The Lost Crystallus - 9-09
[Presente]
[Reina]
-Por cierto, antes de ir a lo de la academia de espadachines, debo contarte otra cosa-
-¿Qué?-
-Juju, ¡Cómo aprendí a usar el látigo!-
-Supongo que no existe una academia de usar látigos, ¿Verdad?-
-Claro que no… ¿Por qué habría un sitio así?-
-Yo que sé, Ancardia es raro, debes admitirlo-
-Si… bueno… aun así…-
-¿Por qué un látigo?-
-Quise seguir el consejo de Luvia y aprender a usar las armas que mis padres utilizaban. En ese momento no lo supe, pero ahora entiendo el motivo de que mi papá usara esa herramienta-
-Es algo que llama la atención, aunque supongo que habrán muchos agentes con armas locas por ahí. Ya sabes, como si fuese un gran MMO-
-Jeje, supongo que no es una mala comparación. Ahora que me he puesto a estudiar los archivos sobre mi familia, he descubierto muchas cosas interesantes-
-¿Qué más averiguaste?-
-Los Alcott fueron famosos por ser conocidos como los “Castigadores” de Ancardia. Básicamente eran quienes atrapaban y castigaban a quienes cometían crímenes. También se encargaban de los desertores o traidores. El látigo era su herramienta emblema y se volvió tradición que cada descendiente aprendiera a usarlo-
-Vaya… es un lore bastante oscuro…-
-Mmm… supongo, pero no parece que los Alcott fuesen malos, no abusaban de su autoridad, no se metían con los inocentes-
-¿Tu padre fue un castigador?-
-Mmm… la generación de mi abuelo fue la última. La familia Alcott se redujo bastante, por lo que mi padre tenía más prioridad en hacer crecer la familia que seguir la tradición. Aun así, aprendió a usar el látigo y lo empleó como arma al ser agente-
-Al final solo te tuvieron a ti…-
-Si ellos siguieran vivos, quizás hubiese tenido muchos hermanitos jeje-
-Mas bellezas pelirrojas…-
-¿Qué te estás imaginando…?-
-Reina en quintillizas-
-¡¿Cinco yo?! Pobre de mí mami, explotaría…-
-Jeje, aunque supongo que está bien así, una sola de ti es todo lo que necesito en mi vida-
¿Eh? ¿Qué significa eso? ¿Una declaración? Mmm… bueno da igual, sonó muy bonito jeje.
-*Rubor* E-Esto… Zero…-
-¿Si?-
-*Rubor* ¿Has pensado… en… tener muchos hijos?-
-¿Eh? Mmm… cuando era niño y estaba contigo, daba por hecho que, de adulto, me casaría contigo y tendríamos hijos-
-*Rubor* ¿E-Enserio?- ¡¡¡KYAAAAAAAAAAH!!! ¡Ay pero que cosas dices! Jijiji
-Luego de separarnos, deje de pensar en ello, daba por hecho que moriría solo-
-Oh… ¿Y… que piensas ahora?-
-No lo sé, no me detuve a pensarlo…-
-Y… ¿Cuántos hijos quisieras tener?-
-Mmm… supongo que toleraría un máximo de 3-
-*Rubor* Jeje, no es un mal número-
-¿Y tú?-
-*Rubor* Si… con tres estaremos bien jeje…-
-¿Ah?-
-*Rubor* ¡E-Es decir, que no me parece un numero malo! ¡Y-Yo también pensaba que sería madre al casarme contigo! ¡Y-Ya sabes! ¡Pensamiento de niña! Jejejeje-
-¿Y ahora que piensas? ¿Quieres volver a aumentar la cantidad de Alcotts en el mundo?-
-*Rubor* Honestamente ni consideraba el hecho de ser madre algún día. Pero… supongo que solo aceparé tal cosa si es con la persona indicada…-
-Oh…-
-*Mirada fija*…- ¡Eres tú, tontito!
-*Rubor* Opino… lo mismo, con la persona indicada…- Dice el tontito, mirando avergonzado hacia un costado.
