The Lost Crystallus - 4-12
[Retrocedemos unos cuantos días para ubicarnos al inicio del año. Mientras Zero viajaba a la ciudad, separándose de sus amigas. Del otro lado del océano Atlántico, cierta señorita de largo cabello rojo y ojos violetas, estaba a punto de verse involucrada en una importante misión.]
[Reina]
Me encuentro en mi departamento, sentada en un sillón muy cómodo que coloqué en mi balcón. La vista es muy bonita, aunque ya me he acostumbrado a este paisaje.
No estoy haciendo nada importante, solo leyendo noticias de Ancardia por las redes. No suelo escribir nada, solo mirar lo que otros publican.
-“Continúan los ataques del misterioso guerrero enmascarado. Un sujeto que ataca a los agentes, no pueden atraparlo, usa una lanza”. Vaya… espero no encontrármelo…-
Veamos que mas…
-“¿La doctora más poderosa de Ancardia, tiene discípulos? Fuertes rumores apuntan a ello”. Ya veo… no es de extrañar que esos dos se vuelvan populares en el futuro. Aun me cuesta creerlo…-
¿Quemas tenemos aquí?
¿Eh?
-“Todos expectantes ante el Dragón Negro, ¿Cuántos traidores atrapará en este nuevo año? Aun se desconoce su verdadera identidad. Algunos rumores apuntan a que sería un agente cuyos orígenes no son de familia nobles. Incluso se dice que vendría del exterior. ¿Recuperaremos la influencia de la ciudad capital, con su ayuda?”-
Ah… ¿Pero esto que es…?
-¡¿Dragón negro?! ¡¿Qué clase de nombre estúpido es ese?! Estos agentes que se creen que todo es un juego, son los que duran poco. Aunque… ¿Viene del exterior? No creo que sea muy posible…-
Están sucediendo cosas muy raras en mi país, ¿Debería llamar a Luna?
No, mejor no la molesto con estupideces. De todas formas, este año regresaré. Y también… juro que iré por Zero…
De pronto suena mi teléfono, es la líder Lorraine.
-Buenos días Reina, lamento molestarte en tu día libre-
-Descuida, no estaba haciendo nada importante, solo leyendo publicaciones de Ancardia. ¿Has visto lo de ese Dragón negro? ¿Qué onda con eso? Vaya nombre ridículo…-
-Ah… si… ¡E-Es decir! Quizás tiene ese apodo por el terror que causa a los traidores que atrapa. No lo sabes pero hubo muchos casos de agentes desertando para unirse a las mafias de las grandes ciudades-
-Sí, parece que las cosas andan muy mal. Aun así, un apodo tan friki para algo tan serio…-
-Vamos Reina… no te centres en eso y si en los logros de esa persona-
-Bueno, es cierto, juzgar solo por eso está mal. No debería ser tan grosera. Voy leer más sobre él-
-¡No!-
-¿Eh? ¿Por qué no?-
-Porque… ¡Porque tengo una misión que asignarte!-
-¿Enserio? De acuerdo…-
-No estás solo para realizar labores de oficinista. Sé que eres una excelente agente y podrás ocuparte de este asunto-
-Muy bien, dime de qué trata-
-Es algo que parece estar muy ligado a lo que está sucediendo en tu país-
-¿Qué quieres decir?-
-Hemos recibido varios reportes de que la droga conocida como “Beso de Lilith”, ha llegado a este país. Debemos averiguar su origen y eliminarla, antes de que se expanda por toda Europa-
-¡¡¡…!!!-
-El Beso de Lilith, es un problema con el que están lidiando en tu tierra natal. Esto es obra de una familia conocida como los tres mosqueteros. Estoy segura de que no es desconocido para ti, el apellido “Sadokawa”-
-…-
-Quiero que investigues sobre esto y des con el origen del problema. Atrapa o elimina a quien trajo eso aquí-
-Entendido, investigaré el asunto. No se preocupe-
Bien, si realizo con éxito este trabajo, estaré más cerca de poder obtener la autorización para regresar. Este será el año en el que pueda luchar para reparar mis errores. Aunque me él odie… yo…
-Mejor ponerse a trabajar. Cuando llegue el momento, daré todo de mí. Me ganaré su perdón y recuperaré su confianza-
Veamos, lo primero será hablar con los agentes de Paris para recolectar información. Luego comunicarme con los de otras ciudades. En el peor de los casos, viajar a cada una de ellas… Creí que había logrado detener la producción al exterminar a la responsable hace años…
-Será mejor que primero me actualice con todo lo relacionado al beso de Lilith-
Con mi computadora, busco en la red de Ancardia, los informes de lo que estuvo sucediendo en mi país. Sé que la situación no es muy buena…
-Ya veo, la presencia de mafias en la ciudad capital, ha ido incrementando. Es peor que antes…-
La familia de esa mujer… siguió con su legado. Y todo indica que la hermana menor, es aun peor y más cruel. Por otro lado, esta ese misterioso tipo que se hace llamar serpiente. Creo que escuche algo de él en algún momento, pero no demasiado.
