Soy un zombie especial.- ¡Un apocalipsis de fantasía! - 012
- Inicio
- Soy un zombie especial.- ¡Un apocalipsis de fantasía!
- 012 - El dolor de perder a tu familia. (1)
CAPÍTULO 12- El dolor de perder a tu familia. Parte 1.
(Pov- Zei.)
Miro a Mary llorar mientras abraza el cuerpo sin vida de su hijo.
… ¿Cómo debo reaccionar ahora? Mi mente está en caos. Mi madre oficialmente está muerta, mis amigos posiblemente estén muertos, y ahora el hijo de Mary está muerto.
Zombies, Orcos, Duendes violadores, Elfas planas. ¿Qué mierda le pasó al mundo en tan solo un día?
Toda mi vida se fue a la verga… No sé qué hacer ahora. ¿Qué puedo decirle a Mary? ¿Cómo puedo tratar de ayudarla si ni siquiera sé cómo sentirme mejor yo mismo?
Verla abrazando el cadáver de su propio hijo, me rompe el corazón. Si tan solo fuera más poderoso. Si no fuera por la Elfa plana, ya estaría muerto, muerto. Ni siquiera con el poder del guión pude derrotar a ese Orco.
… No soy un héroe, de eso no tengo la menor duda. No quiero que otros dependan de mí para estar a salvo, no quiero soportar esa carga. Cuando deje a Mary en el refugio, Kiasan y yo viviremos el resto de nuestras vidas en soledad, viajando por el mundo o algo así. Quiero descubrir la verdad detrás de todo esto, pero… Ah, mi mente realmente es un caos en este momento, no puedo pensar con claridad.
—Lo siento, no llegamos a tiempo.- Dijo… ¿un hada?
Un Hada está flotando a mi lado, y está con otras criaturas de fantasía.
Otra chica gigante y tres niñas cíclopes. Trillizas, ¿eh? Que… lindo… Ay, son las hijas de la Cíclope zombie. Me siento mal por ellas, pero yo no tuve la culpa. Ella era un zombie, ya no había nada que pudiera hacer.
Con el hijo de Mary me siento una mierda porque podía evitar su muerte, pero me niego a sentirme culpable por la muerte de la mujer Cíclope, yo no tengo la culpa de nada.
—Ustedes no sabían que nosotros estábamos en peligro, ustedes no tienen la culpa de nada, así que no debes disculparte.
Kiasan me sacude la pierna. ¿Eh? ¿Quieres ir con Mary? Lo siento, todavía no me siento listo para hablar con ella, dame un minuto más.
—Está… sola.
… Sí… Ella necesita compañía en este momento difícil. Somos unos desconocidos para ella, pero al menos estar a su lado le hará sentir… algo. No sé qué, pero al menos no se sentirá sola.
Asentí y volteé a ver a la niña hada.
—La Elfa plana y tus compañeras se quedaron atrás… Y perdón.
—¿Perdón? Ese tono sonó como de culpa. ¿Qué les hiciste?
Se acercó demasiado a mí, intentando intimidarme con la mirada. Oye, eres un hada adorable, no eres para nada intimidante. Mejor aléjate, solo atraigo la mala suerte.
—Esa es la cuestión, no hice nada, no soy el culpable de nada, pero esa Elfa plana no entiende. Lo siento, no tengo tiempo, mejor habla con ella.
Me agaché y miré a las niñas Cíclopes a los ojos. Son tan lindas, pero al mismo tiempo, son tan escalofriantes. Ojos gigantes del tamaño de mi puño. Grotesco, pero sería grosero de mi parte mostrar repudio. ¡No seas racista, Zei!
—¿P-pasa algo, señor?- Dijeron al mismo tiempo.
Que lindo… Ah, se quedaron sin madre, en un mundo condenado a la extinción. Al menos yo tuve a mi madre hasta mi adolescencia, pero ustedes siguen siendo niñas pequeñas, todavía la necesitaban. Misma situación, diferentes destinos.
—Hola.
—H-hola.
Están muy bien coordinadas. ¿Lo hacen a propósito o están realmente vinculadas? Y tiemblan mucho. ¿Tan tímidas son? Que lindo.
¡No, Zei, no! No es momento de ponerse a pensar en otras cosas.
… ¿Qué puedo decirles? Quiero decirles algo lindo, un consejo de vida o algo así. Quiero ayudarlas en algo.
—Oye, enfermo.
¡Uwaaaah! ¡¿La niña hada es tan fuerte?! ¡De una simple patada me lanzó volando! ¡Ay, ay, mi cuerpo me duele! ¡¿Por qué hiciste eso?!
