Soy un ser inferior con la habilidad de seducir mujeres - 050
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CAPÍTULO 50- Traidora.
(Pov- Kei.)
Mmm… Analicemos la situación actual, ahora que Seiya está aquí. Debo actualizar la información para mantenerme al corriente y que nada ni nadie me tome de sorpresa.
Desde que derroté a la comandante Slime, ningún demonio ha aparecido, o al menos no se han visto. Tienen miedo de mí, por eso se toman su tiempo, pues dejarán de enviar demonios débiles y enviarán demonios mucho más poderosos, y para hacer eso, la Reina Demonio necesita acumular poder. Si estoy en lo correcto, me queda aproximadamente… tres o cuatro meses libres, tal vez menos si descubren más sobre mí sin que me diera cuenta.
Eso es respecto a los demonios. Lo siguiente es sobre Nisei… Ah, nada todavía. No aparece por ninguna parte. Las chicas insisten en que está muerta, pero mantengo la esperanza de que siga con vida. Solo le pedí investigar y escapar por si se encontraba en problemas. Al principio tenía planeado hacer la misión con ella, pero cuando fui a ese país, no la encontré. Busqué y busqué, pero no la encontré. ¿En serio fue descubierta tan rápido? Definitivamente hay algo en ese país. Me siento mal por ella, la envié a morir, pero realmente pensé que haría un excelente trabajo. Esa chica logró derrotarme, y hasta era capaz de derrotar a Drin. Esa chica era… No… Esa chica es fuerte. Me niego a creer que esté muerta.
Mio, Nem, Terkiana, Nerka, Mia, Treka, Eris y Drin… Vaya, vaya. Bueno, el orden de los más poderosos, según el estatus, son: Kei (yo), Drin, Treka, Mia, Terkiana, Mio, Eris, Nem y Nerka. Nerka tiene una excelente puntería, pero su fuerza física no se queda atrás. Podrá tener el peor estatus, pero es porque se enfoca en mejorar su fuerza física y puntería, en lugar de mejorar su poder mágico. Lo mismo va para Eris, que entrena solamente para mejorar su fuerza física. Nem y Mio pelean cuerpo a cuerpo, pero sus ataques usan magia que daña el interior de sus enemigos, por lo que entrenan para mejorar su poder mágico. Mia es experta en el tema del entrenamiento físico, ella entrena a las demás en esa área. Treka las entrena en el campo del sigilo y agilidad, pues es su especialidad.
Pero las que más han mostrado avances, son Drin y Terkiana. Por alguna razón, mi habilidad [Puntos dobles] logró eliminar el límite alcanzado por Terkiana hace cientos de años, y ha vuelto a ser capaz de mejorar.
Los Elfos tienen un crecimiento muy, pero muy lento, pero cuando alcanzan cierta cantidad de poder, ese desarrollo lento se vuelve muchísimo más lento, hasta pareciera que son incapaces de volverse más poderosos, y eso es conocido como «límite».
Los Elfos se rinden cuando llegan a ese límite, pues no valdría la pena entrenar tanto solo para aumentar su poder tan solo un 0.1%, y lograrían eso entrenando semanas sin descanso alguno. Pero Terkiana ha aumentado su poder un 48% desde que entrena conmigo, es decir, mi habilidad [Puntos dobles] no se ve afectado por ese límite, y le da puntos a Terkiana como si no fuera un Elfo con desarrollo lento, y lo mismo va para Grisia y Nerka, que aumentan en poder como si no tuvieran desarrollo lento.
Tenemos la teoría de que los puntos que yo consigo, mi habilidad los vuelve puntos especiales, capaces de volver poderosos a cualquier ser. Fufu. ¡Ya sabía que mi habilidad única no era una versión de la misma habilidad de las héroes!
Grisia no está todavía en nuestro equipo, no oficialmente. Esperaré hasta que cumpla 15 años. Es demasiado joven todavía, le falta experiencia. No quiero ponerla en peligro.
