Limit Breaker: Conquistando Mazmorras - 77

La decisión de intervenir en el conflicto entre México y Estados Unidos no cae del todo bien en el gremio Victory, sobre todo en Estela y Julio, quienes saben que los norteamericanos siempre llevan sus problemas a otro nivel y que en la mayoría de las ocasiones termina en guerras que ganan ellos, no por algo poseen al cazador mejor rankeado, el mejor gremio y militarmente hablando, la fuerza mágica más fuerte del mundo, superando a la Rusa, China, Francesa y Británica.

Lo que sigue a la decisión tan cuestionable de Martin es un ambiente sombrío y de preocupación que no tarda en socavar un poco lo que el cazador había pensado. Creyendo que todos estarían de acuerdo no había pensado en conversar con nadie, volviendo a la mala costumbre como cazador independiente y viendo a los miembros del gremio más como una familia que como empleados o justamente, miembros de Victory en plena función.

Estela da un paso al frente y le explica a Martin porque es una mala idea meterse en conflictos ajenos:

Estela: “Martin, sabes que los norteamericanos son conflictos y no dudaran en meterse con Argentina si tomamos parte de ello. Son así y no hay duda de que si están viendo a México es como parte de una estrategia geopolítica y económica”

Martin: “No sería bueno de mi parte ocultarlo” — saca de su saco unos documentos que corresponden a la mazmorra oculta y se lo entrega a Estela — “escuchen chicos. No me metería en este conflicto si no fuera necesario y créanme que si lo es. Por alguna razón los norteamericanos buscan esa mazmorra oculta. Las acciones de los miembros de Dark Eagle son extrañas, y según Arakneida, parece que un emperador está detrás de esto”

Julio: “Esta no es una misión que te dio Oscar ¿o sí?”

Martin: “En realidad sí y no. Si me pidió intervenir, pero desconoce que sucede con esa mazmorra. Aunque no ignora mis investigaciones con Arakneida a la cabeza”

Nadie más dice una palabra, solo se quedan en silencio y dubitativos. Martin mira a cada uno de ellos, sintiendo como no están de acuerdo y aun así respetaran las órdenes del maestro y líder del gremio. De repente, sonríe incómodamente y vuelve a explicar con mejor detalle sobre la intervención en el conflicto:

Martin: “Se que no están de acuerdo y lo entiendo. Pero hay una mejor explicación detrás. Si todo lo que sospechamos es cierto, habrá más enemigos al nivel de los altos rango o quizás al de los emperadores”

Octavio: “Establecernos como una potencia regional ya de por si ha atraído mucha atención de gremios, cazadores, países e inclusive esos emperadores. No estoy seguro porque debería importarnos México siendo un país que nos abandonó en la mazmorra Antártida, pero confío en tu decisión porque al final lo que haces es por el bien nuestro y de Argentina”

Macarena: “Sea cual sea el motivo debemos centrarnos en no ponernos en peligro”

María: “En eso concuerdo”

Marcos: “¿Cómo harás para que no parezca una intención para investigar esa mazmorra oculta?”

Martin: “Eso es lo que pienso será difícil. Algo se me ocurrirá”

Lucas: “No es como si se solucione con ir y hablar con ellos. Los yankis tienen fama incluso en esta época de mazmorras, magia y cazadores de ser belicosos inclusive mucho peor que durante las guerras mundiales”

Martin, quien hasta hace casi 1 año atrás era un cazador independiente, ahora tiene a persona bajo su cuidado y no es para menos, son aquellos que depositan la confianza en él y viceversa. Por más que lo desee, sabe que no puede pasar por algo que a pesar de que no quiere ponerlos en peligro para las misiones, ellos desearan lo contrario.

Estela es la primera en dar un paso al frente y opinar frente de todos, la verdad:

Estela: “Lo que en verdad queremos decir es que no vamos a dejarte ir solo. Tendrás que elegir a un grupo de personas del gremio, y no cuentan Arakneida y Lorkamos. Elige al menos a 3 de Victory y lleva a los otros dos. No harás esto solo ¿okey?”

