The Lost Crystallus - 9-17

En lo alto de un gran edificio abandonado, dos siluetas observan el cielo nocturno de la ciudad. Una pequeña niña junto a su hermana mayor.

-Hermana… ¿Por qué mandaste lejos a Kei y Mei?-

-Porque necesitan pulir un poco sus habilidades y obtener más conocimiento. Son fuertes, no lo niego, pero necesitan mejorar más, si queremos dominar toda esta ciudad-

-Hermana… ¿Crees que yo pueda volverme tan fuerte y grandiosa como tú?-

-Juju, sin duda. ¡Naciste con más potencial que yo! Solo necesitas pulirlo. Y no apuntes a ser como yo, sino mejor-

-¿Mejor…? ¿Yo…?-

-No te dejes engañar, siempre se tu quien engañe a los demás. No dejes que tus sentimientos te confundan, solo se fiel a tu familia, nadie más. Miente, roba, lastima, demuestra bien quien manda-

-…-

-Todo lo que te sirva de herramienta, es válido, incluso personas. Este mundo está podrido, más de lo que tus ojos ven. Si no quieres que te aplasten, entonces oblígate a ser quien lo haga a otros. ¿Está claro?-

-¡Si hermana!-

-Imita a los tontos que viven una vida cómoda y normal. Aprende el comportamiento de quienes están del lado del bien-

-¿Por qué?-

-Para poder engañar, hace falta comprender primero a tu víctima, su modo de vida, su manera de pensar. De esa forma sabrás como hacerlo. Si vas por ahí con cara de mala, entonces te dejarás en evidencia, ¿No crees?-

-¡Ah! E-Entiendo…-

-Vivimos una vida emocionante pero llena de peligros. Ten presente que podremos morir en cualquier momento. Eso nunca cambiará, por más que ya no estemos en nuestro antiguo hogar…-

-¡Me volveré mas fuerte! ¡Te superaré! ¡Para que nadie de mi familia muera!-

-Jeje, no pierdas ese lado adorable-

 

La hermana mayor, acaricia la cabeza de su hermana menor. Una escena que puede parecer adorable, cálida y familiar a simple vista. Pero que en realidad es la representación de dos semillas de pura oscuridad, que han caído en la ciudad capital, para sembrar el caos total.

 

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Tras quedar atrapada en un mar de oscuridad. Reina Alcott, abre los ojos nuevamente, la luz es fuerte, por lo que su visión es borrosa. Escucha gritos e insultos, reconoce la voz, se trata de Zack.

-¡Finalmente despertaste!-

-¿Eh…?-

-Tranquila, apenas fueron unos 20 minutos-

-¡Ah!-

 

Reina finalmente vuelve a recuperar el conocimiento y a recordar su situación. Se encuentra atada junto a un tubo. Los gritos que escucha, son de su compañero que protesta por la golpiza que está recibiendo de quienes hace unos minutos, eran aliados.

Observa su propio cuerpo, su ropa no se ve alterada, ni presenta heridas, solo el golpe que recibió, el cual aun le sigue doliendo.

Se siente aliviada de que no le hayan hecho nada raro mientras estaba inconsciente. ¿Pero por cuánto tiempo más será así?

-Tú… ¿Qué mierda fue lo que hiciste para que ellos…?-

-¿Mm? Claro, les debe estar carcomiendo el cerebro, el ver que de pronto fueron traicionados-

-¡¡¡Habla maldita perra!!!- Grita Zack, quien se encuentra atado en una silla en un rincón, siendo golpeado brutalmente.

-¡Jajajaja! ¡Ni sufriendo tremenda golpiza, apagas esa llama de furia! ¡Me encanta!-

-¿Por qué…?- Pregunta Reina, sintiendo una profunda frustración.

 

Sadokawa sonríe al ver su rostro, se acerca y con su mano, acaricia la mejilla de la joven pelirroja.