Jiji, no es que me importe eso de aumentar el número de mi “clan”. Yo solo quiero formar una linda familia con Zero en el futuro.
-Ejem… bueno, la cosa es que le pedí a mi abuelo un látigo y se ve que eso le hizo feliz, el que quisiera seguir la tradición. Y así, todos los días practicaba un poco. No mentiré, me lastime muchísimo tratando de aprender a controlar esta porquería. Muchas veces quise rendirme, pero supongo que el deseo inconsciente de homenajear a mi papá, es lo que me hizo seguir adelante. Y bueno, con el tiempo, aprendí a dominarlo jeje-
-¿Lo lograste tú sola?-
-¡Así es!-
-En verdad eres grandiosa-
-Jiji- Me acurruco en su hombro.
-*Rubor*…- Zero me acaricia el cabello.
——————————————————–
Reina Alcott había desarrollado una actitud fría, distante y muy desinteresada hacia todo mundo. Si no estaba con sus amigas, entonces mostraba un rostro serio, apagado, como si todo le aburriese.
Y es que, de esa forma, ella se defendía del mundo. Sabía que no podía seguir siendo aquella niña asustadiza y dependiente. Tenía que ser fuerte, en especial cuando se encontrase sola.
Si sus amigas no estaban cerca, entonces solo se enfocaba en mejorar para poder lograr su objetivo principal, volver con Zero. Todo lo demás no importaba.
Su abuelo la inscribió en la academia de espadachines. Lamentablemente Luna no se uniría con ella, pues no le interesaba aprender ese arte. Ella solo quería apoyarse en las artes marciales. Aunque si estaba obligada a aprender a utilizar armas de fuego, pues era un requisito mínimo para ser agente.
En su primer día, se vio rodeada de muchas personas que estaban por el mismo motivo que ella. Su mirada se centró en los instructores, siendo la principal, una hermosa mujer alta de cabello blanco. Su mirada era bastante apagada, como si desprendiese tristeza, pero generando un aura de autoridad fuerte. Su nombre es Freya Esteban, madre de Gray, quien por esa época se encontraba siendo un alumno de la academia, demostrando ser bastante superior al resto.
Los novatos comenzarían con prácticas simples. A medida que avancen, se les irán asignando otras tareas. Y aquellos que demuestren un buen avance o talento, se les asignará un tutor.
La primera clase resultó ser sencilla, pero también bastante agotadora. Reina tomó una espada de madera y repitió un único movimiento de corte vertical hacia adelante. Eso era todo lo que haría durante un tiempo, hasta que su cuerpo pudiese dominar tal movimiento, como si fuese algo tan natural como respirar.
-Zero… estoy aprendiendo a utilizar una espada. Recuerdo que soñábamos con poder usar una como en los videojuegos y asi tener aventuras. ¿Qué pensarías de mí si me vieras? ¿Te felicitarías?- Es lo que piensa la joven de cabello rojo mientras seca su sudor con una toalla.
Desde que comenzó a fingir que olvidó todo sobre su amigo y renunció a verlo, dejó de atarse el cabello con el listón azul que le había regalado. No se deshizo de él, simplemente lo guardo, pues es uno de sus más grandes tesoros.
Ella se toca su coleta y siente tristeza de utilizar otro lazo. Da un leve suspiro y se prepara para ir a los vestidores para luego marcharse. Sin embargo, sus pensamientos y paz, son interrumpidos por la aparición de tres siluetas.
-Así que tú eres la nieta de Graham J. Alcott-
-¿Mm?– Reina voltea con una mirada desinteresada pero algo curiosa.
–Juju, finalmente podemos conocerte-
-¿Quiénes son…?-
-Juju, permítenos presentarnos. Mi nombre es Trisha de la honorable familia Gold-
Una joven de la misma edad que Reina, de estatura baja, cabello rubio y atado con una coleta larga, ojos verdes con una mirada llena de confianza y orgullo. Algo que ya le dio mala espina a la pequeña Reina.