En resumen, todo está avanzando relativamente bien. Cris, la chica Slime, sí trabajaba para los demonios, Luna me lo confirmó, pues Fravi les advirtió sobre ella. Tengo entendido que ella logró escapar de las héroes, así que debo tener cuidado.
¿Por qué Fravi me ayudó? No lo sé, pero posiblemente tiene sus razones.
Mei… Bueno, con ella sigue igual en cuanto a su personalidad, al menos la personalidad que tiene conmigo. Se comporta de manera grosera con las demás personas, pero al menos no mata inocentes. Poco a poco se convierte en nuestra madre, incluso su cuerpo y rostro se está comenzando a parecer al de nuestra madre, es por eso que me enfoco mucho en su educación y personalidad, para evitar que se vuelva una Sei Molfer 2. No quiero que mis futuros sobrinos sufran lo mismo que nosotros sufrimos. Cuando ellos nazcan, posiblemente este mundo viva en paz con los demonios… o sin ellos. Como sea.
Mis padres y abuela son iguales, no han cambiado.
Mis hermanos mayores… ni puta idea. Hace mucho tiempo que no los veo, pero tampoco es que me importen. Su existencia tiene 0 importancia en mi vida. Creo que sigo resentido porque ellos trataron mal a Mei cuando éramos pequeños.
Y bien, el asunto con Seiya… No tiene importancia alguna en mi vida. Lo único interesante que puedo conseguir de él… ella, son sus contactos, pero eso es todo. Ella podrá identificarse como mujer, pero es hombre, así que no me sirve para tenerla como compañera, no tiene lo necesario para volverse fuerte.
Tal vez mi habilidad también sea capaz de volver fuerte a un hombre, pero tomaría muchísimo tiempo, y tal vez no valga la pena. Prefiero irme por lo seguro y entrenar a personas que sé que son fuertes, y que pueden volverse incluso más poderosas.
Y, por último, las héroes… Nada interesante. Luna a veces viene a visitarme, una vez por semana, pero solamente entrenamos y recordamos nuestro mundo. Es agradable estar con ella, pero sigo sintiendo miedo de que me traicione.
Las demás no me hablan ni se interesan en mí.
En resumen, todo va relativamente bien con mi vida… excepto por una cosa.
—Hmmmmh. Delicioso.
—Tu sudor sabe exquisito, amor mío.
—¡D-dejen de lamerme!
¡Mis prometidas son unas futuras ninfómanas!
E-estaba tranquilamente entrando al baño para orinar, pero Freiya me estaba esperando dentro.
Cuando intenté preguntarle el por qué estaba en el baño de hombres, ¡Neil apareció detrás de mí y me atrapó con sus tentáculos!
Y-y en este momento, bastante ilegal por cierto, ¡ellas me quitaron el uniforme escolar y me están lamiendo el cuerpo!
—¡No, dejen de lamerme…! ¡Kya! ¡No me toquen ahí!
—Tú no quieres tener sexo con nosotras, así que al menos déjanos lamerte y tocarte, amor.
—Es tu culpa por ser demasiado lindo.
—¡Tienen 11 años, idiotas! ¡Cuando tenga tiempo, iré a romperles el culo a sus madres por corromper sus mentes inocentes con ideas estúpidas!
—Fufu. Mejor rompenos el culo a nosotras, guapo.- Dijeron las dos.
¡Ahhhhhhhh! ¡¡Maldito mundo raro!!
—Cof, cof. Vaya, vaya, vaya.
E-esa voz… ¡Oh, mi héroe!
—¿Qué creen que le hacen a Kei, idiotas?
—Fufu. ¿Celosa, Grisia? Suficiente tengo con compartir a Kei con Neil, no planeo compartirlo con alguien más. Si quieres te dejo darle una lamida a su pezón, pero eso es todo.
—¡¿En serio?!
—¡Grisia!- Grité, enojado, ¡porque Grisia estaba a punto de unirse a ellas en lugar de ayudarme! ¡Ya estaba salivando!
