The Lost Crystallus - 11-03

¡Presentamos a la primera coneja del Bunny Ears, la adorable Luna Araciel!
[Zero]
No mentiré…
Me siento emocionado…
No esperaba esto… jeh…
-Voy a tomarme mi descanso, como hace un bonito día, me iré a comer afuera-
-¡De acuerdo!- Dice Luna.
-Uuh… lo siento amorcito, hoy no coinciden nuestros descansos…- Dice Reina, con sus orejas caídas.
-No te preocupes, en la noche te daré muchos abrazos- Le digo para después darle un beso en la mejilla.
-¡Yay! Jeje-
Agarro un trozo de pastel de queso, lleno un vaso con un batido helado de vainilla y salgo del Bunny Ears para ir a toda prisa hacia un parque que hay cerca de aquí.
Mientras avanzo, recuerdo nuestro último encuentro. En como descubrí que ella poseía los ojos rojos…
Como peleamos…
Como todo acabó bastante mal…
-Mai estaba llorando aquella vez…-
Creía que… ya no iba a querer volver a verme, pero… ahora está aquí… vino a verme…
Dijo que quería verme…
Lo último que supe de ella, es que Reina, Gabriel y Andrés, la enfrentaron durante la invasión. Reina se enojó mucho porque impidió que pudiese matar a Diana. A lo cual, fue un gran alivio porque no quiero que mi novia se manche las manos de esa manera…
Entonces… ¿Realmente está todo bien entre Mai y yo? ¿Es motivo para alegrarse el volver a verla?
-Mierda… ya me puse nervioso…-
Al llegar, veo a Mai sentada en una banca, quien observa a las personas que pasan por delante de ella. Se ve muy bonita con la ropa que lleva, parece una chica normal. Nadie podría pensar que es alguien que sabe pelear con armas blancas o que posee un poder oscuro como de cuento de fantasía.
-Aquí estoy, Mai…-
-¡Hola!- Dice ella, alzando el brazo para hacer un saludo militar. Veo que sigue esa costumbre en ella, lo que la hace ver adorable.
-Traje una rebanada de pastel de queso y un batido helado de sabor vainilla-
-¡Oh!-
Mai abre bien grande sus ojos y alza sus brazos. Sus mejillas se tornan rojas, dejando en claro lo emocionada que se siente. Sin perder tiempo, comienza a disfrutar de su comida.
Me siento a su lado y…
Silencio…
No sé qué decirle…
Esperaba poder hablar de muchas cosas con ella, pero ahora… no me salen las palabras…
¿Qué pensara de mí?
¿Todo está roto? ¿No se puede arreglar nuestra relación?
Mai termina de comer y se queda callada…
El silencio se vuelve incomodo y pesado…
-Lamento si te cause problemas al aparecerme de la nada…- Dice ella, con una voz suave y algo baja.
-¿Eh? No fue nada, por suerte nadie más te vio…-
-Qué bueno…-
-Mai… ¿Cómo me encontraste?-
-El otro día te vi caminando junto a Reina, llevaban unas bolsas de supermercado. Los seguí y vi que estaban en esa cafetería…-
-Oh… claro…-
Genial… ya nos encontraron el primer día. Si Luna se entera, nos va a dar un buen sermón… y hasta un coscorrón.
-Zero…-
-¿S-Si…?-
-¿Me desprecias…?-
-¿Eh?-
-…- Mai me mira fijo con ojos temblorosos.
-¿Por qué piensas eso?-
-Porque la última vez que nos vimos… yo… te ataqué… te lastimé… te hice sangrar…-
-…-
-Te dije muchas cosas malas…-
-No dijiste nada malo. Ahora puedo comprender mejor tus palabras y las lagrimas de aquella noche, porque yo también soy portador de la maldición-
-Entonces es cierto…- Dice bajando la mirada.
-Mai… seré sincero contigo…-
-…- Ella voltea a mirarme.
-Nos conocimos por unos pocos días, pero aun así no pude olvidarte. Y al saber que vendría a la ciudad, no puede evitar pensar en la posibilidad de poder verte de nuevo…-
-…- Mai me observa atentamente.