-Gold…-
-Juju, ¡Así es! Pertenezco a una de las grandes familias, no es extraño que ese nombre te suene-
-Ni idea, solo trataba de recordar que significaba esa palabra en ingles…-
-¿Eh?-
-Oro… vaya apellido raro…-
-¡¿R-Ra-Raro?!-
-Si…-
-¿Enserio… no conoces el apellido Gold…?-
-Son demasiadas familias con nombres raros, no esperes que recuerde a todos…-
-I-Increíble…- Dice Trisha mientras se desploma en el suelo.
-Jajajajajaja, ¡Te ha derrotado!- Dice una de las dos niñas que acompañan a Trisha.
-…- Reina las mira fijo sin mostrar mucho interés.
-Juju, me llamo Satella de la familia Reins. Apuesto que tampoco has escuchado de ella-
-No me acuerdo-
-Juju, tu nombre es Reina, ¿Verdad?-
-Si-
-Juju, Reina, resultaste ser más interesante de lo que esperaba-
-¿Eh?-
-Juju, va a ser divertido observarte, pues a simple vista se nota que no eres nada común. Te veo más bien como… mmm… ¡Una pieza de rompecabezas que encaja y a la vez no!-
-¿Ah?-
-Juju-
Satella, misma edad que Reina, es una joven de cabello largo como el de Reina. Es de color negro, sin embargo lo lleva teñido de una manera en la que su interior es verde y el exterior es su color natural. Sus ojos son de color violeta, los abre bastante grandes y junto a su sonrisa, la hace ver bastante enigmática y difícil de predecir. Reina no pudo evitar sentir como todas las alertas se encendían dentro de ella.
-Ya, ustedes dos, dejen de incomodarla. Por favor perdónalas, no son malas chicas-
-…-
-Me llamo Tiara Fencer, es un gusto poder conocerte. Eres bastante famosa, pero quizás eso no te agrade mucho. No es nuestra intención molestarte-
-Ah… mucho gusto…-
Al igual que las otras dos, Tiara es de la misma edad que Reina. Tiene cabello corto con mechones en punta, es de color castaño claro, con ojos de color marrón claro. Demuestra ser la más educada y centrada de las tres, por lo que Reina no siente incomodidad al tratar con ella.
-¡Esto es increíble! ¿De verdad eres Reina Alcott?- Pregunta Trisha con angustia.
-Si-
-¿Nieta del líder principal, Graham?-
-Si-
-¡¿Qué es esa actitud tan desinteresada?! ¡Se supone que debes dar un buen ejemplo! ¡Demostrar interés y buen conocimiento! ¿Qué clase de imagen pretendes darle a tu familia?-
-No me interesa-
-¿Eh?-
-Aaah… todo eso de las familias, quedar bien ante ellas y bla bla bla… ¡No me importa! Me da igual lo que piensen de mí…-
-¡¿Ah?! ¿Cómo puedes hablar así…?-
-¿Por qué no podría?-
-Ah… ya entiendo… claro… ¡Te crees superior al resto por ser la nieta del líder!-
-¿Eh?-
-¡Muy bien! ¡Te demostraré que yo puedo superarte! ¡Necesitas una lección de humildad!-
-¿Ah?-
-¡Desde ahora seremos rivales, Reina Alcott! Juju-
-No me creo mejor que nadie, no me interesa eso de ser rivales. Adiós…-
-¡Esto es solo el comienzo, Reina Alcott! ¡Te demostraré mis habilidades!-
———————————–
[Presente]
[Reina]
-Me fui sin voltear a mirarlas. En verdad no me interesaban para nada-
-Sí que te volviste toda una niña antipática…-
-Ya sabes cómo son las familias nobles y sus costumbres de porquería. Me negaba a formar parte de ese mundo…-
-Jeje, te entiendo, a mi me trataron como basura por ser de afuera-
-¡Ya ves! ¡Son una porquería!-
-Por cierto, interesantes chicas…-
-Ugh… no debí ser tan fría con ellas…-
-¿Te arrepientes de no haberles brindado su amistad?-
-¡No hablo de eso! ¡Si hubiese mostrado un poquito de interés, esa estúpida de Trisha no se hubiese puesto a fastidiarme!-
-Oh… cierto que dijiste que son muy molestas…-
-¡No tienes idea de cuánto! No me dejaban en paz…-
-Mmm…-
-¿No me crees?-
-Solo pensaba que ya llevas tiempo aquí. Ya sabes, desde que volviste de Francia y eso. ¿No te resulta extraño que no hayan aparecido?-
-¿Crees que no averigüé de ellas? Parece que estuvieron lejos, realizando misiones. Pero sé que han regresado…-
-Oh…-
-Deben saber que estoy aquí, pero con esto de la invasión, sus deseos de fastidiarme se postergaron…-
-Ya veo, deben haber participado en la batalla-
-*Suspiro* En fin… seguiré relatando…- Digo mientras me aferro a su brazo, necesito consuelo y su compañía me revitaliza jeje.