-¿Quieres saber? Te lo diré, simplemente hice lo que ustedes al parecer no hacen-

-…-

-Escuchar-

-¿…?-

-Jajajaja, ¡Eso que dije!-

-…-

-Me fui acercando poco a poco, observándolos con paciencia. Y entonces me convertí en eso que ellos necesitaban con desesperación.

Alguien que esté ahí para escuchar…

Alguien que brinde un consejo…

Alguien que de comprensión…

Alguien que de un abrazo…

Alguien que ofrezca calor y placer para el desahogo…

Y finalmente, alguien que de oportunidad de un futuro mejor-

-¿Eh…?-

-Parece que muchos agentes están bastante frustrados. Enserio, ¿Por qué les meten tanta presión en sus vidas? ¿No son héroes honorables al simplemente hacer su trabajo? Pero parece que sus familias ansían la gloria, más que nada en el mundo. Todo para presumir ante el resto de nobles jeje-

-¡¡¡…!!!-

-Enserio, ¿Por qué se complican tanto con esas cosas? ¿No están anticuadas ya? Aunque bueno, competencias y querer sentirse superior, es cosa del ser humano en si jeje-

-Entonces… tu…-

-Sí, me tome la molestia de ir acercándome poco a poco a ustedes. De ir ganándome la confianza de aquellos agentes tan vulnerables, de escuchar sus problemas, de poner mi hombro para que lloren. Incluso…-

-Te acostaste con ellos… que desagradable eres…-

-¡Jajajaja! ¿Por qué? Yo también sentí placer, me divertí al igual que ellos. Yo no soy una princesita que piensa que esos actos son solo para el verdadero amor. Pero no puedo culparte, se nota que aun eres una mocosa. Que sepas usar una espada, no te libra de ello jeje-

-…-

-Tú y tu compañero, no se molestaron en intentar comprender al resto. Simplemente daban órdenes desde arriba. Aaah… si hubiesen intentado empatizar, aunque sea un poquito con el resto, hubiesen notado el resentimiento que cargaban algunos. La envidia, el desprecio, el odio…-

-…-

-¡Parece que eres de buena familia! ¡Todos los privilegios que muchos sueñan con tener! Y por eso te odian, te juzgan sin molestarse en conocerte. ¿Lo entiendes? ¡Eres una mierda por lo que tienes! Jajajajaja ¿Y por qué? ¡Porque el mundo es así de podrido! Jajajaja-

-…-

-Aaah… daba igual si te sentías mejor que el resto o no. Algunos te van a odiar, otros solo admirar. Pero si no te hubieses mantenido tan apartada, habrías comprendido mejor tu entorno y evitar esto-

-…-

-Muchos agentes están artos de sus familias, de la presión de ser mejores, de ser tratados como basura por no ser nobles. Se cansaron y decidieron unirse a mi causa. Yo ofrezco algo mejor, pues a esta ciudad, no… ¡Al mundo le espera un gran cambio! ¡Un lugar mejor! Y yo puedo llevarlos a quienes realmente nos guiarán-

-Tú… eres… una…-

-Juju esa cara es genial, ¡Ese odio en tu rostro es esplendido! Aaah… me gustó mucho jugar contigo. Eres fuerte, pero predecible, ¡Puedo ver tu interior! ¡Eres un mar de conflictos contigo misma!-

-¡¡¡…!!!-

-Pero hasta aquí llegaste, es una lástima, pero así funciona esto. Vas a morir, ¡Pero descuida! Como me caíste bien, dejaré que te marches de este mundo, conservando tu pureza jeje-

-…-

-Ah… y otra cosa, tus ex agentes me contaron rumores interesantes sobre ti. Al parecer, de niña tuviste una vida normal, en esta misma ciudad-

-¡¡¡…!!!- Reina no puede evitar mostrar una expresión de horror.

-¿Puede ser que conserves a algunos amigos importantes de esa época? Jeje… por tu rostro, parece que al menos uno si…-

-…- El corazón de Reina no deja de latir fuerte.

-Voy a investigarlo, para luego divertirme mucho juju- Dice Sadokawa, mientras se relame los dedos.