Él siente como esas honestas palabras llegan a emocionarlo. La importancia de Martin para los demás miembros y como también ha repercutido en sus vidas:

Martin: “Si…tienes razón. Me disculpo. Aquellos que quieran venir que de un paso al frente. Solo serán 3 personas los que me acompañarán además de Arakneida y Lorkamos”

El silencio es profundo, una clara muestra de que las cosas son mejor como siempre, o al menos eso es lo que Martin piensa, porque cuando está por cerrar el asunto del viaje a México, escucha como todos los miembros de Victory dan un paso al frente al mismo tiempo. Martin se queda atónito al ver que todos están predispuestos a ir con él a pesar del peligro que supone.

Sin oponerse a la decisión en conjunto, Martin selecciona a 3 miembros, Julio, Daniel y Estela, y deja en duda quien se quedaría a cargo del gremio.

Martin mira a María y se acerca a ella:

Martin: “¿Qué dices María? Eres alguien que sin duda puede mantener el orden del gremio”

María: “¿Yo? E-Es que no sé cómo administrar al gremio”

Martin: “Pero todos confían en ti. No dudo que tengas la capacidad para cuidar al gremio mientras no estamos. Será tu decisión”

María: “Yo…hummm…”

Octavio: “Yo confío en María”

Macarena: “Igual yo”

Laura: “La señorita María siempre esta predispuesta a ayudar. Es una más que confiable candidata”

Lucas: “No me quejo. Es muy trabajadora”

Marcos: “Es verdad, no hay duda. Ella debería ser la encargada del gremio”

Las muestras de apoyo y cariño de parte de todo el gremio emocionan de pies a cabeza. Aun sin querer algo así, María siente que todo su trabajo en el día a día es apreciado por los miembros de Victory, no solo por parte de Julio, el amor de su vida.

Martin: “Creo que no hay más dudas al respecto ¿Qué dices María? ¿quieres ser la maestra del gremio Victory en nuestra ausencia?”

María: “No hay motivos para rechazar esa responsabilidad. Admito que me da muchos nervios, pero también siento seguridad al tener a todas estas buenas personas respaldándome” — sonríe — “acepto el desafío, solo hasta cuando regresen”

Otra de las razones por las que María acepta tal reto es que, acostumbrada a seguir la vieja crianza de su país, Corea del Sur, no ha alcanzado todo su potencial a pesar de que siempre cuenta con el fervoroso apoyo de su esposo, Julio. “Una mujer no puede manejar una empresa”, “una mujer jamás debe sentarse en la misma mesa que un hombre si este no lo hace primero”, “una mujer solo debe cocinar y si el hombre le permite, trabajar”, “solo una mujer de dinero o gran talento puede apostar a ir a la universidad, aquella que no pueda debe casarse con alguien de estatus”, estas son algunas creencias a las que María estaba sujeta gracias a su padre y la crianza que este le ha impartido desde que era una niña, pero la llegada de Julio a su vida, el valor que le ha dado y ahora pertenecer a un lugar hermoso y con gente amable como lo es Victory, llega una oportunidad en la que por fin puede mostrar cuánto vale.

Horas después de haber nombrado a María como maestra momentánea del gremio Victory, el grupo liderado por Martin se prepara para viajar a través de los portales de Arakneida, como es de costumbre y para evitar conmoción en la sociedad y más aun con el cazador de tal auge.

Antes de partir, Martin le envía un comunicado a Oscar para que el grupo sea recibido por el presidente de la A.M.C y los gremios más importantes, Whiplash Quetzal y Guerreros Jaguares, siendo el primer al que visitaran para poder conseguir información sobre esa mazmorra tan misteriosa, pero sin que se den cuenta de que inclusive en Argentina lo saben también.