Ancardia sufrió un terrible golpe, casi son totalmente exterminados en la ciudad capital. No solo eso, sino que manipularon psicológicamente a muchos agentes novatos para que traicionaran a los suyos. La cantidad de agentes que perdieron la vida…
-Que cifra más triste…-
Al final… mis acciones no detuvieron nada. Y la misión de hace tres años, tampoco aportó mucho…
No permitiré que su influencia se expanda. Al menos quiero evitar que esa droga de porquería, cause problemas en este continente. Y luego…
-Zero… espero que todo ese caos no llegue a afectarte. Quiero protegerte…-
Visito a los diferentes agentes, repartidos por toda la ciudad. Les pregunto sobre el beso de Lilith. La información es bastante pobre, pero suficiente para que no queden dudas de que esa cosa se encuentra en este país. Pero se desconoce quién la ha traído o donde se esconde…
[Tres días después]
Me encuentro desayunando en una cafetería bastante elegante. Un sujeto se acerca y se sienta en la misma mesa. Se trata de un agente, fingimos ser dos amigos que se reúnen para platicar, cuando en realidad solo intercambiamos información.
-¿Sabes? El otro día mi amigo me dijo que vio a una chica que conquistó su corazón. Tan atlética, tan capaz. Le gusta hacer ejercicio, se mueve con gran agilidad. Si te descuidas, no la podrás ver, pero como él es todo un romanticón, no pudo dejar de notarla jeje-
-A mi me suena bastante acosador, pero bueno… cada quien su manera de amar…- Yo digo.
-No digas eso. ¡Ah! Por cierto, yo también vi a una chica linda que me dejó cautivado-
-…-
-¡No me mires así! Yo no la ando siguiendo ni nada, solo la vi una vez, pero llamó mi atención jeje , ¿Qué hay de ti?-
-No he visto a nadie que me hiciera sentir algo…-
-Siempre tan amarga…-
-¿Solo viniste a hablarme de chicas?-
-Jeje temo que si-
-Ni modo…-
-Lo siento, pero debo irme, ¡Hablamos otro día!-
-Adiós…-
El agente se marcha, dejándome el dinero para pagar lo que consumió, junto a un pendrive.
¿Qué fue toda esa charla sin sentido? Pues algo que a simple vista parece eso, una plática estúpida…
Pero para mí, fue una conversación perfectamente clara. Como agente, se reconocer los códigos secretos, por así decirlo.
Básicamente me dijo que han estado viendo a una misteriosa chica por esta ciudad. Parece ser evidente que no es de aquí. Se mueve con gran agilidad y rapidez, por lo que no es fácil seguirle el rastro. Y no es un solo agente quien la ha visto. ¿Será quien distribuye la droga?
Regreso a mi apartamento para verificar los datos del pendrive. Allí hay unas fotos y descripción de la misteriosa mujer.
Recorro las calles en plena noche, buscando a esta misteriosa chica. No se le ha visto la cara, suele andar con capucha, pero hubo un agente que logró verla sin ella, comprobando que es una mujer y con cabello largo, pero no han podido confirmar mucho más. Ni color de cabello o tono de piel.
Di la orden de que estén atentos y me notifiquen cualquier novedad. Pero claro que no me voy a quedar esperando sin hacer nada.
[Reina recorre las calles de parís durante las noches, en busca de actividad sospechosa. A pesar de encontrar individuos que portaban el beso de Lilith y de atrapar algunos vendedores, no lograron dar con la misteriosa chica o la organización responsable en sí. De esta manera, transcurren 3 días.]