 

Aquellas palabras, impactan en Reina, como si una gran flecha quisiera destrozarle el corazón…

La humillación…

La frustración que carga desde hace años…

Y el miedo de que la persona que tanto desea volver a ver, acabe sufriendo por su culpa…

Todo eso se acumula y finalmente…

Estalla…

Reina aprieta los dientes, libera su aura verde con intensidad y forcejea, llevando al límite sus músculos.

-¿Eh? Ese brillo alrededor de su cuerpo… es como… el de aquella bruja…- Menciona Sadokawa, sorprendida al ver el aura de la joven agente.

 

Zack, al ver a Reina, decide imitarle, liberando toda su furia en un aura de un color azul oscuro.

Con un fuerte grito, Reina logra romper las cuerdas que mantenían sus manos atadas junto a un tubo.

Respirando de forma agitada y mostrando una mirada de bestia, Reina Alcott se deja conquistar por una furia que jamás había sentido…

Uno de los agentes traidores, salta atacarla, pero Reina le da un puñetazo en el estomago tan potente, que lo estampa contra la pared.

-*Jadeo* No te lo perdonaré…-

-¡Oh! ¡Sí que lo rompiste! Jeje- Comenta Sadokawa con una sonrisa.

-*Jadeo* No… dejaré… que lo lastimes… *Jadeo* a “el” no…-

-¿Mm? Jeje… oblígame-

 

Reina grita de furia y se lanza hacia ella, pero Sadokawa logra esquivarla por muy poco, rodando por el suelo.

-*Jadeo* En verdad… te odio… como no puedes imaginar…- Comenta Reina, quien derrama lagrimas por la gran frustración que siente.

-Jeh… admito que ese poder raro tuyo, me hace temblar de miedo…-

-¡Reina!-

 

Zack también logro liberarse de sus ataduras. Con su cuerpo lleno de heridas y una mirada similar a Reina…

-Me ocuparé de todos estos traidores de mierda y el resto de delincuentes. Te encargo a esta basura…-

-Si… quiero hacerla sufrir mucho…-

 

Los agentes corren al ver el aura de Zack. Este va tras ellos, sin tenerles piedad alguna…

Reina toma su espada, que se encontraba apoyada en un rincón, la desenvaina y la envuelve con su aura…

-Jeh… esto es malo…- Dice Sadokawa, mostrando preocupación sin dejar de sonreír.

-Aquel que amenace a Zero… merece morir…-

 

Reina ataca con su espada, pero Sadokawa lo evita a duras penas. Al ver que esta con desventaja, trata de escapar, pero Reina se le adelanta, bloqueándole la salida.

Sadokawa saca dos cuchillos y se lanza a pelear. En cuanto bloquea un ataque, siente el tremendo poder de la joven agente. Su defensa se rompe y Reina avanza, cortándole el brazo derecho.

-Ahora te cortaré el otro… y luego las piernas…-

 

Sadokawa se desploma de rodillas y sujeta su gran herida…

-Ugh… esa cosa… es bastante tramposa… que poder… tan… mentiroso…-

-¿Aun puedes hablar…?-

-Jeje… joven agente… cuyo nombre es Reina Alcott…-

-…-

-Tus adorables agentes me lo dijeron… Yo… soy la líder… de la familia… Sadokawa… sin nombre, solo soy… Sadokawa. Mi objetivo principal… es… darle un buen lugar a mi familia… mis hermanos…-

-…-

-Jeh… y para ello… he tenido que hacer muchas cosas malas… pero eso me llevo… con las personas indicadas…-

-…-

-Eso… me da acceso a cosas… interesantes…-

-…-

-*Jadeo* Ugh… como duele… jeje… pero esto… *Jadeo* aún no se acaba…-

-¡¡¡…!!!-

 

Sadokawa saca una jeringa con un líquido extraño y no duda en inyectárselo. Entonces comienza a gritar de dolor mientras las venas de su cuerpo se hacen notar…

Entonces un aura azul se manifiesta, pero luego cambia de color a un tono purpura…

El muñón de su brazo se cierra con una capa de cristal del mismo color de su aura.

