Me volví en novio de una Yankee - Capitulo 3

(Frank) Elizabeth se esta tardando demasiado, yo decidí esperarla mientras aún seguía sentado en el peluche de tiburón.

(Frank) Ahora que lo pienso, este día no estuvo tan mal después de todo, tener una cita con una chica que tiene la estatura de un edificio no es tan malo, pensé que tendría problemas, pero resulta que no.

Frank soltó un leve suspiro y siguió acostado encima del peluche, durante su espera, miro por los alrededores, se le notaba un tanto curioso al ver familias junto con algunas personas pequeñas, hubo veces que le traía recuerdos cuando venía con su padres y hermana a comer en algún restaurante.

Todo iba con bastante calma hasta que escucho las voces de lagunas chicas a lo lejos.

– ¡Ey! ¡Mira! Ahí hay una mesa vacía -Dijo toda emocionada.

– ¿Estas segura que esta vacía? Quizás las personas de ahí fueron al baño o hacer su pedido.

-Bueno, vamos esperar ahí un rato, si ya no viene, nos la quedamos, así que rápido. -Jalo a su amiga de su brazo.

-¡Espera! ¡No me jales tan fuerte!

Ambas chicas fueron hacia donde se encontraba Frank descansando, todo parecía normal hasta que una de ellas noto el tierno peluche sobre la mesa.

-Ahh~ ¡Que lindo! Un peluche de un tiburón~ -Movió ligeramente su mano para tomarlo.

Pero cuando estaba punto de agarrarlo, Frank soltó una voz desde ahí.

Frank: Disculpen señoritas, pero este lugar ya se encuentra ocupado. -Hablo de una manera gentil.

Ambas: ¡¡…!!

Isabella: ¿Escuchaste algo?

Luciana: Al parecer si, pero… -Volteo por donde provenía la voz.

Frank: Aquí abajo señoritas.

Al escuchar nuevamente la voz de Frank, lograron localizarlo fácilmente, vieron a una pequeña persona que estaba de pie en el peluche.

Al verlo mas de cerca, se sorprendieron, ambas pensaron que alguna otra persona le había hablado.

Frank: Holis~ -Levanto su mano en forma de saludo.

Isabella: ¡Wow! Un chico~

Luciana: Te dije que había posibilidades de que hubiera alguien aquí.

Isabella: Tenias razón, pero ya quería tener un lugar, me siento algo cansada después de tanto trabajar.

Ambas chicas discutían, hasta que Frank hablo nuevamente.

Frank: Este… No quiero sonar grosero señoritas, pero esta mesa ya esta reservada, mi amiga ahorita regresa con nuestros pedidos.

Isabella: Ohh… Lo siento, no quería…

Isabella se quedó en silencio por unos segundos, hasta que le llego una idea.

Isabella: Bueno ¿Son ustedes dos solamente?

Frank: Si por el momento.

Isabella: Ya que son solo dos ¿Por qué no nos das la oportunidad de compartir mesa?

Isabella: Prometemos no ser un estorbo

(Luciana) ¿Ahora que se trae esta chica?

Miro con desconfianza a su amiga.

Frank: Este… No sé qué decir…

Isabella: Por favor~ No nos notaras que estamos aquí, sinceramente nos sentimos muy cansadas después de tanto trabajo~ -Hizo un pequeño gesto de súplica con sus manos.

Frank al mirar a ambas, les algo de lastima, pero tampoco quería ser grosero, así que no le quedo de otra que aceptar la petición de la chica.

Frank: Ahh… Esta bien, supongo que a Eli no le importaría si comparto mesa.

Isabella: ¡Genial! ¡Muchísimas gracias!

Ambas se sentaron en el lado izquierdo.

Isabella: Eres un chico muy amable~

Luciana: Me disculpo… -Se sonrojo por la vergüenza.

Frank: No hay de que…

(Frank) Solo pido una cosa… Es tener una muerte rápida y sin dolor en caso de que Eli decida castigarme…

Frank se encontraba super preocupado de algo malo vaya pasar.