Estoy comenzando a pensar que esa chica pudo haberse ido a otras ciudades. O quizás peor, se marchó a otro país. La actividad del beso de Lilith es mínima, pero es un hecho de que está sucediendo. No quiero dejar pasar más tiempo o la influencia de esa droga será más grande…
Ya no se me ocurre donde más revisar…
De pronto suena mi teléfono.
-Aquí Alcott-
-¡Señorita Alcott! ¡La hemos visto! ¡Le enviaremos la zona en donde se encuentra en este momento!-
-¡Excelente! ¡Iré ya mismo! No dejen que los descubra, mantengan distancia, no sabemos qué tan peligrosa es-
-¡Entendido!-
Observo las coordenadas que me enviaron, no es lejos. Es en una zona industrial,
-¿Me llevarás a tu laboratorio, misteriosa amiga?
Llego lo más rápido que puedo, le ordeno a los demás agentes que permanezcan alejados, pues yo me ocuparé de ella. No es que me crea superior y menosprecie al resto. Es que no quiero provocar toda una batalla campal y despertar a medio mundo.
Con mi rango, podre estar preparada ante cualquier imprevisto. Además, esta misión me fue asignada a mí.
Ingreso lentamente a la zona de fábricas. Me muevo entre las sombras, me he equipado con mis armas, una katana de color verde, una pistola y un látigo.
Mientras avanzo, visualizo una silueta que se mueve desde lo alto. Va saltando de techo en techo. Comienzo a seguirla a toda prisa hasta ingresar en una de las fábricas.
De pronto un fuerte sonido se produce, un disparo…
¡¡¡Me está disparando!!!
Me oculto entre las maquinas. Las balas rebotan en los tubos de metal o paredes, el sonido resuena por todo el lugar…
Tengo que buscar otra ruta para acercarme y atacarla…
Lamentablemente parece tener buen oído. No deja de dispararme hacia donde me encuentro. Le respondo de la misma manera, provocando un tiroteo dentro de la fabrica.
Ya me está cansando…
¡¡¡Ahora verás de lo que soy capaz!!!
Me encuentro en un punto elevado, saco mi látigo y lo agito. La punta viaja, da una curva y golpea el arma de mi enemiga, alejándola de su mano.
¡Así es! ¡Soy una experta en el uso del látigo!
Doy un salto y caigo con una patada voladora. Impacto exitosamente en ella, enviándola a volar unos cuantos metros. Tras rodar por el suelo, se levanta de un salto. Su capucha se cae, por lo que puedo ver el rostro de mi enemiga.
Se trata efectivamente de una chica, aparentemente de mi misma edad. Su cabello es largo, atado con una coleta en el lazo izquierdo, lo lleva teñido de verde.
-¿Eh? ¿Una niña?- Dice ella con asombro.
-¡¿A quién le dices niña?!-
-A ti…-
De pronto saca de su abrigo, una tremenda pistola…
-¡Mierda!- Yo grito.
No duda en dispararme con ella, así que me muevo velozmente, dando una voltereta para acercarme y utilizar mis habilidades de artes marciales para atacarla. Ella intenta esquivarme, pero no es tan habilidosa como yo, por lo que recibe golpes.
Trata de dispararme, pero al estar tan cerca de ella, no encuentra el ángulo para hacerlo, por lo que intenta golpearme con la culata.
De tantos golpes y forcejeo, su pistola termina saliendo despedida de su mano, quedando desarmada.
Le doy una patada que la hace retroceder con violencia y estrellarse contra un muro. Entonces cae y se queda sentada en el suelo. Mete la mano en su abrigo, intentando sacar otra arma, pero es demasiado tarde, porque yo le estoy apuntando con la mía.
Aun así… ¡¿Cuántas armas lleva escondidas?!
-Jaque mate, verdecita-
-Jeh… tan joven y tan habilidosa. Puede que me hayas vencido, pero no es el final definitivo para mí. No pienso rendirme… haré que…- Dice ella.
-Tú también eres muy habilidosa, sí que me diste problemas… ¡Pero tranquila, no te mataré! ¡¡¡Te obligaré a hablar!!!-
-¡¡¡Me dirás donde guardan el beso de Lilith!!!- Dice ella.