-¡¿Pero qué?! ¡¿Qué hiciste?!-

-Je… jeje… me dijeron… que era algo experimental… pero no me quedaba otra salida… me acorralaste bien…-

-N-No puede ser… ¡¿Cómo obtuviste la capacidad de tener S.E?! Y ese color…-

-Aah… siento mi cuerpo… mucho mejor… ¿Así es como te sientes tu?-

 

Sadokawa se impulsa hacia adelante y le da una patada a Reina, quien logra protegerse, aun así, siente el enorme poder de su enemiga.

-Ugh… si no me hubiese protegido…-

-Estamos igualadas, pelirroja-

-En verdad… eres insoportable… ¡¡¡DESAPARECE DE MI VIDA!!!-

 

Reina se impulsa hacia ella, logrando embestirla y llevarla contra un muro. Ambas lo atraviesan, saliendo al exterior y cayendo en otra torre del complejo abandonado.

Las dos sufren bastantes heridas, pero se reincorporan y continúan peleando. Sadokawa arremete y golpea con éxito a Reina, tanto patadas como puñetazos.

Pero la ira de la joven, es tanta que ignora todo el dolor de sus heridas y ataca sin retroceder. Poco a poco va cortando la piel de su enemiga, por todas partes.

Sadokawa concentra todas sus fuerzas en sus piernas y le da una poderosa patada en el estómago. Reina sale despedida contra unos escombros.

-*Jadeo* Ugh… mi cuerpo… se siente… extraño… creo que no duraré mucho más…- Comenta Sadokawa, escupiendo sangre.

 

Reina se levanta nuevamente, sangrando en varias partes y observando a su enemiga con odio. Se impulsa hacia adelante con un grito tan fuerte como el rugido de una bestia. Sadokawa intenta enfrentarla, se produce una colisión de ataques. Sadokawa logra hacerle frente con su cuchillo, a la espada esmeralda de Reina.

La velocidad es pareja y las colisiones retumban por todo el complejo. Sin embargo, la furia de Reina incrementa a cada segundo, haciendo que logre superar en poder a su enemiga. Y entonces…

El otro brazo de Sadokawa sale despedido, pero Reina no se detiene allí. Alzando su espada, arremete con una estocada que atraviesa el torso de la villana, llevándosela consigo hasta estamparla contra el muro.

Una gran nube de polvo se alza. Y cuando se despeja, Reina observa a su enemiga, totalmente derrotada y con una apariencia que solo da pena.

-¿Satisfecha…? Ganaste…-

-…- Reina se mantiene callada, mirándola fijo.

-Aah… esto también podía pasar… el riesgo de perder… y morir… siempre está presente en este tipo de vida…-

-…-

-Tu… también lo entiendes mejor ahora… ¿Cierto…?-

-…-

-Si… *Cof* esa mirada que tienes… me gusta…-

-…-

-*Jadeo* Esta… es la manera… de poder ganar… convirtiéndote… *Cof* en un monstruo… para poder… vencer a otro… jeje…-

-…-

-Aaah… no me arrepiento… viví como mejor pude… como… mejor… aprendí…-

-…-

-Mi familia… aprendió bien… y continuarán… con el plan…-

-…-

-Disfruta… de tu victoria sangrienta… jovencita… juju…-

 

Sadokawa cierra los ojos y muere con una sonrisa. Reina retira lentamente la espada, empapada de sangre. Su corazón aun late rápido y la furia no le abandona.

De pronto escucha unos pequeños pasos, al voltear, ve a una pequeña niña, que le recuerda a Sadokawa.

Reina alza su espada, dejando la punta a centímetros de la nariz de la pequeña. Su mirada se mantiene aterradora, haciendo que la niña sienta un miedo que nunca podrá olvidar.

-Ah… ah…-

-Intenta algo extraño… y no dudaré en matarte… me da igual que seas una niña…-

-¡¡¡…!!!-

 

La pequeña se queda paralizada y pálida del terror. Reina abandona lentamente el lugar.