—Ejem. D-digo… ¡Ustedes no son estudiantes de esta escuela todavía, váyanse ahora mismo o las denunciaré por acoso sexual e intento de violación!
—¡Kei será nuestro futuro esposo, no es violación!
—¡Pero todavía no están casados! ¡Váyanse o sufran las consecuencias!- Dijo, levantando sus puños, asustando a mis prometidas.
Fufu. La fama de Grisia es casi como el de un Molfer, por eso ellas tienen miedo.
—C-chicas, ¿en serio no pueden esperar hasta que cumplan 15 años? ¡No quiero perder mi virginidad todavía!
—Ah, es lo único malo que tienes, cariño, eres demasiado tímido.- Dijo Freiya.
—Pero ese lado tuyo a mí sí me gusta. Te hace ver más lindo.- Dijo Neil.
Neil me liberó. Ah, uffffff, gracias… ¡¿Eh?! ¡Me dieron una nalgada!
—Nos vemos mañana en nuestra cita semanal, amor.
—Te amo.
Me besaron en las mejillas y salieron del baño, no sin antes intercambiar miradas de odio con Grisia.
—No intentes robarnos a Kei.
—O tu familia sufrirá las consecuencias.
—Sí, sí, bla, bla, bla. Adiós, perras ninfómanas.
—Fufu. Es gracioso que la hija de una ninfómana nos llame así. Adiós.
Ellas salieron del baño y suspiré de alivio. ¡Ahhhhhhhh! ¡Nooooooo! ¡¿Por qué unas inocentes niñas se volvieron unas pervertidas?! ¡Definitivamente les partiré la cara a sus madres!
—¿Estás bien, Kei?
—S-sí, gracias.
—¿Por qué no las golpeaste? Podías liberarte de esos tentáculos sin problema alguno.
—Ah, prefiero evitar lastimarlas. No quiero tener problemas con sus familias en este momento de paz.
—Sí, puedo comprender tu situación. ¿Me toca entrenamiento hoy?
—Mia estará ocupada hoy con mi madre, así que Treka es la única que está disponible hoy.
—Por mí está bien. ¿Nos vamos juntos?
—Nos vemos más tarde. Tengo que acompañar a Seiya. Iremos a la Capital para que la conozca y todo eso. Cuídate.
—Sí, por supuesto. Fufu. Protege tu trasero.
—¡Por supuesto que sí! ¡Nos vemos!
Salí corriendo del baño.
¡Mi trasero siempre estará a salvo!
Ah… Seiya, espero que me seas de utilidad.
•
•
El Dios supremo vigila demasiado a Kei, pero no es el único humano que vigila. Y, de hecho, hay un humano que ha convivido más con el Dios supremo que Kei, e incluso el Dios supremo lo entrenó personalmente.
¿Quién tuvo la fortuna de ser entrenado por el mismo Dios supremo?
—¡¿Eso es todo, inútil?!
Drei estaba siendo golpeado por Iskei y sus amigos en el suelo, sin piedad alguna, pero Drei no se queja ni nada por el estilo, como si esos golpes no te estuvieran afectando en lo absoluto. Saria simplemente estaba observando sin decir nada, asustada. ¿Por qué no intenta defender a Drei? Ella sí quiere hacerlo, pero no quiere molestar a Iskei, el chico al que ama.
Drei se dio cuenta de eso al verla a los ojos y cerró los ojos, para terminar de aceptar que él nunca será más importante que Iskei para ella, a pesar de ser amigos de la infancia.
¿Por qué están golpeando a Drei?
—¡¿Seguirás defendiendo a esa rara?!
Porque él evitó que ellos siguieran insultando a cierta chica importante para él, y no es Saria, es otra chica, que ocupó el lugar que Saria ocupaba en el pasado en el corazón de Drei.
Drei los escuchó hablando mal de esa chica y les pidió que dejaran de hablar de ella o se iban a arrepentir. Ellos se rieron de él y lo comenzaron a golpear.
