Humanos Contra Demonios.- ¿Soy realmente un chico perfecto? No lo creo - 06
- Inicio
- Humanos Contra Demonios.- ¿Soy realmente un chico perfecto? No lo creo
- 06 - CAPÍTULO 6- Los hijos del Rey.
Humanos contra demonios.
CAPÍTULO 6
E-e-esto debe de ser u-un error. S-sí, es u-un error. E-estoy malinterpretando las cosas. ¿Por qué? ¡Porque es imposible que ellos dos estén aquí, en este mundo! ¡Debe ser un error!
A-admito que me quedé sorprendido, nervioso y en shock al ver a Sonia y a Cris. ¡¿Qué demonios hacen aquí?!
¡¿Estoy alucinando?! ¡Quiero creer que esto es un simple error y que algún hechicero o lo que sea me puso un hechizo de ilusión para engañarme, pero esto se siente demasiado real! ¡Ahhhhhhhh! ¡Me duele la cabeza! ¡No entiendo absolutamente nada de esto!
—¡¿R-realmente son ustedes?!
—¡Dani!- Dijo Sonia, emocionada… con la misma expresión con la que siempre me saludaba.
Sonia salta sobre mí y me abraza.
La odio tanto, que no quiero que me toque. No sé si realmente eres la verdadera Sonia, pero creo que sí lo eres. Si fueras una ilusión, el que leyó mis recuerdos para crear esta ilusión sabría que odio a Sonia con todo mi corazón. ¿Qué ganaría con esto?
No lo sé.
—¡Pensé que habías muerto!
—Oye, aléjate de mí.
La empujé suavemente, pues sigue siendo una chica, y aunque me haya engañado, no significa que la debo tratar mal. Mi respeto hacia las mujeres sigue en mí, y seguirá ahí hasta que muera.
—¿Eh? ¿Q-qué?
—No me toques… Ah, es cierto, ustedes están aquí… ¡Ahhhhhhhh! ¡No entiendo nada!
Me alejo de ella rápidamente. Esto es demasiado raro, mi corazón apenas puede soportarlo.
¡¿En serio son ellos?! ¡¿No estoy siendo atacado por hechizos de ilusión?! ¡Ahhhhhhhh! ¡Dios, no entiendo absolutamente nada de lo que está pasando!
—¡¿Por qué están aquí?!
—N-no lo sabemos, entramos a tu casa a buscarte, vimos la cuerda que tenías colgada en tu habitación, la tocamos, pero por alguna razón nos dio un toque eléctrico y una luz salió de la cuerda, y cuando la luz desapareció, aparecimos en un bosque.- Dijo Cris.
N-no, no, no, no, no, no, no. N-no… P-por favor, no. Que esté mintiendo. N-no, por favor no. ¡¡Por favor, Dios, esto no!!
¡¡Arruiné mi estadía en este Reino al desafiar al Rey, poniendo en peligro las vidas de Sara y Alex!! ¡Lo arruiné todo!
Debo escapar de este Reino, mientras soy perseguido por los guardias del Rey, incluso aventureros, y no puedo, debo, ni quiero matarlos. Ellos solo hacen su trabajo, el único responsable es el Rey, él los obliga a hacerlo.
Tantos problemas me persiguen, ¡y dos más se acaban de sumar! ¡Ahhhhhhhh! ¡Cris, eres mi mejor amigo, pero odio a tu hermana! Sé que fue mi primer amor y mi primera y única novia, pero cada vez que la veo, me dan náuseas y quiero vomitar, pues no puedo sacarme de la cabeza la imagen de Sonia besándose con ese idiota.
Y lo más probable es que ellos ya hayan tenido sexo, considerando las muchas veces que Sonia me ofreció su cuerpo y yo siempre la rechacé.
Al principio me sentí culpable por eso, pues pensé que, si hubiera tenido sexo con ella, ella nunca me habría engañado, pero reflexioné y me di cuenta de que no era normal que ella me ofreciera su cuerpo tantas veces considerando que siempre la rechacé y le decía mis razones.
Es decir, Sonia me ofrecía su cuerpo porque se sentía culpable, y se sentía culpable porque… ¡¡ella me engañaba!!
¡¡Ahhhhhhhh!! ¡¡Maldita sea!! ¡¡Ella quería que yo tuviera sexo con ella después de que ella había tenido sexo con él, para sentirse menos culpable, pero nunca le importó que yo iba a tener sexo usando el mismo puto agujero que ese idiota usó antes!! ¡¡Me niego rotundamente a ser la segunda opción de alguien!!
—D-Daniel, yo…
Sonia intentó tomarme de la mano, pero me alejé nuevamente de ella.
—Te dije que no me toques. Nunca me vuelvas a tocar.
—Daniel…
No me importa que tus ojos se llenen de lágrimas, y ni siquiera vale la pena guardarte rencor. No vale la pena vivir una vida con odio, así que simplemente no le tomaré importancia al asunto y te voy a ignorar, al menos por un tiempo… Tiempo… ¡¡Ahhhhhhhh!! ¡No puedo perder más tiempo!
—¡Mierda, mierda, mierda, mierda, mierda, mierda!- Dije nervioso.
¡Dios, por favor, necesito tu ayuda!
—¡Necesito respuestas…! ¿Eh?
M-me llega una llamada. A-alguien me está llamando… Por favor, Dios, ayúdame.
—¡Gracias!
Saco mi teléfono y contesto. ¡Gracias por escuchar mis súplicas, Dios!
—Ellos lograron ir a ese mundo porque un pequeño portal que conecta tu mundo con este mundo sigue abierto. El portal desaparecerá en unos días, pero ellos ya no pueden regresar. No les digas lo que pasa, inventa una excusa. Y no les daré magia a tus amigos, ya no puedo ayudarte. Adiós.
—¡Pero, perdón por decir esto, pero es tu culpa! ¡Tú dejaste el portal abierto!
—Yo no fui, Daniel, alguien más lo hizo. Apenas me di cuenta. Investigaré al respecto. Adiós.
Cuelga y me pongo más nervioso que antes. ¡¿Cómo que alguien más lo hizo?! ¡¿Acaso algún Dios maligno intenta joderme la vida?! ¡¿Intenta retrasar mis planes?! ¡Ahhhhhhhh! ¡Más problemas a mi vida! ¡Apenas inicia mi aventura, no sean tan malos conmigo!
—¡Mierda, estoy jodido! ¡Ahhhhhhhh!
—¡Dinos lo que pasa, Daniel! ¡¿En dónde estamos?!- Dijo Cris.
—¡¡Daniel, ello se acercan!!- Gritó Sara.
Sara llega con el carruaje y Treis la conduce.
—¡Vámonos, los guardias del Rey vienen en camino!- Dijo Sara.
—¡Maldita sea!
¡Ya no puedo perder más tiempo, después solucionaré el problema con ellos!
Entro a la casa por la caja y le susurro a mi abuela.
—No podemos decirles la verdad, no les digas que eres mi abuela.
—¿Ellos qué hacen aquí?
—Luego te explico.
Tomo la caja y la pongo en el carruaje.
Ah… Adiós, casa, siempre te recordaré por ser la primera propiedad que compré con mi propio dinero.
Adiós, pueblo, gracias por darme la bienvenida. Gracias a ti, conocí a Sara, y gracias a ella, conseguí muchísimos hechizos en mi primer día en este mundo.
Pero ahora debo irme y no sé cuándo podré volver. ¡El Rey está loco, tiene suerte de que yo sea una persona buena y no lo mate! ¡¿Cómo se atreve a desafíar a un aventurero capaz de matar a un demonio de un solo ataque?! ¡Definitivamente eres un idiota, Rey! ¡Algún día vendré por ti! Por lo pronto, prefiero evitar poner en peligro a mi abuela. Vendré por ti personalmente después, y me encargaré del problema desde la raíz.
—¡¿Es un unicornio?!- Dijo Sonia, sorprendida.
El grito de Sonia me regresa a la realidad y suspiro. Debemos irnos ya, no puedo perder más tiempo en mis pensamientos.
Mi abuela y Rem entran en el carruaje y tomo de la mano a Cris.
Me da asco Sonia, no la tomaré de la mano.
—¡Tendrán que venir conmigo, les explicaré lo que pasa!
—¡Sí!- Dijo Sonia.
—¡Esto no tiene sentido lógico!- Dijo Cris, asustado.
¿Y me lo dices a mí? ¡Un Dios o una especie de monstruo capaz de viajar por otros mundos intenta arruinarme la vida! ¡Yo soy el que está más asustado!
Me di a mí mismo una cachetada. ¡Ya, Daniel, deja de perder el tiempo!
—¿Dani?
—No es nada.
Perdón por preocuparte, abuela, pero necesitaba un poco de dolor para tranquilizarme.
Entramos en el carruaje… Bien, estamos listos.
—¡Vámonos, Treis! ¡Lo más rápido posible, por favor! ¡Te lo agradecería!
Treis comienza a correr y me sostendo para evitar golpearme. Se mueve y salta demasiado el carruaje por la velocidad, pero debemos resistir por unos minutos al menos, hasta estar lejos de este lugar.
Y si nos persiguen, yo mismo saldré a enfrentarlos mientras escapan. Soy más rápido que Treis volando, o eso creo, así que podré alcanzarlos después de derrotarlos… ¿Eh?
Bajé la mirada… Sonia puso su mano en mi brazo… Me está tocando otra vez…
—¡Dinos lo que pasa!- Dijo Sonia.
Quité su mano de mi brazo.
—Sonia, esta será la última vez que te lo pediré, y te lo suplico. Por favor, por favor, no me vuelvas a tocar… Te lo suplico…
… ¿Eh? ¿Q-qué?
Bajé la mirada… El líquido que sentí caer en mi mano son… ¿mis lágrimas? ¿Estoy llorando?
Estoy… llorando… Llorando.
C-creí que podría soportarlo, hacerme el fuerte, pero no fue suficiente para olvidar lo que ella me hizo.
Tantos años de amistad y amor, tirados a la basura por su puta lujuria.
M-maldita sea… ¡¡Maldita sea!! ¡¡¿Por qué me hiciste eso, Sonia?!!
—¡¡Dani!!
Lo siento, abuela.
—¡Sé que estás enojado con ella, pero no te golpees! ¡No vale la pena!
Lo siento, abuela… Estuve a punto de perder el control y golpearla, es por eso que yo mismo me golpeé en la cara, para mantenerme bajo control y no dejarme controlar por la ira.
Perdón por eso, abuela… Lo siento.
… Mi nariz está sangrando.
—Eso fue muy inmaduro de tu parte, Dani.- Dijo mi abuela, mientras comenzaba a limpiarme la nariz con un pañuelo.
—Lo siento.
Sé que lo más maduro es olvidar a Sonia y no tomarle importancia al asunto, pero abuela, es difícil para mí superar a Sonia tan rápido.
Nos conocemos prácticamente de toda la vida. Ella fue mi primer amor. Mi primer beso. Mi primera cita… Ella era el amor de mi vida, la tercera mujer que más amaba, después de ti y de mi madre, que murió por darme la vida.
Sonia siempre dibujaba una sonrisa en mi rostro con su presencia, sus besos, sus caricias, sus palabras… Con su ser.
Pero, me engañó… La mujer que tanto amaba, me engañó… Me engañó…
—Me engañó…
—Yo…
Cris le tapó la boca a Sonia, para evitar que me hable. Gracias, Cris, no quiero escuchar sus excusas.
—Hermana, por favor, ¡cállate! Daniel, por favor, primero explica la situación, dejemos el tema del engaño para después. ¡Lo más importante es saber el por qué estamos en este lugar!
Sí, lo sé. Ustedes merecen una explicación, ¡explicación que no puedo darles al 100% porque Dios me lo prohibió!
Me quedo pensando una historia por unos segundos… La historia debe ser convincente… Mmm… Ah… Mmm… Tal vez sí… Sí, puede funcionar, al menos temporalmente… Lo tengo.
—El Daniel que ustedes conocían, era uno de mis yo alternos o paralelos. Cuando intentó suicidarse, hice que la cuerda funcionara como un portal y su cuerpo se juntó con mi cuerpo e hicimos un solo cuerpo, supongo que me entienden. Una fusión. Cuando ustedes tocaron la cuerda, el portal aún seguía funcionando, y es por eso que están aquí.