***PARTE II***

En la casa blanca, Kargroot y Cromana deambulan por los pasillos donde los suelos están inundados de sangre, cadáveres demacrados esparcidos por doquier, y escombros en muchas partes producto de una intensa batalla en la que solo un lado acabo venciendo sin dificultad y así doblegando a los humanos hasta la muerte. Algunos supervivientes son usados como alimento para Cromana, quien se deleita con la sangre de ellos, y otros despellejados por Kargroot para probar sus armas:

Kargroot: “Llevamos meses aquí y ya siento aburrición” — murmura de malhumor

Cromana: “En eso podemos estar de acuerdo. Es muy aburrido sin Vulkotros” — responde mientras se sienta sobre una pila de cadáveres en descomposición

Kargroot: “Me importa un comino ese lamentable insecto. Kassio es el que me da mala espina”

Cromana: “Ya, ya, cálmate. Nuestra misión aquí es desestabilizar todo lo que podamos a esta nación y eso lo cumpliremos”

Eso le responde la vampiresa, pero le sorprende al mismo tiempo que Kargroot se encuentra con una baja paciencia respecto al emperador de la Oscuridad, cuestionándolo y pensando en enfrentarlo abiertamente. Alguien como el caballero de la Oscuridad, conocido por haber sido candidato a Emperador de la Muerte, se muestra perdiendo el temperamento, sin embargo, también se le permite un poco de templanza aun después de perder la peciancia, como si fuera una gran contradicción:

Kargroot: “¿Sabes? Te diré algo. Reconozco estar algo preocupado por ellos, y más aún por Lych. Quizás te preguntes la razón. Tanto él como yo nacimos en el mismo lugar y en el mismo momento, mucho antes que tu o el herrero. A pesar de todo, considero a Lych como alguien cercano, y es en verdad molesto esa clase de sentimentalismos. Pero lo que más me tiene furioso es el hecho de que esos dos han sido arrastrados a quien sabe que cosa por Kassio. Ese maldito bastardo no ha dicho nada y no nos ha contactado” — dice mientras libera involuntariamente su energía oscura

Cromana: “Y aun así sigue moviendo los hilos detrás de ese gremio. Se vuelve cada vez más extraño”

Kargroot: “¿Tu extensión no ha vuelvo?” — pregunta por uno de los murciélagos usados para buscar información

Cromana: “No, y en mi actual rango es complejo tener una mayor extensión”

Kargroot: “Eso quiere decir que el dominio de Kassio sobre Estados Unidos es mucho mayor del que creíamos”

Cromana: “¿Qué hacemos entonces?”

Kargroot: “Esperar, es lo único que podemos hacer”

Cromana: “Oh…”

Kargroot se sienta a un costado de la pared, apoya su arma contra la puerta del despacho presidencial y suspira agotado. La cuestión del paradero de Lych y Vulkotros lo agobia a mas no poder, y sumado a la incógnita que gira entorno a Kassio, todo parece indicar que nada podría salir bien de la misión actual, sospechando de que la falta de comunicación radica en algo más que una falta de interés del emperador actual que gobierna en el abismo. Por lo tanto, no es ajeno a la gran preocupación por todo eso.

Aun después de que el emperador anterior haya caído, Kargroot profesa un profundo respeto y gran lealtad, no solo por haber sido alguien magnánimo en poder, sino que brindaba misericordia hacia monstruos de cualquier rango, demostrando que no abusaba de su posición, sino que lo que hacía era para dar ejemplo a los futuros emperadores que iban a llegar con el tiempo.

Lo cierto también es que el caballero de la muerte, como su clase lo indica, sigue un código de conducta similar al de los caballeros humanos, resaltando siempre la lealtad, honor en batalla, y sacrificio por los débiles, y por esa razón la conducta de Kassio es repudiable hasta el hartazgo y no es propio de alguien que deba ser emperador, menos aún aquel a quien consideraba el pináculo de la conducta en esa posición.