-Pese a todo lo que sucedió aquella noche, al verte hoy… al escucharte decir que estas aquí por mí… pues… me alegro muchísimo, esa es la realidad-
-…- Ella continúa mirándome.
-Te quiero Mai… eres como una hermanita para mí. No voy a ocultar mi cariño hacia ti-
Ella abre bien grandes sus ojos, mientras que sus mejillas se tornan rojas.
-*Rubor* ¿Me quieres…?-
-Si-
-Pero… yo te ataqué… te dije cosas feas… ¡Te lastimé!-
-No importa, te perdono-
-Hice enfadar a Reina, quien se supone que es la persona más importante en tu vida-
-Estoy al tanto de eso. No te preocupes, es mejor así, no quiero que Reina se manche las manos, recurriendo a matar para salvarme de esta maldición-
-¿De verdad no me desprecias? ¿Está bien querer volver a verte…?-
-Sí, gracias por haber venido-
Mai baja la mirada, se la ve muy colorada, su boca muestra una leve sonrisa.
-*Rubor*Que bueno… ¡Qué bueno! Tenía mucho miedo… de que me odiaras por todo lo que hice… ¡Pero aun así quería verte!-
-Mai, no hiciste nada malo. Si me atacaste, fue porque te viste presionada, pero se notó que no querías hacerlo y que sufriste mucho. Y con respecto a mis amigos, me dijeron que no los atacaste. Y con Reina fue un choque de caminos, tu solo protegías a una amiga, ¿Cierto?-
-Si…-
-Mai, todo está bien de mi parte. Te aprecio, esa es la realidad. De hecho… yo me preguntaba si te sigo cayendo bien…-
-¿Eh?-
-¿Qué piensas de mi…? Muchas cosas cambiaron desde que nos conocimos aquella vez hace tres años…-
-Pues…-
-…- Me siento nervioso…
-Nunca pude olvidarte. El día que te conocí, los días que pasamos juntos, son recuerdos muy importantes que nunca desaparecieron. No dejaba de preguntarme si habías logrado tu objetivo. Y cuando me dijiste que si lo hiciste, me puse muy feliz-
-Mai…-
-Eres muy importante para mí. Yo también te quiero-
-¡¡¡…!!!-
Esas palabras… no solo me brindan felicidad, sino que también me relajan. Entonces todo está bien entre nosotros…
Qué bien… no quería perderla…
-Gracias Mai-
-Dijiste que me ves como a una hermanita-
-Si… perdón si suena raro-
-No, de hecho, eso me gusta. La idea de verte como un hermano, me alegra, así que así es como quiero que sea-
-Jeje…-
-¿Soy rara?-
-Somos raros-
-¡Uh! Ya veo…- Ella se deprime.
-¿Pero qué importa? ¡Lo importante es que nos hace feliz! Somos hermanos del corazón-
-*Rubor* Hermanos del corazón…-
-¿Qué opinas?-
-*Rubor* Eso me gusta-
Mai y yo, juntamos nuestros dedos meñiques, oficializando nuestra hermandad.
Quizás parezca un acto infantil y tonto, pero para nosotros es algo muy importante. Dejamos atrás los recuerdos amargos y nos enfocamos en lo que realmente importa.
-Mai, no te preguntaré sobre tus asuntos, ni en donde se ocultan los demás. Solo me gustaría saber si vas a estar por estos lugares-
-Estaré durante un tiempo por esta parte de la ciudad. Puede que reciba misiones, pero mientras no sea así, soy libre de andar por donde quiera- Me dice, haciendo símbolo de victoria con sus dedos.
-Genial, yo también estaré una buena temporada por aquí-
-Ya veo-
-Entonces, eso quiere decir que podríamos seguir viéndonos…- Yo sugiero.
-¿No será un problema? Tus amigos me ven como enemiga…-
-Y la hermana de Diana me quiere reclutar…-
-Si…-
-Bueno… entonces los demás no tendrían que saberlo-
-¿Te refieres a reunirnos en secreto?- Pregunta ella.
-¡Exacto!-
-Eso… no suena mal… ¿No es problema? Les mentirías a tus amigos, en especial a Reina-
-Yo…-
-…- Mai me mira fijo.
