The Lost Crystallus - 2-02
Siempre que observo aquella luz, siento mucho dolor en mi pecho. Yo se que allí se encuentra lo que busco. Pero no puedo evitar sentir tristeza, ganas de llorar…
Esa luz me rechazó, así lo siento. Y me da miedo de que me olviden, de que todo siga su curso sin mí…
Pero eso es normal, ¿Cierto? Yo no soy importante, ¿Por qué se detendrían a pensar en mí? ¿Por qué ella…?
La luz no vendrá por mí, no se acercará ni se alejará. Debo ser yo quien llegue…
¿Me aceptarán si lo hago? No, esa no es la pregunta correcta…
¿Seré capaz de llegar?
Intento darlo todo, subo a toda prisa sin detenerme, pero los escalones que se desploman detrás de mí, me alcanzan y caigo…
Aun sigo muy lejos de poder lograrlo, pero… siento que he podido llegar más lejos que antes…
——————————–
Un nuevo día comienza, me quedo pensativo en la cama. Me resulta extraño estar tan lejos de mi hogar, tan lejos de mi propia cama y que hasta hace muy poco, estaba durmiendo en una bolsa de dormir.
¿Cómo llegue aquí? ¿Cómo pude lograrlo? Solo me dispuse a caminar y caminar…
Atravesé puro campo verde, pasé por bosques, colinas, crucé canales que transportan agua bien helada de las montañas. No veía tanta naturaleza desde que visite a mi madre el año pasado. Fui capaz de viajar tanto yo solo, sin ayuda de nadie. ¿Hasta dónde seré capaz de llegar?
Consigo juntar ánimos para poder levantarme de la cama. Una vez que termino de prepararme, salgo por algo de desayunar. Me dirijo a la cafetería de la misma posada y pido un desayuno simple.
-Aquí tiene señor- Dice la camarera.
-Gracias-
-Esto… ¿Es usted un turista?-
-N-No exactamente, solo soy un viajero que llegó aquí de casualidad-
-Ya veo, ahora comprendo…-
-¿Eh?-
-Señor, me han dicho que un desconocido estuvo pasando el tiempo con aquella chica…-
-¿Se refiere a Mai?-
-Señor… no debería andar mucho con ella…-
-¿Por qué? No parece ser peligrosa-
-Bueno… es que…-
-Esa chica tiene algo siniestro- Dice el dueño de la posada.
-¿En qué sentido?-
-Estuvo implicada en un incidente con unos bandidos. Todos acabaron brutalmente muertos, siendo ella sola la única sobreviviente. Luego su familia la abandonó, se fueron aterrados, asegurando de que ella era un monstruo-
-¿De verdad… cree eso…?-
-Dudo de que sea un monstruo, pero que ella tiene algo malo, eso es seguro. Seguramente su familia jugaba con magia negra y les salió mal la jugada. Su casa esta embrujada, nadie se acerca ya-
-Mmm… ¡Bueno, agradezco su advertencia! Pero… esa chica no me pareció mala. Pienso seguir pasando tiempo con ella. No se preocupen por mí, si algo me sucede, pues mala suerte. De cualquier manera estoy solo. Además, soy un desconocido aquí, nadie me llorará-
-D-De acuerdo señor, sentí que era mi deber advertirle, espero que no le suceda nada-
¿De verdad piensan que Mai es una bestia asesina y sangrienta? No niego que sea capaz de poder matar a alguien, pero al punto de ser como una bestia loca de varias colas, pues se me hace difícil de creer.
Seguramente haya mucha historia por descubrir en Mai, pero la realidad es que solo estoy aquí de paso. Tengo un objetivo y no puedo distraerme con otras mini historias. No sé qué cosas misteriosas giran en torno a ella, pero la cosa es simple, ¡Si ella no me hace nada, entonces todo estará bien!
Sé que acabo de conocerla, pero no se… hay algo que me dice que no es mala persona, solo alguien con mucha mala suerte… como yo…
-¡Buenos días Mai!-
Saludo a la pequeña, quien estaba sentada en una roca. Al voltear a verme, noto que estaba comiendo una manzana. Ella sin cambiar la expresión de su rostro, alza su brazo izquierdo para saludarme con gran entusiasmo.