N-no tiene mucho sentido, pero creo que servirá.
—¿E-entonces no eres Daniel?- Dijo Cris.
—Sí y no, soy Daniel, y a la vez, soy el Daniel de este mundo. A partir de ahora, yo los cuidaré.
—¿O-otro mundo?- Dijo Rem.
Ah, ahora deberé responder más preguntas.
Volteé a verlas. Rem y Sara parecen muy sorprendidas, pues sus cuerpos no dejan de temblar de la emoción y se acercan demasiado a mí.
—¡Increíble, eres de otro mundo! ¡Eso explicaría muchas cosas! ¡Tiene sentido!- Dijo Sara.
—¡¿Cómo es tu mundo?!
—Esa es la razón del por qué no sé nada de este mundo. Mi memoria se reemplazó con la del otro Daniel y solo recuerdo cuando le dije al otro Daniel lo que hice, luego nos fusionamos y olvidé toda mi vida. Ahora sólo tengo los recuerdos del Daniel del otro mundo.
—¿Qué es este mundo?- Dijo Sonia, al quitarse la mano de Cris de la boca.
Todavía le guardo un poco de rencor, con el tiempo el rencor desaparecerá, así que debo ser paciente. Aunque la odie, Sonia merece respuestas, después de todo, es mi culpa que ellos estén aquí.
… ¡¿Mi culpa?! ¡Ellos entraron a mi casa sin permiso, así que ellos también tienen la culpa! ¡50/50 de la culpa!
Ah… Me arde la cabeza por tanto estrés.
—Luego les explico, tenemos que escapar.
—¿De quién?- Dijo Cris.
—Del Rey.
Maldito seas, Rey, acabas de arruinar mi vida tranquila en este mundo. Si estoy en lo correcto, los Semihumanos no son los malos, pero primero averiguaré lo que pasa. Además, ¿por qué perder el tiempo peleando contra ellos, si nuestros enemigos son los demonios? ¡Idiota, solo estarás desperdiciando vidas si sigues con la idea de la guerra! ¡Nuestro enemigo son los demonios, idiota!
… ¿Y si el Rey es un demonio infiltrado? La posibilidad es bastante alta…
—¡¡Alex!!
¡Uwaaaah! ¡Sara, no grites tan de repente! ¡Casi me da un infarto!
Sara me toma del brazo derecho.
—¡Olvidamos a Alex! ¡Si la encuentran, podrían matarla!- Dijo Sara.
¡Es cierto, Alex no está aquí! ¡Por estar perdiendo el tiempo pensando acerca de mis problemas, olvidé por completo a Alex! ¡Ahhhhhhhh! ¡Soy un idiota!
—¡Mierda, sigan avanzando, ahora vuelvo!
Me preparo para salir. Alex, lo siento. Espero llegar a tiempo
—¿Qué harás?- Dijo Sonia.
No tengo tiempo para dar explicaciones.
—¡Arches Nexus!
Me voy volando de ahí a toda velocidad.
Por favor, Dios, espero no llegar tarde.
•
•
Al ver a Daniel irse volando, los hermanos tuvieron reacciones completamente diferentes.
—¡¿Puede volar?!- Dijo Sonia, asustada.
—¡Increíble!- Dijo Cris, con los ojos brillantes.
La abuela de Daniel se queda observando a Sonia por unos segundos y después suspira, bastante decepcionada.
—¿Por qué lo hiciste, Sonia?- Pensó ella.
•
•
(Pov- Daniel.)
Me puse nervioso mientras vuelo por todo lo que me está pasando, pero respiré profundamente y suspiré, para tranquilizarme.
Daniel, necesitas tranquilizarte. Todo saldrá bien, solo hay que tener fe.
Derrotaste a Sandro, el mejor aventurero del gremio. Si fuiste capaz de hacer eso siendo un novato, no tendrás problemas con lo demás. Solo no bajes la guardia.
—Mi historia no tiene sentido, pero se la creyeron.
Tuve suerte… Pero mi historia no tiene nada de sentido… Debo pensar en una mejor, o mejorar la que ya tengo.
O simplemente puedo decir que es un asunto privado, que no puedo mencionar porque algún Dios me mataría… Sí, esa también puede ser una buena opción.
… Alex… Mmm… ¿Debo involucrarla…? Sí… El Rey podría usarla para perjudicarme… Debo ir por ella.
Lo siento tanto por involucrarte, Alex, ¡pero nunca me imaginé que el Rey fuera tan estúpido como para querer tenerme como enemigo! ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Cómo puede existir una persona tan estúpida con una posición tan importante?!
•
•
Minutos más tarde, llego al pueblo pobre en donde vive Alex.
—¿En dónde está?
Busco a Alex y la encuentro despidiéndose de su familia.
Su familia también estará en peligro… Pero…
Miré a mi izquierda. Cientos… Incluso me atrevería a decir que son miles de personas las que están reuniéndose en el castillo.
Y veo a los hombres de este lugar despidiéndose de sus familias.
¿Tan rápido el Rey ordenó reunir a los habitantes del Reino para capturarme? Vaya, vaya. ¿Cómo llegaron tan rápido al castillo? ¿Existirá alguna plataforma de teletransportación o un hechizo parecido? Después lo averiguaré.
Como sea. Seguramente el padre de Alex también irá a buscarme.
Si los dejo aquí, podrían matarlos por ser la familia de Alex, una de mis compañeras, pero… ¿si la secuestro? No puedo irme sin Alex, sí o sí la usarían para atraerme, pero… ¿y si finjo que la secuestro?
Si Alex patalea y grita, posiblemente los demás en el pueblo piensen que la secuestré y ese rumor va a esparcirse, hasta llegar a los oídos del Rey, y dudo que le haga algo a la familia, pues ellos no tendrán importancia alguna para mí, solo Alex.
No sé si funcione, pero es lo mejor. No puedo llevarlos conmigo, sería demasiado peso y va a disminuir mi velocidad, dándole la ventaja a los arqueros. Y si vuelo muy alto, sería muy peligroso, pues si uno de ellos se cae, no podría atraparlo debido al peso en mi cuerpo, y si me toma demasiado tiempo alcanzarlo y atraparlo, su cuerpo sufriría daños y moriría… Morir…
¡Es cierto, puedo usar el hechizo para revivir personas! ¡Si matan a la familia de Alex, puedo revivirlos después de solucionar el problema con el Rey!
Los mataría yo mismo para evitar que sean asesinados cruelmente, pero no quiero arriesgarme. Solo puedo revivir a las personas una vez, y la guerra contra los demonios se volverá más agresiva en el futuro. Ellos podrían morir en el futuro, así que es mejor guardar ese hechizo para el futuro.
El problema principal soy yo, Daniel, no Alex, y el Rey no sabe que es mi compañera…
Ah. Lo siento, Alex, pondré en peligro a tu familia, pero es la mejor opción… para mí.
Una decisión egoísta, lo sé, pero necesaria.
—¡Vendré a visitarlos seguido!
Aterrizo frente a ella.
—¡Hay un problema, debemos irnos del Reino y alejarnos lo más lejos posible!
—¡¿Por qué?!- Dijo Alex, confundida y un poco asustada.
—¡Hice enojar al Rey! ¡¿Vienes con nosotros?! ¡Estarás segura conmigo!
—¡Claro!
Su familia me observa asombrados y volteo a verlos. Lo siento por no llevarlos conmigo, pero espero que comprendan mi situación. Es un Reino completo contra mí, no puedo garantizar que vivan si vienen conmigo.
—¡No se preocupen, la cuidaré muy bien!
—Ayúdame con mis cosas.
Tomo una caja con ropa con mis manos y Alex sube a mi espalda.
—¡Adiós!- Dijo Alex, despidiéndose de su familia.
—El Rey no sabe que Alex es mi compañera, pero podría descubrirlo pronto. Si se encuentran en peligro, entonces… Ya sé. Digan que están bajo la protección de la señorita Rose y la del aventurero Daniel. Estoy seguro de que nadie quiere tener de enemigo a la señorita Rose ni a mí. Adviertan que morirán de la peor manera posible si intentan matarlos. ¡Lo siento! ¡Arches Nexus!
Me voy volando de ahí. No sé si la familia de Alex estará bien, pero solo puedo preocuparme por nuestra propia seguridad por ahora.
Me duele abandonarlos, pero no puedo arriesgar la seguridad de mis amigos y la de mi abuela.
—¿Qué hiciste para que se enoje?
—Por alguna razón, no quiere que vaya al país Soular. Esconde algo, no confío en él.
—¡¿Iremos al país de los Semihumanos?! ¡Es demasiado peligroso!
—Tal vez, pero aún no.
Todavía hay muchos asuntos que debemos resolver primero.
Rey, espero que disfrute del tiempo que tiene en su trono, porque pronto habrá un nuevo Rey. No seré yo, no tengo tiempo, pero encontraré una mejor opción para esa posición, y si te niegas a entregar el poder… te mataré. No te encerraré en prisión, te mataré. ¿Por qué? Porque estoy seguro de que trabajas para los demonios. Eres un demonio, o eres demasiado idiota. No puede existir alguien tan idiota… O eso creo.
•
•
Unos minutos más tarde.
Veo el carruaje… Treis avanzó mucho… Es de gran ayuda. Tuve mucha suerte de conseguir ese hechizo. Es realmente fuerte y rápido. Los guardias no podrán alcanzarnos.
—¡Llegamos!
Desciendo y vuelo al lado de Treis.
—Puedes parar.
Treis se detiene y aterrizo. Ay, mi espalda me duele.
Alex baja de mi espalda y sube al carruaje.
—Ahora sí, vámonos.
Puedo darme cuenta sin mirar directamente que Sonia y Cris no dejan de observarme, las siento sobre mí.
Volteo a verlos. Sus miradas son raras… Sonia me tiene miedo y Cris me admira.
—¡¿Puedes volar?- Dijo Sonia asustada y Cris emocionado.
Cris es un fan de la fantasía. Debo enseñarle más de este mundo. Es una buena oportunidad de volver a ser su amigo, pues oficialmente para ellos soy otro Daniel.
—En este mundo hay magia, puedo usar hechizos de vuelo.
—¡Increíble!- Dijo Sonia, mientras se acerca a mí.
La odio… Y la amo… Mierda… Creo que la sigo amando… Pero no la voy a perdonar… No me gusta el NTR. Odio el NTR… Odio las infidelidades… Y la odio a ella.
—Básicamente soy el Daniel que conoces, y el Daniel que conoces aún está enojado contigo.
—Vamos, solo le di un beso a Erick, no es para tanto. Fue un reto, perdí una apuesta. Por favor, debes creerme.
… Estoy 100% seguro de que no fue solo un beso… Pero no quiero saber más.
—Eso para mí, es engaño. Nunca me vuelvas a tocar.
—Pero…
—Por favor, cállate. No quiero escuchar tus excusas. Y si fue solo un beso, no me importa, sigue siendo un engaño para mí. En el momento en que juntaste tus labios con los de él, lo nuestro terminó. ¿Entendido?
—Daniel, yo…
—Lo repetiré por última vez. ¿Entendido?
—… Yo… No quise lastimarte.
—… Sí… Definitivamente no quiero que me vuelvas a tocar en tu vida.
Me das asco.
Cris se acerca a mí.
—Daniel… ¿Qué pasará con nosotros?
—No pueden regresar a su mundo, se quedarán conmigo o pueden irse si quieren. Les advierto que este mundo es muy peligroso.
—¡Nos quedaremos contigo!- Dicen los dos.
… Ah… Más inútiles… Perdón por llamarlos así, pero es la verdad… Solo me van a retrasar… Bueno, Cris es mi mejor amigo, será divertido vivir aventuras con él… Pero Sonia… Ah… Esa chica será una molestia… Me duele verla… Ella me engañó… Y no puedo perdonarla.
Saco mi teléfono y volteo a ver a Sara.
—¿Los reinos se ayudan entre sí?
—Solo cuando se trata de planear los ataques del ejército se ayudan, ajeno a eso, no.
—¿Hay un buen Reino por aquí? ¿Hay uno confiable? ¿O debemos escapar del país?
—Hay uno que no participa en la pelea contra los Semihumanos.
Mmm. Ya veo. Vaya, vaya. Tal vez el Rey sea pacifista. Vale la pena intentarlo.