Sin embargo, Kargroot admite que su imponente figura y poder no ha hecho más que convertirlo en objeto de temor y no respeto como lo fue su antiguo señor, y eso es un rasgo que no ha querido modificar para no querer igualar o a fin de temer, superarlo, siendo mejor que el antiguo emperador. Aun así, entre camaradas sabe cómo actuar y como presentarse de mejor manera:

Kargroot: “¿Sigues con ese sueño?”

Cromana: “¡¿Heh, que?!” — se exalta por la repentina pregunta

Kargroot: “No me tomes por tonto o ignorante. Se bien que tienes pesadillas durante tu sueño matutino”

Cromana: “No creí que se notara tanto” — se sonroja

Kargroot: “Se que tú y Vulkotros piensan que soy sádico y bastante exigente con mis aliados. Pero también entiendo que para poder cuidar de los míos se necesita conocerlos mejor”

Cromana: “S-Supongo que tiene sentido”

Kargroot: “Dime entonces sobre tu sueño”

Cromana: “Sueños muy comunes y a decir verdad no me molestan en lo más mínimo. Salvo por un tramo en la que siento un intenso dolor en mi pecho que me hace despertar”

Kargroot: “¿Recuerdas ese tramo de tu sueño?”

Ante la pregunta del caballero oscuro, Cromana se achica en sus hombros y muerde las uñas de sus dedos, mostrando signos de nerviosismo. Kargroot se percata de que ese sueño la ha estado afectando por más que intente mostrarse imponente como la vampiresa progenitora de su raza, la más fuerte y peligrosa:

Kargroot: “Aunque si no deseas contarme…”

Cromana: “A decir verdad, me aterra mucho intentar recordar ese tramo del sueño, pero es estúpido que yo, la vampiresa primigenia sienta miedo ¿verdad?” — sonríe incomoda

Kargroot: “Si, no voy a negar que tenemos que mostrar fortaleza aun en nuestros momentos de soledad”

Cromana: “Por favor, no lo tomes a mal”

Kargroot: “¿Por qué lo dices?”

Cromana: “Ese tramo del sueño, sucede durante una noche en la que la luna esta empapada de sangre. Una joven pura de corazón, cuerpo y espíritu es sacrificada, cortándole el cuello y siendo bañada por su sangre en una fuente cubierta con también sangre impura de la maldad latente en el corazón de ‘Saddorra’. Aun muerta, cuando su cuerpo es impregnado por esa sangre corrupta, la chica se mueve como si su pureza tratase de rechazar con el resto de su fuerza a la maldad, pero sin éxito. Al final se forma una esfera de sangre negra, y una vez se rompe, salgo yo como el primer vampiro…”

Kargroot: “Cromana…” — dice sorprendido — “lo que acabas de decir es un tabú ¿lo sabes?”

Cromana: “¿Tabu? ¿a qué te refieres?”

Kargroot: “Aquellos monstruos que recuerdan sus orígenes, es decir, que saben cómo nacieron, son considerados tabú porque pueden llegar a ser propensos y levantarse contra sus creadores. Porque saben que sus orígenes están más que claros y sienten ser capaces de alguna manera trascender a sus creadores”

Cromana: “¿Tu como sabes eso?” — pregunta sorprendida de que sepa tanto

Kargroot: “Porque yo hace mucho tiempo supe de mi creación, pero mi lealtad hacia mi difunto señor es más fuerte que unas meras intenciones de ser parte del tabú”

Cromana: “Al final solo somos impotentes desdichados…”  — presiona su pecho al sentirse triste y vacía

Kargroot: “Hasta que nos libremos de aquello que nos mantiene oprimidos. Incluso la muerte puede tener su lado misericordioso” — acaricia la cabeza de Cromana — “tranquila niña, no tardaremos en iniciar nuestra venganza contra Kassio…”