————————————
Reina trataba de realizar sus prácticas de espada en paz, ignorando todo lo demás. Sin embargo, le resultaba difícil ignorar a Trisha, quien siempre se le acercaba para desafiarla.
-¡Veamos quien realiza mas movimientos seguidos sin parar!- Propone Trisha.
–No-
-¡Listas! ¡Ya!- Dice Trisha, ignorándola.
-*Suspiro* Maldita sea mi suerte…-
Reina siguió realizando su rutina como siempre. Y sin siquiera desearlo, acabó derrotando a Trisha.
-¡Kyah! Mis brazos… siento que van a estallar… no puedo moverme más…- Dice Trisha, desplomándose en el suelo.
-…- Reina continúa realizando su entrenamiento.
-¿Cómo puedes seguir como si nada…? Sin duda eres una rival digna…-
-…- Reina frunce el ceño, pues en realidad también siente dolor y agotamiento, pero lo que le permite continuar, es su motivación por volverse agente lo más pronto posible para ver a su amigo.
Debido a los acosos diarios de Zack y los cansinos desafíos de Trisha, sumado al agotamiento por tanto estudio y entrenamiento diario, provocó que el poco rastro adorable que quedaba en su rostro, desapareciera. De esta manera, Reina comenzó a mostrar una mirada filosa ante todo mundo, provocando que muchos sintieran miedo de tratar con ella.
Sin embargo, debido a su belleza natural por su aspecto físico, la mayoría de los chicos seguían admirándola y deseándola. Esta mirada “aterradora”, como la habían apodado, hizo que su popularidad incrementase. Algo que ella detestaba, pues no quería llamar la atención de nadie.
—————————————
[Presente]
[Zero]
-Y así fue como inicio la leyenda de la mirada aterradora de Reina Alcott, ¡Listo! ¡Es todo lo que necesitaba saber! Puedes retirarte-
-¡No seas idiota! ¡Y no me interrumpas!- Grita mi adorable compañera mientras me ataca, pellizcándome en ambas mejillas.
-Jeje, aun así, por más que cambies tus expresiones, nunca dejas de parecerme hermosa-
-*Rubor* Mmm… tontito…-
———————————————-
Era otro día más en la academia, Reina se encontraba finalizando su rutina de entrenamiento. A su lado se encontraban Trisha, Tiara y Satella, quienes siempre se acercaban a ella para molestarla. Al menos, Reina lo consideraba una molestia.
-Juju… *Jadeo* esta vez… fue un empate…- Dice Trisha, agotada.
-*Jadeo* Como sea…-
De pronto, una hermosa mujer adulta de largo cabello blanco y ojos azules, se acerca. Ella centra su mirada en Reina. Lo que provoca que esta se incomode un poco.
-Pequeña…-
-¿Si…?-
-Ya veo… sin duda eres hija de Lynette-
-Así es…-
-¿Deseas convertirte en agente para honrar a tu madre…?-
-No. Tengo mis propios objetivos-
-Ya veo…-
-…-
-Ustedes cuatro… lo hacen bien… se les asignará un tutor para que avancen al siguiente nivel…-
-¡Muchas gracias Señora Freya!- Responden el trío de compañeras de Reina.
