The Lost Crystallus - 9-22

[Presente]

[Luna recibió el alta médica y regreso a su casa, aunque su brazo aun no se ha recuperado del todo. Su amiga Lisa insistió en quedarse en su casa para cuidarla hasta que termine de sanar.

Al comenzar a caer la noche, ambas disfrutan de una tasa de Te mientras platican de diferentes temas. De pronto, la menor de las Blair, comienza a reflexionar sobre cierto tema…]

 

[Lisa]

-Sabes… debo confesar que hay algo que siempre me preocupó…-

-¿Oh? ¿Qué cosa?- Pregunta Luna, sorprendida por mis palabras.

-Cuando Reina fue a visitar a Zero, hace tres años, cierto día tuvieron un festival escolar…-

-¡Ah! Si, fue donde ambos se besaron, ¿Cierto? Zero me lo contó, me sorprendió bastante lo lejos que llegó Reina jeje. ¿Qué pasa con eso?-

-Bueno… la realidad es que yo lo ya lo sabía-

-¿Eh? ¿Enserio?-

-Reina me llamo para contármelo, pero me dijo que no quería que tú lo supieses o armarías un escándalo-

-Jeje… supongo que sí, no puedo culparla-

-Reina estaba muy confundida y asustada…-

-Es comprensible. Ella pronto tendría que despedirse y ya se había involucrado mucho sentimentalmente. Yo ya había previsto ese escenario, a pesar de que me resultaba difícil de imaginar a una Reina enamorada. Hoy día ya se me hace muy normal jeje- Dice Luna, sonriendo mientras disfruta de su bebida.

-…-

-¿Qué pasa, Lisa?-

-En aquel momento, Reina me pregunto si haberse enamorado de Zero, era un error-

-…-

-Y yo… le dije que si…-

-Mmm… ya veo…-

-Después de eso, Reina comenzó a evitarlo y al final… todo acabó mal…-

-¿Te arrepientes?-

-Si…-

-¿Por qué le dijiste eso? No te estoy reprochando, solo tengo curiosidad-

-En ese momento, estaba resignada a creer que mi destino era acabar cumpliendo los caprichos de mis padres. Que… sentir aprecio por mi hermana era un error, porque me daba esperanzas de un cambio que era imposible que sucediera…-

-…- Luna me escucha atentamente.

-Plasme mi propia frustración en mi amiga… y le dije que era un error…-

-…-

-Cuando me enteré de que Zero había llegado aquí, buscándola… yo…-

-Entiendo. Con razón te notaba algo nerviosa y distante al principio, aunque no le di demasiada importancia-

-Si no le hubiese dicho eso… quizás… todo hubiese resultado mejor…-

-¿Zero lo sabe?-

-No… nunca me atreví a decírselo, porque… me daba miedo de que acabase odiándome…-

 

Luna se queda en silencio, luego bebe un sorbo de té para después sonreír.

-Jeh, no hay manera de que Zero pueda llegar a odiarte. El estuvo mucho tiempo solo, sufrió bastante rechazo por años, es por eso que valora muchísimo a sus amistades-

-…-

-No hace falta decir que nos quiere mucho, ¿Verdad?-

-Lo sé. Nos salvó a mi hermana y a mí, de nuestra familia-

-Ahí lo tienes. Y sobre la respuesta que le diste a Reina aquella vez. Pues… quizás daba igual lo que le dijeras, ya que no iba a cambiar el resultado-

-…-

-Además, pienso que fue bueno en cómo se dieron las cosas. Ambos atravesaron mucho dolor, pero eso les sirvió para crecer y aprender. Gracias a eso, es que su relación funciona de maravilla hoy día- Reflexiona Luna.

-Creo que tienes razón-

-Aunque… esos dos ya se están tardando bastante. Ya son libres, ¿Por qué no se confiesan de una vez? Todos queremos que se amen-

-Jeje, creo que sucederá pronto-

-¡Y quiero que me den muchos sobrinos! Bueno… con uno estaría bien, ¡Una linda sobrinita para jugar! Jeje- Dice Luna mientras libera sus orejas, lo que indica que ya comienza a decir tonterías.

-Ay Lunita… tu nunca pierdes tu humor-

-¡Ya tuvimos mucha tristeza! ¿No crees?-

-Supongo que sí. Necesitamos un poco de alegría-

 

——————————————————–

 

Reina Alcott se detuvo frente a la puerta principal de su apartamento. En cuanto pensó en su amigo, todo su cuerpo quedo paralizado.

Algo extraño estaba sucediéndole. Algo que nunca espero sentir en su vida. Por primera vez no tiene el coraje para poder verlo.