Ay, el suelo, mi viejo amigo, estamos besándonos otra vez. Puaj… Bueno, no tan puaj. La tierra sabe… bien. Tiene un sabor salado. ¡Ahhhhhhhhh! ¡Deja de perder el tiempo!
—¡¿Por qué la patada?!
—Por pedófilo.
Ay, creo que me quedé mucho tiempo pensando mientras las veía directamente. Con razón estaban temblando tanto, no era por timidez, sino por miedo. Nota menta: las hadas son más fuertes de lo que parecen. No juzgar por la apariencia, entendido… ¿Eh?
¡¿Raíces?! ¡Uwaaaah! ¡¿Qué es esto?!
—¡Z-Zei!
—¡Aléjate, Kiasan, es un árbol con vida violador!
¡Siento raíces recorriendo mi trasero y entrepierna! ¡Espero que seas hembra, árbol viviente!
—¡Al menos dime algo lindo primero, soy un chico fácil, árbol! ¡No hay necesidad de violarme!
… ¿Funcionó? ¡Se detuvo…! Ay, no puedo moverme. ¡Se detuvo porque me inmovilizó, las raíces rodean todo mi cuerpo! Solo dejaron libre mi cabeza.
—Interesante.
La chica hada flota frente a mí y me abre la boca a la fuerza. ¡Ay, ay, mi mandíbula! ¡I-idiota, ten cuidado! ¡Si te cortas con mis dientes, valiste madres!
—Dientes blancos y… Snif, snif. Sin olor, absolutamente sin ningún olor. Una lengua saludable y larga.
Jeje. Lo sé, lo sé, a mis ex novias les encantaba mi lengua, si sabes a lo que me refiero. Guiño, guiño.
—No eres humano, ¿verdad? Pero tampoco siento que seas un No-Muerto. ¿Cómo se llama tu raza? ¿De qué te alimentas? Es muy raro que tu boca no tenga ningún olor.
Por fin dejó mi boca en paz. Ay, me duele la mandíbula.
—D-debemos… irnos. D-déjalo… en paz… por favor.- Dijo Kiasan, jalando el pie de la hada.
—Después es tu turno.
¡El árbol generó más raíces!
—¡Corre, Kiasan!
—¡Detente!- Gritó… ¡la chica gigante!
¡Oh, nuestra héroe! ¡Llegaste a tiempo!
Las raíces se detuvieron antes de atrapar a Kiasan. ¡Gracias, no quería que Kiasan fuera profanada también! Estas raíces rodearon todo mi cuerpo por debajo de mi ropa, todo, todo, todo, incluso entre mis nalgas. Ay, me siento sucio. Al menos no se metieron por el siempre sucio, todavía no me invita una tacita de café.
—¿Qué? ¿Lo estás protegiendo? Es un pedófilo asqueroso.
—¡Son mentiras, a mí me encantan las mujeres muy maduras! Entre más experiencia, mejor. Nunca le pondría un dedo encima a una chica menor que yo.
—Dice la verdad.- Dijo la gigante.
—Bueno, si tu habilidad te lo dice, supongo que lo juzgué mal.
—Mi habilidad lo confirmó, pero también lo hizo su forma de mirarme. Mis ojos están arriba.
Ay, lo siento, lo siento. ¡Es que son gigantes! Uno de sus pechos debe pesar dos o tres veces más que yo. ¿Cómo serán sus areolas?
—Puedes liberarlo.
—Si tú lo dices.
Chasqueó los dedos e inmediatamente las raíces se volvieron polvo. Ay, otra vez estoy besando el suelo. No te pusiste celoso porque me manoseó ese árbol, ¿verdad? Ya sabes que nuestra relación es abierta, bebé… ¿Mmm? Siento miradas en mi espalda. Oh, pequeños pies frente a mí.
Me di la vuelta y miré a las niñas Cíclopes arriba de mí.
Puaj.
Rápidamente me levanté del suelo. No me dio asco sus ojos, sino que están usando vestidos ligeros. ¡No se paren arriba de un hombre! ¡Tienen suerte de que no sea un enfermo que disfruta viendo la ropa interior de niñas pequeñas! ¡Kiasan, te conseguiré pantalones!
—¿Querías decirles algo?- Dijo la mujer gigante.
Ay, no me hagas sentir mal. ¡Yo no les pediré disculpas, yo no maté a su madre! Pero sí, les diré unas palabras lindas y conmovedoras. No soy bueno en esto, pero improvisaré un poco.
