para atrás.

—¡Muy bien vamos! —exclamó Toonlaman mientras asentía.

Nos apresuramos para encontrarnos con la naga, para así evitar que ocasionara más desastres.

Mientras corríamos, nos detuvimos a petición de la señorita Opalice, luego un círculo mágico apareció debajo de ella.

—Muy bien, ahora que uno de los trece héroes del caos se encuentra con nosotros, las condiciones para usar mi habilidad están completas —dijo la señorita Opalice.

Tras de decir eso, ella empezó a entonar una bella canción.

[¡¡¡CANTO DE INSPIRACIÓN!!!]

Su voz era realmente hermosa, lo que me hizo sentir repentinamente muy relajado.

[Se ha detectado una habilidad compatible con el sistema.]

[Para que la habilidad surja efecto se necesita de un nexo y realizar una conexión…]

[Nexo localizado. Procediendo a establecer una conexión.]

Podía sentir como tanto mi fuerza corporal como mis habilidades se fortalecían enormemente.

[La conexión establecida con el ser llamado Toonlaman está en acción.]

Gracias a su habilidad podía sentir como tanto la fuerza de Toonlaman y los demás héroes de unían a la mía, pero no solo era yo, al parecer todos los demás héroes reunidos por la señorita Opalice estaban siendo potenciados.