-¡¡¡Me dirás donde guardan el beso de Lilith!!!- Yo digo.
-¿Eh?-
-¿Eh?-
Espera…
¿Qué dijo? ¿Por qué repitió lo que yo…?
-¿Me estas pidiendo que te diga donde se oculta la droga llamada Beso de Lilith?- Le pregunto.
-¡Así es!-
-Pero… yo creí que tú eras la que lo sabía…-
-Pelirroja… ¿No eres tú la que distribuye esa droga?-
-No, estoy buscando al responsable para detenerlo-
-¿Tu también? Mmm… supongo que habrá otras organizaciones que persigan lo mismo-
-Si tú no eres una de ellos… entonces… ¡¡¡Estuve perdiendo el tiempo!!! Maldita sea…-
-Cielos… cuantas balas perdidas. Es una suerte que no nos hayamos matado jeje-
-¿Quién eres?-
-Bueno, supongo que puedo decírtelo, me venciste después de todo-
-…-
-Me llamo Maya, soy una mercenaria. Me contrataron para capturar vivo o muerto al responsable de distribuir el Beso de Lilith en Francia. No puedo revelarte mucho más-
¿Una mercenaria tan joven? No imagino la vida dura que debe haber tenido para acabar así…
Bueno, yo soy un agente secreto profesional y apenas tengo 18…
-Mi nombre es Reina, trabajo para una organización. Mi misión es la misma que tu-
-Mmm… si nuestros objetivos coinciden, quizás podríamos trabajar juntas. Con nuestras habilidades, podríamos resolver esto más rápido. No es una obligación, claro está- Propone Maya.
-Pues… mi misión es detener todo esto. Si primero me dejas sacarle información al responsable, puedes quedártelo para entregarlo a tu cliente o matarlo si deseas-
-No tengo problema-
-Si no interferimos con la otra, entonces acepto esta alianza. La verdad es que quiero terminar con esto lo más pronto posible-
-Reina, antes una pregunta-
-¿Si?-
-¿Tu organización planea quedarse con el beso de Lilith?-
-No. Queremos eliminar su existencia de aquí-
-Mi cliente desea lo mismo. Entonces supongo que en verdad no tendremos problemas. Será un placer trabajar contigo, pelirroja habilidosa- Dice mientras me brinda su mano.
-De acuerdo verdecita pistolera- Digo mientras estrecho su mano.
[De esta manera, Reina Alcott establece una alianza inesperada con una joven mercenaria llamada Maya. Juntas buscarán evitar que la droga conocida como Beso de Lilith, se propague por todo el continente.
Ahora regresamos nuevamente al presente, pero esta vez, centrándonos en la base Ancardia.
Observamos a una jovencita de cabello rubio, una de las tantas huérfanas de viven en el orfanato. Ella se encuentra yendo a visitar la tumba de su hermana. Siempre la visita y renueva las flores. Siempre tan atenta y considerada. Quizás se trate de una de las personas con el corazón más puro de ese lugar.
Al estar cerca de llegar a la lapida de su querida hermana, se detiene al visualizar a una misteriosa joven. No la conoce, pero siente que su hermana le habló de alguien con esa descripción en el pasado.
La joven voltea a verla y le sonríe dulcemente, luego se marcha tras terminar de presentarle sus respetos a la tumba.]
[Lisa]
Me encuentro junto a Lina, Irina y Annie, en una cafetería. Siempre que tenemos un tiempo libre, solemos reunirnos para pasar el rato.
-Lisa… ¿Sabes algo de Luna? ¿Se encuentra bien? Hace días que no la vemos- Me pregunta Lina.
-Se encuentra bien, solo que…-
-Esta triste… ¿Cierto?- Dice Lina.
-No puede evitar preocuparse por Zero. Y el hecho de estar distanciada, la entristece más…-
-No le costaría nada, enviarle un mensaje cada tanto, para que ella pueda tranquilizarse- Dice Irina.
-Supongo que debe estar muy ocupado. Y Luna… necesita su espacio. No hay mucho que se pueda hacer…-
-¡Oh!-
-¿Qué pasa Annie?- Pregunta Lina.
-Es que acabo de ver a una persona con un color muy bonito…-
-¿Enserio? ¿Quién?-
Observo también por la ventana, por simple curiosidad. Entonces mis ojos captan ciertos colores que me traen recuerdos…
-¡Ah!-
-¿Qué pasa Lisa?- Pregunta Irina.