Isabella: Ahora que te lo pienso, mirándote mas de cerca, eres un chico muy guapo~

Luciana: A parte de guapo, es un hombre caballeroso, pensé que te negarías a dejarnos sentar aquí contigo.

(Frank) No se alejo mucho de lo que estuve pensando, pero igual viéndolas, son unas chicas muy hermosas, son tan hermosas que podría catalogarlas como diosas. Si Eli no se llega a enoja, este día será considerado el mejor de mi vida.

Isabella: Te noto demasiado joven ¿Cuántos años tienes pequeñín? –Pregunto de manera curiosa.

Frank: Unos 23 años, pero dentro de unos pocos días cumpliré 24.

Ambas bellezas se sorprendieron al escuchar mi edad, sus rostros mostraron que no lo podrían creer que me viera tan joven a pesar tener más de 20 años.

Isabella: ¡Imposible!, ¡Me cuesta creerlo que tengas esa edad! –Miro mucho más de cerca a Frank

Esta chica está muy cerca de mí, sus ojos son igual de hermosos que su rostro y también huele bastante bien, debe estar usando un perfume bastante lujoso.

Isabella: Al verte muy joven pensé que eras hijo de padres tiny, y que estabas a punto de cumplir los 19 años para ser una persona normal.

Frank: Yo… Se que es un pensamiento erróneo, pero también me trajo dolorosos recuerdos que tuve que pasar cuando me encogieron.

La chica con quien estaba platicando, ella me noto que estaba triste no pudo evitar en regañar a su compañera.

Luciana: No seas grosera con el chico Isabella, él está siendo muy amable con nosotras y tú le hace una pregunta que hizo que lo incomodara. Tampoco debes de olvidar que ambas venimos de padres tiny.

Isabella se sintió realmente mal al hacer una pregunta con muy poco tacto hacia el joven. Cerro lo ojos por un momento para reflexiona, paso unos segundos y los volvió abrir de nuevo, pero ahora con una mirada seria se dirigió hacia Frank.

Isabella: Tienes razón Luciana, sé que no he sido buena con mis palabras, pero… Pido disculpa por haber sido mal educada contigo joven

No pude notar si estaba arrepentida o no, pero por lo menos se tomó la molestia de disculparse conmigo.

Frank: Está bien, no pasa nada solamente recordé algo de mi pasado, pero ya después de todo eso quedo atrás (Le da una sonrisa)

-Vez Isabella, además de lindo también es muy amable y educado, así que no seas grosera con el de nuevo-

-Esta bien, esta bien, ya entendí así que deja de regañarme- Un poco molesta le contesto a su compañera.

Me la pasaba de maravilla con este par de bellezas, platicábamos o reíamos de vez en cuando, hasta que note que a lo lejos venia Elizabeth a toda velocidad hacia donde estábamos.

No se veía muy feliz que digamos mientras venia, sus ojos mostraban llamas de enojo.

Elizabeth llego a donde se encontraba Frank y ve con enojo a las chicas que se encontraban sentadas platicando con el.

-Frank… ¡Quiero una buena explicación! – En un tono amable se lo dijo.

Que cara… Por alguna razón me recorrió una fuerte escalofrió en todo mi cuerpo cuando me hablo Elizabeth. Por cierto ella es mi amiga en primer lugar, no es necesario que le de algún tipo de explicación sobre esta situación.

-Y bien Frank, estoy esperando- En un tono autoritario le hablo.

-Este… Yo…- Le tengo mucho miedo.

Luciana e Isabella miraran en silencio como iba la escena, hasta que Luciana decidió hablar para tranquilizarla.

-Cálmate, el no hizo nada malo solamente estábamos teniendo una pequeña charla y eso era todo-

Elizabeth parece que no se quería calmar, aún seguía sin comprender por qué estaba tan enojada conmigo.

«Quienes son estas chicas, y por qué son tan cercanos a mi Frank» Miro con cautela a Isabella y Luciana.

-¿Qué te parece si nos tranquilizamos por un momento y comemos los 4 juntos ¿Qué te parece?- Dijo Luciana.