-No vamos a hacer nada malo, así que sería ocultarles algo inofensivo-
-…- Mai sigue mirándome.
-¡Solo vamos a divertirnos como buenos hermanos! Pero las cosas andan delicadas, así que mejor ocultar algunos detalles-
-Está bien, entiendo- Dice ella, sonriendo levemente.
-Entonces es un hecho, reunámonos muchas veces en nuestros tiempos libres. Por ejemplo, trabajo hasta las 6 de la tarde, podríamos vernos una hora o dos. Si tengo días libres, podríamos aprovecharlos también-
-¡Oh! ¡Me gusta eso! ¡Conozco un buen lugar donde poder estar solos y sin que nos molesten!- Dice ella, alzando los brazos.
-¡Perfecto! ¿Te parece de vernos más tarde entonces?-
-¡Sí! Te daré mi número-
-¿Segura? ¿No es arriesgado?-
-Te agregaré con otro nombre, ¡De esa forma Diana no sabrá!- Dice ella con sonrisa de confianza.
-¡Muy bien! Ya tengo que regresar al trabajo, nos vemos aquí a la tarde-
-¡Sí! ¡Es una promesa hermanito!- Dice ella, haciendo saludo militar.
Me llama hermanito… mi corazón se llena de mucha ternura…
Voy a morir de diabetes…
Puede que este mal…
Que esta idea sea algo mala…
Pero…
Es mi oportunidad de pasar tiempo con ella, ¡Quiero conocerla más! Quiero enmendar lo de haberla abandonado aquel día…
Quiero hacerla feliz…
Aunque… tener que mentirle a los demás…
Sea como sea, no puedo mentirme en este momento… ¡¡¡Estoy muy feliz y emocionado!!! ¡¡¡Podré pasar tiempo con Mai!!!
Regreso al Bunny Ears con mucha emoción.
-Bienvenido amorci… ¡AH!-
Abrazo fuerte a Reina y le doy un gran beso delante de todo mundo.
-¡Estoy de regreso, mi linda conejita!-
[Luna]
Zero ingresó con una gran sonrisa y luego le dio un gran beso a Reina. Después se fue a la sala de descanso a buscar sus orejas para seguir trabajando.
Reina no se esperaba semejante trato, aquel beso la dejó atontada. ¡Basta con ver sus orejas que forman un corazón! Esta chica… jeje…
-¡Tremendo beso que te dio! ¿Le habrá pasado algo bueno? Se le notaba súper contento- Comenta Lina.
-Desde que esta con Reina que se ve más feliz, pero esta vez fue mucho más notorio- Dice Irina.
-*Rubor* Aaaah… chicas… ¿Queda muy mal si le pido matrimonio ahora…?- Dice Reina, perdida en las nubes.
-¡¡¡Muy pronto!!!- Gritamos todas.
[Zero]
Las horas me parecieron eternas, pero finalmente llego el momento de finalizar el trabajo por este día. Me encargo de ordenar y limpiar lo que me corresponde y…
-¡Amorcito! ¡Ya estoy libre! ¡Divirtámonos juntitos!- Dice Reina, quien viene corriendo para darme un abrazo.
-Lo siento Reinita, pero hay algo importante que debo hacer solo-
-¿Eh?-
-Volveré a la hora de la cena, entonces prometo no despegarme de tu lado-
-Mmm… bueno, ¡Pero quiero que me des mucho cariñito hasta dormir!- Dice mientras infla levemente sus mejillas.
Los demás nos observan y sonríen en tono de burla…
-*Rubor* Esto… si Reinita…-
-Jiji-
-Oiga, no hagan mucho ruido que el resto debemos dormir. ¡Y usen protección!- Dice Luna.
-¡¡¡No estaba hablando de “eso”!!! ¡Le pedí cariñitos!!! ¡¡¡Tonta pervertida!!!- Grita Reina con enojo y vergüenza.
-Jeje ¿Y se puede saber que son esos supuestos cariñitos?- Pregunta Luna.
-¡¿Qué te importa?!- Dice Reina, dándole golpecitos en el hombro.