¿No desea verlo?

Ante tanto miedo y dolor, le es imposible poder encontrar una respuesta…

Los siguientes días, se concentro solamente en el trabajo, ignorando y evadiendo a su amigo. Ni siquiera era capaz de mirarlo a los ojos…

 

Cierta noche, Verónica se sorprendió de encontrar a Reina, aun en la tienda, trabajando en una computadora, con una mirada llena de angustia y sueño.

-¿Qué estás haciendo? Ya es bastante tarde-

-Estoy… organizando informes… y puliendo estrategias…-

-Reina…-

-Está bien, me iré en cuanto comience a amanecer. No ire a la escuela hoy, no pasará nada con faltar un día…-

-¡Reina!-

-…-

-¿De verdad vas a pretender que no notamos tu enorme cambio de actitud?-

-…-

-¿Quedarse hasta tarde organizando archivos? ¿Enserio? No digo que seas floja, solo que nunca te ocupaste de estas cosas. De hecho, no necesito que tú lo hagas…-

-Lo siento…-

 

Verónica suspira, luego agarra una silla y se sienta frente a Reina.

-Muy bien, ¿Qué sucedió en aquel festival escolar?-

-…-

-*Suspiro* El chico se dejo llevar por sus impulsos, quiso besarte de una manera brusca, tú te asústate, lo rechazaste de forma violenta y todo termino horriblemente mal, ¿Cierto?-

-¿Eh?-

-Mira, así suelen ser los chicos adolescentes, pero no creo que en su caso haya sido con maldad y…-

-¡Todo salió de maravilla! ¡Zero no es esa clase de chico! ¡Él nunca me atacaría de esa forma! ¡Él es alguien dulce y amable!-

-¡Esta bien! ¡Está bien! ¡Lo siento! ¡No pretendía ofender a tu amigo!-

-¡Hmph!-

-Entonces… si todo salió bien, ¿Por qué le has estado evitando?-

-…-

-De pronto comenzaste a dedicarte más a la misión y menos a tu otra vida. Además, se nota en tu mirada una enorme tristeza, todo mundo está preocupado-

-…-

-Necesitas hablar con alguien, así que estoy aquí para escucharte-

-Pues…-

-Explícame que sucedió en ese festival-

-Zero y yo, nos divertimos muchísimo. Hicimos muchas cosas, pero el evento más importante, fue en la noche. Bailamos juntos alrededor de una gran fogata, nos dijimos muchas cosas lindas y…-

-Se besaron, ¿Cierto?-

-Después de eso… no pudimos dejar de hacerlo. Entonces… lo invite a mi apartamento donde…-

-Por favor… dime que usaron protección…-

-*Rubor* No hicimos eso… solo nos quedamos abrazaditos y nos dimos muchos besos…-

-¿Enserio no tuvieron…?-

-No…-

-¿No intento quitarte la ropa?-

-No…-

-¿Ni tú a él?-

-Me voy a enojar…-

-Vaya par de adolescentes responsables que resultaron ser. Eso o quizás algo cobardes…-

-Verónica…-

-Bueno, mejor, si acabases embarazada, tendría muchos problemas-

-¡Verónica!-

-Ya… lo siento. Tuviste una noche mágica y luego todo comenzó a salir mal. ¿Por qué?-

-Yo… estoy enamorada de Zero… ¡Lo amo con todo mi corazón!-

-…-

-*Snif* A pesar de los besos… las caricias… y las frases bonitas que nos dijimos… yo… ¡No pude decirle que lo amo!-

-…-

-*Snif* No pude… ¿Sabes por qué…?-

-Porque eres agente de Ancardia y no puedes quedarte con él-

-*Snif* Exacto… *Snif* Enamorarme… de él… es un error…-

 

Verónica respira profundo y luego inclina su silla hacia atrás, mirando hacia el techo.

-Ten cuidado con lo que dices…-

-¿Eh…?-

-Decir que haberte enamorado de él, es un error, significa un total desprecio hacia su persona. Casi que me hace sentir lástima…-

-¡Yo no siento desprecio por Zero! ¡Jamás…! Yo no…-

-Aunque entiendo que estas en una posición complicada…-

-*Snif* No hay futuro para nosotros…-

-Mmm… quizás… si exista una manera…-

-¿Eh? ¿Cuál…?-

-Podrías solicitar un puesto fijo aquí en la ciudad. Tienes un buen historial, no debería resultarte complicado-