Drei recibía los golpes sin problemas… Es más, ni siquiera tenía el cuerpo lastimado. Es como si los ataques físicos no tuvieran efecto en él. ¿Los golpes eran débiles? No, el cuerpo de Drei era el que es resistente.
—Última advertencia.- Dijo Drei, aburrido de la situación.
Ellos siguieron golpeándolo, ignorando por completo la advertencia de Drei, pues era bien sabido que él no tenía poder mágico y que solo fue aceptado en la academia porque sus padres convencieron al director.
En esa academia sí aceptan personas sin talento mágico, pues principalmente los educan para ser guerreros, pero Drei no fue aceptado en la academia al principio porque se peleó con un maestro cuando iba a realizar el examen de admisión. ¿Por qué? Porque el maestro tenía una personalidad grosera y arrogante, y cuando Drei chocó con él por accidente al entrar al salón de clases, el maestro lo insulto y Drei le devolvió el insulto, una cosa llevó a otra y terminaron peleando a golpes en frente de todos.
Por eso Drei no es respetado por nadie. No le tienen miedo a sus advertencias, porque no tiene poder mágico y creen que es un insecto que solo fue aceptado por lástima, y ser uno de los peores estudiantes de su clase no le ayuda demasiado.
Pero eso cambió desde que «él» apareció en su vida.
Drei sonrió y abrió los ojos.
—Se los advertí.
Repentinamente, sus ojos se pusieron grises y todo a su alrededor comenzó a moverse lentamente, como si estuviera en cámara lenta.
El puño de Iskei estaba a centímetros de su rostro y sin ninguna dificultad movió su cabeza hacia la derecha, esquivando el golpe y provocando que el puño de Iskei impacte en el suelo.
Sin esperar ni un segundo, Drei golpeó a Iskei en la cara con un puñetazo tan potente, que lo sacó volando e Iskei impactó contra la pared.
Drei pateó las piernas de los otros dos estudiantes y ellos estaban a punto de caer al suelo, pero antes de que eso pase, Drei se levantó rápidamente del suelo y usando sus puños, los golpeó fuertemente en la cara y sus cabezas impactaron en el suelo, dejándolos inconscientes casi inmediatamente.
En menos de 3 segundos, Drei los derrotó con tanta facilidad, que Saria no podía creer lo que acaba de presenciar.
Su querido Iskei estaba en el suelo, con sus labios rotos y su nariz sangrando, quejándose de dolor y sin ser capaz de ponerse de pie.
Su querido Iskei fue derrotado por Drei, algo que Saria nunca se imaginó ver en su vida.
—¿Eh? ¿Q-qué?
—Es lo malo de los que creen que su poder mágico es lo más importante, descuidan el entrenamiento físico.
Sus ojos volvieron a su color original y todo volvió a la normalidad.
Iskei, al igual que sus amigos, se desmayó por culpa del dolor.
—¡¿Iskei?!
Saria se acercó a ayudarlo y Drei suspiró decepcionado, pues incluso en esta situación en donde él estaba siendo golpeado, Saria se preocupó más por Iskei que por él.
—Saria, siempre te había considerado una amiga, pero no intentaste ayudarme… Iskei me estaba golpeando, pero te preocupaste por él y no por mí… No me vuelvas a hablar.
—¿Q-qué? ¿Qué estás diciendo?
—Adiós.
Se alejó caminando y sonrió, dejando atrás a Saria, que no dice nada ni va tras él, porque no sabe cómo reaccionar en esta situación… O más bien, el miedo no la deja moverse.
Miedo del nuevo Drei.
—Bueno, la vida sigue… Me pregunto si Cristhela me ayudará con mi entrenamiento hoy.
Cristhela, la nueva chica que ocupa un lugar en el corazón de Drei.
Y mientras Drei disfrutaba la sensación de victoria, en Godfer, el Dios supremo estaba observando a Drei, bastante satisfecho con el resultado.