-¡Buenos días! Entonces si te quedaste…-
-Claro que si jeje-
-*Rubor*…-
-¿Qué sucede?-
-No es nada. ¿Qué quieres hacer hoy? ¿De verdad quieres pasar todo el día conmigo?-
-¡Sí!-
-*Rubor* Bueno, entonces… ¡Ah! Ya se… ¡Te mostraré un lindo lugar!-
-Eres mi guía aquí, iré a donde me digas-
-Bien, entonces… ¿Puedes caminar mucho? Es un camino largo…-
-Pues llegue hasta aquí desde mucho más lejos jeje-
-Es verdad, entonces vámonos-
Nos alejamos poco a poco del pueblo. Nos adentramos por arbustos enormes, plantas de todo tipo. Luego pasamos por un camino de tierra, a nuestro alrededor hay pastizales bastante crecidos. Escucho el sonido de animales pero no los veo.
-¿Eso es un pavo?-
-¿Pavo? Ah… los pájaros que abren sus colas bien grandes. Hay bastantes por aquí, no te preocupes, no lastiman-
-Lo sé, creo que en el pueblo de mi madre también hay…-
-¿Tu mamá vive en un pueblo?-
-Sí, ella nació en uno que está más al norte de aquí. Ella se mudó allí hace unos años cuando…-
-¿…?- Ella me mira atenta mientras avanza.
-Vivíamos todos juntos en la ciudad, ¿Sabes? Mis padres y yo-
-¿Y qué sucedió?-
-Mi papá falleció y eso puso muy triste a mi mamá, entonces quiso volver a su pueblo-
-Y tú te quedaste…-
-Si…-
-¿Extrañas a tu mamá?-
-Si…-
-¿Ella sabe que estas aquí?-
-No…-
-…-
-Ella jamás me habría permitido buscar a Reina…-
-Ya veo-
-¿Sabes? Pienso que te llevarías bien con ella, tendrían muchas cosas en común para charlar-
-¿Eso crees?-
-¡Sí! Le caerías muy bien al instante jeje-
-*Rubor* Ya veo…-
Hemos caminado por un buen tiempo, ¿Cuántas horas pasaron? ¡Ah! ¡Van dos horas!
-Zero-
-¿Si?-
-Ya casi llegamos, falta subir hasta allá-
Ella señala un tramo que lleva hasta un borde bastante alto. No me asusta debido a que cuando visite a mi madre, ella me hacia recorrer muchos lugares del pueblo. Así que esto no es un reto imposible para mí, aunque los pies me duelen un poco, pero no tanto como días atrás, ¿Me estaré fortaleciendo?
Tras llegar hasta arriba de todo, nos sentamos sobre una gran roca y entonces ella señala con su dedo hacia adelante.
-Mira… se alcanzan a ver las montañas…-
-¿Mm? ¡Oh! ¡Es verdad!-
-Tu viajas para ese lado… ¿Verdad?-
-Ahora que lo dices, es cierto… ¡Esas montañas son el final de mi viaje!-
-Están bastante lejos…-
-Si…-
-¿Reina vive en esas montañas?-
-¡¿Eh?! ¡No! N-No creo…-
-¿Cómo puedes estar tan seguro?-
-Pues… era bastante culta como para vivir en un sitio tan aislado como ese…-
-Oh… entiendo…-
Para estar sola, sin familia, ni adultos que la cuiden, ella demuestra tener bastante educación. Tiene conocimiento en las cosas básicas, pero aun le falta mucho por aprender. Aun así es capaz de poder sobrevivir sola e interactuar con otras personas. Sería genial si tuviese acceso a una buena educación, quizás sea capaz de demostrar una gran inteligencia.