-Es… una buena idea… pero… si hiciera eso para continuar viendo a Zero…-

-Tus superiores se darían cuenta de tu relación con alguien normal del mundo exterior y podrían intentar separarlos…-

-…-

-Solo si eso en verdad resulta ser algo malo…-

-¿Eh?-

-Si manejas bien tus cartas, podrías comenzar explicándole toda la verdad a tu amigo. Si lo acepta y quiere quedarse contigo, entonces lo siguiente seria ir fortaleciendo poco apoco su relación. Entonces tus superiores podrían aceptarlo. No creo que una persona normal del exterior que sepa de Ancardia, pueda causar tanto daño-

-Oh…-

-No te preocupes, prometo hablar a tu favor para que puedas convencerlos-

-*Rubor* Verónica… yo… apreciaría mucho eso…-

-No será algo sencillo, pero es mejor que nada-

-Si…-

-Bien, ya estamos por dar el ataque final. Mejor resuelve todo con tu amigo después de la misión. Dile que estabas triste porque tienes que irte pero que volverás, podrán ser una pareja y cosas así-

-Está bien… de todas formas… aun no tengo coraje para verlo…-

-Ten cuidado Reina, aunque no lo parezca, los chicos tienen corazones frágiles. Que los ignore la chica que les gusta, los destruye por dentro-

-E-Entiendo…-

-Ya, vete a dormir-

 

Reina se levanta y se prepara marcharse, pero se detiene un momento para…

-Gracias Verónica, eres una excelente persona-

 

Aquellas palabras logran enternecer a Verónica. Y tras ver a Reina marcharse, se queda pensativa hasta que finalmente le viene un recuerdo.

-¡Ah! Ya recordé…

Esos niños que aparecieron hace años, tomados de la mano y pidiendo ayuda porque estaban perdidos…

Jeh… vaya historia que tienen esos dos. En verdad espero que puedan terminar juntos. Aunque no lo tendrán sencillo.

Joven, te enamoraste de una chica muy linda pero con una historia muy complicada. La vida va a poner a prueba tus sentimientos, ¿Podrás ser capaz de estar a la altura?-

 

Reina se había centrado tanto en sus propios conflictos, que había ignorado los sentimientos de su amigo. Este al no soportar más el hecho de ser ignorado, ideo un plan con ayuda de sus dos amigos para tenderle una trampa a  Reina y así poder hablar con ella.

Ambos se reencontraron en plena calle, en una ubicación donde no suelen transitar. La joven no estaba preparada para enfrentarlo, así que de forma automática, trata de evitarlo y marcharse.

-¡¡¡DEJA DE EVITARME!!! ¡¡¡ME DUELE MUCHO!!!-

-¡Ah!-

 

Aquel grito la deja paralizada. Entonces voltea lentamente a mirarlo, dándose cuenta de todo el daño que le había provocado.

-¡Solo escúchame un momento! ¿Está bien?-

-S-Si…-

-Tengo miedo, ¿Sabes? No quiero perderte, no quiero que nuestra relación se arruine. ¡Eres lo más preciado en mi vida!-

-*Rubor* Zero…-

 

“Yo también tengo miedo…

Tampoco quiero perderte…”

-Quizás fue apresurado, quizás fue un error, no lo sé… ¡¡¡Pero me gusto mucho haberte besado!!! ¡Lo deseaba con toda mi alma! ¡Me repugna la idea de que alguien más lo haga! ¡Me aterra y enoja pensar que otro conquiste tu corazón!-

-…-

 

“Zero… yo…

¿Qué demonios estaba haciendo…? Soy una tonta…

Todo eso que dices… yo también… lo siento…”

-No me arrepiento de haberte besado, era lo que quería. Para mí fue el momento más feliz de mi vida. No pienso esconderme, no pienso hacer de cuenta que eso no sucedió, ¡No pienso olvidarlo!-

-…-

 

“Zero…

Te hice sentir despreciado…

Te hice creer que esa noche fue algo horrendo para mí…

Pero no es así… ¡Es todo lo contrario!”

-Puede que para ti fuese algo desagradable. Quizás ya no quieras verme mas, ¡Quizás la relación ya se fue a la mierda por mi culpa!-

-…-

 

“¡No! ¡No es así! ¡Tú no hiciste nada malo!