—Ya sabe controlar a la perfección los ojos celestiales. No le tomó demasiado tiempo… Fue buena idea dárselo en persona.
Drei, el humano que fue entrenado personalmente por el Dios supremo, y el humano más envidiado por los Dioses… incluyendo a Fravi.
•
•
¿Cómo fue capaz Drei de conseguir ser entrenado por el Dios supremo? ¿Acaso estaba a punto de morir de manera épica salvando a una persona y el Dios supremo sintió admiración por él? Nah. ¿Acaso es un guerrero del destino que salvará el mundo del Rey Demonio? Nah. ¿Acaso Drei hizo algo importante al menos? Nah.
Entonces, ¿por qué el Dios supremo lo entrenó? La respuesta es simple: entretenimiento. Kei está pasando por un momento de paz, así que el Dios supremo quería entretenerse con algo, además, ese «algo» le podría ser útil en el futuro.
Todo comenzó tiempo atrás.
Drei estaba haciendo flexiones en su habitación tranquilamente.
Por cierto, aunque es un mundo mágico, está muy avanzado. No parece medieval. Parece moderno. ¿La razón? La tecnología mágica, es decir, el reemplazo de la electricidad. En ese mundo se logró usar la magia como electricidad, logrando muchísimos avances tecnológicos, lo que le permitió a ese mundo dejar de ser medieval a pesar de ser un mundo mágico, pero no está tan avanzado como el mundo original de Kei.
Todo estaba tranquilo, hasta que…
—405. 406…
—407. 408.
—409. 410… ¿Eh?
El Dios supremo estaba sentado en su espalda y Drei cayó al suelo por la sorpresa.
El miedo estaba más que justificado. El Dios supremo apareció de repente en su espalda, sin aviso previo.
Además, su apariencia no le ayudaba a disminuir el miedo de Drei.
—¡¿Quién eres?!
—Mucho gusto, Drei. Soy el Dios supremo.
—¿Q-qué?
—Si no me crees, puedo demostrarlo. Cuando tenías 8 años, lloraste porque se murió tu gato, pero no querías que nadie te viera, es por eso que lloraste en tu habitación por horas en la noche.
—¿Eh? ¡¿Cómo lo sabes?!
—Soy el Dios supremo, lo sé todo. ¿Quieres que revele más secretos? Tienes una fotografía de Saria usando traje de baño y la usas para mastur…
—¡Uwaaaah! ¡Alto, alto, alto! N-no es necesario. Te creo. T-tengo bien oculta esa fotografía, así que… ¿En serio eres un Dios? Si es así, ¿en qué número estoy pensando?
—En ninguno. Estás imaginando la fotografía de Saria, y ahora estás imaginando a un número 7 bailando.
Drei intentó cambiar lo que estaba imaginando para ponerlo a prueba y así poder confirmar por completo lo que él le está diciendo.
—¡¿Eh?! ¡Es cierto! ¡Definitivamente ahora sí te creo!
En ese mundo, nadie es capaz de leer la mente, no existe magia ni habilidad capaz de hacerlo, por eso Drei le cree.
—Perfecto. Ahora escúchame. ¿Quieres superar a Iskei? Yo puedo darte el poder que necesitas.
—¡¿En serio?!
—Sí. Te daré un poder llamado: «Ojos celestiales». Te permitirán ver los ataques en cámara lenta… Es todo. Parece demasiado simple, pero es muy útil. Aparte, te convertiré en un humano especial. Tu fuerza incrementará, pero tu cuerpo no cambiará mucho. Un cuerpo muy musculoso podría ser molesto. Tu cuerpo ya no tendrá límite, es decir, siempre podrás seguir mejorando.
—G-genial… Pero… ¿Por qué haces esto por mí?
—Eres alguien bueno y me agradas… Aparte, me dolió saber que Saria nunca te amará.
—Eso hasta yo lo sé.
—Consigue otro amor.
—Sí… Ya estaba renunciando a ella.
—Y hay otra razón por la que te estoy entrenando, pero lo sabrás en el futuro. ¿De acuerdo?