-…-
-¡Agradece tu también! Se educada…- Dice Trisha en voz baja.
-Gracias…-
Freya se retira. Reina observa y se pregunta el motivo de que aquella mujer desprenda un aura tan triste.
-*Suspiro* Eres increíble… tienes que disciplinarte más…- Reprocha Trisha.
-¿Y quién era? Sé que es alguien importante, como una directora o algo así…-
-¡¿Ah?! ¡¿No sabes quién es la señora Freya?! ¡¿Acaso viviste dentro de un huevo hasta ahora?!- Grita Trisha.
Reina le tapa la boca con la mano. -Tiara, ¿Podrías hablarme sobre Freya? Por favor-
-Con gusto-
-¡¡¡MHFMFH!!!- Trisha protesta.
-¡Jajajajajaja! ¡Qué divertido!- Satella se burla de Trisha.
-Freya pertenece a la familia Esteban, ¿Sabes de ellos?- Comenta Tiara.
-Mmm… ¡Ah! Son una de las familias que descienden de los fundadores. Aquellos que acompañaron a Sylphica en sus batallas-
-¡Exacto! Pero ella no es solo el apellido, ¡Fue una agente muy talentosa y una de las mejores espadachinas! Por eso es la instructora principal de la academia. Incluso su hijo Gray Esteban, entrena aquí, siendo el mejor de todos los estudiantes- Explica Tiara.
-Si conoce a los Esteban y no a los Gold…- Dice Trisha con tristeza.
-Animo, solo tienes que ser exitosa como agente para que Reina te reconozca- Dice Satella, acariciando la cabeza de su amiga.
-Siento que es un objetivo mediocre…- Dice Trisha, poco convencida.
-Por cierto, el esposo de Freya es un agente de rango Elite- Comenta Tiara.
-Toda una familia llena de talento al parecer…- Dice Reina, con poca emoción.
-Juju, parece que tú también heredaste el talento de la familia, ya que tus padres eran agentes grandiosos- Dice Satella con su sonrisa perturbadora.
-¿Quién sabe? Yo simplemente entreno y demuestro resultados, nada más…- Contesta Reina sin mucho interés.
-Juju ¿Qué motivará tanto a esta reina?-
-…-
Al día siguiente, Reina dejaría de realizar los entrenamientos básicos, para pasar a instruirse con un tutor personal. Se trataba de otra estudiante que ya se encontraba en niveles avanzados, pese a ser bastante joven, teniendo una edad similar a la de Sarah Blair.
-Buenos días Reina-
-Buenos días-
-Me alegra volver a verte-
-¿Eh? ¿Nos conocemos?-
-¿Oh? Mmm… claro, solo me viste una vez… y por poco tiempo, ¡No importa! Me presentaré de nuevo jeje-
-¿…?- Reina trata de recordar en donde vio a esa chica.
-Me llamo Seelie, es un placer conocerte de nuevo, Reina-
-Ah… mmm… ¡Ah! Eres la chica que acompañaba a Roland… y estabas con… ¡Un chico feo que miraba mal a mi amigo!-
-¿Chico feo? ¡Pfff! Jajajaja, hablas de Logan-
-Te escuche… pelirroja…- Dice Logan, apareciendo por detrás.
-…- Reina lo mira sin inmutarse.
-No te la creas mucho, podrás tener una apariencia similar a la de tu madre, pero no eres ni la mitad de bonita con esa actitud…-
-Me da igual, no me interesa ser linda para nadie. Ojala fuese fea-
-¡Hmph! Seelie, no seas amable con ella solo porque es hija de Lynette-
-La entrenaré como se debe, no te preocupes. Ve a cuidar a tus alumnos, chico feo jeje-
-¡Cállate!-
Reina comenzó a recibir entrenamiento por parte de Seelie. Se sentía a gusto con ella y agradecía poder estar lejos del trío que la molestaba. Al menos por un par de horas, pues Trisha siempre iba a desafiarla al final de cada sesión.