La idiota soy yo… que no pensó en el daño que te estaba causando…”

-Pero no puedo hacer nada. Yo… hice lo que deseaba hacer, creyendo que era lo correcto, porque esos son mis sentimientos por ti-

-*Rubor* ¡Ah!-

 

“Nuestros sentimientos…

Ambos sentimos amor por el otro…

Yo… quiero luchar por ello…”

-Yo sentí que era lo correcto. Quizás me equivoqué, pero no escaparé, afrontaré las consecuencias. Así que… haz lo que debas hacer, solo… no te olvides de mi…-

 

“Soy una tonta…

No dejo de ser una tonta…”

-*Snif* Lo siento… *Snif* ¡En verdad siento mucho haberte lastimado! Yo… ¡Dios! ¡Ni me di cuenta del daño que te estaba causando! Pero… *Snif* estaba confundida… y con miedo…-

-Reina…-

-*Snif* No sé si fue lo correcto, me aterra como puede cambiar nuestra relación, en que nada vuelva a ser como antes…*Snif* ¡Lo siento! ¡Estoy muy confundida!-

-Reina… ¿Ya no quieres verme más?-

-¡Quiero verte! ¡Solo puedo pensar en estar contigo!-

-¿Me desprecias?-

-¡Nunca sería capaz!-

-Reina… ¿Cómo me ves realmente? ¿Soy una falla como piensa el resto? ¿Soy un perdedor?-

-¡Me voy a enojar si vuelves a preguntarme eso de nuevo! Ya te dije… estoy confundida… y tengo miedo… ¡Pero lo que más quiero es estar contigo y que nada malo ocurra!-

 

“Si…

Eso es lo que quiero…

Lo que siempre he querido…”

-Reina… nos besamos, creo que ya deja en claro lo que siento por ti. ¿Pero sabes qué? No te voy a pedir que seas mi novia-

-¿Eh?-

-Mira, no tenemos que apresurar las cosas. Podemos seguir siendo mejores amigos como hasta ahora-

-Pero…-

-Solo es cuestión de ir desarrollando nuestros sentimientos hasta estar seguros de que queremos avanzar, ¿Qué opinas? Así te sentirás con menos presión jeje-

 

“Zero…

A pesar de todo lo que te hice… tú aun me sonríes…

Te preocupas por mí y piensas en cómo hacerme sentir mejor…

Je… jeje…

En verdad… te amo con toda el alma”

-*Rubor* Zero… jeje… ¡Gracias! ¡Te quiero mucho!-

-Pero ten en cuenta de que me esforzaré para impresionarte y hacer que te enamores de mi-

-*Rubor* ¿Eh? Jeje, ¡Sí!-

 

“Tontito… ya no tienes que hacer nada…

Después de todo… te he amado toda mi vida”

-Al menos volvió tu linda sonrisa-

-Esto… yo… tengo que irme-

-¡Ah! Perdón por haberte robado tú tiempo…-

-Está bien, era necesario enfrentar las cosas, perdón por mi cobardía-

-Bueno, no te molesto más, puedes irte. ¡Ah! Y… Reina…-

-¿Si?-

-¡Yo también te quiero mucho!-

 

Reina sonríe dulcemente al escuchar esas palabras. Todo su dolor, todas sus dudas, se esfumaron gracias a su preciado amigo.

Ahora finalmente tiene bien en claro que lo quiere hacer. Seguir el camino que le planteó Verónica y luchar por un futuro, juntos.

Reina finalmente obtiene la motivación necesaria para el asalto final y así completar su misión. Pero ya nos será un final definitivo, no lo permitirá.

 

Antes de marcharse, Reina voltea y corre hacia su amado para brindarle un dulce beso en los labios.

-*Rubor* Quiero dejarte bien claro que no siento asco por besarte. Para mí también fue una experiencia maravillosa. No lo olvides porque sueño con un futuro en donde pueda llenarte de besos todo el tiempo, pero por ahora, confórmate con este, ¿Si?-

-*Rubor* Si…-

-Jeje… eres tan lindo. Adiós, nos vemos luego…-

 

Tras tantos días investigando, participando en operativos donde desmantelaban bandas mafiosas, finalmente llego el momento de dar el gran golpe final. Habían obtenido la ubicación de la cabeza principal que comandaba toda la zona de la ciudad.

Si bien, acabar con él, no supondría eliminar toda la oscuridad de la Ciudad Capital, si serviría para dar un mensaje de esperanza. De que la luz no ha abandonado a los ciudadanos. Y más importante, podrían acercarse cada vez más al núcleo central de todo este acto siniestro.

Fue una operación bastante grande, solicitando ayuda de otros escuadrones provenientes de las demás regiones de la capital.

Reina lidero un equipo de asalto, compartiendo el liderazgo con un miembro del ejército, quien resultó ser el hermano de Irina.

La misión se llevo a cabo en un barrio privado, todo inició al amanecer. Los enemigos se resistieron, utilizando todo el armamento que disponían.