*TRUUUUUUU*
De pronto, un fuerte sonido retumba por todo el lugar. Observo a Mai y…
-¿Ese fue tu estomago…?-
-Si…-
-Jeje, hemos estado caminando por largo rato, es normal que nuestros cuerpos pidan reponer energías-
-Hay árboles con frutas por aquí y…-
-¡No te preocupes por eso! ¡Lo tengo cubierto!-
-¿Mm?- Ella inclina su cabeza.
-¡Chan! ¡Chan! ¡Traje unos sándwiches que compre antes de venir!-
-¡OOOOOH!- Ella alza los brazos emocionada, con brillo en sus ojitos.
-Y también tengo bebidas, así que vamos a llenar nuestras panzas-
-¡Sí!-
La vista es hermosa y comer en compañía de Mai, hace que todo mejore. En este momento me siento muy bien. Soy capaz de hacer a un lado todas mis preocupaciones por un rato y solo dejarme abrazar por esta tranquilidad…
-Por cierto Mai… ¿Hay alguna leyenda sobre un animal grandote con orejas largas como de conejo?-
-¿Eh? Nunca escuché de un animal así…-
-Oh…-
-¿Por qué?-
-No es nada, solo curiosidad- Entonces solo fue un sueño…
-Aaah… eso estuvo delicioso… ¡Gracias por la comida!- Dice mientras alza la mano para hacer un saludo tipo militar. Se ve adorable, debo admitirlo.
-Jeje, no fue nada, ¡Es mejor comer acompañado!-
-Así es, pero suelo comer sola…-
-Si… yo también…-
-…- Ella me mira.
-…- Yo la miro.
-Somos dos personas que están solas….y ahora estamos juntos… es algo bastante…- Dice ella.
-¿Loco? ¿Gracioso?-
-Mmm… curioso… supongo… pero me gusta-
-¡A mí también! Jeje-
-*Rubor*…- Ella baja la mirada algo avergonzada.
-Me gustó mucho comer en este lugar. La vista es única, no hay nada como esto en la ciudad-
-…- Mai se queda mirando hacia adelante, en dirección a las montañas que apenas se ven a lo lejos.
-¿Mai?-
-Mmm… acabo de recordar algo…-
-¿Qué cosa?-
-Historias… que las personas del pueblo cuentan…-
-¿Qué historias?-
-Dicen que suceden cosas extrañas… en esas montañas…-
-¡Oh!-
-Personas de otros pueblos, también cuentan historias parecidas…-
-¿Qué dicen?-
-Algunos cuentan que vieron luces, otros que vieron personas salir de cuevas, algunos piensan que hay un pueblo pero de personas extra… extrate… mmm… ¿Cómo era…? Vienen del cielo…-
-¿Extraterrestres?-
-¡Si, eso!-
No es perfecta la manera en que Mai habla, pero eso es normal, le falta educación de escuela. Utiliza palabras simples, dejando en evidencia que frases más complejas pueden llegar a confundirla. Aun así, es sorprendente lo bien que puede desenvolverse en la vida con el conocimiento que tiene.
Por otro lado, la información que acaba de soltar, puede parecer tonta a simple vista, pero algo me dice que puede ser una pista bastante importante. Reina apuntó hacia ese lado y dijo que era un lugar bastante increíble, poco conocido, cerca y a la vez lejos…
¿Podría ser…? No… es imposible… ¡No puede haber una ciudad dentro de las montañas! ¡¿Acaso Reina es una mujer topo?! Pero que algo podría haber cerca de esa dirección… eso si es posible…
-Bastante interesante… ¡Gracias Mai!-
-¿No te da miedo?-
-¡Muchísimo! Pero… no tengo otra alternativa, pues Reina podría estar en ese lugar oculto-
-Sí, eso pensé-
-Reina me dijo que era un lugar maravilloso…-
-¿Eso dijo?-
-Si…-
-¿Le crees?-
-No debería, después de haberme abandonado de esa manera, pero… quiero creerle, al menos en eso…-
-Ya veo, espero que tengas suerte-
-Gracias Mai, eres muy buena chica-
-*Rubor* N-No es nada. ¿Regresamos? Es un largo viaje al pueblo…-
-Si, además la caminata nos ayudara a digerir mejor la comida-
Durante el camino de regreso, le cuento a Mai como fue mi viaje hasta ahora. Luego le hablo sobre las cosas tecnológicas que existen hoy día, en especial el todo poderoso internet. Ella escucha atentamente, mirándome de reojo mientras camina a mi lado. Es bastante bajita, ¿Qué edad tendrá realmente?