-Seelie, me impresiona que seas tan grandiosa con la espada. Y eso que eres bastante joven, creo que tienes como la misma edad de Sarah- Comenta Reina, mientras se toma un descanso.
-¿Te refieres a Sarah Blair?-
-Sí, ¿La conoces?-
-Claro, hemos entrenado juntas en algunas ocasiones. Además, es famosa por ser discípula de Agnes-
-Ya veo. Por cierto… ¿Puedo preguntarte algo sobre Freya?-
-Claro-
-Cuando la observo… noto como tristeza en su mirada o forma de hablar…-
-Ah… si… eso tiene explicación…-
-Además, siento que me observa mucho…-
-Para empezar, ella fue quien instruyo a tu madre-
-Mamá… ¿Entrenó aquí?-
-Así es-
-Ya veo…-
–No solo fue su tutora aquí, también lo fue como agente. Ella apreciaba mucho a tu madre, así que supongo que verte aquí, le debe provocar mucha nostalgia-
-…-
-Y sobre la tristeza que notas en ella, se debe a que… hace no mucho, perdió a su hija…-
-¿Eh? Oh…-
-Wanda Esteban, a pesar de ser una joven adolescente, alcanzo el rango Elite junto con su hermano-
-…-
-Ella… fue asignada a una misión muy peligrosa…-
-Entiendo…-
Al pasar tiempo con Reina, se dio cuenta que esta no se interesaba mucho por saber sobre sus padres. Es por eso que no se atrevió a decirle que Wanda formaba parte del mismo grupo de agentes Elite, “La primera generación” y que murió en la misma misión en la que fallecieron ellos dos.
Reina Alcott avanzaba a buen ritmo en sus entrenamientos. En menos de un año, comenzaría a asistir a la academia de agentes. Debido a su status social, ella contaría con más ventaja para comenzar a ejercer misiones básicas, mucho antes que otros. Un beneficio que compartiría con su amiga Luna, algo que ella misma le exigió a su abuelo.
Algunos días, tras finalizar sus sesiones de entrenamiento con la espada, antes de volver a casa, tomaba un desvío hacia la zona donde hay un lago, lugar que descubrió gracias a Luvia.
Aquel lugar le permitía relajarse. Y aunque queda bastante lejos de la mansión donde vive, no le supone un problema.
Ella se sienta bajo un árbol y contempla el lago, mientras piensa sobre su vida.
-Aaah… entrenar artes marciales desde bien temprano, luego la escuela por la mañana y después la espada… apenas tengo tiempo libre…-
Reina lanza una piedra al agua.
-Luna, Lisa y yo, estamos muy ocupadas últimamente, quisiera volver a tontear libremente…-
Reina cierra sus ojos y se acomoda bajo el árbol.
-Pero cuando no estoy haciendo nada, me siento incomoda… pues quiero ser agente lo más pronto posible…-
Reina se relaja y acaba durmiéndose por un par de minutos. Al abrir los ojos nuevamente, ve un rostro conocido. Se trata de Satella, quien la observa con una sonrisa.
-¡¡¡Hiiii!!!-
-Jajajaja, ¡Te ves adorable mientras duermes!-
-¡¿Y tú qué haces aquí?!-
Reina comienza a mirar en todas direcciones, incluso arriba de su cabeza, más concretamente en las ramas del árbol.