La batalla se intensificó de inmediato y se mantuvo equilibrada durante dos horas. Pero luego, Ancardia comenzó a ganar terreno.

Reina Alcott se sentía motivada, su amor por Zero le daba fuerzas para no retroceder.  De esta manera, su escuadrón avanzó hasta acorralar al jefe principal enemigo. Sin embargo, este acabó por quitarse la vida con su propia pistola, no sin antes decir…

“Esos hermanos no tardarán nada en llenar el hueco que yo dejaré. Prefiero la muerte por mí mismo, que esperar a que ellos vengan a liquidarme por haber fallado”

 

La misión había acabado. Y aunque no pudieron capturar vivo al líder, si pudieron con muchos otros, a los cuales interrogarían para sacarles toda la información útil.

A Reina ya no le importaba mas la misión, solo podía concentrarse en sus planes a futuro. Esto le emocionaba.

Sin embargo… aquella misma alegría, fue lo que le permitió descuidarse por un instante…

Al quitarse la peluca que utilizaba para realizar sus misiones y prepararse para regresar a su apartamento, un miembro de la mafia que había logrado ocultarse de todos, pudo ver la verdadera apariencia de la joven que acabó con sus compañeros.

Al haberlo perdido todo, solo le quedaba vengarse…

 

Días después, Reina ya estaba preparada para irse, pero antes de eso, aceptó tener una última cita con su preciado amigo en una convención de temática anime.

Se había decidido a contarte toda la verdad, ya no quería ocultarle nada. Y le iba a dejar en claro que haría todo lo posible para que pudiesen estar juntos por siempre.

La cita había resultado exitosa, ambos habían vuelto a divertirse juntos y sonreír como antes.

Al llegar el atardecer y volver a casa, ambos pararon en el pequeño parque donde se conocieron, para tener una conversación.

Cuando la joven estaba por revelarle toda la verdad sobre Ancardia, algo inesperado sucedió…

Aquel mafioso se apareció, tomándola del cuello y apuntándole con una pistola en la cabeza.

Todo aquel hermoso clima, había sido destruido en tan solo un segundo.

Reina estaba en shock, pues aquella vida peligrosa a la que estaba acostumbrada a vivir, ahora se encontraba nuevamente en presencia de su amigo, involucrándolo.

Para su sorpresa, el muchacho no se había dejado vencer por el pánico. A pesar de la situación crítica, pensó en un plan simple para poder salvarla, haciéndole creer al malhechor que alguien más se encontraba detrás.

En cuanto el sujeto volteó, Zero se lanzó al ataque con su espada sin filo, logrando acabar con él a puros golpes salvajes.

Lamentablemente, el mafioso no estaba solo, pues alguien más pudo escapar junto a él. Ese segundo sujeto logró golpear al muchacho, dejándolo inconsciente.

 

Reina Alcott, al presenciar cómo habían lastimado a su preciado amigo, estalló de furia. Dejó de pensar y solo se concentró en una cosa…

Castigar a quien se atrevió a golpear a Zero.

Liberó su aura, sin importarle que estuviese a plena luz del día en un lugar público. Afortunadamente no había personas alrededor a esa hora.

 

La expresión de Reina en ese momento, era la más siniestra que jamás había tenido. Tanto que su enemigo quedo paralizado del miedo. Ella no tuvo piedad, atacándole a puño limpio, pero con su aura liberada, por lo que no tuvo dificultades para romperle sus huesos.

Pero eso no bastaba para calmar su ira…

Tomó la pistola que tenía el otro sujeto y la colocó en la frente del hombre acabado…

Llorando y maldiciendo a gritos, estaba lista para jalar el gatillo…

Pero entonces su mirada se desvió hacia su amigo que yacía inconsciente a pocos metros. Entonces el pánico se apoderó de ella…

-¿Qué estoy haciendo…?-

 

Con sus últimas fuerzas de cordura, ella solicitó ayuda a Verónica…

Todo el equipo de la tienda de flores llegó de inmediato. Verónica, al igual que el resto, no podían creer el escenario que tenían frente a ellos.

-¡Rápido, aíslen la zona! ¡Qué nadie se acerque! ¡Comiencen a cargar a esos dos a la camioneta!- Ordena Verónica.

 

Ella se acerca a la joven, quien se encuentra de rodillas, abrazando a su amigo.