Tras caminar por un largo rato, nos detenemos junto a un lago que hay oculto entre las plantas. El agua viene directo de las montañas y continua por un pequeño canal hasta vaya a saber uno donde…
-Nos movimos mucho hoy- Dice Mai mirando al lago.
-Solía ser un chico de casa, pero desde que comencé este viaje, no he dejado de moverme. Mis músculos aun me duelen, pero poco a poco voy a acostumbrándome…-
-Para mí es normal moverme mucho todos los días-
-Sí, tiene sentido, debes buscar alimentos y eso…-
-Me he ensuciado un poco, debería tomar un baño…-
-Sí, yo también, apenas llegue a la posada… ¡¿Eh?!-
-…-
Mai comienza a quitarse la ropa frente a mí. Ella siempre usa una sudadera gris bastante grande que llega hasta sus muslos. Debajo lleva una blusa simple que rápidamente se quitó, quedando solo en pantis y calcetines largos de color blanco. Como se encuentra de espaldas, no soy capaz de ver bien su cuerpo, aunque eso no me interesa.
Tampoco lleva sostén, aunque creo que tiene lógica ya que es bastante pequeña. O al menos no parecía estar muy desarrollada. ¡Pero eso no importa ahora!
-¡¡¡OYE, OYE, OYE!!! ¡¿Qué estás haciendo?!-
Rápidamente tomo su sudadera y se la vuelvo a colocar, vistiéndola a la fuerza.
-¿Oh? Pues… pensaba bañarme…-
-¡¿Ahora?! ¡¿En este momento?! ¡¿Frente a mi?! ¡Y esa agua esta fría! ¡¡¡Estamos en invierno!!!-
-No hay problema, estoy acostumbrada al agua fría-
-¡¡¡Hay mucho problema con eso!!! ¡¿Y por qué te desnudas frente a mí?!-
-Porque bañarme con ropa es incomodo-
-¡Eso no responde mi pregunta! ¡¿No sabes que no debes andar desnuda frente a otros?!-
-Claro que se eso. Las personas malas me harían cosas muy malas-
-Erm… ¡Exacto!-
-Pero tú no eres malo…-
-Mai…-
-Así que no es problema que…-
-¡Lo es!-
-¿…?-
-Mmm… parece que debo educarte en ciertos detalles básicos de gran importancia-
-…-
-Primero vístete y luego siéntate, hay mucho que debo explicarte-
-Está bien-
Espero a que ella vuelva a vestirse bien y luego nos sentamos junto al lago, mojando nuestros pies.
-Mai, en verdad me alegra saber que confías en mí, pero aun así, la confianza necesita tiempo para construirse-
-¿…?- Ella inclina su cabeza mientras me mira.