—¿Cómo se llama?
—Se trata del Reino del Rey Finder. Es el Rey más bueno que he conocido… Aunque, siendo sincera, nunca lo he visto, solo he escuchado cosas muy buenas de él. Pero es demasiado tranquilo y pacífico en comparación con otros reinos, así que es un lugar aburrido.
… Supongo que a las personas de este mundo les encantan las batallas. Una raza guerrera, ¿eh?
Busco en el mapa el Reino del Rey Finder… Mmm. Aquí está. Está demasiado lejos… Pero con la velocidad de Treis, creo que llegaremos en poco tiempo… Uno o dos días de viaje.
—Lo encontré, pero está muy lejos. Espero que estén listos para un viaje largo. Solo habrá paradas para hacer del baño o dormir.
Treis empieza a hablar.
—Sé por dónde es, llegaremos al amanecer.
Vaya, vaya… No tardaremos tanto. Creí que llegaríamos en una semana.
—Vaya, vaya. ¿Tardaremos todo un día en llegar?
—Lamentablemente sí.
Treis es un ser vivo, debe descansar también.
—No te esfuerces tanto, al anochecer descansaremos.
—Muchas gracias.
—No, gracias a ti.
Sonia y Cris parecen asustados, están temblando de miedo. Fufu. ¿Sorprendidos de escuchar a un unicornio hablar?
—¡¿El unicornio habló?!
Ellos realmente serán un problema.
Debo protegerlos… Mi trabajo aumentó.
Dios, mi cabeza me arde tanto.
Tantos problemas en un solo día. Todo se complicó.
•
•
Al anochecer, todo más o menos se tranquilizó.
Treis regresó a su hogar, pues necesita descansar, él es una criatura con vida propia, no me aprovecharé de él.
Logré tranquilizar a Sonia y a Cris. Fue un poco difícil, pero ya no están tan asustados. Pero, eso sí, Sonia sigue y sigue molestando, intentando hablarme, pidiéndome perdón e insistiendo en que ese beso fue una simple apuesta que perdió. Sí, claro. Soy un ingenuo, lo acepto, pero tampoco soy tan idiota como para creerme eso.
Paramos en un bosque a dormir. Me llevé a mi abuela lejos para decirle lo que Dios me dijo, pues por fin tenía tiempo a solas con ella.
—¿No les dará magia?- Dijo mi abuela.
—No, por eso debemos protegerlos.
—Ya entiendo.
—A partir de ahora, te llamaré Cristina. Sería raro decirte abuela frente a otros.
—Claro, no te preocupes, Dani.
Le dije a mis compañeras que le digan Cristina a mi abuela y que no le digan a nadie que es mi abuela. Prefiero evitar más preguntas raras que pondrían en riesgo la historia falsa que inventé.
Después de decir lo que debía, Sara hizo una fogata y nos sentamos alrededor de ella.
Todos estábamos comiendo lo que Sara cazó. Ella se encargó de drenar la sangre del cerdo salvaje y mi abuela preparó la comida.
Fue asqueroso, así que preferí ayudar no ayudando, pues mi ayuda solo les estorbaría.
—Me siento mal por Liz, ella no vino con nosotras, parecía muy entusiasmada con la idea de vivir con nosotros.- Dijo Alex, con un tono triste.
Liz está del lado del Rey, era obvio que no vendría con nosotros.
—Ella trabaja para el Rey, era obvio que se quedaría con él. Si ella quisiera estar con nosotros, nos hubiera seguido.
—Estoy de acuerdo con Daniel. Apenas la conocíamos, ni siquiera yo la conocía, solo conocía a su hermana. Liz es un misterio, y no sabemos si es posible confiar en ella.- Dijo Sara.
Ah, tan fría como siempre, pero estoy de acuerdo, no sé si es seguro confiar en ella. Creo que sí podría confiar en Rose, pues tengo entendido que es mucho más importante que el Rey, y ella me trató bien. Me pregunto qué es lo que pensará esa mujer acerca de la guerra.
Como sea, lo mejor sería olvidar ese tema por ahora e intentar relajarnos. Pensar demasiado y no descansar solo nos agotará innecesariamente. Resolveré personalmente este problema cuando logre encontrar un lugar seguro para mi abuela. Por lo pronto, lo mejor para ellos sería descansar y no pensar más sobre este asunto.
Me levanto y me alejo de ellas.
—Haré unas camas.
Extiendo mi mano derecha. Supongo que no tendré ningún problema creando camas.
—¡Retiers!
Retiro una gran cantidad de tierra del suelo.
—¡Crea!
Convierto la tierra en un colchón enorme. Fufu. Ah, gracias, Dios, por darme magia tan poderosa.
—Podremos dormir más cómodos así.
—Realmente eres increíble, yo también puedo usar ese hechizo, pero solo puedo crear cosas del mismo material. Tú conviertes la tierra en algo muy diferente.- Dijo Sara.
—Gracias, aunque no sé cómo funciona, solo me imagino lo que quiero que sea y ya, no es necesario que sepa cómo construirlo.
—Si intentas usar el hechizo para convertir algo de tierra en un mueble, ¿podrías?
—Creo que… sí… Esperen…
Puedo crear cualquier cosa… Cualquier cosa…
Tengo una gran idea. Espero que funcione.
Si funciona, crearé aparatos muy útiles y la comunicación no será un problema.
Extiendo mi mano derecha
—¡Retiers!
Saco un poco de tierra y los acomodo en seis montones. ¡Es momento de la verdad!
—¡Crea!
Convierto uno de los montones en un teléfono… F-funcionó… ¿Funcionó? ¡F-funcionó!
—¡Funcionó!
Hago inmediatamente lo mismo con los demás. ¡Sí! ¡Resolví uno de los problemas más importantes en el mundo, la falta de comunicación! ¡Con esto, siempre podré estar seguro de que mi abuela está bien!
Tomo los teléfonos y los reparto.
—¿Funcionan? Por favor, que funcionen.
—¡Funciona!- Dijo Rem.
—¡Igual a mí! ¡Esta cosa está brillando!- Dijo Sara.
¡Sí! ¡Funciona! ¡Ahhhhhhhh! ¡Mi magia es demasiado poderosa! ¡Enemigo final, por favor, no seas tan poderoso como un Dios!
A todas les funciona menos a Sonia y a Cris.
—¿Por qué el mío no funciona?- Dijo Cris.
—A mí tampoco me funciona.- Dijo Sonia.
¿Por qué a ellos no…? Oh, ya recordé. Vaya, vaya. Olvidé que se cargan con magia, y Dios no les dio magia.
—Lo olvidé, se cargan con magia.
Tomo los teléfonos. Se cargan rápido, así que no será ningún inconveniente para mí cargarles el teléfono cuando se les acabe la batería.
—Esperen…
Los teléfonos se encienden. Listo. Fufu. Soy un cargador con piernas.
—Bien, tomen.
Les entrego los teléfonos
—¡Les explicaré cómo funcionan!
Ah, esto será aburrido de explicar.
Saco mi teléfono y señalo una de las aplicaciones más importantes que tiene.
—Tenemos la aplicación de mapa, abran la aplicación.
Todas la abren.
—Sirve para saber en dónde estamos y a dónde ir. Explicaré las dudas al final, primero escuchen.
Sara levantó la mano, pero prefiero primero explicar primero y después resolveré dudas.
Cierro la aplicación de mapa y abro la aplicación de la cámara.
—Esto permite capturar un momento preciso del tiempo y poder guardarlo.
Le tomo una foto a Alex y la muestro, sorprendiendo a las chicas mágicas de este mundo. Mi abuela, Cris y Sonia son de mi mundo, ellos saben perfectamente cómo funciona un teléfono, así que ellos no me prestan atención y están viendo sus teléfonos, seguramente averiguando qué puede hacer.
Bueno, Sonia también me está mirando, pero para disimular que me está tomando fotografías con su teléfono. Ah, como sea, que haga lo que quiera, no me importa.
—Como pueden ver, la imagen quedó plasmada.
—¡Increíble, soy yo!- Dijo Alex, emocionada.
—Se puede cambiar de modo de cámara a vídeo.
Les muestro cómo se cambia.
—Permite grabar un momento en el tiempo de mejor forma.
Empiezo a grabar a Alex.
—Di: «hola».
—¡Hola!- Dijo, agitando los brazos.
Detengo el vídeo y lo muestro.
Ah, me siento raro enseñándoles esto.
—¡Increíble!- Dicen Sara, Alex y Rem emocionadas.
—Abran el menú y encontrarán la aplicación de linterna, creo que es obvio para qué se usa.
Les expliqué cómo encenderla.
Bla, bla, bla… Ah… Explicar cómo se usa un teléfono es aburrido. Ya me quiero dormir.
—Por último, les explicaré los hechizos… Aunque creo que no será necesario, ustedes no entienden nuestra letra, no entenderán lo que dicen los hechizos. Pero pueden tomarles foto a los hechizos y guardarlos, y cuando ocupen uno y no sepan cuál es, simplemente abren la galería.
Muestro dónde está la galería.
—Y buscan la foto. ¿Alguna duda hasta ahora?
Alex, Rem y Sara levantan las manos… Ah, esto será largo.
•
•
Pasé media hora explicándoles en dónde estaban las aplicaciones a Sara, a Alex y a Rem.
Sara es una chica inteligente, pero hasta a ella le tomó tiempo comprender para qué y cómo se usaban. Sí, lo sé, es difícil acostumbrarse a algo nuevo. Te comprendo demasiado bien.
—¡Increíble!- Dicen las tres emocionadas.
—¡E-esto hace de todo! ¡Facilitaría mucho las vidas de las personas, Daniel!- Dijo Sara, sacudiendo mis hombros.
—¡O-oye, no te acerques demasiado a él!- Dijo Sonia… ¿celosa?
Ah, antes me daría gusto y me haría sentir feliz que Sonia se ponga celosa, pues significaría que le importo, pero ahora solo me da lástima y asco.
Mejor simplemente la ignoro y no digo nada.
—Queda una última función, y la más importante.
Abro la aplicación de llamadas.
—Esto sirve para llamar a alguien, en otras palabras, podemos usar esto para hablar con otras personas a distancia.
—¿Podemos hablar con esto?- Dijo Rem.
—Sí, miren… Mierda.
O-olvidé que no me sé mi número. ¡Nunca se lo pregunté a Dios! N-no sabía que lo iba a necesitar. ¡Ahhhhhhhh! ¡Soy un idiota!
—¿Qué pasa?- Dijo Sara.
—No me sé mi número, el que me dio el teléfono no me dijo cuál es mi número. Ah, lo siento, chicas, pero dejaremos eso para otro día.
—Es el primer teléfono en este mundo, intenta marcar al número 1.- Dijo mi abuela.
Mmm… Pues… ¿No sería demasiado sencillo? Bueno, vale la pena intentarlo.
—No lo creo, Cristina… Pero supongo que no pierdo nada intentándolo.
Lo intento y una voz de hombre me dice que el usuario está ocupado… ¿Ocupado?
¿E-en serio ese es mi número?
—Cristina, marca al número 1.
Mi abuela marca y me llega una llamada… Realmente funcionó… Esto es raro… Muy raro… ¡Ahhhhhhhh! ¡Mi número es el número 1! ¡Tan corto! Adiós, sentido común de mi mundo, ya no entiendo nada.
—Vaya, vaya, realmente funcionó. Mi número es el número 1, cuando esté lejos y ocupen llamarme, solo toquen este botón.
Les indico en dónde está el número.
—Y tocan este otro.
Les indico que toquen el botón de llamar.
—¡Quiero intentarlo!- Dijo Alex.
Alex me marca y contesto.
—¿Hola?
—¡Increíble! ¡Se escucha como si estuvieras hablándome en el oído!
Bueno, creo que lo mejor sería explicarlo de una mejor manera, con una mejor demostración.
—¡Arches Nexus!
Me alejo volando hasta estar muy alejado de ellas… Bien, hasta aquí será suficiente.
—¿Me sigues escuchando?
—¡Increíble, puedo escucharte como si estuvieras a mi lado!
Perfecto. ¿Tendrá límite de distancia? Esa será una de las cosas que debo investigar.
Bajo e investigo el número de cada una… Sí, números sencillos, fácil de recordar.