-Juju, Trisha y Tiara no están aquí, puedes relajarte-
-No puedo relajarme si tu estas aquí…-
-Jajajaja ¡No seas mala!-
-¿Y qué quieres? Estas un poco lejos de donde vives…-
-Lo mismo podría decir de ti, Reinita. Tu castillo se encuentra en dirección al centro, ¿No te desviaste demasiado?-
-Puedo hacer lo que quiera en mis ratos libres…-
-Mmm… ciertamente es un lugar muy lindo para relajarse-
-¿Y bien? ¿Qué haces por aquí? ¿Acaso te desviaste tanto de tu casa para venir a espiarme?-
-¡Así es! Jeje-
-¡¡¡Qué miedo!!! ¡¡¡Acosadora!!!-
-¡Jajajaja! ¡Vamos, no tienes que asustarte! No voy a hacerte daño-
-¿Cómo quieres que no me asuste? ¿Qué te traes conmigo?-
-Mmm… pues…-
-…-
-¡Me gusta observar e investigar todo aquello que capta mi interés!-
-¿Ah?-
-Y tú me interesas mucho, Reinita-
-Ugh… siento frio en el cuerpo…-
-Bueno, los agentes investigan mucho, así que está bien lo que hago-
-Debatible…-
-juju-
-*Suspiro* ¿Y por eso te juntas con Tiara y Trisha?-
-¿Oh? Ellas son mis amigas, las aprecio mucho jeje. Aunque también son interesantes y me divierto-
-…-
-Juju-
Reina no puede evitar sentirse incomoda ante la misteriosa y quizás algo espeluznante sonrisa de Satella. Sabe que algo pretende, pero le es imposible leerla.
-¿Y… por qué te resulto interesante…? ¿Solo porque soy nieta del líder…?-
-Juju, Reinita, es claro que no eres alguien muy común. Eres la nieta del líder principal, aquel a quien los líderes de las demás bases responden. Quien está a cargo de todo, quien nos guía. También eres la hija de dos agentes de elite de un grupo famoso, sin duda serán leyendas. Aunque creo que ya comienzan a serlo jeje-
-…-
-Eres la última Alcott. Eres muy linda, por lo que muchos querrán casarse contigo-
-Ugh…-
-Pero todo eso es aburrido-
-¿Eh?-
-No eres la única chica noble que da de que hablar y que termina siendo deseada por muchos. Diría que es bastante común entre la nobleza-
-…-
-¡Lo que me atrae de ti es otra cosa! Juju-
-Me estas asustando mucho…-
-Reinita, tú no eres lo que aparentas ser-
-¿Eh?-
-¿Por qué de pronto, todo mundo comenzó a hablar de ti? ¿Qué era de Reina, antes?-
-…-
-Tus padres estaban retirados, no solo eso, sino que ni siquiera vivían aquí. ¿Dónde estaban?-
-…-
-Juju, investigando por ahí a tus compañeros de clases, pude obtener información, según lo que ellos escuchaban de ti-
-…-
-Reinita… ¡Estuviste viviendo en el mundo exterior como alguien ajeno a Ancardia! ¿Cierto?-
-…-
-De pronto, tus padres mueren y apareces aquí, provocando que empiecen a hablar sobre ti-
-…-
-Desconoces muchas cosas, no actúas como todos esperarían de una noble como tu-
-…-
-Y tu mirada, no es la misma que la de muchos otros. Tú emites un aura distinta, es como que no perteneces del todo a este mundo. ¿Acaso es porque tienes esencia del exterior? Jeje-
-¿Y qué si he vivido en el exterior?-
-¡Pues eso es lo que te hace súper interesante! Para empezar… ¿Cuál es tu motivación?-
-…-
-¿Seguir el camino de tus padres? ¿Casarte con algún agente de buena familia? ¿Traer gloria a los Alcott?-
-…-
-¡Nah! ¡Está claro que no tienes esos objetivos tan aburridos! Se nota que no eres asi jeje. Entonces… aun así… quieres ser agente… y te esfuerzas mucho por ello…-
-…-
-Mmm… ¿Cuál es tu motivación real? ¿Qué esperas conseguir?-
-¿Por qué debería conseguir algo?-
-Porque nadie se esfuerza tanto por nada jiji-
-…-
¿Acaso Reina Alcott busca recuperar algo? ¿Algo que dejo atrás en el viejo mundo?-
-¡¡¡…!!!-
-¡Claro! ¡Al estar aquí! ¡Estas como un ave enjaulada! No puedes volver al exterior…-
-…-
-¿Pero qué dejaste allí? Juju-
-Tienes demasiada imaginación. No tengo nada interesante que contar, soy una chica aburrida, es todo-
-¿Quizás tenias un novio?-
-¡¡¡…!!!-
-Jajajaja, ¡Imposible! El romance no encaja contigo. Mmm… ¿Un amigo o amiga? ¿Eso es lo que buscas recuperar?-
Reina se sentía acorralada y sorprendida de que Satella haya llegado a la verdad. Se replanteó cuidar lo que dice en público. Pues al todos estar pendientes de ella, si no tiene cuidado, podrán usar lo que dice en su contra.