Elizabeth ya había ordenado la comida para que comiera junto con Frank, así que no le quedo de otra que aceptar.

-Está bien- A regañadientes acepto la invitación de Luciana.

-Ya que todo se calmó, creo que iré a hacer nuestro pedido- Isabella se levanta y va hacia hacer fila para encargar su pedido.

Bueno, este día se esta poniendo un poco raro, ambas chicas se están mirando fijamente como si se estuvieran retando o algo así.

Me siento algo incomodo con todo este silencio, tratare de romper el hielo.

-Eli, que te parece si comemos primero nosotros-

Elizabeth soltó un suspiro y dejo a un lado su pelea de miradas con Luciana.

-Está bien- «Mas tarde te hare que me expliques con todo y detalles con estas chicas Frank»

Ella comenzó a desenvolver la hamburguesa, pero sin antes extender una servilleta que puso a un lado de mi para que comiera el trocito de hamburguesa que me daría a mí.

Cada bocado que le daba me gustaba -Ya estaba extrañando el sabor de estas hamburguesas, tenía un largo tiempo desde que las probé- Quedo todo manchado de cátsup.

-Hehe, pareces un niño por haberte ensuciado con la salsa de tomate- Se burlaba de Frank por verlo tan infantil.

-Que esperabas, no puedo comer del todo bien con estas porciones tan grandes- Le reproche.

«Tiene razón, además le cuesta comer un poco sin ensuciarse, quizás debería limpiarlo un poco»

-Veo… Que eres tan descuidado así que te voy a limpiar, así que debes estar agradecido conmigo, ¡hump!-

«Vaya que sorpresa, esta chica se puede notar que le gusta este chico, quizás debería jugar con estos dos un poco mientras espero a Isabella» Luciana tomo un pequeño trozo de servilleta y con cuidado comenzó a limpiar a Frank antes que Elizabeth.

-¿¡Oye que estás haciendo!?- Elizabeth al verla que estaba limpiando a Fran, ella no dudo en detenerla.

-Pues… Estoy tratando de limpiar a mi novio- De una manera coqueta le dijo.

-¿¡No…No… Novio!?-

Elizabeth se quedó muy sorprendida por lo que dijo Luciana, incluyo yo estoy igual de sorprendido, no me lo podía creer que sea el novio de esta diosa, es la primera vez en mi vida que me pasa este tipo de cosas.

De repente Elizabeth me tomo por la fuerza y me puso enfrente de ella.

-¡Por qué no me dijiste que tenías novia! ¡Maldito! ¡Tonto! ¡Enano! ¡Infiel! –

Estaba tan enojada que me comenzó a decirme todos los insultos del mundo y algunos que ni siquiera existe.

Por otro lado, Luciana se estaba partiendo de la risa al verme que me estaban regañando por su culpa, pensé que tenía suerte al estar al lado de unas bellezas, pero al parecer fue un grave error para mí.

-Jajaja, ya querida no lo regañes tan feo, solamente estaba bromeando contigo-

Elizabeth al escucharla no evito estar tan roja como un tomate, estaba tan avergonzada que tomo el peluche y se cubrió con el para que no le viéramos su rostro.

Yo aun seguía en la mesa a esperar que se calmara un poco.

-Creo que esta vez te excediste señorita-

La mire un poco molesto por lo que le hizo a Eli, pero en vez de arrepentirse de lo quiso ella me hablo de una manera muy picara.

-Vamos cariño tranquilízate, solo fue una pequeña broma inocente, no pensé que ella se pondría de esta manera-

-«No creo que sea tan inocente, bueno eso fue lo que pensé hasta que vi que su rostro, tenia una mirada de que no se arrepiente de nada»-

Estaba discutiendo un poco con ella, cuando en eso veo venir su amiga con su comida.

-Por fin pude ordenar algo- Se sienta al lado de Luciana.

-¿Y ustedes tres que les sucedió y por qué esta niña esta…?- Se queda pensado un poco y mira a Luciana que tenía un rostro lleno de inocencia.