—Mi número es el 1. El de Cristina es el 2. El de Alex es el 3. El de Sara es el 4. El de Rem es el 5. El de Sonia es el 6. Y el de Cris es el 7.
Les explico cuáles son los números, para que no tengan problema y lo memoricen, pues podrían necesitarlo en el futuro.
—¡Increíble, este es un gran invento!- Dijo Sara, saltando de emoción.
Y al darse cuenta de lo que hacía y que todos se le quedaron mirando, se avergonzó y bajó la mirada.
No te sientas mal, Sara, es lindo que tengas ese lado tuyo tan adorable. Realmente eres una chica inteligente, ¿eh?
—Y es muy útil, nunca lo pierdan. ¡Ya es tarde, a dormir!
La comunicación ya no será un problema.
Y también sirve como arma, aunque primero debo descubrir cómo usar mi teléfono como arma.
•
•
Una hora después, y asegurándome de que todos estén dormidos, estoy listo para irme.
Me levanto y veo que todos están dormidos… Sí, ninguno finge, están dormidos. No quiero preocuparlos innecesariamente, además de que quiero ir solo.
—Debo ir con Rose.
Ella parece confiable y necesito su ayuda. No parece alguien malvada. Tenerla de mi lado facilitará el asunto con el Rey y las vidas de las personas ya no estarán en peligro.
Además, estoy 100% seguro de que necesitaré su ayuda en el futuro. No puedo perderla.
Me pongo los zapatos y me dirijo a Sara, que está haciendo guardia.
—Ahora vuelvo, si alguien despierta y pregunta por mí, solo tienes que decir que fui al baño.
—¿A dónde irás?
—Debo ir con alguien, es muy importante. Si pasa algo malo, llámame.
—Claro, solo ten cuidado.
—Lo tendré. ¡Arches Nexus!
Me voy volando de ahí.
Rose, por favor, dame tu ayuda.
Tengo muchísimos problemas, no quiero agregarte a ellos. Quiero tenerte de mi lado.
•
•
15 minutos después, en el castillo.
Liz y Rose están en una habitación, y Rose está consolando a Liz, que no deja de llorar.
Liz está muy deprimida. Estar con Daniel le garantizaba vivir increíbles aventuras, y ese es su mayor sueño. Pero Daniel se fue sin ella, sin tan siquiera preguntarle si quería ir con él, y eso lo consideraba un abandono de su parte.
—¡¿Por qué se fueron sin mí?!- Dijo Liz.
Liz está llorando al lado de Rose y ella le acaricia la cabeza, intentando tranquilizarla.
—Es tu culpa, debiste irte inmediatamente y no quedarte buscando ropa.
—¡No podía salir de viaje sin ropa!
—Lo siento, no sé en dónde está, el Rey lo arruinó todo, como siempre.
—¡Ya no te quedes aquí con él, todos los reyes quieren tenerte, vete con el Rey Finder, él nos trataría mejor!
—No, en el Reino del Rey Finder no hay nada interesante, sería aburrido estar ahí.
Pero, lo que ella no sabe, es que pronto las cosas cambiarían en ese Reino, para bien… y para mal.
•
•
(Pov- Daniel.)
Ah… Ah… Vamos, Daniel, tú puedes. ¡Sé un ninja!
Infiltrarme en el castillo fue fácil gracias a que entré por una ventana exterior del último piso del castillo, pero todavía debo esconderme de los guardias que vigilan.
Estoy escondido detrás de una pared y espero a que pase un guardia.
Se escuchan sus pasos, así que se acerca. Vamos, Daniel, solo debes amenazarlo, eso será suficiente. No es necesario pelear.
—Vaya turno, ya me quiero ir.- Dijo un guardia.
Ahí viene uno… Él solo está haciendo su trabajo, no le haré daño.
Sostengo mi espada fuertemente con mis manos. E-esto es solo para amenazar, pero si intenta matarme… me defenderé.
Por favor, no hagas ninguna tontería. Te lo suplico.
Pasa al lado de mí y sin perder el tiempo, lo amenazo con mi espada en su cuello.
¿Eh? ¿Eso es…? No, mejor no pienso en eso, no tengo tiempo.
—No hables innecesariamente y solo responde a mi pregunta. ¿En dónde está la habitación de Rose?
—¿L-la señorita Rose? S-su habitación es esa.
Señala con su dedo índice una puerta al final del pasillo.
—Gracias. Te lo agradezco.
Me alejo corriendo y el guardia grita casi inmediatamente.
—¡¡Daniel regresó, está en la habitación de la señorita Rose!!
—Bueno, es su trabajo.- Dije mientras lo escucho.
No debo odiarlo por hacer su trabajo. Seguramente recibiría un castigo si se queda callado. No te preocupes, lo comprendo.
Entro en la habitación y cierro la puerta.
—Perdón por entrar sin permiso, pero me vienen persiguiendo.
—¿Daniel?- Dijo Rose.
—¡Regresaste por mí!- Dijo Liz, emocionada.
… Esto es incómodo. Nunca pensé en ella… Siendo sincero, la olvidé por completo… Ella parece muy feliz… Me siento mal.
Desearía mentirle, pero no lo haré. Ya dije demasiadas mentiras el día de hoy, no quiero decir más. No quiero que se me vuelva una costumbre.
—Vengo por otro asunto, pensé que te querías quedar con el Rey.
—¡No, quiero ir con ustedes, incluso ya hice mi maleta!
—Vaya, Vaya, está bien.
Supongo. ¡Ahhhhhhhh! ¡No pierdas tiempo, Daniel!
Tomo algo de tierra de una maceta.
—¡Crea!
Lo transformo en un teléfono. Listo.
—Toma, Rose.
Rose toma el teléfono y lo observa detalladamente.
—Vaya… ¿Qué es esto?
Los guardias intentan abrir la puerta. ¡Ahhhhhhhh! ¡Idiotas, ¿acaso realmente no me tienen miedo?! D-debo trabajar con mi imagen.
—Es un teléfono. Lo siento, creo que no tengo tiempo para explicarte cómo usarlo.
—Salgamos de aquí y me lo explicas. Te pediría que mates a los guardias, pero dudo bastante que quieras hacerlo. ¿Verdad, chico bueno?- Dijo Rose.
—¿Y por qué no les ordenas detenerse? Eres más importante que el Rey.
—¿Acaso no te diste cuenta de sus ojos?
—Sí, me di cuenta de eso.
Los ojos de ese guardia eran completamente negros, me sorprendió demasiado, pero supuse que su raza los tenía así.
—¿Por qué son completamente negros?
La puerta está siendo destruida. No hay tiempo.
—En otro lugar te explico.
Los guardias tumban la puerta y salto por la ventana sin dudarlo.
—¡Arches Nexus!
Los tres nos vamos volando de ahí.
Volteé hacia atrás para verlos. Todos tienen los ojos completamente negros. ¿Por qué?
—Conozco el lugar adecuado para hablar.- Dijo Rose.
—Te sigo.
Según los clichés, ella será muy importante para mi aventura.
Si ignoro el cliché del enamoramiento, ella será muy útil.
Pero si me dice que me ama, la rechazaré. No quiero una novia. No quiero una esposa… No quiero nada.
Un minuto después, llegamos al bosque del silencio. Ah, que nostalgia… Aunque hace poco tiempo que estuve aquí.
—Aquí es seguro hablar.
—Entonces, ¿qué pasa con los ojos?
—Realmente hiciste enojar al Rey, incluso se atrevió a desobedecerme. Si su sangre no fuera especial para mis experimentos, ya lo hubiera matado. Usó uno de mis experimentos de control para obligar a todos los guardias, mercenarios, e incluso aventureros para que lo obedezcan solamente a él, para evitar que yo evite que te maten. La mayoría de los aventureros del Reino ya deben de estar bajo el efecto de la droga, excepto por Sandro, él fue el único que rechazó tomarla, incluso peleó con todos los aventureros que intentaron obligarlo y los derrotó.
—Pelear con todos los aventureros y ser capaz de ganar, incluso con su estado mental actual… Sandro es sorprendente, aunque me duela admitirlo.
—Sí, no lo dudo, es alguien interesante. No sé si considerarlo alguien bueno o malo. Dejando de lado su constante acoso sexual hacia las mujeres, él dona mucho dinero a los orfanatos e incluso escuché que se come las brochetas de rata que los pobres venden.
—¿Él hizo eso?
—Según lo que escuché, siempre lo hace.
—¿No serán rumores inventados por él para hacerlo ver alguien bueno?
—Mis fuentes son confiables, así que no, no son rumores inventados.
…
…
…
Ah… Necesito sentarme.
Me senté debajo de un árbol y suspiré… Sandro, en serio, ¿qué eres realmente? Como guerrero, tienes mi respeto. Eres capaz de derrotar demonios y me diste una mejor pelea que el demonio negro, incluso lograste hacerme daño, a mí, alguien que puede ver los ataques en cámara lenta.
Pero como persona, das asco… O eso creía.
El acoso sexual, pues… No lo sé… No lo sé… Digo, desde que llegué, muchísimas mujeres me han ofrecido sus cuerpos y me han enseñado sus pechos y traseros desnudos sin ninguna vergüenza. La mayoría de personas en este lugar son unos pervertidos, incluyendo a las mujeres.
Incluso hay burdeles con prostitutos hombres para mujeres, y vi a mujeres entrando a ese lugar.
La mayoría de personas en este lugar son pervertidas, así que no puedo culparte demasiado por ser un pervertido. El acoso sexual es un asco, es lo único malo que tienes, y ya te lo curé matándote… O eso espero.
Y si lo que escuché de Rose es cierto, Sandro, tú… Tú eres… ¿Una persona buena? O al menos alguien generoso.
Y yo… maté a una persona que ha hecho tantas cosas buenas…
—¡Puaj! ¡Hermana, está vomitando!
—Daniel, ¿qué pasa?
Ah… M-mierda…
—Agua.
Usé magia de agua para crear agua con mis dedos y limpiarme la boca. Un hechizo sencillo.
Mi estómago se revolvió al recordar la muerte de Sandro.
Maté… a alguien así de amable con otros… L-lo juzgué sin conocerlo por completo.
Por culpa de mi ira, lo maté… Me dejé controlar por mis emociones… Y me aproveché del poder que Dios me dio.
N-no… Me prometí que el poder no me cambiaría, pero me aproveché de mi poder… Me aproveché de mi poder.
Sandro, de él solo escuché cosas sobre su poder y su mala fama de mujeriego, pero nunca escuché nada sobre las cosas buenas que ha hecho. Sandro incluso fue apoyado por los hombres del pueblo cuando luchamos. Pensé que lo hacían por envidia, porque las mujeres me apoyaban a mí, pero ¿por qué apoyar a alguien como Sandro, que tiene fama de mujeriego y que según todas las mujeres están enamoradas de él? Al menos yo tengo fama de chico inocente, pero ellos prefirieron apoyarlo a él. ¿Por qué?
Creo que porque… él es alguien admirado. Las mujeres me apoyaban por mi apariencia, pero a él genuinamente lo apoyaban, porque lo admiran, y por eso la mayoría apostó por él, sin importarles que yo había derrotado al demonio negro y tengo todos los tipos de magia.
Sandro es alguien que es admirado… Una persona que merece admiración… Y yo lo maté.
Lo maté… En lugar de simplemente golpearlo y dejarlo inconsciente o algo así, preferí matarlo.
M-me dije a mí mismo que lo hice para evitar que él acose sexualmente a mi abuela o intente violarla, pero si lo que escuché es cierto, él no sería capaz de hacer eso…
—Rose, no me mientas y responde, por favor. ¿Sandro ha violado a alguien?
—No que yo sepa, Sandro siempre las termina conquistando con sus palabras, y si no le hacen caso, simplemente lo intenta con otra chica y ya.
—¡Puaj! ¡Hermana, dale medicina o algo, sigue vomitando!
Y-yo… j-juzgué a alguien sin conocerlo… M-me dejé llevar por mis prejuicios hacia los acosadores sexuales… L-lo juzgué sin conocerlo… M-me dejé llevar por las palabras de Sara… Me dejé llevar por simples rumores, que ni siquiera confirmé si eran verdaderos.
Lo juzgué… sin darme la oportunidad de conocerlo.