Me dirijo a mi habitación para cambiarme, le doy un beso a Reina y salgo para reunirme con Mai.
Al llegar al parque, la veo sentada en la misma banca que antes, al verme, me saluda alzando sus brazos bien alto.
-¡Sígueme!- Dice ella.
Caminamos por la avenida principal de la zona comercial, nos metemos por unos callejones, subimos unas escaleras y saltamos a una terraza de un edificio abandonado. Desde aquí podemos ver la ciudad desde las alturas, con el océano a lo lejos. Sin duda es un paisaje muy hermoso.
-¡Este lugar es genial!-
-¿Verdad que si? Aquí no viene nadie, podremos estar relajados- Explica con orgullo.
-¡Perfecto! Para celebrar esta reunión… ¡Iré por unas paletas heladas!-
-¡Oh!- Ella se emociona alzando los brazos.
-Enseguida vengo-
-¡Aquí te espero!-
No demoro mucho en ir por unas paletas heladas. Nos sentamos en el borde del techo de lo que parece ser un depósito de limpieza, ya que es el punto más alto del sitio.
-Nada mejor que disfrutar de una paleta helada mientras se observa el atardecer desde las alturas-
-¡Esta deliciosa! ¿Cómo se te ocurrió esta idea?- Me pregunta con emoción en su voz.

-Vi que lo hacían en un videojuego que jugué hace años, unos jóvenes se subían a una torre alta a contemplar el atardecer mientras comían paletas heladas-
-Ya veo, no he jugado videojuegos…-
-¡¿No lo hiciste?!-
-Me dan curiosidad, pero Diana dicen que son una pérdida de tiempo, que debo concentrarme en ser más lista y fuerte-
-Veo que me toca ser le hermano divertido. ¡Bien! ¡Te llevaré a donde hay diversión! ¡Haré que te enamores de la cultura de los videojuegos!-
-De acuerdo, confío en ti- Me dice con una sonrisa.
-Por cierto Mai-
-¿Si?-
-Esto te sorprenderá, ¡Reina es mi novia!-
-¡Oh! ¡¿Enserio?!-
-Sí, le confesé mis sentimientos y comenzamos a salir desde hace unos meses. Fue después de aquel gran ataque-
-¡Felicidades! ¡Se notaba mucho que ella te quiere un montón!- Dice mientras aplaude.
-Jeje gracias-
-¿Eso significa que ahora van de la mano, se dan abrazos y besos?-
-Sí, todo eso se habilitó una vez que se convirtió en mi novia, aunque ya la había besado antes de eso…-
-¿Van a casarse y tener hijos?-
-¿Eh? Pues… supongo que es un objetivo a futuro…-
-Diana me dijo que ese es el objetivo tras iniciar un romance-
-Pues si… no esta tan equivocada-
-jeje-
-He logrado avanzar mucho más con Reina, no hay solo besos y abrazos-
-¿…?- Ella inclina la cabeza.
-Aunque no sé si tienes edad para saberlo…-
-Tengo 17 años, ¿Es poco?-
-Oh… cierto que no nos llevábamos tanto en edad, lo siento pareces más pequeña. Pues…-
-Cuando dices que avanzaste mas, ¿Te refieres que tuvieron sexo?-
-Ah… ¿Sabes sobre eso?-
-Diana me hizo estudiar muchas cosas, entre ellas, ciencias naturales y allí explicaban el método de reproducción-
-Oh… ya veo-
-Luego Suzuka me explico más detalles sobre eso, que es algo que le gusta mucho hacer al ser humano y que ha generado mucho caos a lo largo de la historia. Yo no lo entiendo muy bien, tampoco me interesa mucho- Explica Mai.
-¡Mejor así! No quiero que corrompan a mi hermanita-
-Diana me dijo que eso se debe hacer con la persona que ames, pero Suzuka decía que se debe hacer cuando uno tenga ganas y ya, evitando problemas nada mas, ¿Quién tiene razón?-
-Ah… inclínate más para la versión de Diana, aunque no es que sea la verdad absoluta… pues Suzuka tiene parte de razón también…-
-…- Mai inclina la cabeza.