Una jovencita Nobu, queda atormentada, tanto por ver a su hermana sin vida, como por la mirada de quien fue su asesina. Pero intentar vengarse, sería algo impensable, pues nada podría hacerle a esa muchacha tan siniestra.

Reina Alcott camina lentamente, ignorando los cuerpos sin vida de tanto delincuentes como agentes traidores. Aun se escucha el sonido de una intensa batalla entre los agentes de Ancardia y el resto de mafiosos.

De pronto, se detiene frente un espejo roto, pero suficiente para ver su propio reflejo. En ese instante, finalmente se da cuenta de lo que realmente hizo. Su cuerpo está manchado con sangre que no le pertenece, al igual que su espada, la cual deja caer al sentir espanto.

-Ah… ah… y-yo…-

 

Su respiración se acelera, su corazón parece querer escapar de su cuerpo.

Reina comprende que ha cruzado una línea de no retorno…

Mira su mano y se horroriza al verla tan sucia con la sangre de quien fue su enemiga. Entonces se desploma de rodillas en el suelo…

Es en este momento, que termina de comprender lo que su abuelo le dijo hace años…

De cómo no sería posible volver a ver a su amigo. Aunque, de hecho, no es que no sea posible, más bien no era recomendable que lo hiciera, pues sus vidas son demasiado diferentes…

No es posible que haya comprensión…  ni entendimiento por ambas partes…

Y lo más importante, que la presencia de Reina, ya supone un peligro para su amigo. Tal como sucedió esta noche…

-Ya… Y-Ya no… puedo ver… a Zero…-

 

El olor a sangre y los recuerdos recientes de lo que hizo, le provocan fuertes nauseas. Sin poder soportarlo, vomita…

A pesar de todo, la operación fue un éxito, pues la raíz principal de oscuridad, fue erradicada. Los supervisores de Reina, lograron encontrarla y llevarla hasta los vehículos para que regrese al hotel. Sin embargo, su corazón ya estaba roto y apenas hacia caso a su alrededor.

Ni siquiera se dio cuenta de cuando trataron sus heridas. Apenas pudo concentrarse para relatar su informe y recibir felicitaciones.

Le dijeron que podía ir a descansar a su habitación, que los demás se ocuparían del resto. En el camino, se topo con Zack, quien presentaba vendajes por todas partes. Ya era sorprendente que pudiera seguir de pie, siendo que recibió más heridas que ella.

-Vaya noche… ¿Cierto?-

-…-

-Odio admitirlo, pero nos confiamos demasiado y casi nos cuesta la vida. Esa mujer era demasiado astuta y no dudaba en hacer lo que sea, con tal de ganar. Aunque se trate de lo más retorcido que pudieses imaginar…-

-Zack… ¿Qué sucedió… con… los que nos traicionaron…?-

-Los mate a casi todos, solo deje a dos para que los interroguen-

-Ya veo…-

-Eran basura e intentaron llevarnos a la muerte, no iba a tener compasión-

-Supongo que no…-

 

Reina no dijo nada para criticarlo, ¿Qué derecho tenia, cuando ella también estaba manchada de sangre ajena?

Al ingresar a su habitación, se dio una ducha, pero por más que la sangre de su cuerpo se limpió, ella seguía sintiéndose sucia.

Al acostarse en la cama, comenzó a llorar desconsoladamente.

-*Snif* Yo… no puedo ver a Zero… *Snif* no de esta manera… *Snif* no siendo lo que soy ahora…-

 

Toda su lucha fue para nada. Su meta siempre fue inalcanzable…

La escalera que creía estar subiendo para alcanzar su luz, era en realidad una escalera que iba descendiendo hacia el vacío…

Reina Alcott ya no tiene una meta…

Ya no tiene un propósito…

-*Snif* ¿Qué se supone… que voy a hacer ahora…?-

 

Apretando fuerte los puños, da un grito mientras derrama lagrimas que no parecen tener fin…

-*Snif* Perdóname… Zero…-

 

==FIN DEL CAPITULO==