-A medida que pasamos tiempo juntos, cada uno va mejorando la confianza en el otro, de esa manera obtienes mas información de la otra persona. Por ejemplo, hoy que pasamos la tarde juntos, descubriste más cosas sobre mí y yo de ti-
-Si-
-Pero no se puede pretender que en uno o dos días, haya demasiada confianza o acercamiento, ¿Comprendes?-
-Ósea que debemos pasar más días juntos para que sea bueno desnudarme frente a ti-
-¡¡¡NO!!! ¡¡¡ESTA MAL!!! ¡¡¡MUY MAL!!! ¡¡¡NO DIGAS ESAS COSAS O METERÁS A LA CARCEL A MUCHOS!!!-
-¿Eh?-
-Qué bueno que aun no soy mayor de edad o me habría sentido aun peor…-
-…-
-Por cierto… ¿Qué edad tienes?-
-14-
-¡¿Eres solo un año menor que yo?!-
-Eso parece…-
-…-
-¿Es malo?-
-¡No, para nada! Solo que… creo que la marca loli no se te irá…-
-¿Eh?-
-No importa jeje…-
-Oye Zero… ¿Entonces es malo que nos bañemos juntos aunque nos llevemos muy bien?-
-Esto va a ser más complicado de lo que imaginé…-
-…-
-Mai, tu cuerpo es tu mayor tesoro, no olvides jamás eso-
-Entendido-
-No puedes mostrárselo a nadie, a menos que en verdad quieras hacerlo. Y eso debe ser para momentos especiales con personas que consideres muy valiosas-
-…-
-M-Mira… hay un orden que inventaron para evitar problemas. Las chicas pueden bañarse junto a otras chicas, pero no con otros chicos, ¡A MENOS! Qué tu en verdad quieras hacer eso con un chico que consideres muy especial-
-¿Por qué esta bien con las chicas? ¿No son especiales?-
-Pueden serlo también, solo que estarás más segura entre chicas, pero pueden haber algunas que quieran aprovecharse de ti. Si intentan tocarte y tú no quieres, adviérteles. Si continúan insistiendo, defiéndete golpeándolas o mordiéndolas-
-Entendido-
-Bien, creo que vas entendiendo-
-Pero hay cosas que no entiendo. Si tú te vuelves especial para mí, ¿No podremos bañarnos juntos?-
-Podemos tener una muy buena amistad, pero cuando digo especial… es… con esa persona con la que quieras… erm… casarte y tener hijos-
-¡Oh! ¡Ya entendí! Tu solo vas a querer bañarte con Reina, porque estas enamorado de ella, ¿Cierto?-
-Aaaah… si… algo así…-
-Pero sigo sin entender que es lo malo que puede pasar entre nosotros-
¿Por qué seguimos girando en el tema de bañarse? Ni modo, tendré que darle una charla adulta…
-Mai, cuando uno llega a los 12 años aproximadamente, comienza a entrar en la adolescencia. Nuestros cuerpos cambian para poder tener hijos-
-¡Oh!-
-No puedo creer que vaya a decir este ejemplo…-
-¿…?-
-Cuando era niño, solo quería jugar con Reina, pero al verla ya de adolescente, yo… *Rubor* sentí deseos de “querer” tener hijos con ella…-
-Ya veo-
-Y… el método para tener hijos es…-
Mai me escucha atentamente, no se avergüenza ni se sorprende. Es una chica bastante extraña pero adorable…
-Ya veo, entonces si me ves desnuda, puede provocar que quieras tener hijos conmigo. Eso debe suceder si ambos lo queremos, pero tú lo quieres hacer con Reina. Bañarse entre chicas está bien, pero no debo dejar que se aprovechen de mí. Los chicos en su mayoría, querrán tener hijos conmigo, así que no debo bañarme con ellos, a menos que encuentre a alguien que me haga sentir lo que Reina te hace sentir-
-Si… por ahora está bien que lo entiendas así. Con el tiempo iras comprendiendo mejor las cosas-
-Aunque también me dijiste que alguien especial puede ser chica o chico, ¿Pero cómo se pueden tener hijos con una chica? Según lo que me dijiste, se necesitan…-
-Lo entenderás mejor con el tiempo-
-De acuerdo, pero… si tu quieres tener hijos con Reina, entonces no deberías querer tenerlos conmigo. Yo no quiero tenerlos contigo, entonces si nos bañamos, no debería pasar nada-
-La adolescencia es peligrosa Mai-
-¿Eh?-
-Es cuando despiertan estas “funciones” que sirven para tener hijos, lo que hace que sintamos fuertes atracciones hacia otros. No es posible controlarlas bien a esta edad. Puede que tú y yo al mirarnos, sintamos atracción y todo termine en tragedia…-
-¡Oh! ¡Ya comprendo! ¡Protegeré mi cuerpo! ¡Te lo prometo!-
-Bien-
-¡Gracias por enseñarme muchas cosas nuevas! Y espero de todo corazón que puedas encontrar a Reina para que juntos puedan tener muchos hijos-
-*Rubor* Mai… jeh… vaya palabras pero aun así hay mucha ternura en ellas. ¡Gracias Mai!-
-*Rubor*…-
Bueno, Reina es muy hermosa, honestamente no pienso que fuese malo querer… ¡Al demonio! ¡Sí! ¡Me cantaría tener sexo con Reina! ¡Seria glorioso! Es que… está muy buena…
En fin, supongo que hice una buena acción este día, me aseguré de que Mai proteja su pureza. -Jeje, mientras te explicaba, no pude evitar pensar en ti como si fueses mi hermanita-
-¡…!-
-Sí, lo sé, es raro, lo siento-
-*Rubor* Jeh… un hermano… eso… me gusta cómo suena-
-¿Mai?-
Parece que le agradó mi comentario, pues sonríe dulcemente. Me dan ganas de darle un abrazo, pero no creo que eso este bien…
¡Por las dudas no lo haré! Mi barra de confianza en mí mismo aun sigue bajo tierra… soy un desastre…
Una vez que llegamos a la entrada del pueblo, Mai y yo nos despedimos por este día.