Lo juzgué por simples rumores… Por culpa de mis prejuicios, maté a Sandro, y le robé la oportunidad de poder volver a la vida en el futuro. Lo maté y usé la única vez que puedo usar el hechizo de resucitación en él por simple… odio… Por una estupidez… Una rabieta… P-por culpa de mi prejuicio, le quité la oportunidad de resucitar en el futuro y lo obligué a usarla para saciar mi sed de sangre. Para saciar mi odio… Mi furia.
M-me aproveché de mi poder…
—Daniel, deja de llorar.
—¡Sí, se supone que eres un guerrero, no llores! ¿Verdad, hermana?
—No, Liz, hasta el más poderoso tiene derecho de llorar para desahogarse.
Me limpié las lágrimas… Daniel, el pasado no puede cambiar, lo que hice ya no tiene arreglo. Aunque me duele admitirlo, mi error no puede repararse. Deberé vivir cargando esa culpa por el resto de mi vida.
Sandro… perdóname.
Prometí que el poder no me cambiaría… y quiero cumplirlo.
Cometí un error, pero no cometeré el mismo error dos veces… Los errores nos permiten avanzar… De los errores se aprende… Daniel, no vale la pena recordar el pasado y sigue adelante… Sigue adelante.
—¿Los aventureros atacarán a los Semihumanos?
—No, Sandro lo impidió. Después de derrotarlos, usó antídotos que yo misma le di para que todos los aventureros volvieran a la normalidad. Creo que solo el 32% de los aventureros aceptaron ir a la guerra a cambio de dinero.
—Vaya, vaya. Ya veo… ¿De qué lado estás?
—Del que más me convenga.
—Con eso me respondes todo… Está bien, te explicaré cómo se usa.
Ya me quiero ir, quiero un abrazo de mi abuela.
No tardé mucho explicándole, Rose es muy inteligente y se aprende rápidamente las funciones del teléfono.
Como se esperaba de una mujer como ella.
—Y, por último, la función de llamar.
Abro la aplicación de llamada.
—Presiona este número.
Le señalo el número 1.
—Y luego tocas este.
Señalo el botón de llamar.
—Inténtalo.
Rose lo hace bien, me llega la llamada y contesto.
—Es algo muy útil.
Al escuchar mi voz a través del teléfono, ella me observa con ojos brillantes y simplemente dice una sola palabra.
—Increíble.- Dijo Rose.
—¡Arches Nexus!
Me alejo volando.
—Puedes llamarme, aunque yo esté muy lejos.
—Este aparato realmente es increíble. ¿Cómo supiste crearlo?
—Es un secreto.
Bajo y me reúno con ellas.
—¡Yo también quiero uno!- Dijo Liz.
No hay problema con eso.
Le hago un teléfono a Liz.
—Supongo que entiendes cómo se usa.
—¡Sí!
—Tu número es el 8. El número de Liz es el 9.
Les señalo en dónde está cada número.
—Y el mío es el 1. ¿Alguna duda? Me tengo que ir.
—¿Por qué me das algo tan increíble?- Dijo Rose.
—Iré al Reino del Rey Finder. No podré visitarte, así que te di un teléfono para estar en contacto por si necesito ayuda.
—Claro, no hay problema, pero ¿por qué irás allá? No hay nada que valga la pena.
—Dicen que es el único Reino que no participa en la pelea contra los Semihumanos. Por eso iré. Ya me tengo que ir.
—¡Iré contigo!- Dijo Liz.
—Ve por tus cosas rápido.
—¡Sí!
Liz dice el hechizo y se va volando.
—Realmente me sorprendes mucho, Daniel. Sin exagerar, eres la persona que más me ha logrado sorprender desde que tengo memoria. Todos los tipos de magia, derrotar a un demonio de un solo ataque, derrotar a Sandro, usar hechizos especiales y únicos de la familia Real siendo un simple plebeyo, y eres el chico más guapo que he conocido.- Dijo Rose.
—P-pues, yo…
Me acaricia la mejilla y siento como la sangre sube a mi cara. ¿P-por qué tengo tanto calor?
—¡¿Eh?!
Se acerca a mí y me da un beso en la boca… ¡¿Me está besando?! ¡Me está besando!
¡Uwaaaah! ¡Me tomó con la guardia baja! ¡¿Acaso el destino sabía que tenía planeado evitar todos los avances románticos de las chicas y me tomó con la guardia baja?! ¡Eso no es justo!
—Puedes considerarlo un gracias por el teléfono. No fue mi primer beso, pero fue el primer beso que le di a un hombre de verdad.
… V-vaya, vaya.
Mi cara se pone completamente roja. Ella es muy hermosa… Muy hermosa… Demasiado hermosa… ¡No, Daniel, no caigas en la trampa del Dios del amor! ¡No existe el amor a primera vista! ¡Ella solo está interesada en mi poder y en mi apariencia, no le interesa mis sentimientos! ¡Nunca me enamoraría de alguien como ella! ¡Debo rechazarla inmediatamente!
—D-de n-nada, n-no t-te p-preocupes.
¡Uwaaaah! ¡No me atrevo a rechazarla! ¡Soy un idiota!
—Te miras más lindo nervioso.
—¡¿En serio?!
¡No, idiota, no caigas en su trampa! ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué soy un chico tan fácil?!
•
•
(Pov- Rose.)
Fufu… ¿Así se siente besar a un hombre de verdad? Se siente… delicioso.
Solo he besado a dos personas en mi vida, mi maestra y Daniel… Aunque mi maestra me besó cuando se embriagó y al día siguiente se disculpó por 10 horas seguidas, suplicando que no la denuncie por besar a una pequeña niña de 10 años. Fufu.
Daniel tiene un pasado misterioso, un poder igual de misterioso e increíble, y un futuro prometedor.
Si lo ayudo, mis días de aburrimiento terminarán.
Si lo enamoro, eso me garantizará estar a su lado cuando las cosas divertidas pasen.
Mi hermana no es la única que quiere diversión en su vida.
… Aparte, mi sangre de guerrera no puede evitar sentirse atraída hacia él… Quiero tener hijos poderosos… Y Daniel puede darme lo que quiero.
Fufu. Daniel, no me decepciones.
Tenía planeado ir tras Sandro, pero justo cuando iba a poner en marcha mi plan, tú apareces en mi vida. No es una coincidencia, es el destino, y no planeo dejarte ir.
•
•
(Pov- Daniel.)
¡Ahhhhhhhh! ¡Daniel, aleja a Rose de ti, idiota! ¡No dejes que se acerque más!
—Fufu. Tu rostro está rojo, Daniel. Que lindo.
—¡G-g-gracias, p-pero yo…!
¡Ahhhhhhhh! ¡Me robó otro beso! ¡Daniel, sé valiente y aleja a esa violadora de labios de ti!
¡Uwaaaah! ¡Me empujó al suelo!
¡No, Daniel, no dejes que los nervios te dominen!
M-me está besando el cuello y… ¿me está acariciando la entrepierna?
—No.
La empujé y me levanté del suelo. Todo menos eso. Puedo soportar muchas cosas, pero no eso.
—No quiero tener esposa. No quiero tener novia. No quiero tener sexo. No quiero tener amigas con derechos… No quiero estar con una mujer nunca en mi vida. Si me ayudarás, será porque quieres ser mi amiga, pero solo mi amiga. Nunca tendré sexo contigo. Nunca volverás a besarme. Nunca volveré a tener novia. Nunca. ¿Entendido?
—Oh… Fufu. Un reto difícil, ¿eh? Me gusta. ¿Al menos me dejas intentar conquistarte?
—Me prometí a mí mismo nunca volver a tener novia, así que no creo que lo logres. Pero si quieres perder el tiempo, entonces inténtalo.
—Desde que te conocí, me he dado cuenta de que nada es imposible en esta vida, así que no creo que sea una perdida de tiempo. Después de todo, tú eres Daniel, el que hace posible lo imposible. Y si lo intento mucho, terminarás sucumbiendo a mis encantos.
—… Yo aborrezco las infidelidades, y considero el harem como infidelidad. En otras palabras, si por alguna razón me enamoro de ti, no tendrás otro novio y yo no tendré otra novia, pero si yo consigo una novia que no eres tú, te rendirás inmediatamente. Esa es mi única condición. ¿Aceptas?
—Oh, ¿me estás dando la oportunidad de tenerte para mí sola y no tendré que compartirte con nadie más? Fufu. Estoy más que de acuerdo. ¿Cómo quieres que se llame tu primer hijo?
—Mmm. Creo que esa es una decisión que nos corresponde a los dos y debemos tomarla juntos, pero si tuviera que responder, diría que lo llamaría Daniel, porque mi padre y mi abuelo se llamaban Daniel también, y quiero seguir con esa costumbre. Y si nace mujer, la llamaría Nadia, en honor a mi difunta madre.
—Daniel y Nadia, ¿eh? Bonitos nombres. Sí, me gustan. Así le pondremos a nuestros hijos cuando nazcan.
—¿Y qué nombre les pondrías tú…? ¡Ahhhhhhhh! ¡Espera, espera, espera! ¡Me estás manipulando para imaginarme con hijos contigo y querer tenerlos!
—Ups. Culpable.
—¡Ahhhhhhhh! ¡Eso es jugar sucio!
—Fufu. Eres adorable.
Liz llega con sus cosas y aterriza al lado de nosotros. ¡Mi salvadora!
—¡Vámonos!- Dijo Liz.
—¡V-vámonos!
—Nos vemos luego, Daniel.- Dijo Rose, guiñando un ojo.
—Nos… Nos vemos… ¡Arches Nexus!
Liz y yo nos vamos de ahí volando.
—Daniel, ¿estás bien? Tienes la cara roja.- Dijo Liz.
—Sí, lo estoy.
… Lo siento, Rose… Realmente lo siento.
Quiero estar solo… No confío en las mujeres… Ya no creo en el amor… Quiero estar solo… Lo siento.
Pero… sí… Realmente era uno de mis sueños tener un hijo, pero era un sueño en el que Sonia estaba incluida.
Pero ese sueño ha muerto, al igual que mi amor por ella… Muerto… Muerto…
—Muerto…
Sandro… Lo siento.
•
•
30 minutos después, por fin llegamos.
Tardé más en llegar porque tenía que volar a la misma velocidad que ella. Mi poder mágico es más poderoso, por eso mi velocidad es muy superior a la de ella.
Liz y yo llegamos al lugar en donde están las demás. Aterrizamos frente a Sara.
—Lo siento, ya llegué.
—¿Liz? ¿Fuiste por ella?
—¡Hola!- Dijo Liz, sonriendo y con un tono un poco alto.
Le tapo la boca con mi mano derecha.
—Están dormidas, no grites.
Le quito la mano.
—Lo siento.
—Fui a decirle algo a la hermana de Liz.
—¿Fuiste al castillo? Pero está muy lejos. ¿Cómo fuiste tan rápido?- Dijo Sara.
—Volando soy muy rápido.- Dije, sonriendo.
—Increíble.- Dijo Sara… sonrojada.
… Maldito idiota. Deja de sonreír, Daniel… Ah, mejor hago guardia.
—Puedes dormir, yo haré guardia… Pero primero, debo ir a hacer algo. Regreso en un minuto.
—Está bien.
Me alejo de ellas y me acerco a mi abuela, que está dormida. Perdón, abuela, pero lo necesito.
Sacudí a mi abuela hasta lograr despertarla.
—¿Pasa algo, Dani?
—Abuela, ¿podrías abrazarme? Por favor. Te lo agradecería… mucho…
Mi voz se corta y las lágrimas salen… Otra vez… Maldita sea. No sé controlarme.
—Dani…
Mi abuela me abraza con fuerza y yo la abrazo.
—Todo estará bien, Dani. Todo siempre puede mejorar, no pierdas la esperanza.
—Gracias… Gracias…
Esto era lo que necesitaba… Mi error no tiene solución, pero por eso mismo no debo pensar demasiado en eso, pues no importa lo mucho que piense, nunca se arreglará y solo me hará sentir mal. Debo seguir adelante, por mi abuela.
Mi abuela es mi única motivación para seguir adelante… Sandro… realmente lo siento mucho… Prometo que no volveré a cometer el mismo error… No lo haré.
—Gracias, lo necesitaba. Vuelve a dormir.
—Dani, ¿qué pasó?
—Prefiero hablar de eso en la mañana. Descansa.