-Reina…-

-¡ALEJATE!-

-…-

-¡¡¡LLEVENSE A ESAS DOS BASURAS Y DEJENNOS EN PAZ!!!-

-Reina-

-¡¡¡ALEJATE!!!-

-Está bien… pero tu amigo…-

-¡¡¡EL ESTA BIEN!!! ¡¡¡YA NO QUIERO SABER NADA DE ANCARDIA!!! ¡¡¡DEJENNOS EN PAZ!!!-

 

Reina estaba demasiado alterada. Todo su dolor y resentimiento por años, era lo que dominaba en su corazón ahora.

Verónica logró convencerla de que revisen a su amigo. Al no presentar heridas serias, dejó que la joven se encargase de él.

No se retiró del escenario, se quedo escondida a una distancia segura, observando a ambos jóvenes. En cuanto el muchacho despertó, se marcharon del lugar. Al llegar a salvo, Verónica, quien los siguió a la distancia, se marchó.

————————————————————–

 

[Presente]

[Zero]

Aun recuerdo el miedo que sentí aquel día. No sé de donde saque la valentía para poder enfrentar a ese tipo armado…

-Aquel suceso, lo cambió todo para mí. Algo se rompió… dentro de mí…- Dice Reina, con una mano en el corazón.

-…-

-Las palabras de mi abuelo, volvieron a mi mente. Entonces entendí bien a lo que se refería. Nuestros mundos eran diferentes. Mi sola existencia te ponía en peligro. Mi deseo de poder estar contigo, no era posible…-

-…-

– No quería volver a verte sufrir de esa manera. Así que… con mucho dolor… decidí alejarme de ti-

-…-

-En verdad deseaba contarte toda la verdad. Quería hacerlo cuando nos despedimos, pero no pude…-

-Jeh, pero las pocas pistas que me diste, fueron suficientes para encontrarte-

-Realmente… no esperaba que tu fueses tras de mi…-

-Ni yo lo esperaba-

-Estaba totalmente destruida. De tanta tristeza y dolor, ni siquiera sentí el viaje de regreso a la base. En cuanto me di cuenta, los rostros preocupados de Luna y Lisa, estaban frente a mí.

Ellas intentaron de todo para animarme, pero era imposible-

-…-

-Por esas casualidades, la agente Char, se encontraba en la base. Ella vino a verme para intentar consolarme. Entonces recordé su propuesta de irme a Francia. Y yo… quería alejarme de todo, desaparecer para todos…-

-…-

-Pero en Francia no encontré consuelo, pues los recuerdos de lo que te hice, me atormentarían cada día…-

-…-

-Bueno, el resto ya lo conoces. Eso… seria todo lo que tendría para contarte sobre mí-

-Gracias, Reina-

-Perdóname… por haber destruido todo lo que construimos aquella vez. Ese amor que tu y yo…-

-Si, en verdad todo eso quedo roto-

-…- Reina muestra tristeza.

-Pero al final, fue un mal necesario-

-…- Ella voltea a verme un poco sorprendida.

-Lo que sucedió después, mi viaje, mi entrenamiento, todo para estar contigo de nuevo. Fue necesario para poder comprender tu mundo-

-¿Eso crees?-

-Vamos Reinita, ambos sabemos que de otra forma, lo hubiese arruinado por idiota-

-…-

-Si me contabas la verdad, yo quizás al principio lo tomase bien, pero luego me habría sentido inseguro e inferior a ti-

-Oh…-

-Bueno… aun me siento inferior a ti, pero sé que si sigo entrenando, podré alcanzarte. Y no es como si ese sentimiento me impida querer estar contigo. Digamos que tanto dolor me hizo crecer jeje-

-*Rubor* Ya veo… y entonces… ¿Qué opinas?-

-¿Mm?-

-¿Qué opinas de mi? Ahora que ya escuchaste mi historia-

-Pues, tengo todo más claro ahora. De hecho me siento feliz, porque ahora puedo decir que te conozco mucho mejor jeje-

-*Rubor* ¿Me sigues queriendo…?-

-¿Por qué preguntas eso? Te dije desde un principio, que no necesitaba escuchar tu historia para saber si te quiero o no-

-*Rubor* L-Lo siento jeje, solo quería estar segura-

 

Reina se pone nerviosa y comienza a frotar su cabello. Entonces se crea un enorme silencio incomodo.

En verdad lo pasaste bastante mal. Aunque me alegra saber que tuviste buenos momentos también. Estoy muy agradecido con Luna, Lisa y Sarah, por haberte cuidado.

Te admiro por nunca haberme olvidado. Si estoy aquí contigo, fue por eso. En ese sentido, yo te falle, porque si me olvide de ti…

Pero está bien, no se puede borrar eso. Pero puedo prometerte que nunca más me olvidaré de ti ni aceptaré que volvamos a estar separados.