-¡Mira! Lo importante es que hagas eso cuando tu lo desees y si alguien te obliga, ¡Le rompes los huesos!-
-¡Entendido! Diana dijo algo similar-
-Si te tocan el trasero, también rómpeles los huesos-
-Diana también me dijo eso. Que nadie me toque en lugares raros, respeten mi espacio, ir siempre bien vestida, usar ropa interior todo el tiempo, ¡Ah! ¡Y bañarme todos los días!-
-¡Exacto!-
-Aunque… a mi no me molestaría que me abrazaras o acariciaras mi cabeza… ¿Eso está mal?-
-No, las muestras de afecto están bien, mientras a ti te guste también-
-Entiendo-
-Jeh, veo que Diana te educo bastante, había mucho que no sabias cuando te conocí-
-Diana fue mi escuela, se preocupó mucho por mí. Ella me dio un hogar, comida y ropa. De hecho, ella es quien hace toda mi ropa-
-¿Diana?-
-Sí, le gusta todo eso, tiene talento. Se la ve feliz cuando teje-
-Vaya… siempre vi su lado rudo, por lo que no me la imagino siendo tierna. Como sea, le estoy agradecido por haberte cuidado-
-Por cierto, ¿Estas buscando tener hijos con Reina?-
-¡¿Eh?!-
-Dijiste que tuvieron sexo, ¿No significa eso que están buscando tener bebes?-
-No… en nuestro caso es mas por… diversión…-
-¿Diversión? ¿Cómo Suzuka? Diana dijo que quienes hacen eso solo por diversión, son pervertidos. Y Suzuka admite ser muy pervertida-
-Esto… yo…-
-…- Ella me mira fijo sin expresar nada.
-Mai…-
-¿Si?-
-Lo siento… tu hermano es un pervertido…-
-Oh…-
-Reina es demasiado hermosa… y tiene un cuerpo tremendo… ¡¡¡Me encanta verla desnuda!!! ¡¡¡Me encanta hacerlo con ella!!!-
-…-
-Aaah… tenía que gritarlo… pero así son las cosas hermanita…-
-¿Por qué te ves triste? Si es algo que ambos disfrutan, ¿Cuál es el problema?-
-¿Eh? ¿No odias a los pervertidos?-
-Mmm… creo que solo a los que intentan aprovecharse de otros, pero tú solo sientes deseos fuertes hacia la chica que te gusta. Y a ella le gusta eso, así que no hay crimen-
-Mai… eres tan comprensiva, ¡Te quiero!- Le digo mientras la abrazo.
-*Rubor* Jeje, eso se siente lindo-
-Los abrazos con quienes aprecias, son lindos- Yo digo.
-Zero…-
-¿Si?-
-Cuéntame como fue que encontraste a Reina y como llegaron a ser novios, ¡Quiero saber!-
-Oh… ¡Entonces prepárate para una historia épica y emocionante! Aunque me la pase llorando varias veces…-
-Jeje, ¡Quiero saber!- Dice ella, alzando los brazos.
Procedo a contarle todo lo que me sucedió tras separarme de ella en aquel pueblo. Me escucha atentamente, asiente cada tanto, alza los brazos, abre la boca cuando se sorprende. Ella siempre tiene cara medio inexpresiva, pero manifiesta sus emociones con movimientos de su cuerpo. Es una característica bastante adorable de ella.
-Y así fue como finalmente Reina y yo nos volvimos una pareja oficial-
-¡Oh! ¡Qué gran historia!- Dice ella aplaudiendo.
-Aunque analizando las cosas… era bastante obvio que ambos nos amábamos con locura. Debí haberme confesado antes… ¡Podría haber aprovechado mejor la posada de la zona sur!-
-Pasaste por muchas cosas, pero al final cumpliste tu objetivo, es lo importante- Dice ella.
-Sí, el amor de Reina hizo que todo valiera la pena-
-Entonces… ahora eres como un súper espía que combate el crimen-
-Algo así…-
-Yo soy más como una villana…-
-¿Por qué dices eso?-
-Porque los dragones hacen trabajos malos, la familia de María lo ordena. Siempre se trata de lastimar gente…- Dice ella mirando con tristeza hacia abajo.