Le di un beso en la mejilla e intenté irme, pero me tomó del brazo.
—Dani, te conozco perfectamente y sé que estás triste. ¿Qué pasó?
—Tenías razón, abuela… No debí matar a Sandro… En la mañana hablamos, por favor, te lo suplico. No quiero hablar de eso en este momento.
—… ¿Me lo prometes?
Levanté mi dedo meñique y le sonreí.
—Te lo prometo.
—Está bien, te tomaré la palabra, pero si necesitas hablar, no dudes en despertarme.
—No te preocupes. Que descanses.
Me alejé caminando. Mi abuela es tan amable. Se dio cuenta de que realmente no quería hablar de eso y no insistió… No la merezco.
—Yo haré guardia, vayan a dormir.
—¿Pasó algo? Tienes los ojos llorosos.
—Es un asunto privado, lo siento… Yo haré guardia, vayan a dormir.
—Gracias.
Las dos se van a dormir y me pongo a vigilar.
—Será una noche larga.
¿Existirán zombies o vampiros? Me pregunto si el demonio que destruirá el mundo es el clásico Rey Demonio.
¿Y si resulta ser una loli? Eso sería demasiado cliché… Ah, el futuro es misterioso.
… Sandro, él… No… No pensaré más en él, solo me seguiré haciendo daño.
Mejor simplemente vigilo… Ah, tan silencioso… Las noches tranquilas como esta son buenas, pero aburridas. Será una larga noche.
•
•
Pensé que sería una noche aburrida, pero eso acaba de cambiar.
Una hora después, por fin ocurre algo interesante en esta aburrida noche.
Veo a un chico y a una chica acercándose hacia mí, están flotando. El chico tiene el cabello color rojo, tiene los ojos de color rojo, y usa un traje negro, como los que usan los nobles de este mundo. La chica tiene el cabello color rosa y corto, tiene los ojos de color rosa, y usa un vestido negro. Parecen ser de mi edad. Ambos son transparentes.
¿Fantasmas?
Se ven muy jóvenes… Ah, este mundo es demasiado peligroso. Cualquier cosa te puede matar, ¿eh?
El chico se acerca a Rem y la chica se acerca a mí. ¿Pervertidos?
—¡A divertirnos, hermana!
Son hermanos… Eso lo hace más triste.
La chica se acerca demasiado a mí.
—¡Sí!
El chico finge tocar la cara de Rem y la chica empieza a fingir que me toca la cara.
¿Qué hacen?
Mejor finjo que no los veo, para saber sus intenciones.
—¡Son muy lindas!- Dijo el chico.
—¡Es muy lindo, ojalá pudiera besarlo de verdad!- Dijo la chica, ¿sonrojada?
¿Los fantasmas pueden sonrojarse? Que raro… ¿Qué?
¿Eh? Tengo un mal presentimiento.
La chica acerca sus labios a los míos y me alejo de ella, bastante nervioso. ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Realmente todos en este mundo son unos pervertidos y acosadores sexuales?!
—¡¿Qué haces?!
—¡¿Eh?!- Dijo la chica, asustada.
El chico quiere fingir besar a Rem. ¡Malditos fantasmas pervertidos!
—¡Aléjate de ella!
El chico voltea a verme, sorprendido.
—¡¿Puedes verme?!- Dijo, asustado.
—¡Los dos, vengan acá!
Me alejo de mis compañeras y los fantasmas me siguen.
Sé que posiblemente ser un fantasma sea aburrido, ¡pero eso no les da derecho de acosar sexualmente a otras personas!
—¿Qué hacen?
—¿Por qué puedes vernos?- Dijo el chico.
—Es un poder que tengo, puedo ver a los fantasmas.
—¡Increíble!- Dicen los dos, sorprendidos.
Ah… «Increíble»… Esa palabra la he escuchado bastante el día de hoy. Ya se volvió molesta.
—¿Por qué intentaste besarme?- Le dije a la chica.
Volteo a ver al chico.
—¿Por qué intentaste besar a mi compañera?
—Es lo que hacemos para divertirnos, ser fantasma puede ser muy aburrido.- Dijo el chico.
—Se ven jóvenes. ¿Cuántos años tenían cuando murieron?
—Tenía 17, y mi hermana tenía 14.
—Me llamo Molly, mucho gusto.- Dijo la chica, sacudiendo su mano mientras me sonríe.
Vaya, vaya. Admito que es bastante linda.
—Yo soy Zero, mucho gusto.- Dijo el chico.
Sentí un escalofrío al escuchar el nombre de Zero… ¿Por qué? Eso fue raro.
—… Soy Daniel, mucho gusto. Escuchen, no quiero que vayan por ahí acosando a las personas. Está mal, y posiblemente se van a ir al infierno por eso.
—No te preocupes, no pueden vernos.- Dijo Molly.
—Sí, aparte asustar y acosar a las personas es lo único divertido que hacemos.- Dijo Zero.
—¿Hace cuánto tiempo murieron?
—Hace unos meses, unos guardias del Rey Dreisi nos mataron.- Dijo Zero.
—Supongo que es uno de los reyes que tiene el país. ¿Por qué los mató? ¿Descubrieron algo que no debían descubrir?
—Por venganza, él nos mató porque mi padre no quiso colaborar con la pelea contra los semihumanos.- Dijo Molly.
—¿Tu padre?
¿Será algún aventurero famoso o un político?
—Mi padre es el Rey Finder.- Dijo Molly.
Vaya, vaya… Que gran coincidencia… Es demasiado conveniente conocerlos… Debe ser el destino… O Dios me está ayudando.
Como sea, no importa, no vale la pena pensar demasiado en eso.
—Mi padre no quiere participar en una pelea de odio.- Dijo Zero.
Este momento es perfecto, puedo conseguir información valiosa.
—¿Pelea de odio? ¿Me podrían explicar? No sé nada sobre los Semihumanos, soy un poco ignorante.
—Los humanos odian a los Semihumanos, piensan que son demonios y los quieren muertos.- Dijo Molly.
—Y los Semihumanos odian a los humanos porque los tratan como monstruos asquerosos.- Dijo Zero.
—Este odio provoca que los humanos y los Semihumanos se peleen entre ellos muy seguido.- Dijo Molly.
—Tres de los cuatro reyes del país se unieron para pelear contra los semihumanos.- Dijo Zero.
—Nuestro padre fue el único que no estuvo de acuerdo. Él piensa que los Semihumanos son como nosotros y no merecen morir.- Dijo Molly.
—Los reyes intentaron convencerlo, y como no cambió de idea, lo empezaron a amenazar.- Dijo Zero.
—Cuando lo amenazaron con matarnos, mi padre nos envió muy lejos del Reino para mantenernos seguros.- Dijo Molly.
—Pero los aventureros que nos protegían resultaron ser guardias del Rey Dreisi y nos mataron aquí, en este bosque.- Dijo Zero.
Siento un odio en mi corazón después de escuchar esa historia y cierro el puño derecho con fuerza.
Tsk. Llegar tan lejos por simple odio… Esos reyes son los verdaderos monstruos.
—Realmente no puedo confiar en los reyes.
—Bueno, nos iremos, ya no te vamos a molestar.- Dijo Zero.
—¡Adiós!- Dijo Molly, sonriendo.
Molly finge darme un beso en la mejilla.
—Si algún día ves a mi padre, ¿puedes decirle que no se sienta culpable con nuestra muerte?- Dijo Molly.
—Ustedes se lo dirán. ¡Resucitación espiris!
Un círculo aparece debajo de Molly y revive.
—¡Resucitación espiris!
Un círculo aparece debajo de Zero y revive. Listo.
—¿Eh? ¿Qué hiciste?- Dijo Molly, confundida.
No se han dado cuenta, ¿eh?
Acaricio la cabeza de Molly.
—Los reviví.
—¡¿Eh?!- Dicen los dos, sin poder creer lo que escucharon.
Zero y Molly me empiezan a tocar la cara.
—¡¿Estamos vivos?!- Dicen los dos, todavía sorprendidos.
—Sé un hechizo de resucitación y les regresé la vida.
—¡Gracias!- Dijo Molly, emocionada.
—De na… ¡Uwaaaah!
Molly saltó sobre mí y me empieza a besar. ¡Ahhhhhhhh! ¡Esto es demasiado ilegal! ¡Que alguien la detenga!
—Gracias…
Me da un beso en la boca.
—Por…
Me da un beso en la frente.
—Revivirme.
Me da un beso en la nariz.
—N-no te preocupes.- Dije, apenado.
A-afortunadamente fueron besos inocentes, no de adultos como el que Rose me dio.
Me alejo un poco de ella, bastante nervioso. N-no quiero que otra heroína aparezca en esta historia. ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué me pasa esto a mí?!
M-mejor regreso al tema principal.
—Nosotros iremos al Reino de tu padre. ¿Quieren venir conmigo?
—¡Sí, por supuesto! ¡Gracias!- Dicen los dos.
Vaya, vaya. Hasta parecen gemelos.
Molly y Zero tocan sus cuerpos y se abrazan llorando.
Que bonito. Esto necesitaba ver después de tantos problemas de este día. Algo conmovedor y bonito.
—¡Estamos vivos, hermano!
—¡Volveremos a ver a nuestro padre, hermana!
Que boni… ¿Eh? ¿Qué hará?
Rem se levantó de la cama y se dirige a ellos
—¡Trato de dormir! ¡Cállense!
Los golpea en la cabeza con sus puños. Ouch. Eso debió doler.
—Realmente estamos vivos.- Dijo Zero, acariciándose la cabeza.
—¡Me duele la cabeza!- Dijo Molly, quejándose del dolor.
Alejo a Rem de ellos. Arruinó un lindo momento conmovedor, pero se lo merecían, por acosadores sexuales.
Después de alejar a Rem de ellos, ella se acuesta a dormir y no pregunta nada sobre ellos.
Sí, supongo que realmente tenía muchísimo sueño.
—Bueno, ¿quieren dormir o quieren quedarse conmigo a vigilar? Algo de compañía me vendría bien.
—No tengo sueño, te acompañaré.- Dijo Zero.
—Yo también.- Dijo Molly.
Los tres empezamos a vigilar… Hay demasiado silencio… Es agradable, pero un poco aburrido… Quiero hablar.
—Entonces… ¿Eres un aventurero?- Dijo Molly.
El silencio desapareció. Gracias.
—Sí, aunque soy nuevo.
—¿Qué tipo de magia tienes? Mi hermana y yo tenemos magia tipo invocación, luz y tierra.- Dijo Zero.
—Todas.
—¿Eh? ¿Qué dijiste?- Dijo Molly confundida.
—Tengo todos los tipos de magia.
—¡¿Eh?!- Dicen los dos, confundidos.
Les tapo la boca con mis manos y Molly se sonroja. No quiero que despierten a mi abuela.
—Ya sé lo que dirán, esperen.
Quito mis manos de sus bocas y saco mi tarjeta de mi bolsillo.
—Para que me crean.
Los dos la observan bien y a detalle. Me pregunto si habrá alguna manera de confirmar que las tarjetas son reales que yo desconozca. Cualquiera podría falsificar una, pero considerando que Sara no dudó de mí cuando se la enseñé, significa que hay una manera de saber si una tarjeta es verdadera. Después les pregunto.
—¡Daniel, eres increíble!- Dijo Molly, emocionada.
Me empieza a besar de nuevo y me alejo de ella. ¡Ahhhhhhhh! ¡Esto es demasiado ilegal para mí!
—¡Deja de darme besos!
No, no soy un cobarde, lo que pasa es que apenas la conozco. Yo no soy un mujeriego. ¡Y es demasiado joven para mí!
—Increíble, no creí que fuera posible tener todos los tipos de magia.- Dijo Zero.
—El aventurero que más tipos de magia tenía, era la aventurera Lina, ella tiene cinco tipos de magia, pero tú tienes los 10 tipos de magia. ¡Increíble!- Dijo Molly.
¿Una aventurera con cinco tipos de magia? Vaya, vaya. Suena interesante.
—¿Y ella es fuerte?
—Es muy fuerte, es de rango S.- Dijo Molly.
—Tiene magia tipo: Agua, fuego, tierra, viento e invocación.- Dijo Zero.
Genial, una persona fuerte. Debo conseguir su ayuda.
—¿En dónde puedo encontrarla?