No evito dar un suspiro –Otra vez haciendo de las tuyas verdad-

Al parecer no es la primera vez que esta chica hace este tipo de cosas, seguiré observando a ver que sucede.

-Este… ¿No sé qué estás hablando! – Finge que nada sucedió.

-Si no me dices, no te devolveré tu celular-

Tan solo esa pequeña advertencia fue lo suficiente para ponerla muy pálida.

-Está bien, tu ganas, solo estaba jugando un rato con ellos eso es todo-

-¿eso es verdad pequeño?- De a un lado a Luciana y dirige su mirada hacia mi.

«A pesar de que tiene un aspecto muy agradable, siendo una gran presión en su mirada he incluso da mucho miedo esta mujer» -Si…Si es verdad, no paso nada malo- Cuando tiene una mirada seria da aún más miedo.

Suspiro -Esta bien, hace un momento me regañaste por se mal educada con él y ahora eres tú la que lo está molestando a este joven y a su novia-

Elizabeth no es mi novia, pero no quería arruinar este ambiente por el momento.

-Está bien, no se preocupen solo fue una ligera broma entre tu amiga así que no paso nada malo-

Una vez todo resuelto ellas comenzaron a comer, Elizabeth se quitó el peliche con lo cual estaba ocultando su rostro y aún seguía un poquito roja por la vergüenza. Al verla así no dude en preguntarle.

-¿Estas bien Eli?-

Ella sin contestar solo asintió con su cabeza que estaba bien. Bueno tampoco era para tanto que digamos, aun sigo sin entender por qué se enojó bastante por decir que tenía novia.

Las mujeres mucho son más complicadas que un cubo de colores, y eso es decir poco.

Mientras comíamos a veces teníamos una pequeña charla entre nosotros, Elizabeth casi no hablaba, pero cuando lo hacía eran sus palabras algo densas o sin mucho interés.

Luciana: -¿Oye en que trabajas?- Miro con curiosidad a Frank.

-Soy el encargado de construir casa para los tinys-

Luciana: -Guaau- Sonó sorprendida -Mis padres viven en una de esas casas, no puedo visitarlos muy seguido debido a mi trabajo y también por mi tamaño- Sonó algo triste.

Isabella: -Ya tranquila Luciana, que te parece si los visitamos este fin de semana-

Luciana: -¿¡Enserio!?- En un instante cambio de ánimos.

Isabella: -Si enserio, pero prométeme que te portara bien-

Luciana: -Lo prometo-

«Ambas chicas son muy energéticas, incluso mas que…»

Isabella: -Cambiando de tema, creo que ya es hora de irnos- Miro su reloj y ya casi eran las 6 pm.

Luciana: ¡Oh! Tienes razón, no llegaremos a tiempo para alcanzar el tren- Limpio un poco la mesa en donde comía.

«Se ven bastante linda cuando se ven preocupada, quizás debería invitarla» -¡Haaaa!- Dio un pequeño grito.

Frank se dio la vuelta y nota que Elizabeth le dio un fuerte pellizco en su espalda -Elizabeth, ¿porque me pellizcaste?-

-Hump, no hay necesidad de decírtelo- Mira hacia otro lado molesta. «Como te atreves a ver a otras chicas grandísimo tonto»

Sus pellizcos realmente duelen, es como si varias abejas te picaran en un mismo lugar.

No les tomo mucho en limpiar la parte de la mesa donde comieron, pero antes de irse querían despedirse de nosotros dos primero.

Isabella: Fue muy agradable conocerlos chicos, en especial tu pequeñín- Le guiño el ojo a Frank.

-Igualmen… ¡Haaaa!- Recibe otro pellizco de Elizabeth.

-¡Deja de pellizcarme mujer!- Se toca su espalda.

-¡Hump!- Hace un puchero.

Elizabeth estaba muy enojada al parecer, cada vez que lo pensaba no podía entender porque estaba en ese estado de malhumorada.