Es momento de, ser claros de una vez por todas…

-Reina…-

-¿S-Si?-

-Escúchame atentamente…-

-D-De acuerdo…-

-Lo que sucedió durante la invasión, sirvió para que abriera los ojos-

-¿Mm?-

-Ante Lucian, en verdad creí que se acababa todo para mí. Había aceptado el final de mi camino…-

-No digas eso…-

-Estaba feliz porque pude salvar a mis amigas. Sin embargo, en aquel momento, hubo un único arrepentimiento-

-…-

-Me di cuenta de lo estúpido que estaba siendo conmigo mismo. Quería hacerme el cool, posponiendo cosas. Trataba de convencerme, diciendo que lo haría cuando fuera realmente fuerte-

-…-

-Ahora sé que es una tontería. No sabes cuándo puede terminar todo, así que si puedes hacer o decir algo, simplemente hazlo-

-Zero…-

-En aquellos momentos de mi supuesto final, en lo único que podía pensar, era en ti-

-*Rubor* ¿E-Enserio?-

-Al final, siempre se ha tratado de ti, Reina-

-*Rubor* Mmm…-

-El comienzo de mi felicidad, el motivo de mi viaje, la razón de mi pelea. Y también, el futuro que quiero tener-

-…-

-Siempre se trata de ti-

-*Rubor* Zero…-

 

Ya no más retrasos…

Que sea lo que los dioses quieran…

A la mierda con todo…

-Te amo Reina Alcott. Siempre te he amado y siempre voy a amarte. Lamento haber demorado tanto en decírtelo-

 

Reina abre la boca levemente, demostrando su asombro. Acto seguido, su rostro se enrojece, luego poco a poco baja la mirada y se queda en silencio durante unos cuantos segundos.

Los segundos corren y ella sigue sin decir nada…

Su silencio comienza a desesperarme, pues estoy tan nervioso que me va a atacar la locura…

Vamos Reina… dame una respuesta… ¡Acéptame o recházame! Aunque si me aceptas mejor…

Pero si me rechazas, no es el fin del mundo, simplemente me esforzaré para conquistarte.

-No es justo…- Dice ella en voz baja.

-¿Eh?-

 

Ella alza la mirada y voltea a verme a los ojos.

-*Rubor* Yo quería ser… quien se confesara primero…-

-¿Eh…? Entonces…-

-*Rubor* Yo también te amo… tontito…-

-*Rubor* ¡¡¡…!!!-

 

¡¿E-Escuche bien?! ¡Dijo que me ama! ¡Realmente lo dijo!

No estoy loco… ¿Cierto?

¡Díganme que no es un sueño!

-*Rubor* ¡Pero yo fui quien se enamoro primero! ¡No hay lugar a discusión! ¡Hmph!-

 

De pronto, comienzo a reír, entonces ella también.

Ambos sonreímos como idiotas.

-*Rubor* Reina… lo que sucedió hace tres años, en verdad se rompió. Pero era un amor inmaduro que no podía tener un futuro feliz. Ahora, tras todo lo vivido, sé muy bien lo que siento. Y tengo la fuerza para protegerlo. Te amo… ¡Te amo Reina!-

-*Rubor* Jeje… no tienes idea de la felicidad que me provoca… escucharte decir eso…-

-*Rubor* Esto… puede que esto suene estúpido y sin sentido… pero… es que yo soy así de imbécil… y necesito confirmarlo o no podré volver a dormir…-

-¿Oh?- Reina se ve confundida.

 -*Rubor* Ya que… dijimos que nos amamos… bueno… esto… ¿Quieres ser mi novia?-

 

Reina se me queda mirando asombrada, entonces comienza a reírse.

-Jajajaja ¡Vaya pregunta más tonta!-

-*Rubor* Lo sé pero…-

-Aunque yo también soy igual de tonta. Si no tengo la confirmación de un inicio oficial, no estaré tranquila-

-Entonces…-

-*Rubor* ¡Sí! ¡Quiero ser tu novia! Jiji-

-*Rubor* ¡Qué bien! Jeje-

 

Reina se abalanza hacia mí y me brinda un gran beso.

-*Rubor* Si tú te confiesas primero, entonces yo seré quien dé el primer beso oficial como pareja-

-*Rubor* Reina… jeh… amo esas locuras tuyas-

-*Rubor* Y yo amo todo de ti, tontito…-

-*Rubor* Reina… quiero besarte y no detenerme…-

-*Rubor* Ya no tenemos que contenernos nunca más. Eres mi dulce amorcito ahora, que no se te olvide-

 

[Reina y Zero, oficializan su relación. Se dan un fuerte abrazo y juntan sus labios. Repitiendo esta acción durante unas cuantas horas.