Ejem.
Me agaché para mirarlas frente a frente.
—La vida a veces puede ser difícil, pero debemos seguir adelante. Yo perdí a mi madre, se convirtió en un zombie, eso significa que ya nunca podrá regresar a la vida, pero ella me enseñó a dejar atrás el pasado y seguir adelante. Ella no quisiera verme triste y deprimido todo el tiempo, al contrario, ella siempre creyó que la vida era para disfrutarla y divertirse. Debo seguir adelante con mi vida. La mejor manera de honrar su memoria, es vivir la vida que me dio y disfrutarla. No voy a desperdiciar la vida que me dio… Por favor, sigan adelante y no dejen que sus vidas estén encadenadas a su pasado. Vivan sus vidas y no las desperdicien.
Les acaricié la cabeza a cada una.
—Tienen una larga vida por delante… Y perdón.
—Pffff. ¿De dónde salió este intento de poeta?- Dijo la hada.
¡O-oye, no se me ocurrió nada mejor!
—¿Por qué te pusiste tan cursi de repente, niño?
¿Niño? ¡¿Será un hada de más de 1,000 años de edad?! Puaj, me dio asco de tan solo pensarlo. Mejor no pregunto nada.
Ay, el ambiente se puso tenso, y solo se escucha el sollozo de Mary.
El hada intercambió miradas con la gigante, y con solo ver unos gestos de ella, creo que la hada comprendió el por qué les dije todo eso a las niñas.
—¿Inocente?- Dijo la hada.
—Sí.- Dijo la gigante.
—Ya veo.
M-mejor me voy, Mary necesita compañía.
Me levanté y miré a la otra mujer gigante a los ojos.
¿Será hermana de la otra gigante? Sus pechos son pequeños, considerando su tamaño. Hay variedad en su grupo, ¿eh? Una tomboy, una loli legal, una chica enojona, bla, bla, bla.
Me pregunto quién será el protagonista que le tocará ese harem. ¡Ojalá fuera yo! Ay, Manuela, serás mi novia por el resto de mi vida.
—¿S-sí?
Desvía la mirada. ¿U-una gigante tímida? ¡Ahhhhhhhhh! ¡Dios, ¿por qué te gusta torturarme?! ¿A quién le enviaste este harem? ¡Dame al menos una milf zombie que comparta mi habilidad!
Ah, no es momento de decir estupideces.
—Yo no lo sabía, pensé que era un zombie diferente y me asusté. Perdón.
—¿Eh? ¿D-de qué hablas?
—Esa Elfa plana les explicará. Lo siento… Lo siento.
Me alejé de ella y me acerqué a Mary.
Estar parado frente a ella pone una gran presión sobre mí. ¿Qué digo? ¿Perdón? ¿Lo lamento por fallarte? ¿No sabía que esto iba a pasar? ¿Fue mi culpa por tener la idea de ir al refugio?
Intento decir algo, al menos un «te fallé», pero mi voz no sale. Lo único que sale de mí, son mis lágrimas.
Un niño murió, no pude protegerlo. Sé perfectamente que soy prácticamente un novato en esto de las peleas mágicas con monstruos, pero al menos me hubiera gustado haber hecho un poco más por él.
—Y-yo…
…
…
…
No puedo hablar, me quedé en blanco.
Mary perdió a su esposo. Perdió a sus amigos. A sus vecinos. Su hogar… Su hijo. Lo perdió todo. ¿Qué puedo decir en esta clase de situación? ¡No sé, no sé! ¡Ahhhhhhhhh! ¡Di algo, idiota!
—N-no te… f-fuerces.- Dijo Kiasan, abrazándome.
Ella necesita más el abrazo, no yo, pero gracias por preocuparte por mí.
—… Y-yo… Yo no… Yo no sabía que…
—No…- Me interrumpió, agitando la cabeza.
¿Mary?
—Tú no tienes la culpa… No la tienes.
… Gracias, Mary. Sé que… ¿Eh? E-espera. S-su cabeza tiene… Y esa roca a su lado, llena de sangre… ¿Acaso tú…? ¿A tu propio hijo? ¿Con tus manos?
—Mary… ¿Por qué?- Dije, apuntando a la roca
—… Se convirtió y tuve que hacerlo. El virus está en el aire, se activa cuando morimos.
¿En el aire? ¿Acaso todos estamos infectados?
… Se atrevió a matar al zombie de su hijo.
—Eres una mujer fuerte y te admiro… Lo siento, lo dije sin pensarlo.