-Lo he pasado muy bien, ¡Gracias Mai!-
-*Rubor* N-No fue nada… ¿Mañana…?-
-¡Si, me gustaría volver a verte!-
-*Rubor* En ese caso…-
-¿Si?-
-*Rubor* ¿Te gustaría conocer mi casa?-
-¡Claro!-
-Bien, entonces es una promesa-
-Llevaré algo para comer-
-¡Oh! Eso sería genial…-
-Nos vemos mañana al medio día-
Mai y yo, nos damos la mano para despedirnos. Ella me mira con una dulce sonrisa junto s sus mejillas de un tono rosado. Luego se marcha corriendo, voltea una vez más para alzar los brazos en señal de despedida y después se marcha.
Al ingresar a la posada, el dueño me mira algo sorprendido.
-He estado toda la tarde con esa chica-
-¿Y noto algo raro?-
-Solo una niña normal que está sola en este mundo. Tuvo oportunidades de poder hacerme daño si hubiese querido, pero aquí estoy-
-Me alegra verlo a salvo señor-
-A mi me entristece que le den la espalda a una pobre niña que lo perdió todo. Pero no estoy aquí para convencerlos ade que la traten bien. Aunque quisiera, no podría…-
-Quizás… nos hemos dejado llevar por el miedo…-
-Al menos déjenla en paz si no tienen coraje para ayudarla-
-Es usted muy amable, señor- Dice la camarera que me atendió esta mañana.
-¿Eh?-
-No hemos pensado las cosas desde otro punto de vista. Supongo que todos estamos siendo horribles con esa pequeña. Es comprensible que se vea molesto, señor-
¿Molesto? ¿Yo? Ah… claro… estoy enojado… esta situación me molestó mucho. Después de pasar todo el día con Mai, el ver lo buena que es y como la trata el pueblo, pues… me genera mucho enojo…
Les he hablado de manera bastante ruda, no me di cuenta de que mis emociones me guiaban. No soy así, yo jamás diría algo como eso, nunca he tenido el coraje, pero ahora…
-S-Supongo que fui algo irrespetuoso, me deje llevar por mis emociones. Esto… no va a echarme ¿Cierto?-
-Jajajaja, ¡Por supuesto que no!- Dice el dueño de la posada.
-Uuf… menos mal. Y-Ya me voy a mi habitación, ¡Buenas noches!-
Vaya… que día he tenido. Es bueno haberme detenido un poco, necesitaba reponer fuerzas y reordenar mis pensamientos. Creo que si continuo pasando tiempo con Mai, podré retomar mi viaje con mejores ánimos. Y no olvidar que gracias a ella, obtuve pistas muy interesantes. ¡Mañana hablaré con el dueño de la posada para obtener más información sobre esas historias raras de gente en las montañas!
-Bueno, me daré un baño, comeré algo y luego a dormir plácidamente en una cama, pues pronto tendré que volver a acampar…-
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