—Sí, estoy de acuerdo, Dios supremo.
—Te entrenaré por un mes. No muchos tienen ese privilegio. Bosque.
Desaparecieron de la habitación y aparecieron en un enorme bosque, poniendo muchísimo más emocionado y asustado a Drei.
—¡¿Magia de teletransportación?! ¡Es una magia legendaria! ¡Hace miles de años que nadie ha podido utilizarla!
—Soy un Dios. Puedo hacer cualquier cosa. Ahora escucha con atención. Tu apariencia física mejorará un poco. En otras palabras, serás guapo.
—¿Eh? ¿Guapo?
—Esto lo hago para vengarme de esa chica llamada Saria. No entiendo a los humanos. ¿Por qué se enamoró de alguien como Iskei? Los humanos son raros… Bueno, como sea. Te haré guapo para que Saria se enamore de ti y quiero que la rechaces. Y si no se enamora de ti, al menos te ayudará a conseguir novia.
—… ¿Realmente debo rechazarla?
—Ella no te merece. Si quieres poder, harás lo que yo te diga.
Drei bajó la mirada, pues él la sigue amando, pero sabe perfectamente que una relación con ella nunca funcionará.
—Sí… Supongo que es necesario.
—Otras condiciones. No te relaciones con nadie. No tengas amigos en esa escuela. Solo tendrás una amiga.
—¿Solo una? ¿Quién? ¿Saria?
—Se llama Cristhela. Ella asistirá a tu escuela el próximo año escolar. Es la primera hija de la familia Real «Dragón».
—La familia Real «Dragón»… Son conocidos por ser personas que atraen la mala suerte… O eso dicen los rumores.
—Ese rumor es falso, no te preocupes… Lamentablemente, ese rumor ha provocado que ella no tenga amigos. Siempre está sola… Ella tiene un enorme potencial. Conviértete en su amigo… Incluso tal vez te enamores de ella.
—Ser su amigo, ¿eh? Está bien, haré lo que digas… Acepto, maestro.
—Creo que necesitamos entrenar más. Las clases terminan en dos meses. Pídele permiso a tus padres para entrenar conmigo durante las vacaciones. Oculta el hecho de que soy un Dios, por favor.
—Lo haré, maestro.
Y así inició una nueva etapa en la vida de Drei, siendo entrenado personalmente por el Dios supremo y ganándose la envidia de los Dioses.
El tiempo pasó y Drei regresó a la escuela.
—Ya extrañaba la escuela.- Dijo, sonriendo.
Mientras caminaba, las chicas no dejaban de observarlo.
Drei creció 7 centímetros y su rostro se volvió más atractivo.
Llamó demasiado la atención de las chicas de su escuela… Pero él solo estaba interesado en una.
—Me pregunto cómo será.
Cristhela, su futura amiga, y posiblemente también novia.
Las primeras clases terminaron y Drei se dirigió al comedor.
Varias chicas lo invitaron a comer, pero él las rechazó. El Dios supremo le dijo que no debía tener amigos, y eso hizo. Muchas personas, incluyendo a Saria, intentaron hablar con él, pero él los ignoró y no habló con nadie, para respetar las órdenes de su maestro.
—No tener amigos es más difícil de lo que pensé.
Compró un almuerzo y se dirigió a las mesas.
Todas estaban llenas… Excepto una.
En una mesa, estaba una chica comiendo sola.
Su cabello era blanco y corto, sus ojos eran azules y era algo linda, no era exageradamente hermosa, pero tampoco era fea, era linda, por encima del promedio al menos. Y era un poco plana… Bueno, demasiado plana. En ese mundo es considerada fea, pero a Drei eso no le interesa en lo absoluto.
Su expresión era fría. Parecía alguien sin sentimientos… Pero, para Drei, ella parecía una chica triste.
—Cristhela.- Pensó.
Se acercó a ella.
—Debes ser amable y educado. El maestro te dijo que debías ser bueno, Drei… Un chico bueno.- Pensó.