Yo no sé si sería capaz de matar al zombie de mi hijo. Ni siquiera sé lo que haré con el zombie de mi madre. Oficialmente perdí la esperanza de encontrar una cura.
—Él ya no era mi hijo. Tú mismo lo dijiste antes, las almas abandonan el cuerpo cuando se convierten en zombies… Él ya no era mi hijo.
Y mi madre ya no es mi madre.
Lo perdimos todo en cuestión de días, todo por culpa de las criaturas de fantasía. Es más que obvio que ellos tienen algo que ver con todo esto.
Solo nos queda seguir adelante.
—¿Q-qué… h-harás… a-ahora?
Excelente pregunta, Kiasan. Debemos saber cómo está su estado mental. No quiero que se suicide, todavía es joven, tiene una larga vida por delante. Además, tengo una sospecha con las almas. Si el virus fuerza el alma y la obliga a abandonar el cuerpo, es posible que también puedan llevarla a cierto lugar.
—Quiero enterrar a mi hijo… Escuché lo que dijiste, Zei. Seguir adelante y no dejar que mi vida esté encadenada a mi pasado… Tu madre te educó bien.
—Gracias.
Está intentando verse fuerte, pero está sufriendo, sus lágrimas no dejan de salir. Perdió a su familia, ese dolor no se irá tan rápido, le tomará tiempo. Yo aún no supero la muerte de mi madre, y el dolor de perder a su esposo e hijo es peor.
… Me niego a creer que un cuerpo muerto pueda moverse por su cuenta. Los zombies no son normales. Si tenemos la habilidad de desarrollar magia, significa que tenemos algo parecido a un alma, o en mi caso, mi propia alma.
Si esto fue provocado por una criatura de fantasía, es posible que se trate de un ser que planea algo horrible, y que en sus planes incluya conseguir almas. Es solo una teoría, pero creo que las mordidas y muertes, hacen que algo se active dentro de los humanos, algo como un alma artificial que expulsa al alma original. ¿Para qué? Porque esa alma artificial obligará a los zombies a obedecer a su amo. Creo que por eso yo puedo controlarme, porque esa alma artificial falló en expulsar mi alma y se combinó con ella o algo por el estilo.
Kiasan no puede ver almas dentro de los zombies, pero creo que es muy posible. Le contaré mi teoría a las criaturas de fantasía para que ellas investiguen, a mí realmente no me interesa encontrar al culpable, solo quiero vivir mi vida lo más pacífico posible.
—Z-Zei… T-tu… c-cuerpo… D-descansa.
Sí, estoy temblando, llegué más allá de mi límite, apenas puedo mantenerme despierto, pero me niego a descansar, no puedo dejarlas solas en este momento.
—… Lo siento… Yo… no puedo dejarlas solas.
—Nosotras las cuidaremos mientras descansas.- Dijo la gigante tetona.
Volteé a mi izquierda.
Todas las chicas mágicas están ahí. ¿Puedo confiar en ellas? Parecen confiables, y la gigante evitó que la hada me mate.
Ah… Si sigo así, me quedaré dormido y las atacaré. No tengo otra opción.
—Si planean vengarse, háganlo solo conmigo. Ellas son inocentes.
—¿Crees que somos monstruos?
—La Elfa plana intentó matarme.
—¡Y lo volvería a hacer, hijo de tu pu…! ¡¿Hmmmh?!
La gigante le tapó la boca a la Elfa. Estuve a punto de abrir la boca, pero estoy tan cansado que me da flojera discutir con ella.
—Bueno, no te culpo por sospechar de nosotras, pero no somos malvadas. Ella solo está un poco irritada por la situación actual.
—… No debería, pero…
Mis ojos… Mi visión está borrosa… Mi energía se está agotando.
Caí al suelo. N-no puedo moverme. ¡Uwaaaah! ¡Estoy a punto de convertirme en un zombie por completo!
—¡Por favor, protejan a mis amigas! Es lo único que me queda en este mundo.
—Lo haremos. De todas maneras, teníamos planeado conseguir información de este mundo.
Kiasan se agachó para ayudarme.
—¿P-plan E?
Plan entierro.
—S-sí. G-gracias… Y no te encariñes con ellas, por favor.
No confiaré en ustedes. No confiaré en ninguna criatura mágica. Si la magia de invocación fue la culpable de esto, no puedo confiar en ninguna criatura mágica. Cualquiera podría ser el villano que planeó esto.
Solo por esta vez, confiaré en ellas porque es la única opción que tengo.
Por favor, no les hagan daño.
Comments for chapter "012"
QUE TE PARECIÓ?