—Lo último que escuché de ella es que fue a Soular.- Dijo Zero.
—Sería interesante hablar con ella, con tantos tipos de magia, supongo que debe de saber muchos hechizos.
—¿Qué harás en el Reino de mi padre?- Dijo Molly.
—Solo quiero saber algo, es todo.
Bueno, la verdad es que no sé exactamente lo que haré.
Lina… Ella no parece una inútil.
Debo buscarla.
•
•
7:03 de la mañana, les di tres minutos más de sueño para que vean que soy alguien amable, ¡pero es momento de despertar!
Despierto a todas con un gran grito.
—¡¡Arriba, soldados, debemos irnos!!
Todas se levantan poco a poco y bostezan… Despertaron rápidamente… Genial. Pensé que tardaría más en despertarlas.
Wow. El cabello de mi abuela está muy despeinado y alborotado. Mmm… Por aquí vi un peine… Aquí está. Es de Sara, pero no creo que le moleste compartirlo.
Me acerqué a mi abuela y comencé a peinarla.
—Buenos días, Cristina.
—Buenos días, Dani.
—¡B-b-buenos días, Daniel!- Dijo Sonia.
—Buenos días, Daniel.- Dijo Cris.
—Buenos días, Cris.
Seguí peinando a mi abuela, ignorando a Sonia.
—Cof, cof. ¿No te faltó alguien?- Dijo mi abuela.
—Pero…
—Sin excepciones.
—Ah… Está bien…
Sonia me mira con ojos de cachorro y suspiro.
—Buenos días, chica rubia con el cabello teñido de negro.
—Dani.
—Ah… Buenos días… ¿Cómo se llamaba ella?
—¡Dani!
—Ya, ya… Ah… Buenos días, Sonia.
—¡Buenos días, Daniel!
Sonia me abrazó del brazo y no tuve necesidad de alejarla de mí, Cris alejó a Sonia de mí.
—Tú no tienes vergüenza, ¿verdad, hermana?
—¡Tú no te metas!
… ¿Le dio una cachetada a Cris?
—N-no… N-no quise…
—Hermana, por favor, acepta que lo perdiste y no te comportes tan egoísta.
Recogí los lentes de Cris del suelo y se los reparé, pues se rompieron. Solo fue cuestión de usar el hechizo de creación de objetos y pensar en los lentes de Cris, pero nuevos.
—Toma.
—Muchas gracias.
Los tomó y me acerqué a Sonia.
—D-Daniel, y-yo no quise…
Levanté la mano y ella cerró fuertemente los ojos, pensando que le daría una cachetada, pero simplemente le acaricié la cabeza y después la tomé de la mano y se la sacudí… Un simple saludo de manos.
—¿Eh? ¿Daniel?
—Sonia, por favor, ya no insistas en recuperarme, nunca pasará. Siendo sincero, preferiría morir a tener que volver contigo. Pero eso no significa que no podamos ser amigos de nuevo… Ser novios fue un gran error. Solo eso puedo darte, amistad. Adiós.
Me alejé caminando y suspiré.
—Suban al carruaje, nos vamos.
—¿Tan temprano?- Dijo Alex.
—Si salimos ahora, llegaremos en la tarde.
Sara observa a Zero y a Molly. Sí, sí, lo sé. Más personas.
—¿Ellos quiénes son?- Dijo Sara.
—Son los hijos del Rey Finder. Vi a sus fantasmas y los reviví. Suban al carruaje, debemos irnos.
—¡¿Los hijos del Rey?!- Dicen todas, confundidas.
—No hay tiempo de explicaciones. Yo iré volando porque no hay tanto espacio en el carruaje.
Y no quiero una escena innecesaria en donde alguna de ellas esté demasiado cerca de mí, no quiero darle esperanzas a nadie… ¡Uwaaaah!
¡Rem se subió a mi espalda! ¡Todavía no estoy listo!
—¡Iré contigo!
—¡Espera, aún no activo el hechizo de fuerza!
Caigo al suelo junto con Rem.
¡Me dolió…! ¡Ahhhhhhhh! ¡Sus pechos están en mi cara! ¡¿Cómo es posible si caímos de frente y ella estaba en mi espalda, no frente a mí?! ¡Dios del amor, te estoy diciendo que no quiero hacer ningún avance con alguna de ellas, no les des falsas ilusiones!
—¡Daniel! ¡L-lo siento!- Dijo Rem, preocupada.
Rem me ayuda a levantarme. ¡Ahhhhhhhh! ¡Me niego a hablar sobre esto! ¡Lo borraré de mi mente!
—Suban al carruaje. ¡Caballo divino, ven a mí!
Treis aparece.
—Hola, buenos dí… ¿Eh? ¿Q-qué?
Se quedó perplejo al ver a Molly y a Zero. ¿Los conocía?
—¿Molly y Zero?
Oh, ¿se conocen? ¡¿Y si eran enemigos?!
—¡Treis!- Dicen los dos, emocionados, sin ningún rastro de odio en sus voces.
No, no lo odian. Eran amigos, ¿eh?
Los dos abrazan a Treis… y Molly llora demasiado… Wow. ¿Tanto lo extrañaban? Que lindo es saber que Treis es tratado bien y no como un esclavo a pesar de ser una invocación.
—Supongo que se conocen.
—Mi familia lo utilizaba para transportarnos.- Dijo Molly.
Treis empieza a llorar… Vaya, vaya… Es tierno, aunque es raro ver a un unicornio llorando.
—¿Cómo siguen con vida? Yo los vi morir.- Dijo Treis.
Estuvo en la pelea, ¿eh? Debió ser difícil para él verlos morir y no ser capaz de salvarlos.
—Daniel nos revivió con un hechizo de resucitación.- Dijo Zero.
—¡¿El hechizo de resucitación de la familia Real?!
—¡Sí!- Dijo Molly.
—¡Pero nadie ha podido utilizarlo en doscientos años!
—Supongo que soy un chico con suerte.- Dije, sonriendo y guiñando un ojo, para aumentar la confianza que Treis tiene en mí.
—¡¿Eres de la familia Real?! ¡Solo ellos podían usarlo!
—No lo soy, soy un pobre plebeyo.
Zero y Molly siguen abrazando a Treis, mientras yo subo las cosas al carruaje.
Es un momento muy lindo y quisiera que dure más, pero un ejército está tras de mí y no podemos darnos el lujo de descansar.
—¡Te extrañamos!- Dijo Molly.
—Lo siento, si no hubiera bajado la guardia, ustedes no hubieran muerto.
—No te preocupes, no fue tu culpa, esos guardias eran muy fuertes.
Según lo que escuché, los guardias los mataron rápidamente. No violaron a Molly ni nada asqueroso le hicieron a su cuerpo.
Pero mataron a dos personas inocentes… Ya tengo el castigo perfecto para esos guardias cuando los encuentre.
•
•
Después de hablar con Treis por varios minutos, me aburrí de escucharlos. El viaje es largo, tienen mucho tiempo para hablar.
—Debemos irnos ya.- Dije, con un tono serio, para que sepan que no estoy bromeando.
—Sí, lo siento.
Treis toma posición y nos vamos.
En el camino hablas más con ellos, no podemos quedarnos más aquí.
•
•
(Dos horas más tarde.)
Estoy volando sobre el carruaje, tengo a Rem en mi espalda, pero ya otra persona exige su turno.
Ah, me siento como un juego mecánico, todas piden turnos para viajar conmigo.
—¡Rem, me toca volar con Daniel!- Dijo Alex.
—¡Está bien!- Dijo Rem.
—Treis, detente.- Dijo Alex.
Treis se detiene.
Bajo y Rem sube al carruaje.
—Diviértete.- Dijo Rem.
Sonia y Cris siguen con miedo, están abrazando sus piernas y no dejan de temblar… Es normal tener miedo. Ellos tienen familia. Yo estoy como si nada porque mi abuela está conmigo, y ella es mi única familia, pero ellos tenían padres, tenían una familia.
—Nuestros padres pensarán que nos secuestraron.- Dijo Cris.
—Falté a la cita con Erick, va a creer que no lo amo.- Dijo Sonia.
—¿Eh? ¿Qué?- Dije… asqueado.
¿En serio lo dijo?
…
…
…
Considerando las expresiones de sorpresa de las demás, la expresión de pena y tristeza de mi abuela, y la expresión de asco de Cris, sí, ella en serio lo dijo.
…
…
…
Lo dijo… ¡¡Ahhhhhhhh!! ¡¡Lo dijo!!
—¿Q-qué? ¡N-no, y-yo no quise decir eso! ¡A-algo me obligó a decir la verdad! ¡No, no! ¡Yo no quise decir eso, algo me obligó a decir eso! ¡Es mentira, Da…!
—¡Ahhhhhhhh! ¡Ya basta de excusas!
Hija de… ¡Maldita hija de…! Ah, no quiero insultar a tu madre, ella no tiene la culpa de que seas una perra.
Perdón por insultarte, ¡¡pero eres una perra!!
—¡Lo sabía! ¡Ahhhhhhhh! ¡¿Por qué no simplemente terminaste conmigo en lugar de engañarme?! ¡¿Tanto querías hacerme sufrir?! ¡¿Ese hijo de puta te convenció de no terminar conmigo para burlarse de mí?! ¡¡Ese hijo de perra siempre me está jodiendo la vida!!
—¡Dani, no digas groserías!
—¡La madre de Erick me robó un beso e intentó acostarse conmigo a pesar de que tenía esposo, por eso tengo el derecho de llamarlo hijo de perra! ¡Y me escapé de ella porque no quería serte infiel! Ah, pero tú… Tú… ¡Ahhhhhhhh! ¡Maldita sea!
—D-Dani… ¿O-otra vez? ¿C-cuándo?- Dijo mi abuela.
—¿Otra vez?- Dijo Alex.
—… Unas horas después de la muerte de mi abuela, Cristina. Ella se ofreció a pagar todo si yo… Si yo me acostaba con ella… Estaba a punto de hacerlo, pero recordé a Sonia y me escapé. No quería engañarla… Pero ella… Ella… ¡¡Ahhhhhhhh!! ¡¡No vale la pena!! ¡Alex, vámonos!
Alex baja del carruaje.
—No hables más conmigo, Sonia. Por favor, te lo suplico… No me hables.
Alex sube a mi espalda.
—¡Arches Nexus!
Me alejo volando del suelo… Ella era el amor de mi vida… Y se enamoró de otro… Me duele el corazón… Quiero llorar… Mierda.
—Daniel, ¿ustedes dos eran pareja?- Dijo Alex.
—El Daniel del otro mundo era su pareja. Aunque en este mundo es normal, en el otro mundo no lo es. Un hombre solo puede tener una pareja, y una mujer también debe tener una pareja, pero parece que ella se enamoró de otro y engañó a Daniel.
—Realmente me sorprendí cuando me enteré de que eras de otro mundo. Eso te hace una persona más interesante, Daniel.
—Gracias.
—Y me alegro que en tu mundo solo tengas permitido tener una pareja, así que, si hago que te enamores de mí, no tendré que preocuparme de que tengas más novias.
—¡¿Eh?!
Alex se empieza a reír.
—¡Es broma!
¡Pues espero que se quede como broma!
•
•
2:18 de la tarde, por fin llegamos.
Llegamos a la entrada del territorio del castillo. No me preocupo por la entrada, después de todo, tengo a los hijos del Rey conmigo, seguramente los guardias los reconocerán, y si no me dejan entrar, ¡entraré a la fuerza!
—Aquí es, ahí está el castillo.
Unos guardias nos impiden pasar. Fufu. Veamos cómo intentan detenernos.
—¡Presenten sus documentos, por favor!
Vaya, vaya… Son muy educados. Me agrada eso.
Zero y Molly salen del carruaje.
—¡Somos los hijos del Rey, te ordenamos dejarnos entrar!- Dicen los dos.
Oigan, al menos les hubieran dicho «por favor».
—¡¿Están vivos?!
Uno de los guardias sale corriendo… Oh… Vaya, vaya… Fue más fácil de lo que creí. ¿Ni siquiera dudaron poquito?
—¡Le daré el aviso al Rey!
—Lo siento, pueden pasar.
… ¿No sospechan de que pueden ser unos impostores…? Ah, es cierto, Treis está con nosotros. Ellos dijeron que su familia lo usaban mucho. Debieron reconocerlo.