-Yo también he lastimado a muchas personas, así que tampoco soy bueno-
-Pero tu enfrentas a personas malas, ¿Cierto?-
-Quizás si, quizás no. Yo obedezco órdenes y lastimo personas, a veces por cuestiones personales. Al final… lastimar… es lastimar…-
-Entonces… ¿Es difícil ser buena persona?-
-Para la situación en la que ambos nos encontramos, lo es. Pero nos duele hacerlo, no nos enorgullece, por lo que nuestra esencia sigue siendo buena. Si eso se corrompe… entonces si nos habremos perdido…-
-Me gustaría… ser simplemente una chica buena…- Dice Mai, apoyándose en mi hombro.
-Yo antes ansiaba tener aventuras, odiaba mi vida aburrida. Luego me converti en agente secreto. Y si, fue emocionante en cierto punto, pero hubo más dolor y miedo…-
-…-
-Ahora solo deseo una vida normal junto a Reina, pero es difícil…-
-La maldición de Hades… nos quita lo que más queremos…- Dice ella con voz baja y suave.
-No dejaré que lo haga, encontraré la manera de evitarlo-
-Conociste a María… ¿Verdad?-
-Si…-
-¿No sentiste una fuerte atracción?-
-Si… fue aterrador, es como si algo me obligase a amarla…-
-Ya no puedo negarme a sus peticiones… y cada vez se siente mejor obedecerla. Eso te pasará también…-
-Me resistiré…-
-Pero hacer eso…-
-¿Eh?-
-No importa… ojala tú puedas resistirte, no quiero que te alejes de quien amas…-
-Tampoco me alejaré de ti, porque eres mi hermanita-
-…- Ella me mira sorprendida y luego sonríe.
El anochecer llegar y ambos nos despedimos, prometiendo volver a vernos. Regreso a casa a tiempo para la cena. Apenas veo a Reina, la abrazo por detrás y la beso en la mejilla.
-*Rubor* Amorcito…-
-Te extrañé Reinita-
-Yo también pero…-
-¿Pasa algo malo?-
-No, es solo que… ¿Podrías evitar abrazarme?-
-Ah… ¡Pe-Perdón!-
¡¿Se enojo porque me fui a ver a Mai?!
Mierda… ya la cagué…
-¡No, espera amorcito! No es que no me guste, es solo que… ¡Cuando nos ponemos cariñosos frente a los demás, no dejan de fastidiar! Así que mejor nos damos cariño en la privacidad de nuestra habitación-
-¡No por favor, sean libres de darse mucho amor!- Dice Lina.
-¡Solo ignórennos!- Dice Luna.
-*Suspiro* Aaah… mejor hagan sus cosas en privado, si no quieren que estas dos se pongan pesadas…- Dice Irina.
-Ay Reina… no me des esos sustos… creí que ya no me querías mas…- Digo mientras presiono mi corazón con una mano.
-¿Ah? ¡No seas tontito! ¿Cómo te voy a dejar de querer de un momento a otro?-
-Perdón, mi autoestima es algo que aun sigue fajándose. Tener una hermosa novia pelirroja no es suficiente como para creerme invencible…-
-Jeje, ay amorcito, ¿Qué voy a hacer contigo? ¿Y bien? ¿Te divertiste con tus asuntos?-
-Más de lo que esperaba. Algún día te contaré-
-De acuerdo jeje, ¿Vamos a comer? La cena ya esta lista-
-¡Si, muero de hambre!-
Si les dijera la verdad a mis amigos, ¿Cómo reaccionarían? ¿A quién verían realmente? ¿A Mai o a una chica dragón?
¿La atacarían? ¿La despreciarían? ¿Se aprovecharían de ella para intentar curarme?
Sé que mis amigos no son crueles y me prometieron no meterse con ella, pero aun así… nuestra misión es buscar a los dragones… y ella es…
No quiero problemas…
De momento mantendré esto como un secreto. Después de todo, solo quiero poder disfrutar del tiempo con Mai. ¿Cuándo podremos volver a tener una oportunidad así?
==FIN DEL CAPITULO==
Comments for chapter "11-03"
QUE TE PARECIÓ?