Estaba frustrada, deseaba golpearla, pues le daba rabia que alguien tan meticulosa, estuviese detrás de ella.
Para evitar que su objetivo se descubriese y llegase a oídos de su abuelo. Reina forzó su corazón a enfriarse como nunca antes y así poder decir…
-Es verdad, cuando vivía en el mundo exterior, tenía un amigo al que quería mucho-
-¡Oh!-
-Mis padres no me hablaron sobre Ancardia, asi que fue todo nuevo para mí al llegar aquí-
-¿Entonces deseas recuperar a ese amigo?-
-No-
-¿Oh? ¿Por qué no?-
-Al principio estaba triste por haberme separado, pero con el tiempo lo superé. Además, pude hacer amigas nuevas aquí. Me divierto más con ellas y cuando quise darme cuenta, deje de pensar en ese amigo-
-Qué triste…-
-Ya no tenemos nada en común, no podría entenderme con él. Por eso mejor olvidarlo y concentrarme en quienes realmente valen la pena-
-Oh… que cruel… ¡Pero va mas contigo! Jajajaja-
-Supongo…-
-Mmm… ¿Entonces cuál es tu objetivo?-
-Obtener el nivel y fortaleza necesaria para que me dejen en paz y hacer lo que quiera con mi vida. Nada más…-
-Mmm… ya veo…-
-¿Contenta? Ahora déjame en paz-
-Mmm… Entonces Reina esta triste…-
-¿…?-
-Reina está enojada… Reina actúa con frialdad… Reina no siente interés por el mundo que le rodea…-
-Oye…-
-Reina busca poder para solo alejarse de todos…-
-…-
-Reina no extraña a su familia… Reina no aprecia las amistades del pasado-
-¡Oye!-
-Reina no ama… Reina… esta vacía…-
La joven pelirroja sujeta a Satella por el cuello de su camisa, la mira con mucho enojo, apretando los dientes. Pero Satella no se inmuta, se mantiene sonriente…
La respiración de Reina es agitada, desea golpearla pero trata de detenerse, pues no quiere meterse en problemas.
Satella entre cierra sus ojos mientras sonríe levemente, mostrando sus dientes. Se siente satisfecha por haberla alterado tanto. No teme a ser golpeada, pues ya obtuvo lo que quiso.
-¿Oh…? ¿No me vas a pegar?-
-Vete… y déjame en paz…-
Reina se aleja y regresa a casa. Debido a la distancia, ella suele moverse con vehículos que conducen los propios criados de su mansión, pero esta vez regresa caminando. Su frustración es tan grande que no le da importancia a esto y simplemente avanza…
Una vez que llega, siendo ya de noche, ignora a los criados que se preguntan el motivo de que llegase tan tarde.
Reina los ignora e ingresa a su habitación y comienza a llorar…
-*Snif* Perdón Zero… yo… *Snif* no lo dije enserio… *Snif* esas cosas tan horrendas que dije… no eran enserio… *Snif* perdóname…-
Las palabras de Satella le habían afectado mucho. Si ella no tuviese el objetivo de volver a ver a su amigo, ¿Entonces que le queda?
“Reina esta vacía”, una frase que le atormentaría por bastantes años…
Sin embargo, también le atormentaba otra cosa.
¿Realmente todo lo que dijo sobre su amigo, era mentira? ¿Y si fuesen sus pensamientos reales? ¿Y si su objetivo es solo un simple capricho infantil?
¿Zero es necesario en su vida?
Reina sabía perfectamente que pudo continuar su vida, sin tener a sus padres a su lado. Y sin tener a su preciado amigo…
==FIN DEL CAPITULO==
Comments for chapter "9-09"
QUE TE PARECIÓ?