Entramos y veo que todos los nobles nos ven raro.
—Supongo que es raro ver a dos personas que murieron.
Y espero que ninguno de ellos sea un traidor, no quiero más sorpresas, ya he tenido suficientes.
•
•
Llegamos a la entrada del castillo y el Rey nos esperaba. Él está junto a una chica y unos guardias. El Rey es un hombre joven, con el cabello blanco, usa un traje blanco, y es delgado. La chica es alta, con el cabello naranja y largo, y usa unos pantalones blancos y una blusa negra.
¿La Reina? Tengo entendido que el Rey no se ha vuelto a casar desde que su esposa murió. ¿Una de sus hijas?
Sea quien sea… me da miedo.
Su presencia… me asusta… ¿Quién es ella realmente?
—¡¿Realmente son ustedes?!- Dijo el Rey, llorando.
—¡Padre!- Dicen los dos, también llorando.
—¡Hijos!
Una conmovedora reunión, el padre abrazando a sus hijos que él pensó que estaban muertos… Bueno, sí, estaban muertos… Ah, como sea.
Debemos alejarnos de este lugar inmediatamente. Debo alejarme de esa mujer. Esa mujer es peligrosa. No sé quién sea, pero mi propio cuerpo me advierte del gran peligro que representa para mí.
Entre más lejos esté de ella, mejor.
—Pero, ¡¿cómo?! ¡Yo vi sus cuerpos muertos!
—¡Daniel nos revivió!- Dijo Zero.
—¡Él puede usar el hechizo de resucitación de nuestra familia!- Dijo Molly.
—¿Daniel? ¡¿El Daniel de los rumores?!
Oh. Vaya, vaya. M-me estoy volviendo popular… ¡Ahhhhhhhh! ¡Los demonios ya deben saber de mí!
—Es él.
Me señalan con su dedo índice y el Rey observa a Treis. Treis, te robaste la atención que era para mí. ¡Gracias! ¡Ahora aprovecharé para irme!
Intenté salir volando, pero mi abuela me tomó del brazo.
—¿Qué haces, Dani? No puedes irte.
—¿Treis? ¿Qué hace aquí?
El Rey se dirige a nosotros. ¡Ahhhhhhhh! ¡Esa mujer no me quita los ojos de encima! ¡Perdí mi oportunidad de escapar!
… ¿Escapar? ¿Estaba a punto de escapar sin mi abuela?
¿L-la iba a abandonar?
… Esa mujer… ¿Quién eres tú? ¿Cómo es posible que me des tanto miedo, al punto de querer escapar sin mi abuela?
—Treis, ¿quién te invocó?
—Fue Daniel, majestad.
El Rey me observa con una mirada seria.
—H-hola, señor. ¿Ya me puedo ir?
—¿Realmente puedes usar el hechizo de resucitación?
—Sí puedo.
—Pero, ¿cómo? Ese hechizo no puede ser usado desde hace doscientos años.
—Eso es un secreto. ¿Ya me puedo ir?
—Este aventurero tiene todos los tipos de magia, papá.- Dijo Molly.
—¡¿Todos los tipos de magia?! ¿L-los rumores eran ciertos?
¡Uwaaaah! ¡¿Por qué mencionaron eso?! ¡Ahora esa chica se puso peor!
La chica que acompaña al Rey se acerca demasiado a mí. M-maldita sea. C-corazón, es solo una chica, ¡deja de latir tanto!
N-no es amor ni nada por el estilo, ¡es terror!
—¡Enséñame tu tarjeta!
—¿Eh? C-claro.
Le enseño la tarjeta y la revisa.
—¡Es real, realmente tienes todos los tipos de magia!
—¡¿En serio?!- Dijo el Rey, sorprendido.
Tengo un mal presentimiento y me alejo de ella.
Y-ya tuve suficiente de esto, ¡ya no soporto más!
—Magnífica reunión familiar, quisiera quedarme más tiempo aquí, pero debemos irnos.
—No puedes irte, haré una fiesta para festejar el regreso de mis hijos, y serás el invitado especial.- Dijo el Rey.
… Mi presencia hizo de esta conmovedora reunión menos conmovedora, y me siento culpable. Sé que soy una existencia rara, pero debe pasar más tiempo con sus hijos que hablando conmigo.
—Vaya, vaya. Lo lamento, tengo planes. Adiós. Tengo una cita con la comida. Adiós.
Me acerco a Treis.
—Treis, lleva a todas al gremio que está cerca, por favor.
—No hay problema.
Treis se va y Molly me abraza.
—¡Daniel, ¿no quieres quedarte en la fiesta?!
—¿Q-quedarme?
Veo que la chica que acompaña al Rey no deja de mirarme con una gran y rara sonrisa.
Esa chica me da miedo… No sé por qué, pero tengo mucho miedo.
No sé si es un peligro para mí, pero debo alejarme de ella.
—No, gracias, como dije, tengo planes. Disfruta tu reencuentro. ¡Arches Nexus!
Me voy volando de ahí.
•
•
La chica que acompaña al Rey se queda impresionada al ver a Daniel irse volando, y una gran risa sale de ella
—¡Hahahahahaha! ¡Increíble, incluso sabe un hechizo de vuelo!
—Hijos, deben contarme todo lo que sepan de ese tal Daniel.
•
•
(Pov- Daniel.)
Estoy volando y reviso el mapa con mi teléfono.
—¿Pueblo central 3? Si el gremio del otro Reino estaba en el pueblo central 1, supongo que el gremio de este Reino está en el pueblo central 3.
Vaya nombres tan originales.
Me dirijo al pueblo.
Ah… Los nombres son muy básicos.
Bueno, al menos son fáciles de recordar.
•
•
Unos minutos más tarde, llegué. Tardé un poco más porque investigué la zona, para saber como es. Me quedaré un tiempo aquí, así que debo acostumbrarme.
Aterrizo en el pueblo y todos los aventureros me observan asombrados, aunque también con miedo.
Parece un pueblo normal… Bueno, normal en este mundo.
—A juzgar por las vestimentas, estoy seguro de que el gremio está aquí.
Empiezo a recorrer el pueblo, en busca del gremio.
—¿En dónde estará?
… Mmm… Nada… No… Nada… Ah, mejor pregunto.
Me acerco a unos hombres que están hablando. Toco el hombro de uno de ellos y voltea a verme. El hombre es alto, fuerte, calvo y con un pequeño bigote negro. Sí, definitivamente es alguien amable. Los que parecen rudos siempre resultan ser amables.
—Disculpe, ¿en dónde está el gremio?
—Vete de aquí, mocoso. Eres molesto.
Me empuja y caigo al suelo. Los hombres se alejan de mí, riéndose… Se burlan de mí… Eso me hace sentir mal… pero por ellos. Fufu. Criticando por la apariencia, ¿eh?
—Que buenas personas son.
—Disculpa, ¿estás bien?
Una chica me extiende su mano izquierda. Parece alguien buena y amigable.
—No te preocupes, estoy bien.
La tomo de la mano y me levanto.
—Solo quiero saber en dónde está el gremio.
—Ahí está. Es el lugar que tiene la bandera roja.
Me señala el lugar.
—Muchas gracias.
Me dirijo al gremio.
—Supongo que todos los gremios tienen una bandera de un color. Ah, que idiota soy.
Entro al gremio y me dirijo a una chica que, supongo, trabaja en el gremio.
—Disculpe, ¿puedo registrarme aquí, aunque ya esté registrado en otro gremio? ¿O cómo funciona el sistema?
—Claro, no importa. Tu información será la misma, lo único que cambia es el diseño de las tarjetas.
—Gracias. Supongo que pongo mi mano en la esfera.
—Así es, por favor.
Pongo mi mano derecha en la esfera.
—Espere.
—Claro.
—Por cierto, ¿que rango eres?
—Soy…
—Fufu. Oye, oye…
El mismo hombre que me empujó me empieza a molestar. Ah, este cliché.
—¿Un mocoso como tú quiere registrarse como aventurero? Me das pena. Estoy seguro de que solo tienes magia tipo tierra. No puedes compararte a mí, yo tengo tres tipos de magia.
Ternurita. Que tierno es. ¿Solo 3 tipos de magia? Es tan tierno. Fufu.
Intenta burlarse de mí. Me está juzgando por mi apariencia. ¡Hahahahahaha!
Ah… Pobrecito.
—Piérdete.- Dije, con un tono serio y amenazante.
—¡¿Qué dijiste?!- Dijo, enojado.
—¿Acaso eres sordo?
Se acerca demasiado a mí, intentando asustarme.
—¡Tienes que saber que soy el aventurero más fuerte del gremio!
—Lo eras.
—¡¿Qué dijiste?!
Ya, aléjate, te apesta la boca.
Una tarjeta aparece de la nada y la chica lo toma.
—Ya terminó.
La chica lee la tarjeta.
—Daniel Conde. Edad, 16 años. Tipos de magia… ¡¿Eh?!
La chica se queda congelada. Fufu.
—Trace, ¿qué te pasa? ¿Qué tipo de magia tiene?
—¡T-t-t-tiene todos los tipos de magia!
—¡¿Qué?!
Él toma la tarjeta y la mira.
—¡Debe ser un error!
Le quito la tarjeta.
—Por eso dije que eras el aventurero más fuerte del gremio… Eras. Por cierto, alcancé el rango A en un solo día. ¡Mi nombre es Daniel, el aventurero con todos los tipos de magia y el que fue capaz de derrotar a un demonio de un solo ataque!
Con esto, evitaré que me molesten.
Pago y me siento en una mesa.
—Ahora debo esperar.
El sujeto se acerca a mí. Ah, que molesto.
—Solo venía a disculparme por mi actitud, no sabía que eras tan poderoso, te pido que me perdones.
—Claro, estás perdonado, ahora vete.
—Te quiero ofrecer unirte a mi equipo, tengo miembros realmente fuertes.
—Ya tengo equipo.
Todas son unas inútiles, pero son mis amigas… Bueno, llamarlas inútiles es grosero, pero considerando lo que pasó con los Orcos… Ah, mejor ya no pienso en eso.
Las chicas entran al gremio y me observan.
Se dirigen hacia mí.
—¿Por qué no nos quedamos en la fiesta del Rey?- Dijo Sara.
—¡Eras el invitado especial!- Dijo Alex.
—Tengo un mal presentimiento, sentí que no debíamos estar más tiempo con el Rey.
El sujeto se queda congelado al ver a mis hermosas compañeras.
Sí, tal vez me consideres un chico con suerte, pero no es lo que piensas. Ellas son y siempre serán solamente mis amigas, nunca pasará algo entre nosotros.
—Sara, ¿puedes prestarle algo de dinero a Cristina para que se registre?
—Claro.
—Alex, ¿puedes prestarle dinero a Rem para que se registre?
—¡Claro!
Todas se dirigen a registrarse, incluso Sonia y Cris.
Ah, debo detenerlos.
—Sonia y Cris, vengan.
—¿Qué pasa?- Dijo Cris.
—Ustedes no se van a registrar. Ustedes no saldrán con nosotros a las misiones.
—¡¿Por qué?!- Dijo Sonia.
—Sonia, cálmate, Daniel tiene razón, no tenemos magia, solo seríamos un estorbo.- Dijo Cris.
—Lo siento.- Dije, algo triste … Me siento mal por ellos, pero es lo mejor.
—Está bien, no te preocupes.- Dijo Cris.
Cris es fan de la fantasía.
Seguramente él está muy triste… No te preocupes, Cris, encontraré la manera de volverte alguien fuerte.
•
•
Unos minutos después.
Escucho a la chica gritar.
—¡¡¿Tienes magia tipo ángel?!!
Veo que el mismo grupo de hombres que me molestó, ahora me observan asombrados.
—Vaya, vaya.- Dije, sonriendo.
Un consejo, chicos, nunca juzguen a alguien por su apariencia, es un error de novato.
•
•
Unos minutos después, ya podemos irnos.
El registro terminó. Nuestra aventura en este Reino comenzó. ¿Nos enfrentaremos a demonios poderosos? ¿Bestias poderosas? ¿Nobles malvados? Sea lo que sea, ganaremos… Eso espero.
—Ya todas terminaron. Vámonos.
Comments for chapter "06"
QUE TE PARECIÓ?