Al caer la noche, ambos suben a la azotea del edificio para contemplar las estrellas, tomados de la mano y sentados en el borde.]

 

-Amorcito…-

-¿Vas a llamarme así a partir de ahora?-

-¿Qué tiene de malo? Me parece tierno y deja en claro que eres mío…-

-*Rubor* Es vergonzoso pero… bueno da igual, quiero que todos sepan que tu eres mi novia-

-Sobre eso…-

-¿Ya te arrepentiste? Duraste más de lo que había previsto…-

-No seas tonto. Es solo que…-

-¿Mm?-

-Ya escuchaste mi historia. Yo… soy una chica aburrida, bastante apática con la mayoría. Debes haberte decepcionado mucho…-

-Pero ahora tienes más amigas. Te he visto llevarte bien con Lina, Irina, Annie e incluso Chari-

-*Rubor* Pero eso fue gracias a ti…-

-Y yo pude hacer amigas gracias a ti-

-¿Eh?-

-De no ser porque salí a buscarte, seguiría siendo un idiota que se encierra en su casa e ignora a todo el mundo. Ambos fuimos bastante similares jeje-

-Eso parece…-

-Reina, ahora puedes mostrar tu verdadero ser. Es esa chica adorable, llena de emociones y que aprecia a sus amigos, dándolo todo cuando necesitan ayuda. Y tu corazón ya no está cerrado-

-¿Eso crees?-

-Ese lado tan adorable y tierno que me enamoró, sigue estando ahí-

-Jeh, gracias amorcito. Si te soy sincera, aun creo que no te merezco-

-Reina…-

-Pero no dejaré que ese pensamiento evite poder estar contigo. Yo también he aprendido. Si siento que no te merezco, simplemente debo esforzarme para demostrarte tanto a ti como a mí misma, que soy digna de ser tu novia-

-Jeh, lo mismo digo, Reinita-

-Ambos somos unos tontitos que se aman mucho-

-Te amo Reina Alcott-

-Te amo mi querido Zero-

 

FIN DEL VOLUMEN 9

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“¡¡¡Gracias por haber leído este volumen!!!”

 

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¡¡¡Un momento!!!

Esto aun no se acaba. Es el final del volumen, así que tiene que haber un poco de contenido extra. Ósea, espacio para mí.

¡Soy Usagi! ¡Un gusto volver a verlos!

Esta vez, les traigo unas palabras del mismísimo autor. Ósea mi jefecito.

Ejem…

Veamos que tenemos aquí…

 

“Este volumen resultó ser más largo de lo que había planeado. Y eso que me hubiese gustado incluir más cosas, como mas escenarios del volumen 1 pero vistos desde el lado de Reina.

Pero no quería saturarlos demasiado, yo también quiero avanzar con la trama, así que me centre en las partes importantes. No fue una tarea fácil, tuve que releerme todo el volumen 1 de nuevo. Admito que había cosas que no recordaba jeje. Aun así me divertí bastante.

 

Este volumen sirve para terminar de conocer en su totalidad a Reina Alcott.  Ella siempre fue el motivo principal del prota, pero si nos deteníamos a pensar, había mucho que desconocíamos de ella.

También aproveche para ampliar la historia del mundo de TLC, agregando los conflictos con la familia Vega, entre otras cosas.

 

Creo que hice un buen trabajo, mostrando el crecimiento de Reina, siendo una niña asustadiza a una agente secreto que combate el mal.  Y bueno, ella tampoco lo ha pasado muy bien, pero así es la vida, no todo es color de rosa. De eso no se salva nadie jeje.

 

Sobre el titulo del volumen, es simplemente un juego de palabras entre el español y el ingles. Pienso que le da un toque adorable y define bien al personaje principal del que trata.

No se, simplemente me pareció divertida la idea jeje.

 

Y bueno, todo termina con un escenario que muchos esperaban. Finalmente esos dos pasan a ser una pareja.

Podría decirse que fue el verdadero final del viaje de Zero, pues logró alcanzar el corazón de Reina. Y ahora comienza algo nuevo.

Tiempos oscuros se acercan…

 

¡Bueno! ¡Espero que hayan podido disfrutar este volumen! ¡A trabajar en el siguiente!

Gracias a todos los que siguen esta historia.”

 

 

¡Y esas fueron las palabras de Zero-Sensei sobre este volumen!

¡Espero que nos acompañen en el siguiente!