Se paró frente a su mesa.
—Disculpa, ¿puedo sentarme aquí?
—¿Eh? ¿Quieres sentarte aquí?- Dijo Cristhela, confundida, pues era la primera persona que le hablaba en la escuela, pues todos la ignoraban.
—¿No puedo?
—Tú… No me conoces, ¿verdad?
—Sí, te conozco, pero no soy un idiota. No creo en esos rumores. ¿Puedo acompañarte?
—C-claro.
Se sentó en su mesa y le sonrió.
—Gracias.
Y así, la amistad entre Cristhela y Drei nació, llenando de odio y resentimiento a Saria, y eso último hizo sentir satisfacción al Dios supremo.
•
•
—Que buenos dibujos.- Dijo Terkiana.
—Eres talentosa, nya.
—Hasta puedo imaginarlo.- Dijo Treka.
—Ouch. Nunca he tenido sexo con Kei usando ese agujero. ¿Se sentirá bien? ¡Kei, usa mi agujero esta noche!- Dijo Nerka.
Las chicas estaban viendo los dibujos que Drin hizo, para enseñarles quién es Seiya, la nueva preocupación de Kei.
El libro prohibido lo escondió porque sabe que Kei se la quitaría, por eso Drin hizo un nuevo libro, para que Kei piense que lo eliminó y no sospeche que esconde otro.
Y ese libro lo usa para mostrarles los dibujos que ella hizo a las demás.
Kei visitó la base secreta para saber lo que harán con Seiya. Reflexionó y llegó a la conclusión que no puede tomar las decisiones solo. Son un equipo, y las decisiones se toman en equipo.
Por supuesto, estaban reunidos en la mesa… Pero nadie le estaba prestando atención a Kei.
—¡O-oigan! ¡Esto es incómodo! ¡Solo tengo 10 minutos libres! ¿Qué haremos con Seiya?
—Es tu decisión, nya.
—Su poder social y económico serían de gran ayuda.- Dijo Terkiana.
—No necesitamos más dinero. Con lo que ganamos en el gremio es suficiente.
—¿Y su influencia? Tal vez podamos usarla para protegerte en el futuro.- Dijo Nerka.
—Podemos tener otra base en su país.- Dijo Mio.
—Pero el problema principal es que es hombre.
—No le veo el problema a eso.- Dijeron todas.
—¡Mi trasero se mantendrá intacto! Por cierto, ¿en dónde está Nem?
—Está cocinando.- Dijo Mio.
—Quiero discutir el entrenamiento. En estos momentos, Nerka, Grisia, Nem y Eris son las más débiles de nuestro grupo. He decidido aumentar la dificultad de nuestros entrenamientos. He preparado medicinas, comida y bebidas. Entrenaremos durante 4 días en la mazmorra «Destino». Ellas pelearán y nosotros nos encargaremos de ayudarlas cuando estén en peligro. ¿Están de acuerdo?
—Suena bien.- Dijo Mio.
—Perfecto…
Kei sintió un escalofrío, que llenó de miedo su corazón.
—Este presentimiento…
Se levantó de la mesa.
—Algo malo pasará… Lo presiento.
Y su miedo estará más que justificado en el futuro.
•
•
En la aldea de Enanos, Zero se reunió con cierta persona.
Una persona muy importante.
Una persona que se suponía que era muy buena.
Ella era amable y se preocupaba por las personas.
¿Fingía ser buena? No… Ella sí era amable… Tal vez su corazón fue corrompido… ¿O no?
—¿Y bien? ¿Hiciste lo que te pedí?
—Sí. La información falsa ya fue repartida. En 3 meses podemos comenzar.
—Perfecto… ¿Y la héroe Sepgrar? ¿Qué pasó con ella?
—Logré matarla sin problemas.
—Excelente trabajo, Frima.
—Me retiro. Tengo trabajo.
Frima, la héroe, desapareció y Zero sonrió.
—Los humanos son tan estúpidos.
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