-Es que… creí haber visto a alguien que conocemos…-
[Luna]
Aaah…
No tengo ánimos de hacer nada…
Hace días que no hago otra cosa que quedarme acostada en mi sofá…
No hay nada que me interese en la televisión, tampoco deseo leer algún libro, ni comer…
Me siento vacía…
-Soy una tonta…-
De pronto suena el timbre…
-Aah… le dije a Lisa que quería estar sola…-
El timbre sigue sonando…
Me levanto de mala gana y voy despacio a la puerta principal.
En cuanto abro…
-¡¡¡Hello mi querida Lunita!!!-
-¡¡¡…!!!-
-¡Tiempo sin vernos! Jeje-
-¿Eh? ¡¿Linda?!-
-¡Vaya! ¡Vaya! ¡Luces terrible! Ay querida… el mal de amores sí que te ha golpeado fuerte-
-*Rubor* No es mal de amores… ¿Y qué te trae por aquí? Es toda una sorpresa-
-Bueno, hay mucho para contar. A pesar de que se que molesto, ¿Puedo pasar?-
-¡Ah! ¡C-Claro! Y no eres una molestia-
Invito a Linda a pasar a mi casa. Nos sentamos en el sofá para platicar. Debí haber ordenado un poco, pero es que no esperaba visitas…
-Entonces es cierto… Seraphine…- Dice ella con voz triste.
-Si…-
-No nos llevábamos demasiado bien. Aunque se debía a que estaba celosa jeje. No me odiaba, en el fondo le agradaba. Una chica increíble con un corazón de oro-
-…-
-Me hubiera gustado venir antes, pero estaba muy ocupada-
-Está bien…-
-Nada está bien aquí, puedo notarlo. Tu rostro, tu mirada…-
-…-
-Y el hecho de que Zero no esté aquí-
-…-
-Me doy una idea de la situación, pero quisiera escuchar toda la historia. Lamento hacerte revivir malos recuerdos-
-Está bien, mereces saberlo-
Le cuento todo a Linda. Ella escucha atentamente sin interrumpirme ni una vez.
-Ya veo, ahora siento aun mas lastima por mi amigo. Lo que vivió fue horrible…-
-…-
-La situación es bastante aproximada a como lo imaginaba. Pero por lo que me cuentas, me alivia saber que no se ha desviado como pensé que podría suceder-
-¿…?-
-Estoy al tanto sobre “El Dragón negro”. Leyendo bien los rumores y descripción, enseguida supe que se trataba de él. Y al enterarme del destino de Seraphine, digamos que arme bastante el rompecabezas-
-Jeh… tienes un buen futuro como agente-
-Luna…-
-¿Si?-
De pronto ella se levanta de un salto y con muchos ánimos, dice…
-¡No te preocupes! ¡Déjalo todo en mis manos!-
-¿Eh?-
-¡Yo salvaré a tu querido y lindo dragoncito!-
-¡¡¡…!!!-
-Juju, aunque solo hay que enderezarlo un poco, no es que sea un caso perdido-
-Pero…-
-Luna, ya cumpliste tu parte. Eres una amiga excelente para él y lo sabe perfectamente. Pero hay cosas que no podrás hacer o palabras que no serás capaz de decir. Aunque seas su mejor amiga o su gran amor, no podrás hacerlo todo-
-…-
-¡Cada amiga tiene su rol! ¡Y es hora de cumplir con el mío! No te preocupes, haré que me escuche. Volverá a ti, siendo el muchacho que tanto aprecias juju-
Supongo que… tiene razón en lo que dice…
Estuve siempre a su lado, pero llego un punto en el que nuestros caminos se separaron inevitablemente. Ninguno está mal, pero… hay una brecha que no podemos reparar. Al menos no sin la voluntad del otro…
Linda es la persona indicada para estar junto a Zero en estos momentos. Ella podrá acompañarlo y ayudarle como es debido. Su llegada es como un rayo de luz.
-Por favor…- Yo digo.
-¿Mm?-
-Cuídalo y acompáñalo por mi… ¡Lo dejo en tus manos!-
-¡Es una promesa! Juju-
Comments for chapter "4-12"
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