-Creo que igualmente tenemos que irnos Elizabeth, ya se hará mas noche si nos quedamos mas tiempo afuera-

-Si…- Ella solo se limitó a decir una palabra para contestarle, sin decir nada limpio un poco la mesa después tomo su peluche y a Frank para irse ambos al distrito donde vive.

Durante todo el camino estuvo muy silencioso, cada vez que trataba de hacerle una pregunta ella me contestaba muy vagamente con un si o no o con un tal vez, es como si ya no le importara nada a esta chica, eso ya no me estaba gustado la manera que me respondiera de una manera tan fría conmigo.

Faltaba poco para llegar al distrito donde vivo, Eli aun seguida ignorándome ya cansado de su comportamiento infantil decidí hablarle en un tono más firme y directo.

-¡Elizabeth!- Grito para que la escuchara.

Elizabeth al escuchar el grito de Frank, ella se detuvo por un momento y se limitó a mirarlo.

-¡No sé por qué estas enojada conmigo! ¡Pero si hice algo que te molesto, te pido que me perdones no era mi intención lastimarte! –

-…- Volteo su mirada suavemente hacia Frank y dirige su mano hacia la cabeza el.

Con su dedo le da un leve golpecito en la cabeza.

-Tonto, bleee- Saco su lengua para burlarse de el.

-¡Oye!… haha… Hahaha- Por un momento estaba preocupado, pero creo que eso le mejoro mucho el humor.

Ambos nos comenzamos a reír, pensaba que se enojara por haberle gritado, pero al parecer se lo tomo con humor. Le pregunte por que estaba de mal humor en el restaurante, pero ella siempre me terminaba cambiando la pregunta sin nada más que decirme.

Paso unos 5 minutos hasta que por fin llegamos al distrito tiny.

-Bueno, al parecer ya llegamos Eli- Ya era algo de noche cuando llegamos, el sol ya está casi por desaparecer, y la única luz que nos acompañaba a nosotros dos era de los faros de la calle.

-Sip, pero fue bastante divertido haber pasado contigo Frank- Se notaba que estaba triste, ella en el fondo de su corazón no quería que este día se terminara.

Con una sonrisa forzada trato de ocultar que estaba triste, así que hizo lo mejor que pudo antes de despedirse de Frank.

-Igualmente yo me pase genial Eli, oye… Que te parece venir a mi fiesta de cumpleaños que será en unos cuantos días. Dime ¿Qué te parece? –

Elizabeth al escuchar que Frank que la estaba invitando a su cumpleaños, eso la hizo sentir mucho mas feliz, estaba tan alegre que dio una linda sonrisa enfrente de el.

Frank al verla sonreír no pudo pensar lo linda y bella que era Elizabeth, incluso hizo que su corazón latiera mucho mas rápido por el momento.

-«Soy yo oh Eli se ve muy linda cuando sonríe»- Sonrojado miro a Elizabeth.

Elizabeth al notar que Frank la miraba, ella al igual que el no pudo evitar igual sonrojarse. El corazón de ambos jóvenes latía demasiado rápido, sentían lo mismo cuando estaban en el acuario.

-«No puedo creerlo, él me está mirando demasiado, se ve demasiado lindo me estoy sintiendo muy rara, ¿acaso este será mi primer amor?»- Una lluvia de preguntas pasaron por mi cabeza, no puedo pensar en nada más que en él.

-«Tranquilo Frank no debes de olvidar que ella es una chica de secu…»- Pero sin darme cuenta de lo que estaba sucediendo, ocurrió algo que no me espere.

-«Eli me está besando, sus labios se me acercaron mientras estaba distraído, no creí que hiciera un movimiento como ese»- Que totalmente en blanco, no sabía qué hacer.

Elizabeth estuvo así por un minuto completo mientras cerraba sus ojos, paso el tiempo hasta que se alejó de mí, su rostro estaba demasiado rojo, sin decirme nada me bajo con al piso rápidamente y me coloco en la entrada para entrar al distrito.

Sin siquiera despedirse se fue corriendo a toda velocidad por las calles toda avergonzada hasta que ya no la pude ver.